La heredera (1)

Sorpresas te da la vida... ¿Quien diria que la heredera de mi empresa me iba a dar una noche memorable?

Hace realmente poco tiempo que entre en la empresa en la que estoy, como unos cuatro meses. Desde que entre me han deparado multiples y agradables sorpresas. Les cuento lo que me ocurrio con mi jefa, que era nada mas y nada menos que la heredera de la empresa.

Hasta hace poco el trabajo habia transcurrido normal. En el departamento de marketing, en el que yo estoy, trabajamos siete personas contando con la jefa, Pepa, una mujer de unos 35 años, calculo, que se conserva bastante bien, aunque a decir de los compañeros, ya lleva encima algunas operaciones de estetica. Su aspecto a diario suele ser bastante formal si bien un poco desgarbado. A ello contribuye su pelo largo y lacio y su altura, ya que mide aproximadamente 177 cm. Ademas, parece que en el pasado fue una fumadora empedernida ya que su voz era casi de cazallero, como se suele decir.

Mi relacion con los compañeros de momento solo es cordial ya que como he dicho solo llevo aqui poco tiempo aunque entre ellos tampoco es demasiado fluida. Quizas el duro ritmo de trabajo y la competitividad en el departamento impidan mayor relacion entre los compañeros. Pepa, ademas de responsable de marketing de la empresa, era la hija del director de la misma, aunque no se hablaba apenas con su padre mas alla de lo puramente laboral. Me explicaron que su presencia alli era por su madre que era realmente la dueña de la empresa pero como digo, su padre apenas la hablaba.

En cualquier caso, los resultados cantaban y el puesto de Pepa alli estaba mas que justificado.

En la empresa hay tradicion de hacer un fiesta justo al final del invierno ya que es cuando finalizan las principales campañas que tenemos y es cuando la empresa tiene los bolsillos llenos. Hace un mes fue la fiesta y para mi era la primera asi que no sabia de antemano como era el ambiente en estas fiestas. Me comentaron que la fiesta de Navidad era bastante sosa e informal, pero esta era la que todo el mundo iba de tiros largos, ya que a la fiesta se solia invitar a personalidades del sector y se anunciaban productos nuevos. Vamos, un acontecimiento.

Dias antes de la fiesta nuestra jefa, Pepa, como responsable de marketing estaba nerviosisima e intratable. Un par de veces me echo la bronca sin motivo alguno. Igual que a mi a mas compañeros. La verdad, esos dias el ambiente en el departamento se podia cortar con un cuchillo.

Pero por fin llego el dia de la fiesta y los animos se calmaron. Ya en la fiesta cada cual lucia con su mejor traje, incluso la gente de la fabrica parecian estar de boda. La cena consistia en aperitivos, servidos por uno de los restauradores mas afamados del pais. En nuestro grupo estabamos los compañeros del departamento y ocasionalmente se nos unia Pepa, que andaba de alla para aca atendiendo a invitados. Esa noche Pepa estaba espectacular. Llevaba un traje blanco de pantalon muy amplio y una chaqueta. Debajo parecia no llevar nada mas. Para la fiesta se habia hecho un peinado que la resaltaba bastante su cara, que por otra parte iba perfectamente maquillada. Para colmo, calzaba unos zapatos con unos tacones de vertigo, lo que hacia que su altura se incrementase, destacando entre la gente. En definitiva, estaba para echarla un polvazo.

La fiesta fue transcurriendo entre risas y conversaciones en su mayor parte intrascendentes. En nuestro grupo estabamos, aparte de mi (me llamo Ernesto), Gonzalo, el "abuelo" del departamento, que tendria unos 45 años, Carlos, Marta y Laura. Como ya he dicho, ocasionalmente se nos unia Pepa. Monica y Roberto ya se habian ido pues solo hicieron acto de presencia.

Tras los canapes y vinos empezaron a servirnos copas. Carlos, que habia sido padre por segunda vez hacia unos dias se marcho. Gonzalo aprovecho para irse con el, ya que segun me comentaban en fiestas de la empresa nunca se quedaba, a pesar de ser un juerguista.

Asi pues me quede con Marta y con Laura. Marta, a pesar de sus 40 años se mantenia estupendamente y la verdad iba vestida bastante sexy. Lastima que su cara no acompañase al resto. Laura era justo lo contrario. No pasaba de los 24 años y tenia una carita preciosa, pero no se cuidaba nada y estaba mas bien rellenita. La verdad es que una mujer con la cara de Laura y el cuerpo de Marta seria un buen objetivo para esa noche.

Poco a poco fuimos quedando menos gente al tiempo que la musica sonaba mas alta y habia grupos que comenzaban a bailar. Entre otras estaba el grupito de las chicas del call-center, que si la cosa se alargaba, al ritmo que estabamos bebiendo, serian otro posible objetivo. Como ya no habia invitados en la fiesta, Pepa se quedo con nuestro grupo y yo no se si era por lo que habia bebido o por que pero aprecie alguna que otra mirada de Pepa distinta de lo habitual.

Cuando teniamos los vasos vacios Pepa dijo que iba a por otra copa, pero antes de ir dijo:

  • Cuidado con lo que haceis con este, que os lo dejo solo aqui.

Ya me habian comentado que Laura y Marta en otras fiestas anteriores habian terminado con alguien de la empresa y por como estaba acercandose a mi, no me extrañaba que hubieran pensado en mi para eso. No soy presumido si digo que a mis 30 años creo estar bien fisicamente ya que no tengo ni un michelin y mido 1:82. De cara, sin ser una maravilla, al menos no asusto. Ademas tengo un aire timido que creo que atrae a las chicas.

Ante las dudas, y entre risas, Pepa me cogio del brazo diciendo:

  • Ademas me hace falta ayuda y asi te vigilo.

Ya en la barra, y acercandose mucho, Pepa me dijo:

  • Te he salvado de esas doa. Menudas lobas son. ¿O te apetecia estar con alguna de ellas?

  • No -respondi yo casi con miedo-

  • No te preocupes -dijo sonriendo- que yo te defiendo.

Esto ultimo lo dijo agarrandome del brazo y tirando de mi hacia si. La verdad es que Pepa me estaba poniendo un poco nervioso. Estaba muy buena, especialmente esa noche, pero como me dejase llevar y le tirase los trastos podia estrellarme, ya que ademas de mi jefa era la hija del director.

Volvimos con las copas al grupo y seguimos de bailoteo y charla. En una ocasion que baile agarrado a Marta la verdad es que se pego excesivamente a mi y ya os conte que tenia muy buen cuerpo.

Definitivamente me estaba apeteciendo echar un polvete esa noche, y Marta si que era mas accesible. Pero la mirada de Pepa a Marta hizo que tanto ella como Laura empezasen a pasar de mi.

La fiesta poco a poco iba acabandose y la gente marchandose. Decidimos salir e ir a otro sitio a tomar otras copas, pero ya en la puerta del hotel donde se celebro la fiesta Marta y Laura dijeron que se iban para casa. La verdad se las veia contrariadas, quizas debido a no haber pillado nada esa noche. Pepa de nuevo me agarro del brazo y dijo que nosotros si que seguiamos de copas.

Ya os he dicho que me parecia peligroso tirar los tejos a Pepa, pero la verdad que entre las copas que llevamamos y que estaba radiante esa noche me apetecia mucho seguir con ella un rato mas. Asi que, una vez solos, nos dirigimos a un local que la gustaba, que estaba muy cercano al hotel.

Al entrar el sitio estaba abarrotado, pero dijo que al fondo solia haber sitio asi que, pasando ella delante de mi nos sumergimos entre la multitud. Yo, para no separarnos y perdernos me acercaba a ella cogiendola a veces la cintura. Dios mio, que cinturita tenia Pepa. Un cuerpo firme y bien trabajado. Llegamos por fin a dode ella decia pero hueco habia muy poco, de hecho estabamos bastante apretados. Mientras trataba de pedir una copa al camarero notaba su cuerpo pegado al mio. ñComo me estaba poniendo! Y ya ni os cuento cuando al mirarla baje la mirada a su escote; Debajo de la chaqueta no llevaba nada y se apreciaba un canal que invitaba a la lujuria. Consegui al fin pedir una copa y brindamos:

  • Por nosotros! -dijo Pepa.

  • Pues eso, por nosotros, y por que lo pasemos bien -replique yo.

  • Si, tienes razon, por que lo pasemos bien los dos -sentencio Pepa.

En un momento que estabamos hablando ella giro la cabeza. Nuestros labios quedaron a milimetros. Tras una tensa espera por fin nos dimos un beso.

Ademas de estar buena, besaba de vicio. Vamos, que parecia que necesitaba hacerlo desde hacia tiempo. Su lengua no dejaba parte de mi boca sin explorar. Yo ya pase mis dos manos por su cintura y la traje hacia mi quedando pegados y pude notar como su pecho firme se apretaba contra mi. Mis manos bajaban a palpar su culo que prieto parecia disfrutar de las caricias.

Ni siquiera habiamos terminado las copas cuando decidimos irnos a un sitio mas intimo. Salimos del abarrotado local cogidos de la mano. Con mi otra mano ya la iba explorando el trasero y me iba poniendo muy muy caliente.

Tardamos muy poco en encontrar un taxi que nos llevo a su casa. A mi no me dejo decir nada, y mejor, por que a la mia po habriamos podido ir. Tras un trayecto de unos 20 minutos llegamos a su casa. El portal era espacioso y elegante, asi como el ascensor, en el que empezabamos a abrazarnos y a devorarnos a besos.

Entramos por fin en su casa, que estaba en consonancia con el edificio. Era un apartamento grande y exquisitamente decorado. Sin mas preambulos me llevo de la mano a su dormitorio y de un empujon me tumbo sobre la cama.

Ella estaba de pie frente a mi, mirandome desafiante. Sin apartar la miraza comenzo a desabotonar su chaqueta. Una vez la abrio pude ver el corpiño que llevaba, que se sostenia los pechos que quedaban a la vista. En esos momentos estaba ya completamente empalmado. Ella percatandose de mi ereccion, se agacho sobre mi y casi sin darme cuenta tenia desabrochado ya mi cinturon y bajado el pantalon . Ya con mas parsimonia fue poniendo su mano sobre el calzoncillo palpando mi pene sobre la tela mientras hacia gestos de relamerse. Poco a poco me lo fue bajando, quedando mi polla completamente enhiesta y expuesta a su vista. Acerco su cara y con la punta de la lengua comenzo a lamer el glande. Poco a poco, acercando sus labios fue acaparando con ellos todo el tronco que tenia a su completa disposicion mientras su lengua jugueteaba alrededor de mi capullo. Comenzo a mover la cabeza haciendome una mamada como nunca me la habian hecho. De la excitacion que tenia, yo ya estaba a punto de correrme y se lo hice saber. Entonces ella muy suavemente fue sacando mi pene de su boca y cuando estuvo completamente fuera dijo:

  • No es cuestion de que te desfondes ahora, no? Mejor que sigas con la excitacion.

Me cogio y me incorporo. Me quito mi chaqueta que aun le tenia puesta. Aflojo el nudo de mi corbata y fue desabotonando con mucha tranquilidad los botones de mi camisa mientras me lanzaba miradas de deseo. Me hizo ponerme en pie y me dejo completemente desnudo, a excepcion de la corbata. Segun me la iba a quitar yo me hizo dejarmela ya que segun dijo tenia en mente un jueguecito.

Asi desnudo como estaba y en pie, se coloco tras de mi y comenzo a besarme por el cuello mientras con una voz muy bajita comenzo a decirme:

  • De verdad que quieres disfrutar esta noche?

  • Ufff, si, estoy que me salgo de la excitacion que tengo -respondi yo.

  • Tengo para ti una sorpresa y espero que quieras disfrutar de ello.

  • Ah si? y de que se trata? -pregunte.

  • Tendras que esperar para saberlo.

Se separo de mi con una sonrisa burlona. Me habia dejado intrigado y parecia que disfrutaba de la situacion. Separandose de mi un poco mas se desabrocho su pantalon que cayo al suelo ya que era bastante amplio. Lo que pude ver no hizo sino excitarme mas. Llevaba unas medias de rejilla sujetadas con ligas a su corpiño. Debajo llevaba un tanga negro con brillantes pequeños haciedo la forma de un corazon. Puso sus brazos en cruz y mirandome dijo:

  • Que te parezco?

  • Que qué me pareces? Un bellezon, una tia impresionante.

Realmente me lo parecia y cada momento que pasaba deseaba mas follarmela. Pepa dio dos pasos y se abrazo a mi. Mis manos fueron directos a sus nalgas que tenian un tacto suave y firme a la vez.

Ella cogio una de mis manos y la llevo mas hacia el centro de su culo y muy sugerentemente me dijo:

  • ¿Y quien va a follarse este culo?

Joder! No me lo podia creer. Esa noche habia descubierto que mi jefa esta buenisima, estaba con ella para tirarmela y encima me proponia follarle el culo!!! Era justo una de mis fantasias, ya que hasta el momento ninguna mujer con la que he estado me habia dejado. Vamos, que me habia tocado la loteria esa noche, pense.

Yo, babeando, respondi:

  • Yo! Que ganas tengo!

  • De verdad que quieres? - volvio a preguntar.

  • Claro que quiero, estoy mas que seguro!

Se dio la vuelta y dandome la espalda puso mi culo contra mi paquete que estaba a cien. Se restrego contra mi, con lo que mi excitacion aun subia mas. Asi estuvo unos segundos durante los cuales mis manos manosearon sus pechos firmes y deliciosos. De nuevo se volteo y ya frente a mi, casi susurrando dijo:

  • Entonces si lo que quieres es follarme el culo, a lo mejor esto te da igual

Y mientras decia eso cogio mi mano y la llevo a su entrepierna. Lo que me encontre jamas lo hubiera imaginado, pues escondido en su tanga parecia haber algo mas voluminoso que una vulva. Joder, parecia una polla!!! Me quede completamente paralizado. No podia ser que esa belleza tuviese polla pero lo que estaba tocando no dejaba lugar a dudas.

El ver que no hubo un rechazo inmediatp hizo que Pepa se agachase a comerme avidamente la polla, que a causa del susto estaba perdiendo la ereccion. En cuestion de un par de segundos sus labios volvieron a ponerla a tope.

Entre tanto me dio tiempo a pensar un poco mas sobre la situacion. Por una parte estaba claro que eso no era una mujer e inicialmente eso me producia rechazo pero por contra hasta ese momento ni sospechaba de que no lo fuera y me tenia completamente excitado. Si ademas sumamos que de ese modo tendria asegurado lo de follarme un culo la balanza se inclinaba por seguir alli. Mentalmente trate de vencer mis reproches alegando que se trataba de mi jefa y que un rechazo me podria costar el trabajo y ademas -pensaba- la dejare que me haga la mamada y me voy, aunque, claro, lo de darla por detras...

Mientras pensaba todas estas cosas ella seguia proporcionandome una mamada exquisita que hizo despejar absolutamente mis dudas sobre si quedarme alli. Seguiria y veria hasta donde llegaba la cosa.

Pepa por momentos me miraba cuando se sacaba la polla de la boca para volverse a meterla. Vio en mi cara que yo aceptaba la situacion y por su sonrisa pude ver que en ese momento se encontraba feliz. Cerro sus ojos y se dedico en cuerpo y alma a adorar mi polla mamandola con una maestria tal que me llevo varias veces a punto de correrme sujetandome para evitarlo. Estaba claro que sabia como comerse un pene y llevarlo a la maxima excitacion.

Durante los aproximadamente 10 minutos que duraba la comida, se quito sus ligas y su corpiño y pude seguir comprobando que nada de lo que veia era de hombre. Sus tetas tenian un aspecto estupendo desde mi perspectiva. Al rato pude ver que se habia quitado tambien su tanga ya que lo vi tirado pero no me habia dado cuenta de como lo habia hecho. Aun asi, no se veia nada masculino en ella y a mi me estaba empezando a entrar curiosidad por como se veria ese cuerpazo con un pene.

Me arme de valor y la hice detener su mamada. Ella me miro con ojos de no entender nada, pensaria que me estaba echando atras y que no queria nada con ella. Su cara era mas bien de decepcion que cambio radicalmente cuando la dije que me gustaria verla desnuda.

  • Sabes lo que tengo -me respondio con sus labios casi rozando mi polla-, ¿De verdad quieres verme completamente desnuda?

  • Si, -respondi- precisamente por eso, tengo curiosidad.

Naturalmente, no era la primeraa vez que veia otra polla ademas de la mia ya que en el gimnasio donde acudia en las duchas puedes ver a otros tios desnudos, pero si bien nunca habia prestado atencion, ahora me apetecia ver lo que Pepa tenia.

Se incorporo y se separo de mi un metro. Con cara de timida se tapaba con una mano su polla y con otra sus pechos. Sonriendo la dije que se destapase y asi lo hizo. La sensacion era extraña ya que en medio de ese cuerpazo de mujer habia un pene de unos 15 o 16 cm con el pubis completamente depilado. La verdad, era una polla bonita y bien proporcionada.

Me acerque a ella y la abrace besandola. Note como ella se abrazaba a mi con fuerza y me besaba con mucha pasion. Poco a poco fuimos dando pasos hasta caer asi abrazados como estabamos en la cama. Mientras una de mis manos recorria sus pechos la otra se paseaba acariciando su trasero, pero poco a poco la fui deslizando hacia adelante.

  • Me apetece tocarte la polla, ¿puedo? -pregunte.

  • Como no! Claro que puedes

Ya sin disimulo lleve mi mano sobre su polla. Era la primera vez que tocaba una polla distinta de la mia y tenia un tacto suave. Instintivamente empece a masajearla y tardo poco en coger cierta rigidez con lo que la abarque con mi mano y comence una verdadera masturbacion. Pepa que ya se habia separado un poco de mi, entorno sus ojos y dio un suspiro de satisfaccion. La sensacion era extraña: estar tocando unos pechos de mujer al tiempo que la meneaba la polla, pero no se por que, la situacion me estaba gustando, maxime cuando la veia tan excitada.

Un rato estuve masturbandola hasta que me interrumpio:

  • Espera cariño, prefiero correrme mas tarde.

De nuevo se acerco y comenzo a besarme al tiempo que ella agarraba mi polla que rapidamente volvio a ponerse durisima. Yo aun tenia la suya en mi mano, que estaba ya quieta. Pero sus labios fueron bajando a mi cuello, despues al pecho bajando por mi vientre hasta llegar de nuevo a tragarse toda mi polla. Para ello habia cambiado su posicion dejando su entrepierna mas cerca de mi cara. Pude entonces contemplar con detalle su polla, con su glande brillante por el liquido preseminal que habia expulsado. Mientras una mano suya estaba explorando mi trasero con un dedo sobre mi ano, proporcionandome un cosquilleo que unido a la mamada que me estaba proporcionando era muy agradable.

Yo seguia mirando casi absorto su polla y se me paso por la cabeza la idea de saber que se sentiria al comerla. En cualquier otra situacion pensar eso me hubiera producido asco pero en ese momento veia casi natural la polla de Pepa y ya no me producia ningun rechazo asi que sin mas cogi su polla con una de mis manos y acercando timidamente los labios le di un beso. Ella pego un respingo, quizas por la sorpresa, y yo instintivamente puse mi lengua sobre su pene. El sabor no me desagrado en absoluto asi que decidi ir mas alla y con los labios abarque todo su capullo. Por los gemidos que daba, la situacion la estaba excitando mucho, cosa que pude comprobar cuando note como su pene crecia en mi boca. Ufff.. que sensacion mas rara y al tiempo satisfactoria. Me aplique a fondo a mamarla la polla como buenamente pude y tartando de hacer lo que a mi me gustaba que me hicieran y tan absorto estaba que cuando quise darme cuenta tenia un dedo suyo dentro de mi ano y contrariamente a como pueda parecer me estaba gustando. Hice entonces yo lo mismo. Lleve una de mis manos al suyo y trate de introducir muy despacio un dedo, lo cual me costo un poco al principio pero al rato entraba y salia sin problemas. Pepa ya se retorcia de placer y en un inciso en la mamada que me estaba haciendo dijo que queria mas dedos, y yo obediente me puse a meterle un segundo dedo. Ella, como queriendo enseñarme hizo circulos con el que yo tenia dentro y cuando estuve lo suficientemente dilatado me metio un segundo dedo.

Joder!!! Quien me iba a decir a mi hace unas horas que iba a estar comiendome una polla, me iban a estar metiendo algo por el culo -completamente virgen hasta ese momento- y lo iba a estar disfrutando como en ese momento disfrutaba.

Como pude, sacando un poco su polla de mi boca dije:

  • Joder, jamas imagine que esto era tan bueno.

  • Mejor es tener una autentica polla dentro -respondio ella.

Ops!!! Que habia querido decir? Eso ya era otra cosa. ¿me querria dar por detras? Ademas, yo lo que inicialmente queria era follarme su culo no que ella me follase a mi. Claro, que mientras pensaba esto tenia su polla en la boca, asi que si se trataba de verguenza no tenian sentido los reparos. Si se trataba de mi culo, en ese momento tenia dos dedos dentro. ñPor que no probarlo? si me duele ya lo parare -pensaba. Lo que no hice fue mostrar entusiasmo, pero creo que con mi silencio la di a entender que estaba dispuesto.

Pepa ya se habia vuelto a dedicar a mi polla y seguia con su dedos dentro de mi moviendolo ya sin escrupulos. Los movimientos de su lengua me estaban excitando mucho asi que la dije que me iba a correr, pensando que se apartaria (como siempre me habia pasado hasta ahora) pero hizo lo contrario, se agarro mas fuerte a mi y su boca comenzo a succionar con mas fuerza.

Ya no pude aguantar mas y me corri como pocas veces he hecho y ella tragaba todo mi semen. Despues de varios latigazos en su garganta siguio limpiando mi polla y se volteo para besarme. Al besarme pude comprobar el sabor de mi semen ya que aun tenia restos en los labios. La verdad, no se si por que era mio o por que, el sabor me resulto agradable. Estuvimos besandonos un buen rato y ella se separo de mi un poco, me miro a los ojos y me dijo:

  • Quieres probar ?

Sabia perfectamente a que se referia. Hasta este momento lo que habia pensado era que igual no estaria mal, pero ahora tenia que decidir si lo queria o no. Ella seguia espectante esperando una respuesta. Yo, bajando la mirada, con vergñenza respondi que si, siempre que no me hiciera daño.

  • Cariño, lo que quiero es que lo pases bien. No te va a doler y veras como disfrutas.

  • Estas segura? Mira que...

  • Mi trasero es como el tuyo -me interrumpio- y creeme que yo disfruto mucho con ello.

  • No me mientes?

Entonces me planto un enorme beso. La verdad es que fue la forma de no dejarme replicar mas y dar por hecho que me iba a follar. Mientras, ella seguia completamente empalmada al tiempo que mi polla ya habia perdido la ereccion. Sus manos de nuevo se dirigieron a mi ano y poco a poco, y haciendo circulos alrededor, fue introduciendo uno de sus dedos. A pesar de saber que era el preambulo de lo que venia despues la sensacion era agradable y yo me dejaba llevar. No tardo mucho en tener otro dedo dentro. Ya con los dedos masajeaba mi interior y me estaba produciendo cierto placer y ya no tenia la excusa de pensar que me estaba comiendo la polla, como antes. El placer venia de mi ano.

Siguio dilatandome con los dos dedos hasta que introdujo un tercero. Ahora las sensaciones, pasada una pequeña molestia inicial, si que eran de puro placer. Pepa viendo mi cara me susurro:

  • Quieres que te folle?

  • Si, quiero probarlo -dije ya plenamente convencido.

Saco muy suavemente sus dedos y abrio su mesilla de la que saco un bote (lubricante, supuse) y unos preservativos.

Se coloco de rodillas a mi lado ofreciendome su polla erecta la cual tarde poco en engullir. Notaba como cogia dentro de mi boca mayor firmeza. Mientras en su mano habia echado lubricante y sus dedos estaban entrando en mi ano lubricandolo. Cuando me tenia bien lubricado y su polla ya estaba a punto, me hizo ponerme a cuatro patas y se coloco tras de mi. Juagaba con sus dedos (creo que ya tenia hasta 4) dentro de mi al tiempo que se coloco el preservativo. Saco sus dedos e inmediatamente note como su glande se ponia sobre la entrada de mi ano que ya dilatado o ofrecio demasiada resistencia a la entrada de su capullo.

Note un pinchado asi que ella que se percato paro inmediatamente echandose sobre mi colocando sus tetas sobre mi espalda al tiempo que me abrazaba.

  • Tranquilo, ya veras como no te va a doler y vas a disfrutar -me decia al oido.

  • Trata de empujar como si estuvieras en el baño -continuo diciendo.

Yo me deje guiar por ella e hice eso, mientras note como muy muy despacio su polla iba entrando. Notaba de vez en cuando algo de dolor, pero eran rafagas poco intensas y se pasaban enseguida. Asi estuvimos unos minutos en los que poco a poco su polla iba ganando terreno.

  • Ya es toda tuya - me dijo.

Se incorporo y tras un rato para que mi culo se acostumbrase a su invitado comenzo a moverse hacia atras y volvia lentamente a introducirse. Asi hicimos unas pocas veces hasta que note que los pinchazos ahora me daban mas placer que otra cosa y que su pene entraba y salia mas facilmente. Su movimiento ahora era mas rapido y yo cada vez notaba un placer mas intenso.

  • Joder! como me gusta -exclame.

  • Te estas portando como un campeon, cariño -respondio ella.

Ahora era yo el que me movia buscando su penetracion. El movimiento se fue acelerando y lo que salia de mi boca eran autenticos gemidos. Ella me tenia agarrado de las caderas pero una mano bajo para agarrarme mi polla que de nuevo habia vuelto a la vida. La sensacion cuando llego a cogermela y masturbarme al ritmo de sus embertidas era bestial. Estaba disfrutando como nunca y jamas hubiera imaginado lo bueno que es sentirse follado. Pepa se agacho y agarro mi corbata que aun tenia alrededor de mi cuello (os recuerdo que no me dejo quitarla) y como si de unas riendas se tratase comenzo a hacer como si cabalgara sobre mi. Pense en ese momento que desde un principio ella tenia pensado esto.

  • Para esto querias que me dejase puesta la corbata? -pregunte entre jadeos.

  • Aha! sabia que esto iba a terminar asi -me contesto.

  • Que cabrona -dije- pero que placer me estas dando.

Tras un rato mas en esa postura Pepa dijo que queria verme la cara. Se salio de mi y se tumbo sobre la cama dejando su mastil para que fuera ahora yo el que la cabalgara. Me puse sobre ella en cuclillas y dilatado como estaba me deje caer. De la fuerza con la que caia note un pinchazo, esta vez de dolor, que me tuvo un rato paralizado. Ella mientras suevemente me cogio la polla y empezo a masturbarme. Un momento despues la sensacion de dolor habia desaparecido practicamente y era yo el que comenzaba a moverse. De nuevo el placer volvio y mi cara debia de ser de absoluta satisfaccion y entrega porque Pepa comenzo a decir en un tono mas sarcastico:

  • Vamos, putita, muevete! Tragate toda mi polla.

El escuchar eso, no se por que pero me excito. Mis manos se apoyaban sobre sus tetas al tiempo que yo, practicamente saltando, me insertaba su polla una y otra vez. Asi estuve cabalgandola un buen rato hasta que dio señales de mayor excitacion.

  • Me voy a correr -dijo. ¿quieres tragarte mi corrida?

Yo, que ya estaba disparado, salte y me sali de ella poniendome de rodillas. Le agarre su polla, quite el condon y me la meti en la boca.

Tardo escasos 5 segundos en largar el primer chorro de semen que fue directo a mi garganta y como me pillo por sorpresa me atragantaba y el gesto que hice causo que los siguientes 4 o 5 latigazos fueran directos a mi cara. Yo, para no desperdiciar el nectar que me ofrecia saque la lengua para repasar lo que habia alrededor de mis labios. Pude entonces saborear a placer su semen, que tenia un gusto finisimo. En ese momento seguro que mi aspecto era el de una putita bañad aen semen, pero os puedo asegurar que estaba plenamente satisfecho. Ella inmediatamente se incorporo y se puso a besarme lamiendome la cara y ya cuando la tubo completamente limpia dijo:

  • Dios! Que culo tienes. Como me ha gustado follarte.

  • Lo acabas de estrenar -respondi con una sonrisa.

  • Pues espero que no sea la ultima vez que lo pruebo...

  • Estas loca? -la interrumpi- si estaba en las nubes! claro que quiero repetir!

  • Joder, y eso que eras tu el que queria follarme el culo -dijo en un tono burlon.

  • Y quien te dice que no quiera? - reí yo.

  • A que estas esperando entonces?

Una proposicion tan directa me sorprendio, y ella aprovecho mi paralisis temporal para agacharse y meterse mi polla en la boca. Vi como con sus propias manos trataba de dilatarse el ano y en un rato ya me habia puesto la polla a tope, asi que me coloco un condon y lo embadurno de lubricante. Se tumbo boca arriba en la cama, subio sus piernas y con lo que le quedaba de lubricante en la mano se lo puso sobre su ano.

  • Vamos, valiente, dame tu polla.

Yo ni lo dude. Me coloque en posicion y le introduje el capullo que entro sin resistencia alguna. Espere unos segundos para que se acostumbrase pero ella rodeandome con sus piernas me empujo para que le diese mas polla, asi que empuje y poco a poco fue entrando hasta la bola. Coloco entonces sus piernas en mis hombros para que la penetracion fuese mas completa. Joder, que sensacion lo de follarse un culo. Que agujero tan apretadito. Estaba degustando la sensacion de tener mi polla en su culo viedo sus preciosas tetas y su cara de satisfaccion hasta que decidi moverme. Muy despacio al principio, tal y como habia hecho ella y poco a poco acelerando mis movimientos. Su cara era de sentir un inmenso placer, con sus ojos cerrados y gimiendo como una gata.

  • Follame fuerte, cabron, dame polla -exclamo.

  • Si, toma polla.

  • Parteme el culo, no pares!

La verdad es que viendo su cara y con sus expresiones cada vez me iba excitando mas. Empuje con mas ahinco hasta que llegue al punto de no retorno que sabes que te vas a correr:

  • Me corro! -dije.

  • Dame tu leche. Me la quiero comer! -respondio con ansia.

Saque la polla de su culo todo lo rapido que pude pero no llegue a su boca y tras quitarme el condon derrame toda mi corrida en su pecho. La verdad es que le deje sus tetitas inundadas ya que mi corrida fue muy abundante. Ella con mas lujuria que otra cosa, paso su mano sobr eel pecho recogiendo parte de mi semen y la llevo a su boca que quedo completamente impregnada.

  • Mmmm.. .que delicia!

  • Estas preciosa asi -replique.

Yo mismo me sorprendi por lo que habia dicho, ya que tal y como estabamos no pegaba demasiado ese tono, pero era cierto que su mirada de satisfaccion con el brillo de mi semen en sus labios la hacian una cara muy excitante y de solo verla te entraban ganas de follarla.

  • De verdad te gusto? -me pregunto.

  • Si, estas muy buena y con esto -dije señalando a su polla- estas muy completita.

  • Jajaja -sonreia- y bien que lo has disfrutado.

  • Oye -se interrumpio a si misma-, es tarde, por que no te quedas a dormir aqui?

Vi un reloj que tenia en su habitacion y efectivamente eran las 2 de la madrugada. Era viernes por lo que al dia siguiente no habia que trabajar y mi compañero de piso estaba acostumbrado a que pasase a veces noches fuera y nunca preguntaba.

  • A dormir, solo a dormir? -pregunte.

  • Te ha gustado, eh! -respondio.

  • Si, ni imaginaba lo bueno que era.

Pepa sonreia satisfecha de ser mi iniciadora y haber descubierto en mi una nueva forma de placer. Se levanto y me cogio de la mano.

  • Anda, vamos a darnos una ducha que mira como estamos.

Ya en la ducha, Pepa se puso a enjabonarme con sus manos prestando especial atencion a mi entrepierna, y como era de esperar mi pene fue cogiendo forma de nuevo. Sin pensarselo dos veces, Pepa se arrodillo e introdujo mi pene en su boca. Entre la magistral mamada que me estaba haciendo y la sensacion del tibio agua que me caia encima tarde poco en correrme y al igual que mi primera corrida, no dejo escapar ni una gota de mi leche. Yo me quede tan relajado que solo me apetecia dormir, asi que nos secamos y en un rato fuimos para la cama. Y esta vez si, para dormir.