La historia de laura (Retrato de una Lolita)

Prólogo de laura

Año 1993, cualquiera diría que hace poco, yo era una adolescente que vestía vaqueros y chupa de cuero, una niña que bebía litronas en el parque.

Esa noche de verano, mi cuerpo realza la tela de un vestido ajustado, se mueve al ritmo de la siempre embriagadora voz de Janis Joplin, zapatos de tacón alto y bragas de niña buena, el tanga aún tardaría algunos años en llegar a mi vida, y por supuesto, ni se me pasaba por la cabeza no llevar ropa interior. Entre mis manos, un whiskie doble con hielo, y mis ojos, cerrados.

Hay dos personas mirando la escena desde la barra, cada una de ellas, con el gatillo fácil del morbo, con el deseo inyectado en vena.

Bailo despacio, el hombre que me ha desvirgado hace apenas unas semanas, se acerca por mi espalda, una de sus manos toma posesión de mis pechos, pequeños, desnudos bajo la tela del vestido, la otra guía el líquido elemento hacia mis labios. Apenas rozandola, siento crecer su virilidad entre mis ganas, siento el deseo de la otra persona que nos contempla.

Han pasado casi 30 años desde aquella noche, y con la calma que da la perspectiva, puedo ver el morbo que nos movía a cada uno de nosotros.

Yo era una niña enamorada, entregada, disponible, una niña que había sido follada 50 veces en cincuenta días, jugando a ser mujer, deseando ser mujer, y convertida en tabú por aquel hombre. A sus 42 años, representaba a todos esos maduros que se encuentran con un regalo así, una adolescente de 18, una "Lolita", un animal salvaje al que deben, una de dos, o dejar libre o usarla para satisfacer sus más recónditas perversiónes.

Imagina, una mujer así, entregada, disponible, jugando a ser mujer, deseando ser mujer y dispuesta a ser follada 50 veces en 50 días.

Esa noche acabe bailando algo más que la música de Janis Joplin.

Queda claro entonces, que aquel hombre, no me dejó libre.

La 3 persona, la que miraba, obtuvo su morbo, como no hacerlo si presenciaba la escena, como no ser un actor secundario, si estaba presente,.. Pero eso, eso no tiene mucha importancia.

Es solo un retazo de mi historia, la que de alguna manera siempre quise relatar y que ha encontrado camino a través de un autor de está página, cómplice, morboso, imaginativo,...

El ha escuchado mi historia y juntos le hemos dado forma, juntos la iremos desgranando, para vivirla de nuevo.

Hansberville, es el seudónimo del autor, desde su perfil y el mío, podrás leernos.

Espero que la disfrutes.

Soy laura.