La fiesta
Una madre se encuentra con su hijo en una fiesta grupal.
La fiesta
Susana 55 años regordeta madre de dos hijos mayores, pasaba su vida disfrutando de los placeres de la vida, vivía sola, uno de sus hijos era casado y Fernando el menor tenia un buen trabajo y su departamento de soltero.
Ella se reunía con sus amigas y sus maridos y organizaban encuentros grupales en donde el sexo y el descontrol, lo llenaban todo, eran las 11 de la noche y ya iba por su segundo tequila y por su segundo hombre
En el otro sector de la casa, algo la sorprendería y cambiaría su vida para siempre, al entrar a la biblioteca de la casa, se encuentra frente a frente con su hijo Fernando, vestido solo con su camisa celeste, su primera idea fue taparse con las manos , pero de pronto la risa de Fernando, la hizo distenderse y lo saludo con un tierno beso en la mejilla, Fernando no podía ocultar su erección y el tequila que había hecho efecto en Susana , recordó que cuando Fernando, era chico, lo había sorprendido espiándola cuando se bañaba, para luego masturbarse y al fin y al cabo el destino la había puesto frente a esta situación.
Lo beso en el cuello y Fernando respondió posando su mano en su húmeda vagina, se arrodillo frente a el y coloco su deseado pene entre sus voluminosos pechos
Luego de chupar su pene se sentó en una silla y Fernando se arrodillo a su lado hundiendo sus dedos en la vagina de su madre que suspiraba y gemía de tanto goce, goce que aumento cuando la lengua de su hijo recorría su clítoris arrancándole un placer intenso
Ya el pene de su hijo se introducía en el templo que lo hubiera albergado antes de nacer , años después parte de su cuerpo ingresaba por el lugar donde hubiera salido.
En el momento en que Fernando eyaculo en su interior Susana sintió que ese semen era el producto del mejor amor entremezclaba, el placer con el amor incondicional de madre y la palabra incesto tan temida, y que tanto la perturbaba, cuando Fernando tenia 15 años y lo espiaba cuando se bañaba y se masturbaba pensando en el, ya había perdido su significado tan terrible y lo supo cuando el pene de Fernando lleno de vigor, se introducía en su ano.
Sus embestidas eran potentes, mientras gritaba: te rompo el culo mama si, si , oh ,oh y eyaculo en su ano, con potentes chorros de leche y no seria la ultima vez, los dos reposaban en el suelo, de repente ingresaron a la biblioteca dos hombres y una mujer, la mujer tomo el flácido pene de Fernando y lo introdujo en su boca uno de los hombres se recostó en el piso, su madre se sentó sobre su imponente miembro que penetro en su lubricado ano que contenía el semen de su hijo, el otro hombre la penetro vaginalmente con fuertes empellones, Fernando miraba a su madre doblemente penetrada, abandonada al placer y deposito en la boca de la mujer el producto de la incestuosa excitación, casi al mismo tiempo los hombres eyacularon en el interior de su madre que reía y reía de pura felicidad.