La fiesta 4º parte ( el castigo)

Es la hora de cumplir el castigo por lo que sucedió en la cena. Mi puta va a ser castigada delante de todos los invitados regalándome su dolor.

What do you want to do ?

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Tras la orgía con los sumisos y mientras nos duchamos, comentamos la experiencia que terminábamos de compartir. Me dices que todavía no puedes creer lo que terminas de hacer y cómo has podido disfrutar tanto de una situación que jamás habrías imaginado antes de conocerme. Yo te explico que todos los que tenemos más de 35 años ,  hemos estado durante muchos años sometidos a unos prejuicios provocados por una férrea educación sexual donde todo lo que era distinto al sexo convencional estaba mal visto por la sociedad, y se consideraba un sexo propio de personas degeneradas, pero cuando entras en el mundo del BDSM, te das cuenta de que las posibilidades en el sexo son infinitas, y por tanto, hay que tener muy claro que siempre que dos personas hagan voluntariamente lo que desean, sin hacer daño a nadie, todo es válido y cada uno tiene sus preferencias que siempre tenemos que respetar y sobre todo compartir si son parecidas a las tuyas.

En ese momento recordamos que el anfitrión nos había citado en el comedor, por lo que terminamos de ducharnos, nos vestimos y nos acercamos hacia allí preguntándonos si ese sería el momento en el que tuviésemos que cumplir el famoso castigo. Estaba claro que en breves momentos saldríamos de dudas.

Poco a poco el comedor se fue llenando de invitados hasta que a la hora marcada apareció el anfitrión y se dirigió a los asistentes

-          Buenas noches, espero que estéis todos disfrutando de la velada y de las distintas opciones que os estamos ofreciendo. Ahora es el momento de que cumplan los castigos aquellos que no han podido disimular sus orgasmos cuando hemos estado cenando. Por favor, que se acerquen aquí.

Te cojo de la mano y nos dirigimos junto con la otra pareja a donde se encontraba él anfitrión. La otra pareja está compuesta de un Amo de aproximadamente 40 años y una sumisa de apenas 25. Él es alto con barba y aspecto rudo, ella es preciosa, larga melena morena, ojos grandes y negros, va vestida con un traje negro ajustado totalmente transparente que deja ver su cuerpo perfecto y sus tetas muy bien operadas. Una vez hemos llegado, el anfitrión continúa su discurso.

-          Me imagino que nadie os había dicho lo del castigo porque si no habrías tratado de disimular bastante más vuestros orgasmos, pero con este castigo estoy seguro que vamos a disfrutar todos. Las reglas son sencillas, los Amos hablarán entre si y decidirán qué castigo quieren imponer a sus respectivas esclavas, deberán ponerse de acuerdo porque las dos recibirán el mismo tipo de castigo, Habrá sólo una pareja ganadora que será decidida por los votos del personal asistente, quiero aclarar que no sólo cuenta la intensidad del castigo si no, la forma de disfrutar de ese castigo por parte de los participantes. El premio lo diré después de disfrutar del espectáculo. Cuando queráis podéis decidir qué es lo que vais a hacer con ellas.

El otro Amo y yo nos apartamos a hablar, no queremos que escuchéis lo que hablamos para aumentar vuestro nerviosismo. Mi propuesta es sencilla, quiero que me regales tu dolor y así se lo expongo a él, que me sonríe satisfecho con la decisión. Tras comentársela al anfitrión es anunciada al resto de invitados que la acogen con júbilo mientras acercan sus sillas al escenario donde se desarrollará el castigo.

Del techo cuelgan unas cadenas  y de las cadenas una especie de argollas, tras ordenar que os desnudéis y que os beséis en la boca en una especie de presentación, os atamos las muñecas a las argollas colocándoos una en frente de la otra, totalmente juntas, de hecho, vuestro pezones se rozan constantemente, al ser de la misma altura vuestras bocas están pegadas, los brazos están en alto y estirados y los pies amarrados al suelo con otras argollas que os sujetan los tobillos haciendo que vuestras piernas estén bien abiertas. En la parte de atrás del escenario hay una mesa con distintos utensilios que pueden ser utilizados, hay varas, fustas, velas, cuerdas, agujas, látigos, pinzas, estimuladores anales, consoladores….todo lo que un Amo y una puta pueden desear para disfrutar.

Yo decido empezar con el látigo y él con una paleta

Es un látigo de aproximadamente un metro de largo, muy fino, de esos que rápidamente te marcan donde golpean, me acerco por tu espalda y te digo al oído cuánto deseo marcar tu piel, cuánto deseo saber que puedo ocasionarte tanto dolor como me apetezca y demostrarte que puedo hacer contigo todo lo que quiera, como quiera y cuando quiera. Te digo que sólo quiero que lo disfrutes tanto como yo porque sé que te encanta regalarme tu dolor y que mi primer objetivo va a ser marcar tu espalda. Quiero que cada vez que sientas el látigo en tu piel, cuentes el número de azotes y me des las gracias por él, si quieres que pare sólo tienes que decirme nuestra palabra convenida (ALTO) y pararé inmediatamente, si no escucho la palabra de seguridad, continuaré aunque llores. Si Amo, puedes empezar cuando quieras, soy tuya, es tu respuesta.

Me coloco en la posición, cojo el látigo con fuerza del mango, tiro el brazo hacia atrás y un zumbido se escucha antes de chocar contra tu piel, zassssssssssssss, uno Amo, Gracias.. la marca aparece rápidamente en tu espalda, te ha dolido y para no gritar decides besar a la otra puta, es la forma de ahogar tus gritos de dolor. Ella recibe tu lengua con ansia, está siendo golpeada con una paleta en el culo, golpes fuertes y constantes, plash……..plash…..plashhhhhhh, plashhhh, zassssssssss, dos Amo, Gracias…..una nueva marca en tu piel, zaaaaaaaaaaaasssssssssss tres Amo, Gracias. Uno tras otro los latigazos cubren tu espalda, dejando las marcas cada vez más visibles, algunas de ellas incluso tienen sangre al haber recibido varios impactos en el mismo punto. Tus lágrimas empiezan a caer por tus mejillas y son rápidamente bebidas por la otra puta, que tampoco puede evitar llorar de dolor después de recibir tantos golpes en su precioso culo. Las dos aguantáis el castigo, has contado 40 latigazos. En ese momento decido cambiar de instrumento. Te coloco mirando al público después de mostrarles cómo te ha quedado la espalda, con todos los azotes bien marcados, con el consiguiente aplauso y aprobación de todos los presentes , lo mismo hace el otro Amo con su puta, enseñando un culo casi morado de los golpes recibidos. Te vuelvo a coger las muñecas de las argollas para que tengas los brazos levantados y las piernas bien abiertas. Cojo una cuerda y te ato las tetas haciendo que se pongan duras al dificultar el paso de la sangre, enciendo una vela, y tras asegurarme que la cera se ha derretido, empiezo a verterla despacio por tus tetas y pezones, cubriéndolas de cera blanca,  provocándote esa sensación de calor que tanto te ha excitado siempre, la cera sigue cayendo mientras tu miras como el público disfruta del espectáculo, de hecho, hay vari@s sumis@s que ya están de rodillas comiéndosela a sus Amos mientras que ellos nos observan, parece que el espectáculo es de su agrado y a ti te gusta ver cómo se excitan porque sabes que a tu Amo le gusta presumir de ti y que estará muy orgulloso de tu comportamiento. Una vez las tetas están cubiertas de cera, cojo varias pinzas y comienzo a colocarlas despacio empezando por tus preciosos pezones, soportas el dolor mientras sigues mirando con cara de puta al público que nos observa, continúo colocando las pinzas poco a poco, deleitándome en cada una de ellas y asegurándome que están bien colocadas, una tras otra las pinzas cubren tus tetas, hay un total de 10 pinzas en cada una de ellas. Empiezo a jugar con las pinzas, dándoles pequeños golpes que provocan un dolor intenso, me acerco a la mesa, cojo un vibrador y lo presiono contra tu clítoris, quiero estimulártelo, quiero ver como mi puta se corre mientras el dolor en las tetas es cada vez más intenso provocados por la presión de la cuerda y de las pinzas. Aumento la velocidad del vibrador, abres todo lo que puedes las piernas para acomodarlo mejor, para permitirme el acceso, quieres correrte ya … mientras te masturbo me dirijo al público asistente invitándoles, a todos los que quieran felicitarnos por el espectáculo, a que se acerquen para que se corran encima tuya cuando estimen conveniente, la leche es el premio de una buena puta y los dos queremos que te bañen en leche.  Nada más escucharlo uno de los Amos se acerca a nosotros, y comienza a masturbarse a tu lado, en pocos segundos sientes varios chorros de leche caliente bañándote la pierna, nos felicita por el espectáculo y se sienta. El sentir la leche  aumenta tu excitación provocándote un enorme orgasmo que es correspondido con los aplausos del personal. Mientras, el otro Amo, ha decidido traspasar los pezones de su puta con largas agujas, lo hace despacio colocando una en cada pezón, y después clavando otras más pequeñas en sus tetas. El dolor para la sumisa es insoportable y dice la palabra de seguridad. Su espectáculo ha terminado, el Amo la libera de las argollas y tras quitarle las agujas con cuidado bajan del escenario.

Te quito las pinzas, te quito la cuerda y te masajeo suavemente  las tetas para que vuelva a regar bien la sangre. Después te coloco tumbada boca a arriba en una especie de banco, que está a medio metro de altura, dejando tus brazos colgando a cada lado con las piernas bien abiertas. Cojo una pequeña fusta, que termina en un triángulo de cuero, quiero castigarte el clítoris, pero sobre todo quiero que estés expuesta y con todo el cuerpo a disposición de aquellos que quieran correrse encima de ti. No tardan mucho en acercarse 6 hombres y una mujer, la mujer se sienta sobre tu cara para que le comas el coño mientras yo te azoto el clítoris con golpes secos que te hacen estremecer, dos hombres te cogen las piernas para asegurar que están bien abiertas y que estés más cómoda, el resto te mira, te acaricia las tetas y se masturban compulsivamente para darte su leche. Poco a poco se van corriendo en tus tetas, en tu vientre, en tus piernas, mientras recibes toda esa leche sigues comiéndote el coño de la mujer que gime como una loca por el placer que le estás regalando hasta que termina corriéndose en tu boca y restregando su coño húmedo por tu cara cubriéndotela de flujo. Yo termino de azotarte, me acerco a tu boca y giro tu cabeza para follarte la boca, me gusta verte cubierta de leche, hueles a sexo y la situación me ha excitado muchísimo, estoy muy orgulloso de ti, has soportado el castigo tan bien como yo esperaba y hemos conseguido que te cubran el cuerpo entero de leche, esa imagen y tu perfecta comida de polla hacen que estalle en un orgasmo dentro de tu boca, tragas cada gota de leche de tu Amo porque es la mejor recompensa que una puta como tu puede recibir.

Te ayudo a incorporarte y ante los aplausos de los asistentes nos bajamos del escenario en busca de un poco de hielo para las partes golpeadas. Es el momento de aliviar el dolor del castigo y preparar a mi puta para una nueva experiencia.