La hija mayor de mi amante nos ve haciéndolo

Una ocasión que fui a visitarla fuimos a comer al salón corona y ahí comenzamos a platicar y me contó que con sus ex jefes iban mucho a comer a la polar y después iban a bailar algún salón, regresaba muy tarde a su casa pues ya tenía problemas con su segundo esposo, le pregunté si quería ir a bailar podíamos ir al California o a la maraka que quedaban cerca de su casa, me dijo que sí y nos encaminamos hacia calzada de Tlalpan pero a mitad de camino me dijo que se le antojaba mejor un lugar tranquilo y tomar algo entonces le propuse ir a un lugar que conocía en uno de los hoteles de Tlalpan dónde se podía tomar una copa tranquilamente, escuchar música y también bailar y no era muy concurrido y era discreto. Aceptó y fuimos.

Llegamos al lugar pedimos nuestras bebidas y una mesa del fondo muy privada y discreta dónde podíamos estar sin interrupciones, cuando trajeron las bebidas le di una buena propina al mesero para que no nos interrumpirte más.

Nos pusimos a platicar entre caricias y besos, sobre su reciente separación de su esposo, ya que se había dado cuenta que ella y yo éramos más que amigos y la corrió de su casa pero sin dejarla a la deriva, por los hijos de ella que él quería como propios le rentó un departamento en la colonia álamos dónde yo con más confianza la visitaba ya que su marido sólo iba de vez en cuando a visitar a los hijos sobretodo al menor que era su ahijado.

Era un hotel de Tlalpan, donde había un poco de variedad y después se abría la pista para bailar, ella llevaba una blusa de colores abotonada al frente, una falda pantalón café que le quedaban muy bien súper pegada resaltando sus ricas y redondas nalgas nos sentamos y disfrutamos del show, después nos pusimos a bailar, nos divertíamos mucho, nos acoplábamos muy bien al bailar tanto las movidas como las calmaditas, la acompañe al sanitario y al salir le entregué un ramo de rosas rojas y nardos que es su flor favorita, me besó con mucho gusto en la boca colgándose prácticamente de mi cuello y yo la abracé fuerte sintiendo sus senos pegados a mi pecho poniendo una de mis manos entre su cintura y el inicio de sus nalgas apretándola hacia mí sintiendo su abultado pubis en contacto con mi pene luego regresamos al bar y seguimos bailando.

Nos divertíamos como enanos parecíamos recién casados por todo brindábamos, nos besábamos y acariciábamos; los roces al bailar ya eran mas directos al darle giros al compas de la música posaba mi mano en su nalga o le acercaba mi paquete entre sus piernas o en medio de sus nalgas, el cual ya estaba bastante duro y por lógica me empezaba a excitar y humedecer de la punta.

Comenzaron las piezas lentas puse mis brazos alrededor de su cadera muy cerca de sus nalgas y ella rodeó mi cuello con sus brazos y comenzamos a movernos al ritmo de la música, junte mi pecho a sus senos y se sonrió al sentir como la apretaba, me besó en la boca y después lamí su lóbulo bajando mis labios a su cuello, haciendo que su piel se erizara y gimiera levemente.

Tenía mi pene pegado a su vientre, se sentía muy caliente y le daba pequeños empujoncitos al palpitar mi miembro cada vez mas excitado y ella respiraba más agitada.,.

Acariciaba sus nalgas poniendo mi dedo medio entre ellas dándome una sensación tan placentera que ya no podía mantenerme quieto y Rosana mi erecto pene en sus piernas y vulva ella recargó su cabeza en mi hombro gimiendo bajo pues sentía como se acercaba a un fortísimo orgasmo al sentir mi duro pene rosando sus labios vaginales al movernos, que rico la estaba punteando!!!!!

Le apreté fuertemente hacia mi, ella enterrándome las uñas en mis hombros al sentir como se corría entre mis brazos al bailar, apretando sus piernas al sentir como empezaba a escurrir entre ellas sus fluidos, terminó la pieza y nos fuimos a sentar, iba detrás de ella abrazándola por detrás y ocultando mi erección entre sus nalgas, poniéndome más excitado todavía y con mi rígido pene punteando sus glúteos pufff.

Nos sentamos y me bebí la cuba casi de un trago para tratar de aminorar el calor que tenia, ella hizo lo mismo

Como estábamos ubicados en una de las mesas del fondo nadie se fijaba en nosotros. Brindó conmigo agradeciéndole que haya aceptado salir a bailar y nos besamos, puse una de mis manos en su espalda bajándola lentamente hasta depositarla en la redondez de su nalga mientras con la otra me abría camino hacia su intimidad por encima de su falda pantalón, cerro sus piernas diciéndome que nos podían ver, no le hice caso y seguí mi camino hasta llegar a su entrepierna acariciando su monte de Venus y rozando su clítoris con mi dedo medio venciendo sus leves barreras con mis besos en su cuello, aflojando sus piernas dándome libre acceso a su vagina cubierta por su ligera falda pantalón. Ya sus pantaletas las sentía muy húmedas, la parte interna se pegaba a sus labios vaginales por lo mojada que estaba!!!

Le acarició con la palma de mi mano abarcando casi toda su vagina, que rico sentí, se recargo en la silla y continué, puso mi dedo medio apretando dulcemente su clítoris haciéndole una gran presión, sobándolo constantemente, cerro sus ojos y apretó sus labios para no emitir sonidos fuertes ya que sentía un placer enorme, bajé el cierre de su falda pantalón y metiendo mi mano en su panty seguí  friccionando su clítoris hasta que en un agudo yaaaaa!!! Me indicaba que tenía un orgasmo maravilloso, apretó mi brazo tratando de sacar mi mano de entre su panty diciendo: yaaa amooorrr esperaaaa!!!!!

Recargo su cara entre mi hombro y pecho y lo mordio levemente al sentir como escurrían sus jugos hacia la entrada de su vagina mojando aun más sus pantaletas y mis dedos. Gimió y  chilló hummmm hiiiii ahhhh, que delicioso orgasmo tuvo ¡!!

Puso su mano en mi pene y lo apretó al grado que emití un sonido gutural y recule en mi asiento, me miró y dijo: para que sientassss y me sonreí mientras sobaba su nalga en toda su redondez.

Le llame al mesero y le pedi otra ronda dándole una buena propina para que nadie se acercara a nuestra mesa. En cuanto nos trajo las bebidas se sonrió cómplice con y puso dos sillas cruzadas evitando el paso hacia nuestra mesa y dos más.

Estábamos muy excitados yo seguía acariciando sus piernas y vagina, ya le había echo a un lado su panty y le metía un dedo en su encharcada vagina, con mi otra mano cogí la suya y la puse sobre mi paquete, seguíamos besándonos en la penumbra ella estaba un poco nerviosa aunque bastante excitada pues no conocía el lugar y se preocupaba. Le dije: relájate amor y disfrutemos besando sus labios con pasión.

Miró a su alrededor y estábamos bastante alejados de cualquier otra mesa ocupada y protegidos por las dos sillas entrecruzadas y un garrotero frente a ellas evitando que alguien pudiera acercarse.

Ya con más confianza y con la calentura que traía por mis constantes caricias en su vagina; me desabroche los pantalones y bajé el cierre, levante mi cadera bajándome los pantalones y los calzones a media pierna dejando libre mi grueso e inhiesto pene, que se veía brilloso en la punta por las secreciones pre seminales, mi su pene totalmente erecto y duro mirando al techo y mis colgantes testículos reposando sobre la silla bien cargaditos aun.

Ella volteó a todos lados y ver qué no había nadie cerca cogió mi escroto con su mano sopesando mis  bolas sobándolas y con la otra mano empuñaba mi mástil y me masturbaba, subiendo y bajando su mano sobre todo el tronco mientras nos besábamos en los labios.

Escribo a continuación como ella lo sintió y tal cual me lo dijo después.

Me incliné sobre su regazo y comencé a lamer su glande y saboreando su liquido pre seminal, me lo metí en la boca y empecé a chuparlo ávidamente y sobaba sus testículos al mismo tiempo, lo metía lo mas que podía lo apretaba con mi lengua y paladar y lo iba sacando poco a poco de mi boca para después recorrerlo con la punta de mi lengua a todo lo largo de su duro tronco, como me gusta su pene duro y liso riquísimo al tacto y al gusto!!!! Y sentir como pulsa dentro de mi boca uffff!

Seguí chupándolo y masturbándolo continuamente, solo me asomaba de vez en cuando para no ser sorprendida y continuaba con mi labor mientras su agitada respiración se aceleraba indicándome que ya estaba próximo al clímax, por la postura que tenía yo, el aprovechó para bajar la falda pantalón dejando al descubierto mis nalgas que hábilmente seguía acariciando deslizando su dedo medio entre ellas hasta llegar a mis labios vaginales y haciendo a un lado mis pantaletas que ya habían perdido su forma de lo mojadas que estaban, introdujo su dedo en mi vagina haciéndome suspirar y mover mis caderas acoplándome a su invasión.

Lo metía y sacaba varias veces para después apretar mi clítoris y volver a meterlo en mi vagina, humedeció en mis jugos su dedo pulgar de manera que ya impregnado en mis fluidos lo puso en la entrada de mi ano comenzando a acariciarlo en círculos y empezar a dilatarlo hasta que pudo meterlo en mi culito al mismo tiempo que dejaba su dedo medio en mi vagina, puffff que rico sentir sus dedos en mis dos orificios y mi boca llena de su potente falo, era lo máximo al grado que mi imaginación voló sintiéndome ocupada en mis tres orificios de placer.

Mi excitación se multiplicó y acelere mi chupada a su trozo de carne, logrando que en pocos minutos inundara mi boca con su elixir sexual, sentí tres chorros de esperma que golpearon mi campanilla fuertemente, abriendo mi boca al máximo para poder tragar tal cantidad de semen y no mancharnos, que delicia sentir en la palma de mi mano el paso cálido de su esperma hasta ser eyaculado por su brilloso y excitante glande para llegar hasta mi garganta y de ahí seguir su viaje hasta mi estomago.

Seguí exprimiéndolo con mis labios hasta que arrojó la última gota, me relamí y se lo limpie completamente con mi boca chupando también los residuos que mojaron su escroto, lo estuve chupando hasta que fue reduciendo su tamaño en mi boca, alcé mi cara para ver su sonrisa de satisfacción, volví a besar su ahora flácido pene y moviéndolo le dije ya satisfecho? Guardalo!!!

Me besó en la cabeza y acomodó sus ropas, terminamos nuestra bebida y pidió la cuenta.

La llevé a su casa y al despedirme en la puerta de su departamento me dijo: no quieres quedarte?

Me sonreí y besándola en los labios cerré la puerta y nos fuimos besando hasta llegar a su habitación, desabroché el cierre de su falda pantalón, haciéndolo descender por sus piernas y acariciando sus nalgas sobre las pantaletas, besaba su cuello con tal pasión que su respiración se comenzó a acelerar, me desabroché la camisa y el pantalón, mientras le quitaba la blusa y el brassier, entreteniéndome con sus senos, besándolos y succionándolos alternativamente, nos abrazábamos y friccionábamos juntando nuestros sexos a través de nuestra ropa intima, la recosté en la cama y la besaba desde el cuello hasta el ombligo ocasionándole unos espasmos de placer al meter mi lengua en su ombligo.

Le dije que se volteara y ya en posición de 69, besaba mi miembro y mis testículos a través de mi bóxer, apretaba sus glúteos con pasión y me fue bajando el bóxer, liberando mi potente pene, el cual al verse liberado saltó como resorte pegándole entre la nariz y ojos, mientras yo hacía lo propio con sus pantaletas, quitándoselas lentamente mientras besaba su intimidad y piernas, las que abrí con mis manos para acceder con mi boca y lengua a sus labios vaginales que ya brillaban de humedad, me apodere del clítoris con mis labios y comencé a succionarlo y lengüetearlo con tal pasión que en menos de 5 minutos hice que tuviera otro orgasmo el segundo de la noche.

Se apoderó de mi pene metiéndolo lo más que pudo en su boca, apretando el tronco y glande con su paladar, se sentía muy rico y cálida su boca mientras con su lengua saboreaba la secreción pre seminal que salía por la punta.

Metía y sacaba mi pene de su boca hasta que sentí como se inflaba y le llenaba toda su garganta de espeso semen, chocando contra su campanilla, lo chupo arduamente hasta tragarse la última gota que salía de mi miembro tragando todo lo que eyacule hasta depositarse en su estomago y sentir cómo va perdiendo dureza y rigidez en mi pene en su boca fue delicioso!!!!, reposamos un rato y se levantó a servir dos copas de vino espumoso que bebimos lentamente disfrutando su frescura.

Se recostó boca abajo besando mis tetillas y acariciando mi escroto y flácido pene, mientras yo jugaba con mi dedo en medio de sus nalgas, hasta que empezó a reaccionar mi miembro poniéndose duro como roca y totalmente erecto, me lo beso y se acostó boca arriba, comencé  besarla bajando lentamente a sus senos donde me entretuve bastante besándolos y acariciándolos alternando mis caricias entre estos y su vientre hasta llegar a su vagina, metiendo dos de mis dedos en ella acariciando y apretando sutilmente su clítoris.

Me puse en medio de sus piernas y la penetre completamente haciéndole emitir un leve gemido de placer, lo introduje hasta el fondo de su vagina poniendo sus piernas alrededor de mi cintura, y acariciando sus piernas y nalgas comencé un delicioso mete y saca constante, besando su cuello y hombro, que rico se sentía estar completamente dentro de ésa cálida y húmeda cavidad ensanchando sus pliegues vaginales, metiendo todos mis 18 cms de dura carne aunque no es muy grande pero si bastante grueso, haciéndola sentir completamente llena cuando se lo meti completamente.

así estuvimos como unos diez minutos, después sin sacarlo, nos rodamos hasta la orilla de la cama, levante sus piernas poniéndolas sobre mis hombros quedando sus nalgas en la orilla de la cama y de pie le daba unas embestidas tan profundas que sus senos solo se balanceaban al compas de mis arremetidas, que placer tan intenso sentía, pues no dejaba de bombear y de besar sus piernas y rodillas. UFFFF!!!!! Estaba en el paraíso me hacía sentir un placer inmenso, yo como termine en su boca mi aguante aumento sobre manera, se lo metía hasta el fondo que sentía golpear mi escroto con sus nalgas cerraba sus piernas con mis manos haciéndole sentir todo el grosor y poder de mi miembro al entrar y salir de su vagina.

Subiéndome a la cama nos pusimos de lado y seguí dándole duro por la vagina que ya destilaba ríos de jugos como si fuera un grifo abierto, acariciaba su nalga completamente bajando por todo el muslo hasta la rodilla, ella movía su cadera saliendo al encuentro de mis embestidas, nuestras respiraciones eran fuertes y entrecortadas por la pasión que sentíamos, besaba y mordisqueaba sus senos, metiendo mi lengua en uno de ellos que lo tiene sumido hacia adentro, haciéndole sentir una corriente eléctrica que iba desde sus nalgas hasta su nuca, erizando completamente su piel y gemía ya sin reservas, yo parecía incansable, sus labios vaginales ya estaban súper rosados de tanto mete y saca de mi rígido y fuerte pene.

Comencé a apretar sus nalgas con fruición y pasión y acelerando mis movimientos alzaba su pierna izquierda para poder tocar mis bolas con sus dedos acariciándomelas en cada embestida que le daba, la penetraba con tal fogosidad que la cama chocaba contra la pared  Tac tac sin importarnos que sus hijas pudieran despertar, concentrados en nuestro mutuo placer!!! Así estábamos hasta que juntando su pelvis a la mía de la fuerte y profunda embestida avente tres potentes disparos directamente al fondo de su útero, mientras vaciaba mis testículos en su vagina, sin dejar de mover sus caderas en forma circular y metiendo y sacando mi miembro, hasta que lo deje reposar en su interior y metiéndole un dedo por su ano que hizo multiplicar su placer y el mío inmensamente. Besaba mi pecho y agitaba su cabeza del placer que sentía al encadenar dos orgasmos pequeños al momento de sentía mi corrida inundándole, me abrazaba rasguñando mi espalda y apretándome contra sus senos que quedaban aplastados con mi pecho.

Acariciaba mi espalda de arriba abajo, fue tanta la mezcla de nuestras esencias que mojaron completamente las sábanas y mi escroto que ella acariciaba con dulzura y amor.

Apretaba mis nalgas fuertemente para evitar que me saliera de su vagina y sentirlo dentro hasta que redujera completamente el tamaño de mi pene.

Nos quedamos así abrazados hasta que nos ganó el sueño.

Estaba amaneciendo cuando abrí mis ojos, estaba acostado detrás de ella en postura de cucharita, con mi mano en su vientre y mi pene reposando en medio de sus nalgas y mis testículos en la base de ellas; ella despertó y cogió mi mano la beso y la llevo a sus senos apretándola, empujé mi pelvis, besando su espalda y acariciando su nalga derecha.

Mis caricias nos excitaron a los dos y comencé a sentir como crecía mi pene entre sus nalgas y punteaba levemente su anito; bajé mi mano hacia su clítoris y comencé a acariciarlo con mis dedos excitándonos sobre manera, ella empujaba su cadera para sentir mejor mi erecto pene, levante su pierna derecha y poniendo en la entrada de su vagina mi glande, empece a hacer presión hasta que lo introduje en su vagina avanzando paulatinamente hasta meter mas de la mitad de mi duro pene sin dejar de acariciar su clítoris y labios vaginales, ella agarraba mi pierna y nalga pegándome más a ella para tratar de introducirse lo que más se pudiera de mi duro pene, aventando sus nalgas hacia atrás.

Comenzamos un delicioso vaivén que me hacía sentir mucho placer, llevé mi mano a sus pechos, los apretaba y estrujaba conforme su pasión ascendía, así estuvimos haciéndolo un buen rato hasta que sacando mi pene de  pronto, la puse en cuatro y se lo deje ir completamente haciéndola gritar, seguido de un intenso gemido al sentir como topaba en el cuello de su matriz mi grueso y duro pene, comencé a meterlo y sacarlo rítmicamente, acariciando sus senos con una mano y con la otra sus nalgas, ella recargaba su cara en la cama gimiendo y chillando del placer que sentía por mis fuertes y constantes embestidas, la agarre de las caderas y aumentando el ritmo y velocidad de mis arremetidas, apretó la sabana al sentir cómo le llegaba un fuerte orgasmo que la hizo gritar y gemir de placer, sentir mis bolas golpear su pubis era un placer intenso y el sonido que hacían sus jugos con la fricción de mi pene entrando y saliendo fuertemente me excitaba, empujando sus nalgas hacia atrás mis chorros de esperma salieron disparados llenando su vagina y matriz de mi espeso semen dejándoselo hasta dentro de su vagina mientras vaciaba mis conductos seminales, exprimiéndome completamente con las contracciones de su canal vaginal, y mordisqueando levemente mi glande con mi cuello uterino, me recargue en su espalda sobando y pellizcando sus pezones y senos, resoplando sobre su nuca, pufff que placer y qué gozada tuvimos los dos, un exquisito coito mañanero de antilogía ¡!!!! como lo disfrutamos los dos, sin sacárselo estiró sus piernas quedando presionada por mi peso y mis manos sobre sus senos, así nos quedamos un buen rato disfrutando de la unión de nuestros cuerpos desnudos, hasta que mi pene semi erecto salió de su húmeda vagina quedando en medio de sus piernas humedeciéndolas con nuestras savias mezcladas. En eso voltee hacia la puerta al sentir una presencia y efectivamente ahí estaba parada Vero su hija mayor viéndonos con sus ojos fijos en mi pene y las nalgas de su mamá con una mano bajo su playera tocando uno de sus grandes senos y la otra entre sus piernas sobando su vagina sobre su panty negra, al verme se fue hacia el baño. Pero éso será otro historia...