La golfa escondida

La más tímida de las dos se descubrió como una folladora dominante que perdía los papeles cundo comenzaba a tener sexo, con lo que no sabias si darle dos hostias o follartela otra vez.

La sorpresa de mis chicas ( Trios )

Nunca pensé que podría llegar a escribir esto, pero, por fin sucedió, y no solo lo que yo m había imaginado…….

Por mi trabajo, he tenido la oportunidad de tener numerosas relaciones, algunas de ellas muy interesantes, con mujeres espectaculares y algunas, amantes extraordinarias. Os diré que me dedico al mundo del Marketing y que una parte importante de mi trabajo se realiza en exposiciones comerciales que conllevan viajes de un nivel superior al que con un salario, uno se puede permitir, lo que realmente facilita vivir en un ambiente rodeado de grandes oportunidades sexuales.

También he de añadir que gracias a esto, sin ser un tío muy atractivo, sino más bien resultón y razonablemente simpático, he tenido la suerte de poder ofrecerles un ambiente exquisito a mis conquistas.

Pero lo que iba a contar supera mis anteriores experiencias.

Hace unos meses comencé a trabajar en un nuevo proyecto que me obligaba a la realización castings para la elección de actrices y la verdad es que me divertía muchísimo. Tras unas cuantas pruebas en las que vimos un as cuentas candidatas, elegimos dos que nos parecieron las más idóneas: serias, responsables, atractivas sin ser escandalosas, en fin dos buenos fichajes. Tengo que reconocer que me las hubiera follado a las dos desde le primer día, pero eso me pasa muy a menudo.

Laura, la primera de ellas es una morena de 30 años con una bonita cara y unas caderas de infarto, muy simpática y provocativa, lo cierto es que la gente se da la vuelta para mirarla.

Elena, 28 años, también morena, más guapa de cara, pero con menos curvas , unas tetas espectacularess y mucho más tímida que Laura

Comenzamos con el trabajo y esto suponía un par de grabaciones a la semana, algunas en Madrid, otras en Barcelona y ocasionalmente en alguna ciudad más.

Poco a poco fuimos cogiendo confianza y naturalmente las bromas iban subiendo de nivel, además Laura, reconocía abiertamente su sensualidad y constantemente nos recordaba lo importante que era ir bien follado. Elena siempre asentía y sonreía con los comentarios de Laura, pero prefería mantenerse en segundo plano.

Naturalmente, tras alguna cena y algunas copas yo había tirado los tejos a Laura en varias ocasiones, la cual demostraba su habilidad para esquivar las balas y sin embargo aumentar mi calentura.

Al poco tiempo, tuvimos que desplazarnos a Valencia para una grabación de cuatro días. Al terminar de trabajar, Elena comentó que se iba a quedar en el hotel perreando un rato en la piscina y que luego se iba a pedir un sándwich en la habitación, que estaba cansada.

Nosotros reservamos para cenar en un excelente restaurante valenciano, donde nos dimos un estupendo homenaje de marisco, pescado y vino, terminando de cenar sobre las 12 de la noche.

Le propusimos a Laura tomar unas copas, lo cual aceptó inmediatamente. Cuando nos dirigíamos al centro nos pidió que la perdonáramos, pero que la había sentado mal la cena y quería irse al hotel, naturalmente nos ofrecimos a acompañarla, a lo cual se negó con amabilidad, pero rotundamente.

A la mañana siguiente comenzamos a grabar a las 11 de la mañana con lo que nuestras princesas estaban radiantes y plenamente recuperadas, esos pensábamos

Al terminar por la tarde, el que necesitaba un descanso era yo, con lo que rápidamente todo el mundo se dirigió a su habitaciones para una siesta.

Al llegara mi habitación, me dirigí a cerrar las persianas y descubrí que mi terraza estaba enfrente de la de la habitación de Elena y que allí estaba ella, preparándose para bajarse a la piscina.

Naturalmente, me quede como un mirón por si acaso veía algo interesante, y joder si lo vi. Elena no estaba sola en la habitación, hablaba con alguien a quien yo no podía ver. Al poco tiempo Elena empezaba a desnudarse y a coquetear con su invitado, ¡ joder con la tímida ¡, el flipe fue cuando pude ver sus tetas, que en la distancia me parecieron impresionantes, con dos pezones caídos hacia arriba que podrían causar un infarto. A continuación se puso a cuatro patas y de rodillas salió de mi campo de visión, dirigiéndose hacia donde supuestamente estaba su acompañante.

-Me cago en las putas cortinas!!!- dije yo con un principio de empalme y esperando a ver si podía ver algo más.

A los pocos minutos ya no podía más así que decidí llamarla por teléfono con la excusa de que iba a bajar a la piscina.

-Hola?  - contestó Elena con sorpresa en la voz, característica de haberla pillado con algo en la boca

-Hola Elena, soy Javier, ¿te he despertado?

-No, no te preocupes

-Nada es que me voy abajar a la piscina y quería saber si estabas por ahí, es que se han ido todos a dormir.

-Pues la verdad es que estaba a punto de dormirme… pero …me  vendría bien refrescarme un poco, voy a llamar a Laura y nos vemos abajo.

  • Vale

A Laura?, pensé yo que cosa más rara, pero mi polla piensa antes que mi cabeza y pegando un respingo, pensé : La leche, estaban juntas desde anoche!!

Como podeis imaginar me empecé a poner cachondo y no lo pude evitar, llamé a la habitación de Laura, que naturalmente estaba vacía.

A tomar por culo el baño, pensé, dándome prisa me dirigí hacia la habitación de Elena para confirmar mis sospechas y ver como salían las dos y ……. Por que no, intentar montarme el primer trío de mi vida.

Efectivamente, salieron las dos juntas, en bikini, y riéndose con complicidad, joder vaya par de pibones, pensé. Mi polla estaba totalmente de acuerdo conmigo. Me acerqué y las saludé, pero debía tener una cara de salido que me preguntaron que que me pasaba.

-         Nada, contesté yo, que lo mismo es mas conveniente darnos una ducha

-         Pero la tuya debería ser fría, contesto Laura bajando la vista hacia mi paquete

-         Que exagerada eres, es una típica reacción a dos bombones

-         Dejame ver - dijo tocando mi polla morcillona por encima del bañador – estás empalmándote!!

-         Oye chicos, parar que como venga alguien no veas que corte dijo Elena, si queréis seguir con el jueguecito iros a una habitación.

-         La tuya es la más cercana – dije yo

-         Vamos, dijo Laura.

Nos dirigimos rápidamente a la habitación y cuando entramos me quedé flipao, encima de la cama revuelta había un consolador de un tamaño considerable.

-Me parece que he interrumpido algo con la llamada

-A ver si eres capaz de arreglarlo, dijo Elena con una mala leche que no lo hubiera imaginado, porque nos has dejado a las dos a medias.

Debí poner cara de bobo porque inmediatamente la misma Elena me dijo:

-No te hagas ilusiones porque a mí no me vas a meter nada, si a acaso a esta puta que es la que te más pone.

La verdad es que no sabía por donde empezar y Laura estaba bastante cortada con la reacción de Elena.

Elena se quitó el Bikini, se tumbó en la cama y soltó:

-tu, zorra, descuelga el teléfono y acaba de comerme el coño.

Laura, con obediencia impensable con su carácter, se subió en la cama y metió su cabeza entre las piernas de Laura, mientras yo tenía su tremendo culazo delante de mi y cuando di un paso para acercarme, Laura me dijo:

  • Ni se te ocurra tocarla, ponte en pelotas y siéntate allí a mirar, pero como te hagas una paja se te acaba la fiesta.

La verdad es que no me quedó mas remedio que obedecer porque era un espectáculo digno de ver.

Laura le estaba haciendo la mejor comida de coño que yo había visto en mil películas porno. El chocho de Elena estaba depilado y solo tenía una línea de pelo vertical hacia su ombligo. Laura le abría con los dedos los labios y abarcaba todo su chocho con la boca. Por el movimiento de su cabeza se imaginaba la follada que su lengua le estaba haciendo.

Elena se retorcía de gusto y sus pezones apuntaban directos al pecho y con sus manos se los retorcía mientras empezaba a agitarse, anunciando el orgasmo que le vendría poco después.

Vi la mano de Laura deslizarse por el culo de Elena y como esta, ahuecaba para dejar espacio para las maniobras de su amiga.

Me incorporé para verlo y observé como el dedo de Laura estaba completamente metido en el culito de Elena, esta empezó a gemir mientras agarraba  a Laura de los pelos y la movía la cabeza mientras ella comenzaba un orgasmo que yo jamás había conseguido  ver en una mujer.

Inmediatamente, Elena se incorporó, dio la vuelta a Laura y se sentó sobre su cara, metiéndole el coño en su boca y frotándose el clítoris con su mano. En muy poco tiempo tenía su segunda corrida, desparramando un montón de flujo sobre la cara de Laura y gritándome:

-Mira cabrón, a ver si algún día aprendes a hacer esto.

Yo estaba a punto de estallar y si no lo hice fue por el alucine que estaba viendo. Tenía mi polla en la mano pero era incapaz de moverme, todo esto había pasado en apenas cinco minutos.

Elena se levantó, besó la boca de Laura y le dijo,

-         Vete a comerle la polla al ganso este que le va a dar una embolia.

Muy obediente, me levanté y me acerque a la cama con Laura y empecé a sobarla despacio y con mimos, la estaba viendo demasiado entregada, la empecé a acariciar la espalda y le quité el sujetador del bikini que todavía tenía puesto, le puse la mano por encima de su braga y estaba completamente empapada.

De repenta Elena soltó,

  • ¿os quereis dejar de mariconadas? Zorra, ¡¡ comele la polla!!!

Laura se tiró encima de mi polla y empezó a hacerme una comida suave, me lamió los huevos y empezó a juguetear con mi capullo, la verdad es que ya estaba a punto de correrme, cuando la zorra de Elena me puso una lata de bebida helada en la espalda, no conozco mejor retardador de la eyaculación.

La verdad es que me estaba empezando a tocar los cojones la actitud de la niñata y con la mala hostia que me puso lo de la latita le dije que dejara de jugar al ama y esclava de una puta vez.

Inmediatamente Laura se levanto, dejándome con la polla como un pedernal y me dijo que si quería jugar con ellas ahí se jugaba a lo que decía Elena.

Me levanté de la cama, me fui a por mi bañador y las mandé a tomar por culo, que ahora me terminaba la paja en mi habitación y punto.

Cuando salí de la habitación iba con un rebote y un calentón del quince, pero de verdad que la niña era una tocapelotas.

Llegue a mi cuarto y me hice un pajote que consiguió aliviarme el dolor de huevos.

A las 9 habíamos quedado para ir a cenar y yo me imaginaba que estas dos no iban a aparecer poniendo cualquier excusa, pero me equivocaba.

Llegaron las dos juntas a  cada cual más explosiva, Laura, habitualmente vestía así, llevaba vestido de punto de color mostaza, ajustado y traslúcido que marcaba todas sus curvas, el pelo suelto y una sonrisa en la cara que no dejo a nadie indiferente.

Laura se había puesto un vestido ceñido con un escote enorme y la espalda al aire, se había recogido el pelo con apariencia informal y un maquillaje que resaltaba perfectamente las facciones de su espectacular sonrisa. Joder, hacía unas horas las había tenido a las dos en una cama y habíamos tenido una bronca enorme y allí estaban ellas como si nada, la verdad es que estaba alucinado.

Nos fuimos a cenar y todo transcurrió como si no hubiera pasado nada, las dos bromeaban y vacilaban con todos, cada una en su estilo, e incluso yo empecé a comportarme con naturalidad.

Al acabar la cena y proponer unas copas, Elena dijo que tenía que repasar el guión de mañana y que si no me importaba acompañarla al hotel, me dejó de piedra, miré a Laura para intentar adivinar por donde iban los tiros y soltó:

-yo me voy con vosotros y hacemos un trío, a ver si os vayáis a divertir los dos solos.

Como era una broma habitual, mis compañeros se echaron a reír y me dijeron: venga campeón que no te van a comer, nos vemos mañana.

Cogimos un taxi y nos sentamos los tres atrás, inmediatamente, Elena echo mano a mi paquete y me dijo: Perdona por lo de esta tarde es que me pongo muy bruta y no controlo nada. Laura la miró y la dijo con voz de vicio, a mi me gusta que te pongas así.

Llegamos al hotel y nos fuimos a la habitación de Elena, según llegaron, se pusieron a morrearme y a desnudarme entre las dos, Laura se fue a su bolso y saco una píldora azul, me dijo, es Viagra, tómatela, porque si no no vas a poder con nosotras. Me tragué la puta píldora y me desnudé, me tiraron encima de la cama y Laura se metió mi polla en la boca mientras que Elena se tiro a comerse el su coño. , yo mientras, con mi mano, exploraba el precioso chocho de Elena, , alternando mis dedos entre su raja y su culo, tenía que follarme a esa tirana como fuera, pero quería comerle bien el coño, por lo que aparté a Laura, me tumbe boca arriba y senté a Elena en mi cara, ella empezó a cabalgar mi boca como la había visto hacer con Laura, mientras Elena volvía a hacerme una mamada que estaba siendo espectacular.

Como no podía ser de otra manera y a pesar de la paja de la tarde , noté que me iba a correr en seguida, Laura lo debió notar porque comenzó a succionarme la polla hasta que comencé a correrme mientras que ella seguía con toda la polla dentro, exprimiendo todo lo que podía sacar, Elena comenzó a correrse cuando vio la espectacular mamada que me había terminado su amiga.

Nos incorporamos y vimos como Laura comenzaba a hacerse un dedo, era la única que no se había corrido todavía, yo me acerqué a hacerle una comida que en algún modo le agradeciera la espectacular mamada que me había hecho, pero Elena sacó su vena dominante y me dijo,

-déjala, es una pasada ver a esta golfa haciéndose una paja, además desde aquí se ve mejor la cara de vicio que pone cuando se corre.

Efectivamente, la corrida de Laura fue buena, pero la cara de vicio de esta preciosidad corriéndose, no tiene precio, creo que a partir de ese momento es cuando decidí que tenía que follarmela hasta que se corriera de esa manera.

Sin dale descanso a la pobre Laura y con mi polla a cien, no se si ya por el efecto del viagra, Elena se volvió a erigir en maestra de ceremonias y dijo, ahora vais a follar para mí y yo decidiré como y quien de vosotros juega conmigo mientras.

Yo ya estaba entregado, tenia que follarme a Laura ya, asíoque me acerqué, la morreé y poco a poco me fui subiendo encima de ella, le acaricié el coño y con sus jugos lubriqué un poco mi polla, ella acercó su mano y empezó a pajearme, mientras me decía al oído que me iba a sacar todo lo que me quedaba, me tumbé encima de ella y con su mano acercó mi polla a su coño, me puse a jugar en la entrada, metiendo un poquito y haciendo círculos, la notaba empujar para sentirla más adentro pero la sujeté y seguí con el martirio,

-no seas cabrón y métemela ya, me dijo.

-A las putas buenas hay que montarlas despacio

La verdad es que su choco me aspiraba y noté como mi polla iba entrando en so agujero caliente, no pude aguantar más y se la metí despacio hasta el fondo.

-Cabrón,  que polla tienes, gritó cuando sintió mi punta en su fondo.

Empezamos a movernos cada vez más deprisa pero con un ritmo gradual, de tal forma que yo notaba como su coño se iba dilatando y encharcando. Tras varios minutos de postura del misionero, nos dimos la vuelta y se subió encima mío, lo cual aproveche para ver a Elena, tumbada en la cama, metiéndose el enorme consolador por su coño, lo manejaba a un ritmo frenético y pronto llego a su primer orgasmo.

Se acercó a nosotros y empezó a morrear con Laura, mientras, sus manos empezaron a descender r hasta nuestros sexos donde se puso a jugar con mis huevos y con el culo de Laura, que estaba chorreando. Noté que se empapaba la mano de los flujos y comenzaba a introducir un dedo en su culo, mientras me decía,

  • ¿ quiers follarte el culo de esta puta?

-Tu culo es el que me quiero follar

-Ya te dije que a mi no me ibas a meter nada en ningún sitio, capullo.

Habiamos empezado otra vez con el jueguecito de los cojones.

-Es a esta zorra la que le gustan las pollas, - dijo, mientras laura seguía su cabalgada - así que  vamos a  darle gusto.

Entre la follada, su mano en su clítoris y los dedos de Elena en su culo, Laura comenzó su corrida, abrí bien los ojos y pude ver otra vez esa cara de vicio, con su saliva a punto de sus labios que no pude resistir la traje hacia mí y la empecé a comer la boca que se deshacía mientras se corría de una forma impresionante.

Elena la empujo hacia delante de tal forma que sacó mi polla  de su coño y con su mano la dirigió a su culo. Laura estaba entregada y se dejaba hacer. Elena colocó la cabeza de mi cipote en su agujero ya abierto y me ayudo a clavarsela en el culo.

Laura fue acomodando mi polla de tal forma que en muy poco tiempo yo ya tenía mi polla clavada hasta el fondo en ese culazo que tanto había admirado. Empezó a moverse despacio y noté como mi polla crecía mas, si cabe en el negro agujero de mi amiga. Laura volvió asentarse en mi cara mirando hacia Laura, por lo que me empecé a imaginar a las dos comiéndose las bocas, Laura aceleraba su cabalgada y yo noté que no iba a aguantar más, cogí sus caderas y apreté hasta claversela en el fondo de su culo donde inmediatamente empecé a correrme , mientras oía a Elena decirle,

-Mira como se corre el cabron este en tu culo!!, cuentame lo que sientes, no le dejes una puta gota.

Me puso tan cachondo que cogí el culo de Elena y comenzé a morderle el clítoris mientras empezaba a chillar,y yo le daba bocados en su coño. Joder, era la segunda vez que esta zorra se corría en mi cara.

Saqué la polla del culo de Laura  y nos tumbamos los tres a descansar un poco.

Como vi a Elena más tranquila, me animé y la pregunté que coño la pasaba, como se ponía tan borde y que problema tenía para meterse pollas de plástico y negarse a tener un de carne.

Me contestó que cada uno vivía el sexo como quería, que a ella lo que le ponía a cien era saber que un tío estaba loco por follarla y no  dejarle. Intenté por las buenas:

-Pues la verdad es que es un desperdicio, porque estas buena de cojones y además se nota que te gusta el sexo.

En eso, Laura, le comentó que era verdad, que le parecia una pena y que a ella le encantaría ver como le metían una polla por el culo.

Aquí se armó la gorda, Elena se encaró con Laura :

-Tu eres un putón que te gusta ir provocando y a la primera de cambio ya te estas follando algo aunque sea de plástico- enseñándole el consolador. Hasta has sido capaz de follarte a este soplapollas que ahora se muere por follar conmigo, esa es la diferencia, a ti no te hará ni puto caso, pero yo le tendré como un perro cada vez que me salga del coño!!

Hasta aquí habíamos llegado, cogí a Elena de las muñecas y me la quedé mirando

-Tu que miras gilipollas, me dijo

-Que definitivamente te voy  romper el culo. Ayudame Laura.

Laura empezo a morrear con Elena que se resistia y casi muerde a Laura

-Cómele el coño que no tiene dientes.

Elena empezó a comerle el coño mientras yo me sentaba encima de ella y le iba retorciendo los pezones.

Empezó a decir:

-Cabrones me estáis poniendo cachonda.

Le acerque mi polla a la boca y empezó a darle lametones, cuando vi que mi integridad no peligraba, dejé que se la metiera, la muy puta estaba totalmente encelada y se la estaba metiendo hasta la garganta.

De repente empezó a cambiar y se puso más tranquila:

-por favor no me folles. Los papeles se habian cambiado:

-Lo siento zorrra, demasiado tarde.

Quite a Elvira de su coño y arrimé mi polla a su cueva, inmediatamente abrió las piernas y me dejó todo su coño abierto para mi.

Le metí toda la polla de golpe y acostumbrada a los pollones de plástico que gastaba no acusó el golpe, empecé a moverme para follarmela lo mas salvaje que pudiera, me estaba poniendo a cien, la muy puta, empezó a correrse y me pedía que la follara, seguí bombeandola hasta que paré por el cansancio.

Ella inmediatamente se revolvió y se subió encima de mi, empezando una cabalgada salvaje que amenazaba con impedir que me follara su culo.

Laura ya estaba preparada, había cogido un pequeño bote de crema y me ayudó para ponerla a cuatro patas, yo me senté en su nuca para que no se moviera mientra Laura le preparaba el ojete para mi polla, primero un dedo, luego dos, empezando a moverlos para logra una buena dilatación.

Elena nos decía,

-cabrones por el culo no que soy virgen , por favor, haré lo que me pidais, no me rompais el culo.

Laura seguía con sus movimientos y me llamó. Ven, follatela.

Cambiamos de posición y Laura paso a sujetar a Elena, acerque mi capullo a su ano y con mis dedos empecé a repetir la dilatación, cuando vi. que tenia un poco de espacio, empecé a meterle la cabeza de la polla mientras que Laura comenzaba con unos gritos sordos, pidiendo que no, que le dolía mucho.

Laura empezó a susurrarle al oido que se relajara, que le iba a gustar que ella la iba a ayudar. Con sus palabras el culo de Elena se fue abriendo cada vez más y en muy poco tiempo tenia mi polla clavada en su ojete, empecé a moverme despacio, tampoco era cuestión de destrozarla.

Laura se tumbo delante suyo y le puso el coño en su boca. Elena comenzó a comérselo mientras que yo empezaba con mi bombeo. Era el mejor culo que me había follado en mi vida, se notaba que le iba gustando y cada vez se hacía mas intensa la comida de coño que estaba haciendo.

Se estaba empezando a derretir cuando cogió el consolador y se lo empezó a meter en el coño, yo notaba su fuerza a través de sus paredes, empezo una masturbación brutal mientras seguía comiendo le el coño a Laura, esta tía era una máquina.

Empezó a correrse pidiéndome que la diera mas fuerte, que no me corriera, que se moría de gusto y tuve el placer de ver una verdadera eyaculacion femenina.

Se dio la vuelta y empezó a chuparmela como si le fuera la vida. Me corrí mientras ella estrujaba mi polla para dejarla completamente vacía. Luego se dio la vuelta y se morreo con Laura.

Nos pidió perdón, nos dijo que había sido una borde y que nunca se había corrido así, que a partir de ahora podríamos hacer con ella lo que quisiéramos.

Nos quedamos dormidos y a las 9 sonó el despertador. Fui a levantarme, pero mis dos zorras me dijeron: Jefe, anula la grabación de hoy y nos quedamos follando. Me miré la polla, la tenía escocida y pensé: unas horitas de descanso y mejor esta noche jugábamos un rato, pero antes de irme dije

.venga chupapollas a desayunar.