La Familia sigue creciendo. (5)

Alberto y Maria profundizaran esa estrecha relación hermano-hermana.

Creo que.... no me entran!-- gruño Maria apretando la cintura de sus vaqueros mas anchos,-- Ya esta... es oficial; estoy como una foca...-- termino vencida sentada a los pies de su cama.

Verse en el reflejo de su espejo como una autentica ballena no era precisamente tranquilizador, se sentía tan extraña...-- levantándose la camisola se coloco frente al espejo sosteniendo la apenas apreciable redondez sobresaliendo por encima de la cinturilla . La tripita ya no dejaba nada a la imaginación, --Tendré que usar la carpa de un circo...-- suspiro posando las manos sobre la incontenible personita .

Refunfuñando abrió el armario hasta dar con el soso vestido de premamá azul , al menos era lo suficiente corto y con vuelo para salir ese viernes noche.

Odiaba aparecer así delante de los amigos de Alberto , aun le costaba hacerse a la idea de salir todos juntos esa noche, sosteniendo la percha delante del armario torció la boca al darse cuenta del tipo de ropita que usarían las amiguitas de la pandilla.

Le sudaban las palmas de la mano, de hecho el frio helor se extendía por todo el cuerpo al imaginarse en desventaja con” las zorras calientapollas” – apelativo divertido con el que Alberto las describió.

No quería ir..., al menos no deseaba aparecer vestida con esas pintas, aun así se coloco el vestido vaporoso por la cabeza con algo de dificultad jadeando al deslizarlo por su ensanchada cintura .

Ya puesto, reparo en el extremo esfuerzo subiendo la cremallera de la espalda, por lo demás , la cintura alta ayudaba a esconder su barriga, – suspiro aliviada girando despacio para ver el vuelo de la falda alzándose primorosamente y observando el reflejo de algodón muy por encima de sus rodillas, casi a medio muslo.

Caramba !-- así de esa manera hasta resultaba un poco sugestivo.

Alisando la falda con cuidado sintió prender la chispa maliciosa , en dos pasos se dirigió a la cómoda donde guardaba las medias blancas a juego con los zapatos planos de charol negro.

Sentada a la cama se apresuro a tomar aliento para enfundarse los pantys sin la horrorosa braga faja, una vez puestas servirían para su propósito, un rápido desgarrón y podía estar totalmente con el coño al aire.

Se mordió el labio enrojeciendo hasta las orejas. Estaba echa una buena zorra...!-- estiro los dedos de los pies sobre la moqueta ladeando la cabeza-- Aunque antes muerta que dejar a algún putón arrimarse a su hombre!--

Apenas disponía de 15 minutos mas arreglarse antes de que Alberto saliese de la ducha, con paso firme se dirigió a la habitación de Violeta dando gracias a tener el mismo numero de pie, ahora inclinada sobre el armario de su hermana mayor era consciente de la cortisima tela deslizándose juguetona por su cintura.

Quien lo habría dicho? – sonrió ante el motín abandonado en la caja polvorienta sacando las sandalias de tiras con tacón alto.

Las pequeñas tachuelas la hicieron reír impresionada, podía intentar ponérselos y probar a no matarse... despacio deslizo sus pies enfundando las sandalias de tiritas sobre sus virtuosas medias blancas, echaba de menos los tacones... estilizaban las piernas de una manera... Grrrr!-- probo dando un paso y otro acostumbrándose de nuevo a las alturas.

Desde luego aquello era otra cosa, murmuro volviendo a toda prisa a su habitación y peinarse con una cola alta.

Toda ella resplandecía histérica según el rojo fulana embadurnaba sus labios haciéndolos apetecibles, luego con el pulso algo mas tembloroso se aplico un poco de rimel en las pestañas dibujando una sutil linea ascendente sobre los parpados.

La impresión de todo el conjunto la animo suficiente para lanzar un juguetón besito al espejo, con cuidado cepillo la trenka azul sentada expectante junto al tocador esperando la vuelta de su hermano.

Sus ojos se desviaron a la espaciosa cama de matrimonio y suspiro mordiéndose el labio..., aun le costaba creérselo..., se acostaba con su hermano desde hacia casi 4 meses en aquella gigantesca cama.

Alberto había sido inflexible en lo de conservar la camita.-- Nena... si duermo una noche mas en ese catre las me tendrás que recoger con una jodida pala-- ni hablar …-- . sonriendo con picardia se sonrojo recordando la manera excitante en la que la habían inaugurado. .

Soltando el aire de sus pulmones , espero paciente a verlo aparecer húmedo y limpio, la maldita cremallera de sus pantalones abierta con el inconfundible vello asomando entre medio de la cremallera. Apurada se mordió el labio inferior observándolo buscar una camisa en el armario.

Mmmmmm , aun podía ver las gotitas de agua escurriendo por su espalda hasta ese apetecible culo, en verdad quería morderlo despacio. Acalorada ante la imagen sus mejillas volvieron a sonrojarse viéndolo darse la vuelta y lanzarle un beso cariñoso.

El pelo despeinado le goteaba al acercarse junto a la cómoda apurado por encontrar unos calcetines. Maria volvió a morderse el labio al actuar sin pensar agarrando la cinturilla de los pantalones atrayendolo hacia ella.

  • Mmmmm, desde cuando tienes una boca tan apetecible? – sonrió desde arriba un tenso Alberto-- Este modelito no lo había visto...-- sentencio bajando la mirada desde la excitante boca hacia las rebosantes tetas.

La comprimida tela tirante parecía sujetar a duras penas sus inmensas tetas al inclinarse soplando la suave pelambrera de la entrepierna de Alberto, la punta de su lengua trazo un reguero de saliva desde su ombligo hasta los primeros pelillos en su bragueta, segura de tener su entera atención soltó botón a botón. De repente las manos de él volaron sujetando su cara con firmeza.-- Nena... sera mejor dejarlo para.....-- se detuvo gruñendo al notar la mano de Maria introduciéndose en su bragueta sacando su polla.

La erección considerablemente dura la saludo topando con su carita.

Ohhhhggggg eres malaaa diooos...., pero me gusta cuando eres malaaaaa... – jadeo prendido de sus picaros ojos-- Vas a comértela toda, verdad?... continuo mirándola excitado.

Siiiiiiiiiii... echo la cabeza hacia atrás ante el primer lameton.

Maria lamió perfectamente la redonda cabeza, lengüeteando el acanalado agujerillo hasta sentirse satisfecha con el jadeo, despacio se apresuro a tragar la cabeza hasta encajarla a su garganta sin que sus mandíbulas protestasen.

Comenzando a subir y bajar tragandosela hasta acompasar las mamadas con los supiros de placer de Alberto.

Las manos a cada lado de su cabeza la animaban a moverse a un ritmo pausado con el que se sentía cómoda, sus dientes arañaban cada vena inflada, arrancando aullidos y jadeos a su hermano.. – aguantaría si no respiraba muy profundamente – así se lo había explicado Rebeca unos días atrás.

Primero la lengua..., después tragar , la animo a repetir la operación con la polla de su padre frente a ellas.-- ahora tu hermanita..-- acabo por sacarse la polla brillante ofreciéndole a sustituirla de entre las piernas de un orgulloso Paco.

  • Haz todo cuanto Rebeca te ordene... hija, como ella ninguna..., Diooos sabe la garganta que tiene....!-- soltó un sonoro suspiro al peinar la melena algo enredada de su melliza mamadora.

Rebeca sonrió orgullosa moliendo la tiesa estaca con un ligero aire de suficiencia.

Recuerda Maria, si lames con fuerza el glande sorbiendo así; Sruuuuuuuuppp, Sruuuuupppp, – vamos ahora tu...-- le cedió el sitio sobre la polla embadurnada de Paco.- Esoooo es..., notas las venas tensándose bajo tus dientes... verdad-- resonó detrás de ella – Esta a punto de correrse..., pero aun puedes hacerlo gozar si te inclinas, ves?-- la miro entre las piernas abiertas de Paco bajo la columna tiesa-- Mordiéndolo así, en los cojones...-- se apresuro a mostrárselo – retardas...mmmmmfffffff...., mmmmmffff...-- ahora tu..., se apresuro a cederle el sitio bajo las gruesas pelotas.

  • Mmmmmm...., voy a corrermeeeeee diooooooosss...., suspiro Paco abriendo los extasiados ojos--
  • Maria.... ven...-- abre la boca y en cuanto empieza a soltar la leche traga con rapidez..., vale? – si te da mucho asco te aguantas...-- de acuerdo?-- la reprendió con firmeza. – Nada de escupir.... ni nada por el estilo... Te lo tragas.... comooooo las uvas de noche vieja . . vale?

Maria asintió decidida a tragarse todo el semen paterno, abriendo la boca cuando la babosa polla comenzó a escupir chorros a su boca entreabierta. Al igual que siempre la salada y amarga esencia le lleno la boca con demasiada rapidez, hasta el punto sufrir un ahogo pastoso que solo paso cuando su garganta trago la primera vez engullendo velozmente apresurándose otras cuatro veces mas.

El amargo sabor de Paco llenaba su paladar mientras escuchaba el suspiro aliviado con el que finalmente soltaba su cabeza y la dejaba desencajarse la polla.

  • Muy bien Maria... ya estas graduada en mamadas..., te has tragado el semen-- la abrazo aplaudiendo una orgullosa Rebeca.

Ahora pasado dos días desde la mamada , podía poner a prueba sus nuevos conocimientos adquiridos con Papa , en verdad deseaba demostrarle a su hermano todo lo que podía tragarse, por eso cuando sorbió la gruesa cabeza punteando la lengua una y otra vez, se animo a profundizar mordiendo traviesa los lomos y deteniéndose en los gruesos testículos.

Pellizco unas cuantas veces la tensa piel , satisfecha por los jadeos de protesta de Alberto, su polla ya parecía un trozo de hierro candente surcado de tensas venas.

Era el momento... , suspiro Maria abandonándose mientras Alberto jadeaba soltando la viscosa crema en la garganta y tragaba engullendo tal como Rebeca le había enseñado.

Espesa y caliente leche bajaba por su garganta como un rio de lava fundida alimentándola, nutriendola cuando Alberto intento sacarla de su garganta.

Al final despacio con un mohin de inocencia en sus ojos se atrevió a observar las reacciones en su hermano, lo había echo tan bien como Rebeca?--

  • Uaaauuuuuu.... Maria , te has tragado toda la corrida!-- acaricio su cara admirado-- Cuando has aprendido eso..., siempre solías escupir....-- se vio interrumpido.
  • Shhhhhh..., Ahora seguro que estas mas tranquilo, verdad...-- se levanto y atrapo la boca de Alberto dándole a probar el sabor de su propia esencia.--
  • Mmmmm... nena..., tenerte a mi lado ya me tranquiliza... – confeso separándose volviéndose para ponerse la camisa.-- Te debo una buena corrida... , pero ahora sera mejor que nos vistamos.

Maria se volvió de nuevo a su tocador, consciente de la desaparición de todo el carmín rojo de sus labios, al menos eso se podía solucionar..., aunque viéndose reflejada en el espejo, volvían sus miedos y sus dudas.

Sin sujetadores de abuela debajo del vestido, sus hombros estarían al descubierto aun así, le daba algo de miedo llenar sus pulmones del todo, no fuera a reventar las costuras, No podía hacer mas..! -- sus pechos parecían auténticos torpedos desde que empezó a desarrollarse .

Incomoda o no, ese era el aspecto que tendría frente a las zorras de la pandilla, se tenso acariciando su barriga melancólica con el sabor amargo del semen de su hermano flotando en su paladar. -- al menos creía encontrarse en igualdad de condiciones... , o tendría que soportar los desorbitados ojos de Alberto babeando por minifaldas de lycra y tops como cinturones. – Porque, siempre podía cambiar de opinión … quedarse en casa...-- dudo de nuevo.

  • No, de eso nada ...., – si una de esas zorras se acercaba a su hermano....! que se preparase a morir sin ojos-- bufo levantando el mentón.

Fue consciente del silencio , ya no escuchaba el ruido procedente de Alberto , allí parado con una cazadora de cuero , camisa blanca y pantalones vaqueros negros, estaba para follárselo.

Se avergonzó solo un poco de su ocurrencia, pero así era...

Aunque su apetito se había visto colmado con una contundente corrida, la salida en grupo empezaría cenando en una pizzería, con todos los nervios bailando samba, sabia que la prueba de fuego comenzaría al entrar en la pizzería del brazo de Alberto, lugar donde siempre quedaba con la pandilla. – a quien quería engañar... estaba muerta de ansiedad! .-- Y si parecía una cría? , o si alguna de aquellas zorras se reía de ella? , o peor... no le gustaba a sus amigos? con la cabeza baja contemplo sus pies con suma preocupación.

Un leve tirón de la punta de su cola alta la distrajo para levantar la cabeza de un Alberto totalmente apetecible y listo para salir.

  • Nena... estas....! jodeeer en serio quieres salir... porque ahora mismo los llamo y quedamos otro día... – pronuncio admirado un Alberto atónito. – Estas Bueniiisssimma...-- pronuncio arrodillándose adorando la piel sedosa donde se ensanchaba la cremallera-- Vayaaaa... menudos melones , cariño?-- le guiño el ojo carcajeándose – bajo la cabeza besando la suave piel de la espalda desnuda-- Mierda... no voy a dejar de pensar en estas! – pronuncio acariciando el pezón tieso. -- Mariaaaaa no me hagaaaas estooooo! – suplico bajando un poco la tela y prendiendo la boca al pezón oscuro. -- En serio, que se vayan a la mierda, tu y yo nos quedamos a follar.... eh? – suspiro secando la teta de babas y subiendo la tela ; Buuurrrrfffff – acabo contemplando el reflejo de ambos en el espejo . El ceño fruncido se le dibujo de inmediato en su rostro.
  • Noooo, – va , para!-- Manos fuera...-- acompaño un certero manotazo a las manos en sus caderas friccionando sobre su entrepierna -- tus amigos dirán que te tengo abducido...-- se levanto rodeando su cuello-- Y no es verdad? – a que no?-- se apresuro a besar levemente la jadeante cara de su hermano-- Mmmm... – anda... vamos!-- suspiro excitada sobre su boca parpadeando con rapidez--
  • Mariaaa, Mariaaaa... – lleno de aire los pulmones-- No crees que te voy a dejar ir así? Jodeeer maría … , torció una mueca fastidiado-- , – Son unos putos salidos..., y luego vamos a bailar... si vas así.-- No pienso dejarte venir. Así que... Deberías ponerte otra cosa-- .. – admiro alelado los inmensos pezones despuntando del tejido estampado.
  • No seas tonto..., a quien demonios le iba a resultar atractiva...-- negó con la cabeza-- Ademas llevare la trenka encima , no te apures... - no creo que tenga una cola de tíos babeando a mis pies.-- se cubrió los hombros con su usada trenka.-- Ya esta, señor nos vamos?-- tendió la mano inocentemente.

El zumbido del móvil lo distrajo de un incompresible cabreo, cojones con la niña! – ladro secos monosílabos al desgraciado Carlos – si la arrastraba y la follaba bien follada se le quitaría cualquier tipo de chorrada de su cabecita, porque presentía mas de un dolor de cabeza en aquella interminable noche.-- colgó convencido, viéndola cerrar la puerta dejándolo excitado y cabreado.

No quería atizar alguno de aquellos gilipollas, al fin y al cabo eran amigos suyos, pero si cualquiera de aquellos soplapollas intentaba aunque fuera rozar un pelo de su preciosa coleta, – crujió los nudillos saliendo en pos de su hermanita.

  • Tranquiloooo, son colegas... – se repetía tendiendo el casco a Maria dejándola apretarse a su espalda- --Que lo intentasen... , ya les gustaría-- apretó su mano sobre las de su hermana-- Preparada... ?-- lamió su boca hasta meter su lengua despacio, – Mía... – marco a esa boca recordándoselo – satisfecho por el angelical rostro totalmente rendido!-- Eso era... encendió la moto acelerando hasta desaparecer calle abajo.

Abrazada a su cintura con la cabeza sobre su espalda lo estrujo inhalando el olor a cuero y jabón , podría estar una vida así.., lastima de sus amigos! – pensó despertando a la realidad. Se habían detenido justo en el parking trasero de la pizzeria.

A unos pasos, sus amigotes y esas zorras los esperarían dispuestos a despellejarla, sacándose el casco de la cabeza se le metió la idea de salir corriendo, aunque con semejantes tacones...., no sabia muy bien como.

Aspirando profundamente, se sorprendió siendo agarrada de la mano firmemente conducida sin que una palabra saliese de la boca de Alberto, casi como una pareja normal se vio reflejada en la cristalera del edificio.

Una chica con su chico, se convenció apurando el paso para entrar en la atestada pizzeria.

El aullido de cinco voces a coro le atrajo la atención hacia el apartado mas alejado, toda ella tembló al recorrer la vista hacia el atestado lugar, dos hombres jaleaban la entrada de Alberto que negaba con la cabeza divertido. – Seréis mamones... !chillo respondiendoles a la vez que la sujetaba firmemente del brazo y la guiaba despacio al rincón.

Los silbidos ensordecieron su avance, aunque no impidieron a Maria lanzar un vistazo a los escandalosos componentes de la banda.

Carlos se presento con un brillo especulativo devorándola con las pupilas dilatadas de asombro, justo sentada a su lado una mujer de melena cardada bebía una jarra de cerveza sin dejar de matarla con los ojos. La otra zorra con tetazas a punto de reventar un top la miraba con cierto brillo envidioso, se le torció la boca al escuchar su nombre de la boca de Alberto y avanzo hasta levantarse del lado de Tony dispuesta a colgarse del cuello de su hermano fregando sus melones de silicona sobre Alberto.

De eso nada... guarra! --se adelanto presentándose con una mueca de suficiencia en la voz.

  • Maria... – se adelanto dando dos besos a la asombrada zorra – Y tu te llamas...?-- se precipito a desabotonar la trenka y salir del caluroso encierro.
  • Conchi...-- respondió sentándose malhumorada – Vayaa... pareces muy joven...-- Seguro que puedes tomar alcohol...? – se removió en su asiento con un mohin.
  • No abuso del alcohol... por lo del embarazo y eso...! – se apresuro a acariciar la curva de su barriguita pendiente del silencio sepulcral alrededor de la mesa.
  • Ostiaaa.. estas preñada?-- Jodeeer.... Alberto..., menudas sorpresas te gastas! – siéntate, siéntate....-- Aparta zorra perezosa ...!-- aparto a la silenciosa bebedora-- Menudas noticias tío, … así que... – contemplo las inmensas tetas a punto de reventar las costuras del vestido embelesado--
  • Si , mi chica y yo vamos a ser padres...-- tercio Alberto rodeando los hombros desnudos de Maria dejando su mano sobre su cuello. – No se por que se te queda esa cara de palo, tío!-- no me digas que no tengo suerte con semejante bombón – acompaño sus palabras con un sonoro beso de tornillo. – Vayaaa..., estoy hambriento...-- Silbo a la rellenita camarera.

Conforme la normalidad volvió a reinar en la mesa, Maria pudo respirar con mayor tranquilidad, ninguna de las dos zorras dejaron de echarle miraditas asesinas, mejor dejarlas cocerse en su salsa, lo realmente incomodo llego de la babeante expresión con la que Manolo se la comía con la mirada.

El ascazo la impido masticar nada mas que un par de trozos de lasaña, sintiéndolo pendiente de cada uno de sus movimientos, a punto estuvo de lanzare la cesta con los panecillos desquiciada de los nervios.

Ya en el postre, haciendo imposible otra opción se levanto dispuesta a echarse agua en la cara, despacio recorrió el estrecho pasillo con todos los ojos de la mesa pendientes de cada uno de sus pasos.

Alberto soltó aire viéndola entrar en el baño, volviéndose a quedar en la soledad de aquellos babeantes gilipollas que consideraba amigos.

  • Menudo par de tetas... tío, – rio admirado Manolo...-- Y que manera de mover ese culito... joder , ya me dirás cuando te cansas... – La de cosas que le haría a un coñito como ese....-- murmuro tragando el helado.
  • Por dios si esta como una vaca...-- no se como te tiras a semejante cerda...-- rio la achispada mujer de melena cardada llamada Candy -- Y aun se va a poner mas foca..., cojones Alberto... tu no estas echo para los putos pañales...-- levanto apurando la cuarta jarra de la noche.

El bullicio de risas se apodero de la mesa de nuevo, arrancando un grito de Carlos.

  • Callaos cojones... no veis el careto del pobre Alberto, esta totalmente encoñado!!!!-- aulló levantando su chupito al techo.-- Tío.... con la de tías que nos hemos tirado ….-- lo abrazo cómplice-- Por los caramelitos jugosos....!-- brindo aullando
  • A mi la verdad, me importa un huevo...-- suspiro resoplando Conchi-- Yo he venido a follar contigo...-- hizo un mohín caprichoso-- A si que la largas a la guardería o no follamos-- pronuncio mirándose las afiladas uñas.
  • Menudo morbazo, uuuuffff! – se relamió Tony – Nunca he jodido a una preñada... , joder gracias por traerla! Estoy deseando pillarla en el callejón de atrás y follármela sin condón! – La de tiempo que no lo hago sin chubasquero....-- parpadeo dejando el chupito vacío sobre la mesa.

Alberto escucho cada una de las afirmaciones de su banda con los ojos clavados en su jarra de cerveza, despacio relamiéndose la espuma del labio se levanto de la mesa aun sujetándola con firmeza.

  • Buenooo Mamoneeeees... os habéis superado! – negó con la cabeza soltando la jarra sobre la mesa de un sonoro ruido.

Tomando la cazadora se la puso con rapidez ojeando un par de veces a los lavabos. * Enteraros de una puta vez... , por encima de mi jodido y frio cadáver...-- entendido Manolo?.-- se dirigió con paciencia al pasmado amigo -- No me voy a cansar ni ahora , ni nunca, te queda claro hijo de puta?. –

Candy.., mierda tía! . – desvió su atención a la borracha-- Ni en un millón de años podrás ser la mierda que pisa su pie, – puta huesuda!-- .

Se volvió hacia el boquiabierto publico. – Ahhh en cuanto a lo de estar encoñado... bueno..., puede que si, lo este... o puede que me encante estar con ella, que se yo... Me gusta... entendido? --levanto la voz embalándose. * –

Ni borracho, ni drogado , ni fumado, entiendes Conchi?-- no pienso pillar gonorrea...-- En cuanto a ti...-- apunto el dedo sobre el estupefacto Tony...-- Si te atreves aunque sea a guiñar una puta pestaña en su dirección , respirar el mismo aire que ella respira... oooo lo que sea , te arranco la polla con una llave inglesa .-- Se levanto subiendo la cremallera de su cazadora. * Tiooo no seas así.., no sabes aceptar una broma , joder!-- grito Carlos intentando detenerlo.--

Alberto se alejo sin volverse , levantando la mano y enseñando su dedo indice con suficiente claridad.

  • Hasta nunca gilipollas !..., – se detuvo en la puerta de los lavabos de mujeres.

Tras casi 12 minutos esperando viendo salir y entrar a varias mujeres, sus colegas habían ido desfilando del brazo de sus zorras, le crujieron los nudillos al fijarse como el insensato de Tony se acercaba con arrepentimiento pintado en la cara.

Ni por todo el oro del mundo creía en sus gilipolleces, en verdad esperaba dejarle el camino despejado con Maria?

  • No te atrevas...-- gruño parando su avance-- Largo..., entendido?-- amenazo agarrándole de la camiseta contra la pared de los lavabos.
  • Vale... vale..., joder... si te ha dado fuerte con la cría...!-- Me das una puta pena...! – se alejo negando con la cabeza.

Alberto echaba chispas , el muy imbécil aun tenia la desfachatez..., bufando cabreado contemplando a la ultima chica saliendo del baño mirándolo con ojos desencajados.

  • Buuuuuu...-- se alegro viéndola saltar asustada--

Espero otros 10 minutos apoyado en la pared frente al concurrido lavabo respiro profundamente buscando calmarse, al menos tenían el resto de la noche para ellos, eso … si Maria decidía salir definitivamente del lavabo. Porque …. cuanto tiempo? , a no ser... la ventana del baño!!!!?– entro en tromba en el lavabo de chicas.

La pequeñísima ventana cerrada con candado alivio algo su agitación, al menos no había huido por allí, se volvió localizando el ultimo de los cuatro excusados cerrado.

Acercándose con sumo cuidado pego el oído a la madera preocupado por los sollozos procedentes del otro lado.

  • Maria.... – susurro pegando su boca a la madera-- Que demonios..., – respiro soltando aire-- Anda ábreme... , por favor...!-- suplico al escuchar el gemido lloroso al otro lado.
  • Vete..., lárgate con esos idiotas!-- sorbió la débil voz.-- yo volveré a casa en taxi...-- murmuro .
  • Abre de una puta vez!-- pateo la puerta con rabia-- Maria...no quieras verme mas cabreado de lo que ya estoy...-- pronuncio con voz fría.!

A caso podía suceder algo mas?-- Alberto frunció el ceño echándose hacia atrás para tomar impulso , la pierna pateo la pobre puerta abriéndose de un lastimero crujido.

  • Ves, me obligas a hacer....., – se interrumpió viéndola-- Maria...-- termino arrodillándose ante la llorosa hermana-- Pero, porque... --levanto las manos limpiando el rastro de rimel negro con los dedos-- No te pongas así..., yo no se..., como...-- suspiro posando su frente contra la de la llorosa hermana.

Despacio sosteniendo su lloroso rostro entre sus manos, la miro fijamente hasta sentir el puño apretándose en su pecho, sin decirse nada acerco su cara hasta que su aliento se detuvo sobre esa asombrosa y carnosa boca de fresa.

Abrió su boca lamiendo ese enloquecedor labio, descubriendo la humedad envolviéndolo, su lengua tímida al principio empujo a la de Maria a mezclarse con la suya.

Arrasando sin detenerse, marcándola como verdaderamente quería. el suspiro de ambos espoleo a Maria a rodear sus brazos detrás de la cabeza de Alberto. Adoraba la fuerza con la que entraba y salia de su boca. – Ahhhhhhh jadeo sin aire desprendiéndose solo un instante.

La turbia mirada de los ojos de su hermano la excito si cabe mas, poco importo encontrarse sentada en el retrete de una pizzeria, o en el mismísimo infierno, deseaba follárselo allí mismo.

Pendiente de cada uno de sus movimientos, Alberto siseo al sujetarla levantándola por la cintura para apoyarla entre la pared y él , no podía dejar de comer aquella boca muy , muy excitado. Las piernas de Maria ahora descansaban enredadas tras su cintura separadas por la tela del vaporoso vestido y sus incómodos pantalones.

O la sacaba de allí en ese momento, o follaban allí mismo sobre cualquier jodida superficie.

Como si leyese su pensamiento , Maria tanteo a locas la bragueta de su pantalón a todas prisas, Quería un polvo rápido y furioso, su murmullo satisfecho al tacto de la inmensa polla dura y dispuesta saltando al toque de su mano la animo a pedirle mas. El aullido de aceptación de su hermano la hizo sonreír al deslizar un par de talladas rápidas.

La excitación del momento lo habían puesto a tono, los gruñidos de Alberto la espolearon mientras sus caderas se balanceaban sobre la dura columna . Lastima de tanta ropa!-- sonrió sobre el cuello de Alberto.

--Oh nena..., ohhhh nena.... – quiero estar dentro de ti.... , no se si voy a aguantar....--

bajo sus manos de la cintura hasta las caderas y gruñendo apoyo su espalda contra una de las frágiles paredes del excusado.

Buscando su cara, lamió mordiendo su boca consciente de sostenerla a duras penas entre la pared , su polla y el precario equilibrio de sus brazos.

A tientas repaso su mano bajo la falda encontrando las medias a su paso , tiro con brusquedad del elástico estorbo , dejando vía libre a su mano para tantear la braga en busca del meloso tesoro.

Caliente y excitada apremio levantando las caderas al avance de la mano de Alberto abriendo su sensible coño con un Dioooooooooooooosssssssss que la hizo morderse el labio inferior , Suyooo!!!!

Resoplo a la entrada de dos dedos hundiéndose despacio y acelerando conforme sus caderas subían y bajaban jodiendolos, era una delicia pecaminosa contemplar la oscura y seria reacción de su hermano al soltarla apremiado por la urgencia.

  • Mariaaaa.... ooohhh diooos mariaaaa..., me encanta estoooo.... nena....-- se apresuro a colocar su rabo sobre la pegajosa raja.
  • Follameee Albertooo, follameeee durooooo.... siiiii... – se levanto sobre sus caderas sujeta al cuello de su hermano.

La boca de su hermano fue mas rápida y abrió la suya con un lameton lento que le hormigueo en la entrepierna según la gruesa cabeza entraba en su coño. Ambas bocas se abrieron con lentitud jadeando conforme toda la inmensa barra dilataba la vagina hundiéndose despacio hasta quedar sentada sobre las gruesas pelotas.

El suspiro al clavarse hasta la empuñadura le arranco una profunda sensación de orgullo posesivo , jamas dejaría que ningún gilipollas se acercase a ese coño.-- admitió Alberto empujando su cintura y levantadola al primer envite.

Ya estaba... lo admitía..., encoñado o como cojones se llamara..., ese coño le pertenecía . – Acelero la envestida satisfecho por el maullido con el que su hermanita rebotaba una y otra vez.

Estrecha y tierna, caliente y excitante , su hermanita le iba a dar un hijo... , cuantas señales mas necesitaba...?-- gruñendo agarro las redondas nalgas produciendo un certero ruido de succión saliendo y entrando de las entrañas de Maria... , jodeeer que buenoooo... , ohhhggggg... , siiiiiii no tardaría mucho en correrse-- soltó un jadeo sin importarle nada, salvo llenar su vagina con litros de semen.

  • Albertooooo yaaaa... , yaaaaaaaa.... , soltó un alarido bañando aliviada su polla , satisfecha por el ritmo con el que sus caderas se balanceaban engullendo el primer chorro de esperma.
  • Siiiiiiii cariñooo, oooo hhhhhh siiii preciosaaaaaaa , permaneció meciéndose hasta distinguir la viscosidad de los dos mezclándose. – los dos fundidos en un amasijo de piernas y brazos .

La boca de Alberto busco la de Maria besando con suavidad percibiendo por primera vez el ruido de lo que los rodeaba.

  • Maldita sea ...-- chillo una voz ronca y demasiado grave-- Te juro que me vas a pagar la jodida cerradura y los desperfectos .-- Quien cojones te crees para follarte a tu putita aquí?-- Ahora mismo llamo a la policía si no me abonas lo destrozado.

Alberto atontado por el polvo rápido, fue consciente del lugar donde habían follado sin precauciones, el lavabo de mujeres de la pizzeria, la enrojecida cara del propietario frente a sus narices quizás había visto mas de lo confesado, visto lo visto en sus pantalones.

  • Vale... vale, no quiero problemas... – te pago y nos largamos , de acuerdo?
  • Pues venga..., .., – se deleito deteniendo su mirada en la desarreglada niña y deteniéndose en la curva de su barriga. – Debería denunciaros por escándalo publico...-- pronuncio con un brillo especulativo--

Ver el libidinoso vistazo echado a su hermana pudo con toda la frustración de la noche, dando a su brazo la fuera para trazar un amplio arco y atizar un contundente puñetazo.

Con celeridad busco en su cartera cuatro billetes lanzandolos a su sangrante cara, debían salir de allí antes de montarla mas grande , tiro de la mano de una estupefacta Maria arrastrándola al exterior de la desierta pizzeria.

  • Sube... tendió a toda prisa el casco de la moto... venga, rio dando un rápido beso a la sorprendía cara-- No creo que podamos volver a este lugar...-- guiño un ojo complice mientras pateaba el pedal con el que los alejaba a velocidad de vértigo.

Según la moto se alejaba a toda celeridad el corazón de Maria volvió a recuperar algo de calma, en serio les había visto haciéndolo? , menudo corte...!-- enrojeció avergonzada ante el atrevimiento, sus manos sujetaron la cintura de Alberto con verdadera devoción. Atrás quedaban sus dudas, sus malditos amigos y las zorras calientapollas, de una manera algo infantil y tonta su cara se poso sobre la ancha espalda sonriendo estúpidamente a la vez que la moto entraba en el garaje de su casa.

  • Buuufff... ha faltado poco – se giro Alberto sacando el casco de su cabeza sin dejar de comerse con los ojos a su tierna ovejita.-- En casa... mmmmm-- acaricio su sedoso mentón con dulzura. – Estoy cansado... vamos a la cama?-- insinuó levantando una ceja.
  • Vayamos... – se mordió el labio inferior ante la insinuación-- ha sido un día muy largo, verdad?-- chillo al verse levantada del suelo y transportada en sus brazos.
  • Nena..., no tienes ni idea....! suspiro cargando escaleras arriba con ella-- Nuestro hijo va a nacer adicto al sexo..., – rio soltando una carcajada al caer enredados sobre su cama.
  • O nuestra hija... – abrió las piernas al certero empujón con el que Alberto se clavo en su útero-- ohhh siii, ohhhhh siiiiii,.
  • No me hables de niñas...., vale? – Si es una niña , A lo mejoooorr... deberemos seguir probando, no? -- acelero las riñonadas mas y mas profundamente.