La historia de Yolanda

Esta mujer nos cuenta la forma en que seduce a su joven yerno.

La historia de Yolanda

Yolanda es una señora de 58 años, madre y abuela, es una mujer aun atractiva, cabello claro entrecano, ojos grandes, labios gruesos y carnosos, alta de cuerpo bien proporcionado. Pechos grandes y redondos aun firmes, caderas anchas y pronunciadas, trasero gordo y redondo.

Su historia, narrada por ella.

Mi hija se caso desde hace varios años y se mudo a vivir con su esposo a otra ciudad un poco alejada de la que yo vivía, sin embargo hace un año, su esposo recibió una buena oferta de una empresa que realiza labores en la ciudad donde yo vivo. La oferta consistía en supervisar un proyecto importante, mi hija y su marido se alegraron mucho de esto pues significa un ingreso adicional muy fuerte para ellos. MI hija sabiendo que el trabajo de su marido era en la misma ciudad donde yo vivía me llamo para preguntarme si su esposo podía hospedarse en mi casa mientras duraba el proyecto, por supuesto que accedí siempre había mantenido una excelente relación familiar con mi yerno, me parecía que era un hombre muy responsable y trabajador que se preocupaba por el bienestar de su familia. Además seria una buena forma de tener compañía algún tiempo.

He sido viuda por casi 10 años, debo confesar que no me han interesado los señores que me han pretendido en este tiempo, no me siento atraída por los hombres calvos, gordos o mayores, y aunque se que no es correcto, me llaman mas la atención los hombres atractivos y de buen ver. Sexualmente estoy bastante frustrada y en alguna ocasión compre por catalogo alguna revista Playgirl o algún video sexual para ayudar a mitigar mis noches de soledad.

Desde el momento en que mi yerno se hospedo en mi casa, tuve que esconder todo este material y comportarme como la respetable señora que era. Fue muy duro para mi, he de decir que mi yerno Raúl es todo un semental, alto y varonil con muy buen cuerpo que mantiene en forma debido al ejercicio que practica constantemente, las cosas empeoraron cuando mi yerno teniendo un poco mas de confianza empezó a andar dentro de la casa solamente con un pantaloncillo deportivo y sin camisa, después de ducharse en la noche cuando regresaba de su trabajo, o en las mañanas antes de salir a su trabajo.

Así fue como yo, apenas terminaba de servirle el desayuno, me retiraba a mi habitación y me masturbaba desesperadamente. Al principio fantaseaba con los hombres de las revistas que había visto, pero un día la imagen de mi yerno apareció en el momento justo en que mis dedos se enterraban profundo dentro de mi vagina haciéndome llegar a la cima del placer, fantasee con El, con sentir su duro, joven y viril miembro. Desde ese día fantaseaba con mi yerno y su fuerte cuerpo cada mañana y cada noche, mis fantasías cada día se volvían mas y mas calientes, en mi imaginación Raúl venia hasta mi dormitorio y al descubrirme masturbándome abría su pantalón sacaba su pene completamente erguido y de un empujón lo metía completo dentro de mi.

Finalmente una noche, mi yerno me dijo que lo habían felicitado por su trabajo, y que deseaba que saliéramos a celebrar, fuimos a cenar y después al minigolf. Ya en el lugar mi yerno se ofreció para enseñarme a jugar, Oh si, me sentía morir en el momento en que este envolvió sus fuertes brazos alrededor de mi y me mostró como golpear correctamente la pequeña pelota de golf, aunque su abrazo no tenia nada de sexual y apenas se acercaba a mi lo necesario, me sentía excitada sabiendo que tenia tan cerca de mi un macho tan viril como aquel, practicamos durante algún tiempo, hasta que mi yerno sugirió que era tarde y que era tiempo de regresar a la casa.

Una vez que llegamos, yo me fui directamente a mi dormitorio y metí mi mano debajo de mi falda, precisamente entre mis piernas para mitigar el ardor que sentía, en ese momento tuve una idea. Busque dentro de mi ropa y encontré un conjunto muy atractivo de medias y sostén y una bata bastante sugestiva, me cambie colocándome aquella ropa. Entonces desde la puerta de mi habitación llame a mi yerno que había permanecido tomando una copa en la sala.

Note la expresión de sorpresa en su cara y escuche un pequeño gemido que escapo de sus labios al verme vestida como estaba. Con una dulce sonrisa le pregunte si podía darme una pequeña lección de golf más. Este trago duro y acepto.

Bastante pronto mi yerno estaba detrás de mi con sus brazos sobre los míos, explicándose como golpear la pelota, moví un poco las caderas pegándome a El y le pregunte si lo hacia bien, mi yerno jadeo que si, entonces moví mis manos, sus manos se posaron sobre mis caderas, entonces extendí mi brazo atrás y puse mi mano sobre su pene. El gimió. Arquee mi espalda, sus manos se movieron instintivamente hacia mis senos. Me recosté contra El y le hable:

"Vamos Raúl déle a su suegra una verdadera lección". Al terminar de decir esto me gire para besarlo.

Nuestras lenguas se encontraron, Raúl empezó a apretar mis pezones, empezamos a acariciarnos ardientemente, podía sentir su duro pene apretándose contra mi vagina.

Mis manos fueron hasta el cierre del pantalón de mi yerno y abriéndolo rápidamente, saque su duro pene fuera, este gimió fuertemente al sentir mi mano acariciando su dura erección. Rápidamente fuimos hasta la cama, mi yerno se coloco sobre mi, nuestros cuerpo estaban completamente entregados a la lujuria y al placer. En un par de minutos el enorme pene de mi yerno se enterraba profundamente en mi interior y empezamos a coger como locos.

NO puedo describir todo el inmenso placer que sentía, sentir el enorme miembro de mi joven yerno llenar todo mi interior era mas de lo que jamás hubiera imaginado, sentir como su pene se deslizaba dentro y fuera de mi era el placer total, envolví mis piernas alrededor de su cintura y apreté los músculos de mi vagina alrededor de su grueso miembro, aumentando el placer que ambos estábamos gozando. NO pudimos aguantar mas, ambos alcanzamos el éxtasis en medio de fuertes gemidos de placer.

Después de algunos minutos, ambos nos besamos, le dije cuanto había gozado con El, mi yerno respondió que también había gozado como no lo había hecho en mucho tiempo. Desde entonces disfruto de las potentes cogidas que me da mi apuesto yerno, ahora solamente espero que podamos seguir gozando juntos cuando acabe su proyecto.

Comentarios y sugerencias alonso29cr@yahoo.com