La hermana

Ella bien podia ser la hermana mayor que todos nos gustaria tener, pero ahora es la mia.

Esta historia sucedió ya algunos años atrás, cuando yo tenia 17 años y mi hermana la mayor tenia 18. Ella siempre era una chica con un par de hermosas tetas y un trasero redondito y duro. Una tarde yo disfrutaba de las revistas porno que me había dejado un amigo, y me deleitaba con las hermosas mujeres que en ellas aparecían.

Mujeres con unos pechos grandes y con unas medidas de escándalo, eran perfectas. Cuando de repente entro en mi habitación mi hermana, y yo tímido como era me avergoncé. Ella se dio cuenta de que estaba mirando "Las revistas" como las denominaba ella. Y me pregunto:

  • ¿Que has aprendido algo con esas revistas o eres todavía un novato?

Medio avergonzado baje ligeramente la cabeza y asentí, a la vez que intentaba esconderlas de su vista.

  • Trae para aquí – me dijo ella.

Acto seguido se abalanzo sobre mí y me intento quitar las revistas que tenia a mis espaldas, pero lo que hizo fue acercarme sus pechos a mi cara.

OH que pechos, su dureza había chocado contra mi cara y enseguida me excite. Ella después de cogerme una de las revistas se separo, y vi. como sus pezones habían empezado a florecer, estaba clavando mi mirada sobre sus pezones, mientras ella pasaba las hojas de la revista alocadamente. Yo abstraído todavía en sus pezones no me di cuenta que ella había acabado, y me miro. Se dio cuenta de que la estaba observando y se miro los pechos, y me dijo:

  • Ves mira lo que has conseguido, me he excitado un poco. Que ahora mismo estarás pensando como serán estos pezones ¿verdad?

Yo asentí, y ella se coloco más cerca de mí, dejando de nuevo sus pechos a la altura de mi cara.

  • ¿Te gustaría tocarme los pechos? Si – a continuación ella se quito el polo que llevaba, dejando al descubierto su sujetador.

  • ¿Bueno dime que te parecen? – inicio el movimiento de desabrocharse el sujetador.

Menudo momento fue aquel, yo sentado en una silla, con la polla mas dura que el acero, y mi hermana delante de mí con los pechos al aire masajeándolos.

  • Ven acércate – me dijo mientras ella se acercaba a mi, y me cogia la mano.- Estoy bastante excitada y me gustaría que me besaras los pechos.

Yo sin dudarlo me acerque y empecé a besarle las tetas, mientras una de mis manos se deslizaba hacia una de las tetas, la otra se estaba deslizando hacia su culo. Empecé a chuparle ligeramente los pezones, esos pezones que estaban muy duros. Apretaba mientras tanto con la otra mano el culo. Ella se sentó sobre mí, y note como se colocaba para sentir mi polla sobre su coño. Yo ya no podía más, estaba a punto de explotar. Decidí quitarle el botón del vaquero, y empecé a bajar la cremallera. De repente ella se levanto y dio un salto hacia atrás.

  • Tranquilo, poco a poco, bájate los pantalones y échate sobre la cama – me dijo.

No tarde mucho en hacerle caso y cuando me baje los pantalones ella descubrió mi bulto.

Me tumbe boca arriba sobre la cama y ella después de quitarse los vaqueros se coloco encima mió. Solo nos separaba un poco de tela, ella se deslizo hacia atrás y me bajo los calzoncillos. Empezó a besarme la polla poco a poco, yo cerré los ojos y espere. Pronto ella se la introdujo en la boca, y yo estaba que no me aguantaba, la acaricie el culo y a continuación metí mi mano debajo de su braguita.

Ella esta húmeda y apenas había empezado, así que la indique que colocara su coño sobre mi cara, sin que dejara de chuparme la polla, y empecé a besarle el coño y a pegar lametones. A cada lametón mió ella respondía con una presión de sus labios sobre mi polla era algo maravilloso, su manera de chuparme la polla era diferente, Estaba entrando en un estado de desvanecimiento por el exceso de placer, que por unos instantes deje de chuparle el clítoris. Ella se dio cuenta y continúo chupándome la polla. Vd. como me llegaba, y con mi mano le aparte la cara, pero no se retiro, y mi semen broto como un volcán sobre su cara y sus labios. Se giro hacia a mi y relamiéndose me invito a fumarnos un cigarrito a medias.

Ella lo apago sobre el cenicero y a continuación se coloco encima de mí, me pidió que la follara, que quería sentirme dentro. Esas palabras provocaron en mi una nueva erección, mientras ella se tumbaba boca arriba yo me colocaba entre sus piernas, me agarro la cabeza y arrimo sus labios a mis oídos, y entre susurros, me pidió que se la metiera ya. Y así i.e. Mi polla entro en su coño como que estuviera acostumbrada a ese coño. Ella empezó a agarrarme y apretarme contra ella, mientras yo no dejaba de empujar. Sus gemidos empezaron a ser mas audibles, y sus movimientos mas rápidos. Ella estaba entrando en un estado de Soc. como el que había sufrido yo anteriormente.

Después de unos minutos ella había sentido un gran orgasmo y yo me había corrido dos veces dentro de ella. Ella relajadamente se quito de encima de mi, se puso las bragas y se fue a su habitación. Yo me quede tan satisfecho que no podía dejar de pensar en ese polvo que acababa de echar con mi hermana mayor. Desde entonces y cuando no están mis padres procuramos seguir practicando ese sexo que tanto nos gusta a los dos. Algo que aun estando los dos casados seguimos llevando hasta la extenuación. La verdad es que siempre estuve enamorado de mi hermana, pero temía que no fuera correspondido. Continuara.....

Goress