La Familia de Mi Mejor Amigo: Capítulo 3 Simona

Claudio sigue con su obsesión por Coni, pero en el camino van apareciendo otras mujeres, entre ella Simona, la cual si bien no es de su interés, participa en uno de los quiebres de paradigma.

Capítulo 3 Simona

Por fin vi el coche de Coni, el cual es inconfundible por su llamativo color amarillo, se detuvo casi frente a mí, mi corazón comenzó a latir aceleradamente, pues después de casi un mes de nuestro affaire, no sabía el por qué la repentina reunión en un lugar que no fuese su casa. Me acerqué con el poco aplomo que aún me quedaba, la vi a través del vidrio, se veía tan bella como siempre, ella desbloqueó las puertas por lo que asumí que era una invitación a subir al coche.

  • Yo: Hola Coni:
  • Coni: Hola Claudito, ¿cómo estás?
  • Yo: Bien ¿y tú?
  • Coni: Bien también, tenemos que hablar…
  • Yo: Sí claro…
  • Coni: Quiero que me folles…
  • Yo: ¿Pero Tony?...
  • Coni: Él es… él es un ángel, pero… pero tú eres… un demonio y follas diferente.
  • Yo: Pero ¿él no te folla bien?
  • Coni: Sí lo hace, es más me saca más de un orgasmo, pero no he podido olvidar como me dejabas… necesito que me folles….
  • Yo: Pero tú me dijiste que después del fin de semana me olvidara de todo y que nunca más…
  • Coni: Estaba equivocada, necesito que me folles, este mes que pasó solo he pensado en eso…
  • Yo: ¿Pero ¿qué pasará con Tony?, es un buen tipo…
  • Coni: Lo sé y seguiremos en nuestra relación ya que es el que me conviene…
  • Yo: Pero yo podría ser tu relación…
  • Coni: Ay Claudito, eres un amor y como te habrás dado cuenta follas como un demonio, jajaja, pero soy 10 años mayor, no funcionaría, además de que mis padres y los tuyos se espantarían, jajaja
  • Yo: O sea solo quieres follar conmigo…
  • Coni: No, no solo follar, quiero que sigamos siendo amigos, como lo éramos antes de irnos de viaje el fin de semana largo
  • Yo. Por mí bien, pero igual es raro.
  • Coni: Lo es, pero es lo mejor, así también podrás salir con chicas más próximas a tu edad, como esa que encontraste en la playa…
  • Yo: Sí, Juli, de hecho salgo con ella…
  • Coni: Uff que suertuda, porque me imagino que la follas…
  • Yo: Bueno sí, y somos solo amigos…
  • Coni: Bueno conmigo será lo mismo, eres un chico afortunado, no te faltará donde follar, jajaja
  • Yo: Sí, es cierto… ¿a dónde vamos ahora? Pregunté al ver que no íbamos a casa…
  • Coni: A un motel que conocí con Tony y que no queda lejos…
  • Yo: Pero mi coche está en el estacionamiento de la Uni…
  • Coni: Después iremos por él, ahora me follarás bien follada…

Que les puedo decir, hablar así con Coni era extraño, pues para mí siempre fue como una hermana mayor y nunca la había escuchado hablar sin ningún tapujo… en todo caso, no me podía quejar, lo que había imaginado, soñado y anhelado se iba a cumplir.

El Motel en cuestión casualmente era el mismo que había ido con Juli, por lo cual sabía de cuanto era el importe y todo canchero le insinué a Coni que yo pagaba la mitad:

  • Coni: Claudito, guarda el dinero para Juli, ahora yo invito, jajaja
  • Yo: Pero si vamos los dos.
  • Coni: Cuando trabajes, me traerás a tu cuenta, por ahora pago yo…

Ingresamos con Coni al lugar, el tipo de la entrada al verla no hizo ningún reparo y le indicó el número de habitación, por lo que ella se dirigió al lugar sin problemas y ambos bajamos como si fuéramos a entrar a un bar u oficina, la verdad es que era algo extraño.

Coni al entrar fue directamente a la cama… me sorprendí un poco, pues no esperaba que fuese casi como ir a una oficina pública, o sea ir y follar. A mí, pese a mi poca experiencia me gusta algo de “apasionado cariño”. Me senté a su lado mientras ella tomaba el control remoto encendiendo la TV, donde un tío se cogía fuerte a una chica tetona con las piernas en sus hombros, la chica gemía mientras sus tetas iban y venían, la verdad es que, si bien me excitó, yo no necesitaba eso

  • Yo: Coni, apaga eso…
  • Coni: Pero no te excita… a Tony le pone mucho…
  • Yo: La verdad es que sí, pero contigo me basta y me sobra, no necesito nada más.

La abracé con fuerza y la besé con pasión, ella algo sorprendida y tal vez nerviosa, me correspondió mi beso para luego abrazarme, yo ni corto ni perezoso, le comencé a amasar las tetas por sobre la ropa e intenté desabrochar su blusa… pero… el sonido de la Tv me distraía, pues se sentían los quejidos y estertores de los protagonistas de la película porno, los que ahora se dedicaban a culear...

  • Coni: Perdón, es un poco extraño… lo siento… la apago.
  • Yo: Sí, así es mejor, tal vez después podamos ver algo para aprender, por lo pronto, vamos a lo nuestro, jejeje

Me estiré tomando el control remoto y apagué la TV, luego la recosté sobre la cama y por fin pude liberar las preciosas tetas de Coni, centrándome en los suculentos pezones, más propios de una adolescente, que de una mujer hecha y derecha como Coni.

  • Coni: ¿Te gustan mis tetas?
  • Yo: ¿Lo has notado?, jajaja… me encantan, tus pezones son de otro mundo…
  • Coni: Siempre pensé que eran más propios de una mocosa…
  • Yo: Para mí están perfectos, jejeje… ¿no es mejor sin TV?
  • Coni: Mucho mejor…

Retomamos el beso mientras ella me desabotonaba la camisa, por mi parte bajé una mano y se la puse en el coñito por bajo la falda, acariciando con pasión su abultado monte de Venus, por lo que sus bragas se fueron incrustando en ella y humedeciéndose en la profundidad de su vagina.

Los intensos besos que nos dábamos fueron calentándonos, convirtiéndose en lujuriosos, lo que junto a mis manos en el coño y tetas de Coni, hizo que ella solo deseara que la follara.

  • Coni: ¡Métemela! He esperado por mucho tiempo

Finalmente le quité su blusa y el sujetador, al momento que ella me desabrochaba el cinturón, la verdad es que volver a verla como aquella primera vez completamente desnuda me ponía a mil…. no me detuve mucho en mirarla, ya que me quedaba la otra mitad y la mitad que más me hipnotizaba de su anatomía… ¡Sí! Su maravilloso culo.

Ahora mientras me dedicaba a comer y besar sus tetas, ella me liberó definitivamente de mi camisa. Despojado de mi camisa, inmediatamente fui por su culo, Coni ya estaba tan mojada, que se retorcía para que la dejara con el coño al aire. Casi por instinto Coni buscó mi verga sacándome el pantalón y bóxer, tomándola entre sus dedos empezó a pajearme suavemente e insistía en que se la metiera... Si bien yo soñaba y quería metérsela, no estaba dispuesto a que nuestro reencuentro terminara como en una película porno de las que exhibían en la TV, es decir, aquí te pillé, aquí te follé. Así que procedía besar todo su cuerpo, partiendo por sus ojos, nariz, orejas, boca, pezones, ombligo, piernas y finalmente su coño…. Lo “divertido” es que su mirada se transformó de una lujuriosa a una expectante, diría que también llena de ansiedad.

Continué besándola, jugando con sus pezones mágicos, mientras dos mis dedos incitaban su clítoris hinchado, ella por su parte quería que le metiera mi verga, por lo que la tironeaba hacia la entrada de su coñito. Lo estaba logrando, Coni gemía con deseo e instintivamente se abría de piernas… lo había logrado, ya no era una simple follada para sentirse bien follada, era un inicio para que se sintiera “completa”, la verdad es que mi verga sería un complemento para todo su ser.

  • Coni: Te quiero Claudito… métemela, dijo con deseo y creo que con cariño.

Me invadió una gran alegría, de verdad es que había conquistado a Coni, tal vez ella aún no lo sabía, pero era mía… ¡Sí! Solo mía… ahora era tiempo de follarla como ella deseaba

  • Yo: También te quiero Coni…

Después de esa “sincera declaración”, le puse mi verga entre sus húmedos labios vaginales, esto le causo un pequeño estremecimiento, lo sé porque mientras lo hacía no podía dejar de mirarla a los ojos, era como si quisiera confirmar que yo era “su todo”. Fui empujando mi verga y sintiendo como su coñito no se había agrandado por la acción de Tony, lo sé porque se iba ensanchando a mi paso. Coni con rictus de febril deseo gozaba con mi incursión.

  • Coni: ¡Ohhh… así Claudito! … así… más... dame más fuerte… ¡Uhmmm como llenas!

Comencé a darle duro, ella sonreía mientras boqueaba y gemía, a los pocos segundos nos sincronizamos en el mete saca, logrando profundas estocadas que llegaban a lo más profundo de su ser, me traía recuerdos de cuando nos despedimos del fin de semana largo.

  • Coni: ¡Eres, ahh! …! Ahh ayy Síii! ... ¡Uy!... ¡así!... así me gusta que me follen…
  • Yo: Después te follaré el culo cuando tú quieras….
  • Coni: Eres un pendejo cochino que solo quieres culearme, ahhh…
  • Yo: Sí te voy a romper el culo, jejeje

Sin duda Coni estaba cerca del orgasmo, gemía con los ojos cerrados, su boca abierta luchaba por tomar más aire para “vivir”. Mi verga entraba y salía rápido en ese coñito que era un río de flujos, yo la follaba con fuerza, no podía parar de moverme, atrás y adelante… ¡también estaba por correrme!, pero no quería hacerlo.

Por su cara podía estar seguro que la estaba follando como ella quería… por un momento pensé, que había logrado que no me dejara nunca… había logrado que ella estuviese “tonta por mi verga”, ¡Sí lo conseguí!... ¡ella sería mi chica para siempre!, por lo que le di más duro si eso es posible….

  • ¡Ahhh… ahhh… me corroooo…  me matassss… ahhh!

Finalmente se corrió como yo deseaba, claro que había estado cerca de correrme yo también, salí de encima de ella y me tendí a su costado, tenía que recuperarme, pero a Coni con lo caliente que estaba le importaba poco eso… pese a que aún tenía los efectos de su corrida… mientras me relajaba y sin darme cuenta, ella miraba nuestras imágenes reflejadas en el espejo del techo del cuarto. De pronto se apoderó de mi verga... sorprendido baje la vista, mirando como ya estaba de rodillas, metiéndosela en la boca… buscando ponérmela dura.

Su objetivo obviamente se cumplió a los pocos segundos, al ver su logro sonrió complacida… se levantó, montándose a horcajadas sobre mí, agregó:

  • Corazón… reviéntame el culo… dijo con voz caliente.

Yo aún sorprendido por sus deseos, la miré incrédulo, recordando el momento en que le había dicho que su culo era solo mío y ella había replicado que no me hiciera ilusiones, es más el diálogo fue algo así:

  • Coni: Sabes que no habrá otra vez…
  • Yo: Sí lo tengo claro, pero ten claro que ese culito es solo mío
  • Coni: Bueno, te prometo que nadie más tendrá mi culo, jajaja, duele mucho, jajaja
  • Yo: ¿Es una promesa?
  • Coni: Lo es, lo juro por mi madre, jajaja

Ese fugas recuerdo me alegró, pues ahora tenía a Coni empalándose voluntariamente, una Coni llena de lujuria, pasión y morbo, pero también ternura… estaba seguro que me quería, y que sería mía… ¿faltaba mucho?... no lo sé, ahora solo disfrutaba como su orto dejaba entrar mi erecta verga… Entre tanto pensamiento, estaba mirándola embobado a través de los espejos del cuarto

Coni notando que no reaccionaba mucho, por estar embobado mirándola, comenzó a apuntar mi verga a su minúsculo orto, mientras me miraba excitada…como mi verga se abría paso lentamente en su ansioso y palpitante esfínter.

  • Coni: Bueno… mi culo es tuyo, ¡aprovéchalo!

Fui acomodando la verga con mis manos en sus tetas, pues Coni no quería esperar mucho y se iba deslizando lentamente, luego se inclinó un poco más para besarme, de pronto sentí como sus abundantes cachetes se posaban en mis muslos e ingle, ¡creí morir!, por lo que dejé sus tetas para tomar esas suculentas nalgas que ahora eran mías.

Fue así como ella comenzó a taladrar su ano, mientras yo la ayudaba con mis manos llenas de lujuria, para incentivar nuestro ritmo. Ahora Coni me besaba con pasión introduciendo su lengua en mi boca, dándome caricias con sus tetas en mi pecho... ¡Sus gemidos y boqueadas iban en aumento!, hasta el punto que no pudo besarme más, sus oleadas de placer literalmente le impedían respirar, su placer la estaba ahogando.

  • Coni: ¡Uhmm… síi amorrr… asíi… ahhh… ahhh… me corrooo…  me matass… ahhh!

Me sorprendió sus declaraciones lanzadas en medio de la “partida de culo” … en ese momento dejé de tener la claridad de sus sentimientos y los míos, pero no le dije nada, Coni no tenía que darse cuenta de lo que había dicho…  Sé que las mujeres pueden fingir orgasmos, pero no creía que Coni hubiese dicho que me amaba en medio de una actuación… podía apostar que ella estaba al borde de correrse como burra, su declaración era una muestra que ya no podía fingir…

  • Yo: También me voy a correr corazón… eres mía…
  • Coni: Sí soy tuya… ¡ahh!
  • Yo. Hoy eres mi chica, solo mía
  • Coni: ¡Sí!, solo tuya…. La pendeja ya no lo será
  • Yo: Si eres mi chica y mi putita…
  • Coni: ¡Sí!, tu putita corazón….

Al borde del abismo del orgasmo, comencé a bombearla como una locomotora a vapor, corriendo al despeñadero. Coni se tomaba de las tetas amasándoselas mientras yo la tomaba de sus caderas, castigando su orto con fiereza, mientras ella boqueaba casi ahogándose… si hubiera testigos pensarían que se moría en mis brazos… necesitando atrapar el aire con gran esfuerzo. Una de mis manos fue a tomar sus henchidas tetas mientras la otra aún marcaba el ritmo, ella la tomó y la apretaba fuerte contra sus pezones, volviéndose loca de placer.

  • Coni: Siii… amorrr… soy tu putita… ahhmm… voceaba con sumo placer.

Ya no tenía dudas, Coni era mía y estaba dejándose llevar por el morbo… yo estaba dándole con todas mis fuerzas. Coni ahora al borde de su corrida me alentaba con sus tórridos gemidos… su cara que lograba ver por el espejo estaba apuntada al cielo, como si fuera un ruego a algún Dios antiguo, en ella podía notar expresiones entre placer y dolor

  • Coni: ¡Amorrr… me estas reventando mi culitooo… ahh… mi culito de putita, ahhh!

Le descargué toda mi leche mientras los dos nos corríamos, sentí como su anito se contraía estrujándome hasta la última gota… mi corrida fue apoteósica, no dejaba de salir chorro tras chorro, inundándole sus tripas.

Ella se desmontó y se hizo a un lado, yo me tiré de espaldas desfalleciente, ella se acomodó a mi lado en la cama… ambos estábamos intentando reponernos de la tremenda culeada que mi Coni me había dado… Ambos aún respirábamos agitados, la miré por el espejo del techo, el verla me causaba admiración, su silueta de mujer estaba a mi lado, cosa que hasta hacía poco encontraba imposible, se veía feliz, con una sonrisa amorosa a pesar del maltrato que se auto infringió en su orto…. Tal vez para demostrar su entrega como única señal del daño causado a su enrojecido culo, eran sus declaraciones

  • Ufff me reventaste el culo…
  • Yo: Tú lo pediste.
  • Coni: Sí, jajaja… debo recordar que duele, jajaja… ¿Ahora soy tu única mujer?...
  • Yo: ¿Eso quieres?, si así lo quieres, deberemos declararlo al mundo Urbi et Orbi…
  • Coni: Me gustaría, pero no aún… ¿Seguirás follando a otras?
  • Yo: No si tú lo quieres así…
  • Coni: Uhmmm, tal vez solo a Juli o como se llame, así nadie sabrá que me follas.
  • Yo: Mmm, bueno así será…

El oírla así, me excitaba… Coni se dio cuenta de mi estado y me sonrió coqueta… la abracé mientras mi verga lentamente se recuperaba y comenzaba a rozar a “mi chica”. Volví a besarla, pero esta vez con ternura, pues mi pasión estaba aplacada, no sé cuánto tiempo pasamos magreándonos, acariciándonos suavemente, de tal forma que no hubo lugar de Coni que yo no tocara, en todo caso fue largo… Ella hizo lo mismo conmigo, hasta que volvimos a entrelazarnos en una follada suave y cariñosa. Ahora ella no estaba desesperada y yo no estaba afiebrado por fundirme en ella, es más parecíamos “unos enamorados”.

Nuestra corrida fue tan buena como las anteriores, ambos nos dejamos llevar por un prolongado orgasmo, finalmente quedamos agotados de tanto follar, serían como las 20:00 horas cuando ya algo más recuperados y nos preparamos para machar… Coni me tomó de la mano y me llevó a la ducha, en ella solo nos “jabonamos” muy jabonados, en especial el precioso culo que ahora era mío, luego nos secamos y vestimos casi en silencio

  • Yo: Coni, es tarde, debemos ir rápido por mi coche que quedó en la Universidad
  • Coni: Mejor vamos a casa, mañana yo te llevo a la universidad
  • Yo: ¿Segura?
  • Coni: Absolutamente

Nos fuimos con calma tomados de la mano, la verdad es que casi no hablamos. Al llegar a casa, crucé la calle y entré a mi hogar, adentro estaban cenando mis padres los que comenzaron a interrogarme por mi tardanza, por lo que les “mentí” un poco, diciendo que estaba en un trabajo y al salir mi coche tenía uno de los neumáticos bajo, a pesar de la explicación, igual mi padre me puso cara de pocos amigos, alegando que podría haber puesto la rueda de repuesto, a lo que alegué que lo haría mañana con la luz del día, por lo que me dijo:

  • ¿Cómo te irás?
  • Yo: Le pediré a Coni que me deje cerca de la uni de pasada a su trabajo, pues me puede acercar a solo un par de cuadras.
  • Papá: Pobre, ya la vas a molestar, ¿no te bastó con que te llevara a la costa?
  • Yo: Le encantó el viaje y el que condujo fui yo papá.

Debo reconocer que el viernes me costó levantarme para ir a la universidad, pero todo fue compensado, cuando a eso de las 07:45 vi a Coni esperándome en el coche como había prometido, al subirme la iba a besar como se besa a una amante, pero ella me esquivó y le tuve que dar los típicos besos de amistad. El pequeño desaire me molestó, pero ella de inmediato me señaló que:

  • Coni: No me debes besar en público como si fuéramos amantes, las calles tienen ojos…
  • Yo: Bueno, tendré que perderme tus besos…
  • Coni: Yo también lo lamento, jejeje

Partimos a nuestras obligaciones, el viaje fue como era antes, ella con sus comentarios algo infantiles para su edad, pero que de alguna forma nos hacían a todos más felices, sin dudas volvía a ser la Coni de siempre. Cuando llegamos a la uni y antes de bajarme me preguntó:

  • ¿Saldrás con tu Juli?
  • Yo: Sí hemos quedado en ir a la “Cueva del Pirata”, me han comentado que es muy bueno
  • Coni: ¿Irán solos?
  • Yo: No, de hecho, iremos con Feli y su amiga Simona…
  • Coni: ¿La chica que está saliendo con Feli?
  • Yo: Sí, es amiga de Juli…
  • Coni: Uhmmm
  • Yo: ¿Por qué esa inquietud?
  • Coni: ¡Fóllala con condón!
  • Yo: Vamos, ¿celos?... ¿Qué hay de Tony?
  • Coni: Es distinto…
  • Yo: Si claro. si tú lo dices, jajaja, eres una loquilla celosa, jajaja… adiós corazón, jajaja
  • Coni: Adiós “salido de mi vida”, jajaja

A mi solicitud, me dejó en el estacionamiento, pues quería ver que mi coche estuviese tal como lo había dejado el día anterior, al ver que estaba todo bien me fui a clases. Como de costumbre, las clases que tengo los viernes son solo hasta las 14:30, terminado eso me comí un tente en pie en los jardines de la uni con un refresco comprado en uno de los quioscos, para luego marcharme a casa llegando a eso de las 15:30 horas. Saludé a mi Nana y después crucé al frente.

Al llegar como siempre estaba Coni, pues los martes y viernes sale temprano, pues es su propia jefa y le va muy bien, puede hacer casi lo que quiere, es así como pasado uno o dos años de la muerte de su novio Esteban se dedicó a viajar por el mundo, vivió seis meses en Francia, luego un año en Canadá y todos los veranos visita lugares exóticos, ya sea sola o acompañada de Belén.

Al entrar la saludé y sabiendo que nadie más llega a esa hora me puse detrás de ella que estaba picando algo en el mesón de la cocina y le di una apoyada tremenda, ella sonriente me dio un empujón con su culo para que yo me separa y me dijo:

  • ¡Oye que nos pueden pillar!
  • Yo: Vamos Coni, nadie está a esta hora aquí, tu madre recién llegará a las 17:30 y Feli algo después, repliqué y la volví a apoyar en el culo y más encima le tomé las tetas amasándolas.
  • Coni: Oye eres muy confianzudo, deja mis tetas tranquilas que solo mi culo es tuyo, jajaja
  • Yo: Y tu muy rica… podríamos follar rápido…
  • Coni: No, deja fuerzas para follarte tu furcia hoy por la noche, además puede venir Javi y descubrirnos
  • Yo: Javi viene los miércoles con su ropa para el lavado… y los sábados hasta que llegue el tonto pesado de su marido
  • Coni:  Veo que Horacio no te cae bien y me sorprendes, ¿te sabes todos los horarios de esta casa?
  • Yo: Sí y sí, jajaja

Pese a sus protestas continué con mis caricias y como estaba con la típica faldita que viste para ir al trabajo, se la levanté como pude y sacando mi verga tiesa como palo de su encierro, se la puse entre sus nalgas, ella suspiró y se dejó hacer mientras mis manos se dedicaban a jugar con sus pezones… subí la apuesta y corrí sus bragas a un lado y levantando una de sus piernas se la metí hasta el fondo, ella intentó negarse:

  • ¡Ay Claudito!, ¡¡no!!...  puede llegar alguien
  • Yo: Si llega alguien té la saco, nadie se dará cuenta
  • Coni: Mis bragas están en el suelo, mi falda la tengo en la cintura y mis tetas al aire… solo un ciego no se daría cuenta…
  • Yo: Jajaja, incluso un ciego, pues el olor a sexo es evidente, jajaja

La seguí follando, podría no estar de acuerdo, pero le gustaba mi verga y no podía evitarlo, se la metía y sacaba con pasión, mientras con una mano tenía su pierna en alto y con la otra amasaba sus tetas, ella solo se afirmaba del mesón cerrando los ojos para agudizar su sentido del tacto, en el cual tenía centrada cada una de sus neuronas…

  • Coni: Mmm eres un desvergonzado y guarro, ahhh
  • Yo: Y tú mi putita a la que le gusta mi verga, no puedes negarlo.
  • Coni: Mmm sí, me gusta tu verga… es maravillosa.

La follé como a ella le gusta, no fue una follada muy prolongada, pero si muy gozada, cuando ella se corrió, yo estaba a punto de acompañarla en el anhelado orgasmo, pero se me ocurrió “una maldad”, decidí correrme en su boca.

  • Coni: ¡Me… me… corroo!
  • Yo: Quiero correrme en tu boquita corazón…
  • Coni: Eres un guarro… ahhh… nnooo…. ahhh
  • Yo: Uno que hace que te corras como una gata en celo…. Dame tu boquita
  • Coni: Mmm ahhh… solo si después me besas…
  • Yo: Sí putita mía te besaré….

Apenas terminó su prolongado orgasmo, ella bajó la pierna que le sostenía y se arrodilló frente a mí, por lo que con mi manos le di unos meneos más a mi verga y el primer chorro saltó a sus labios mientras los otros entraron a su boca, ella no dejaba de mirarme como gata en celo, la verdad es que la escena era de lo más erótica, no sé cuántos chorros le lancé pero los últimos cayeron fuera de su boca, el penúltimo en su mentón y el último en su pecho, pero ella con un dedo los recogió y se los echó a la boca, como si fuera a probar el ambrosía caída de la copa de un Dios griego…

  • Coni: No es muy buena, pero me podría acostumbrar a esto, jejeje
  • Yo: Solo si es la mía, esto es solo para mí…
  • Coni: Solo me tragaré la tuya, ahora el beso…

Se levantó y la besé con pasión, por lo que sentí el sabor ocre de mi propia leche, no sé cuánto nos besamos, pues comencé a enervarme una vez más y mi verga cada vez menos morcillona le tocó los labios de su coñito.

  • Coni: Debemos parar…
  • Yo: ¿Por qué?
  • Coni: Porque te estás entusiasmando y debes guardar energía para tu cita de la noche…
  • Yo: Puedo cancelar…
  • Coni: No, debes ir, además ya llegará mi mamá.

Después de nuestro tórrido encuentro, nos compusimos y pusimos el extractor de la cocina para que el olor a sexo se fuese y después comenzamos a preparar la cena de la familia como era costumbre, estábamos en eso cuando llegó tía Sole, al verla junto a Coni, pude notar lo parecida que eran las dos, lo que se hereda no se hurta… tía Sole era una preciosura voluptuosa, cuando joven debió de ser una diosa….

Conversamos de todo y nada, tía Sole con su cariño de siempre se apoderó de la conversación y del ambiente… Así pasó el tiempo hasta que llegó la hora de ir por Juli, estaba despidiéndome de tía Sole y Coni cuando sonó el timbre de la puerta de casa… ¡Uff!, era Tony, lo saludé, pues lo cortés no quita lo valiente, pero debo decir que su llegada no me gustó para nada, así como nada podía hacer, por lo que me fui a cambiar para ir a mi cita con Juli.

Tiempo más tarde pasé por Juli, al llamar a la puerta me abrió la que seguramente era su madre, pues era una Juli con más años y un cuerpo de mujer madura precioso, con esos kilitos de más que las hacen tan atractivas. En eso apareció en la entrada Juli la cual al verme salió a mi encuentro con una sonrisa de oreja a oreja y me presentó a su madre y luego a su padre.

Pasamos unos cuantos minutos dende sus “viejos” me interrogaron de quién era yo y a que “dedicaba mi tiempo libre”, me sentí como a un paso de ser novio de Juli, la cual salió finalmente en mi auxilio diciendo que yo era solo un amigo y no su novio, que el interrogatorio no era válido aún.

Finalmente salimos, pasando a buscar a Simona donde estaba también Feli, el cual claramente estaba tras esta bella chica. Simona la podría clasificar en la chica gordibuena que si tuviera unos pocos kilitos de menos sería modelo, pero que vive feliz manejando las gracias que Dios le dio, en especial su gran par de tetas que encandilan a cualquiera, además que posee unos bellos ojos claros chispeantes. Bueno salimos rumbo a “La cueva del Pirata” lugar que estaba de moda en ese momento, afortunadamente Simona conocía a uno de los dueños y teníamos pases VIP, por lo que, pese a las dificultades de encontrar estacionamiento para el coche, no tuvimos dificultades para ingresar.

Uno de los tipos de seguridad nos guio a uno de los sitios VIP, colocándonos unos timbres para que pudiésemos circular por las pistas de baile o el bar, la verdad es que el ambiente estaba perfecto, por lo que rápidamente nos unimos a la algarabía del lugar. No sé cuanto bailé, pero ya adentrados en la madrugada Juli me dijo que nos fuéramos porque tenía deseos de follar…

  • Yo: Pero ¿qué pasa con Simona y Feli?
  • Juli: O nos acompañan o se vuelven a casa en taxi…
  • Yo: ¿¡Acompañarnos!?
  • Juli: ¡Sí!, ¿te da vergüenza follar frente a otros?
  • Yo: La verdad es que nunca lo he hecho… no lo sé.
  • Juli: Preguntémosles a ellos

Juli sin duda era más “moderna” de lo que yo alguna vez había sido… su comportamiento era más parecido al de un amigo que de una chica con un interés amoroso, es más su comportamiento incluso era más osado que el de Feli. Bueno ella se dirigió a los dos chicos, e interrumpiendo su magreo les preguntó sin nos acompañaban a ir a follar…

  • Simona: Por mí voy… ¿Feli te animas?
  • Feli: Ehh, no sé, ¿Qué dices Claudio?
  • Yo: Bueno si ustedes van yo voy…
  • Juli; Entonces está decidido

Salimos del local con las dos chicas conversando alegremente delante de nosotros y nosotros siguiéndolas dubitativamente, la verdad es que su comportamiento era mucho más audaz que el de los dos juntos, pero como dicen en el campo “un coño arrastra más que una yunta de bueyes”.

Nos subimos al coche, pero yo no sabía a donde ir, por lo que una vez todos a bordo le pregunté a Juli:

  • Yo: ¿Dónde vamos?
  • Juli: A un motel pardillo, ¿Dónde más?
  • Yo: Feli, busca un lugar donde ir…
  • Simona: Yo sé dónde, te puedo indicar, no es barato, pero entre los cuatro lo podemos pagar.
  • Yo: Okey, tú me guías

Aún con serias dudas, íbamos con Feli a un motel a follar a dos bellas chicas, las que, si bien eran muy lindas, simpáticas e inteligentes, nos sorprendían con un comportamiento más parecido a los de un chico de mucha experiencia y sin dudas más liberal que los nuestros, pero ya no había pie atrás, estábamos llegando al motel

Al entrar a la habitación nos fuimos a la cama, cada pareja por un lado de ella, no teníamos claro que hacer, “afortunadamente” sonó el telefonillo el que contestó Feli:

  • Nos preguntan si queremos algo…
  • Juli: Una botella de cava y cuatro copas, es más barato
  • Simona: Y una botella de agua mineral…

Después de la breve interrupción y la llegada de nuestro pedido, pagamos y sin saber que hacer, encendimos la televisión, en ella estaba un “mandingo” enculando a una rubia diminuta, literalmente le estaba partiendo el culo… recordé a Coni. Simona se acostó en un lado de la cama, de cara Juli y yo. Por su parte Feli de instaló detrás de Simona haciéndole una cucharita, rápidamente le tomó una de sus tremendas tetas y le daba besos en el cuello diciéndole algo al oído, mientras Simona se reía de lo que escuchaba.

Por otro lado, estábamos Juli y yo, sin saber exactamente que hacer me tumbé hacia arriba en la cama, Juli a mi lado pegada a mí, la cama era muy ancha, diría que era tamaño King. Yo pensaba que no me iba a atrever a hacer nada, como también pensaba que Juli sería más recatada delante de la otra parejita… Si bien mis tribulaciones estaban atadas a mi crianza y paradigmas sexuales, era un hecho que la situación me daba mucho morbo. De pronto Juli se me echó encima y puso su pierna sobre mi cuerpo, nos besábamos. Si bien estaba nervioso comencé a acariciar su suave pierna hasta el límite con su precioso culo.

De reojo miraba a Simona y Feli, ellos repartían su mirada entre la televisión y nosotros, ambos estaban muy atento a los avances de Juli, la que ya amasaba mi verga por sobre el pantalón. En ese momento Simona le preguntó a Juli:

  • ¿Vamos a follar o solo calentarnos?…
  • Juli: Jajaja… es que aún son un poco pardillos… pero vamos a follar… Claudito es una gran revelación, jajaja… ya lo verás…
  • Simona: Feli no lo hace nada mal, ¿no es cierto corazón? ....
  • Feli: Bueno, sí… eso creo.

Durante la conversación avancé mi mano por la pierna de Juli hasta ponerlo sobre su coñito, al ver mi reacción a sus caricias ella no esperó más, sacándome la verga de su encierro, la que saltó dura y caliente. Entonces Simona exclamó admirada:

  • ¡Ay tenías razón Juli!... una verga así no se ve muy a menudo, pero mira la de Feli,

Agregó, tirando de la verga de mi amigo, el cual ya le punteaba el culo sin cortarse ni un poco, debo decir que la verga de Feli está por sobre el promedio sin ser tan grande como la mía, dado que no la tengo para nada pequeña, de hecho, en la escuela me decían el trípode, jajaja

Este jueguito solo hizo que los miedos o vergüenzas comenzaran a quedar atrás, como también aumentara el morbo, volví a mirar hacia donde estaba Simona con las tetas al aire y pude darme cuenta que su tanga estaba a la altura de las rodillas y Feli le estaba clavando la verga en algún lugar de su culo o coño, mientras rodeaba con sus brazos a Simona y le ponía una mano por encima del coñito cuidadosamente recortado de pelitos, a los segundos le metía un dedo en su interior, ¡la estaba masturbando!

Entonces Juli se desnudó completamente y se montó a horcajadas en mi pubis, restregándose mi verga contra su coñito, ahora eran Simona y Feli los que nos miraban expectantes, aun cuando Feli seguía punteando y masturbando a Simona…

  • Juli: Simona, ya pueden follar, no se corten por nosotros, jejeje
  • Simona: Siempre has sido una salida, jajaja

Si bien estaba concentrado en Juli, alcancé a escuchar cuando Feli le dijo a Simona que nunca había visto a alguien follando de tan cerca, que quería ver un poco antes. Simona no le respondió, pero Juli también debió de escuchar, pues se empaló en mi verga y empezó a moverse, cabalgando como la más experimentada de las amazonas. La situación era en extremo morbosa, me estaba follando a Juli o ella a mí, jajaja, mientras Simona y Feli miraban sin dejar de puntearse y acariciarse entre ellos.

El ser observado por Feli y Simona me puso un poco nervioso, tanto que me desconcentré de que Juli estaba rebotando sobre mí, ante lo cual ella me tomó las manos y se las puso en sus tetas y me dijo:

  • Suficiente, ahora mírame a mí

En verdad que durante un segundo me sorprendió ver como Feli y Simona nos miraban, pero el “llamado de atención” de Juli me hizo olvidar mis “trancas” y remilgos, para por fin disfrutar de cómo me follaba mi chica.

Pese a no mirarlos, no tardé mucho en notar como Feli ya penetraba a Simona, ellos seguían así de lado, él detrás de ella para poder ver mejor como follábamos Juli y yo. Era tan excitante que Juli y yo aceleramos el ritmo y no tardamos mucho en acabar al unísono, quedando ambos abrazados.

  • Juli: ¡Ahmm… síi Clau… asíi… ahhh… ahhh… me corrooo…  me matass… ahhh!
  • Yo: También me… me corrooo…

Con Juli encima de mí, sentía como su pecho aún se agitaba sobre el mío, en ese momento, casi sin pensar los dos miramos a la otra pareja como follaban… Feli y Simona no habían cambiado de posición y poco o nada se podía ver de como mi amigo le metía su verga en el coño, lo que estaba claro que a diferencia de nosotros lo hacían de forma suave y relajada.

No sé si sería el morbo o que los pezones y coño de Juli me transmitían una calidez intensa, hizo que no tardásemos mucho en volver a despertar nuestra libido y que mi verga se endureciera… Al sentir Juli como mi hombría pugnaba por volver a entrar en su coño, ella sin siquiera preguntarme, se levantó haciéndose espacio entre mis piernas, para comenzar a comerme la verga y de paso acariciar mis cojones con suavidad. Juli no solo parecía una experta, si no que disfrutaba con mi verga en su boca. Al mismo tiempo de que nosotros nos enfrascábamos en una “nueva aventura”, Simona y Feli comenzaron acorrerse.

  • Feli: ahhh… ahhh… me corrooo…
  • Simona: Ahh sí, dale, me corro, aprétame las tetas, mmmsiii

Simona y Feli quedaron casi desmayados de la tremenda corrida que habían tenido, lo pude notar pues yo me dejaba comer la verga por Juli, la que en un momento se desprendió de mi amiguito y le dijo a Simona:

  • Juli: Simona ven acércate, que te voy a enseñar como se come una verga.
  • Simona: No, me da un poco de asco…
  • Juli: No seas tonta te va a gustar
  • Simona: Bueno, pero que Claudio no se vaya a correr…
  • Yo: No, no lo haré, dije aún incrédulo de lo que estaba por acontecer.

Ante la también atónita mirada de Feli Simona se acercó y se puso al lado de Juli mirando expectante como Juli me la chupaba. Juli se sacó mi verga de la boca y con una mano me sostenía la verga y con la otra aproximaba la cabeza de su amiga en dirección a mi hombría.

  • Juli: Abre bien la boquita y métela, cuidado con los dientes, no quiero que dañes esta preciosidad
  • Simona: Mmmggff…. ¿así?
  • Juli: Sí, magnífico, pásale la lengua al frenillo
  • Simona: ¿Frenillo?
  • Juli: La cosa que une el capullo con la cabecita.
  • Yo: Jajaja…
  • Juli: ¿De qué te ríes?
  • Yo: Solo del léxico…
  • Juli: Eres un tonto, jajaja, no sé cómo ustedes les dicen a sus cosas…jajaja

En todo caso, el que Juli le explicara como hacer las cosas a Simona, la cual sin ser “nada de mi”, lo hacía demasiado morboso… El ver a Juli unirse a Simona en chuparme la verga, con Feli mirando sin perderse detalle de como su chica Simona “estaba teniendo sexo con otro”. Era una locura que me tenía súper excitado, me ponía “malo”.

Juli y Simona fueron alternándose, un poco Juli y otro poco Simona, las dos estaban enfrascadas en hacerme acabar. Como les dije, algo tan morboso me tenía loco, por lo que estiré mis manos y con una acariciaba la cabeza de Juli y con la otra una de las tremendas tetas de Simona, la que me sonrió cuando lo hice… No pasó mucho tiempo cuando ya me corría irremediablemente, lo sorprendente es que Juli le cedió el privilegio de tragarse todo a Simona:

  • Yo. Me corrooo, me corroo.
  • Juli: Todo tuyo Simona trágatelo todo, jejeje
  • Simona: Pero es tu chico.
  • Juli: Yo te ayudaré con Feli, Jejeje
  • Feli: ¡Síii!

Obviamente al escuchar el diálogo Feli volvía a estar empalmado, por lo que Simona y Juli, se pusieron a chupársela. Simona cada vez estaba más suelta con esto de comer una polla. Yo veía a las dos de rodillas mientras se la chupaban y langüeteaban por lo que al poco rato me volví a empalmar… dudé de que hacer, pero finalmente me acerqué por detrás con la intención de meterle mi verga a Juli… ella al darse cuenta, me hizo un gesto con la mirada de que aprovechase y me follase a Simona.

El morbo de la situación me llevó a ello. Algo que apenas unas horas antes nunca hubiese imaginado, sucedió, pues cuando Simona con Feli nos vieron follando con Juli ya era algo impensado… ahora con Simona chupándome la verga frente a Feli era algo imposible de imaginar… Ahora era Juli junto a Simona la que chupaban a Feli, debo de reconocer que me impactó, además de ponerme algo celoso, así y todo, me había puesto detrás de ella para follar a Simona... por un segundo pensé que es “como pisarse la manguera entre bomberos”, pero si estas chicas así lo querían, así sería… Simona al notarme detrás de ella se abrió de piernas y empinó el culo para facilitarme la entrada… Que les puedo decir, se la metí hasta el fondo, mientras ella se comía la verga de Feli, aún así dejó escapar un gemido.

  • Simona: ¡Ahhh!... Mmme, me la metiste….
  • Juli: ¿Te gustó putita?
  • Feli: ¿¡Se la metiste!?
  • Juli: Sí se la metió y le gustó, siente como te come la verga…

De pronto Juli le dijo a Simona:

  • ¿Te gusta?... verás el cielo…
  • Simona: ¿Pero Feli?
  • Juli: No te preocupes, yo me encargo, jejeje

Simona se sacó la verga de Feli de la boca y corriéndose de donde estaba se puso a cuatro patas para que yo la siguiera follando, mientras Juli con total desparpajo se montaba sobre Feli encajándose la verga de mi amigo del alma y ahora amigo de coño, jajaja.

No puedo negar que lo estaba disfrutando y por las caras de los otros tres, sin dudas ellos también… No sé como pasó, pero en un momento nuestras folladas se sincronizaron, es así que Juli acopló sus rebotes sobre Feli al ritmo de mis estocadas al coño de Simona. Habíamos llegado a lo inimaginable, yo estaba follando a Simona, mientras al lado estaban follando Juli con Feli en un insospechado intercambio de parejas… Simona en cuatro patas y yo dándole duro, en una loca carrera con Juli que cabalgaba a Feli mi mejor amigo.

Pronto nos corrimos, primero Feli y al poco yo descargaba en Simona, la cual gritó su orgasmo a los cuatro vientos, como nunca lo había hecho, fue como si hubiese querido romper algo, no se qué, pero nos sorprendió mucho, tanto que yo me llegué a asustar, pues pensé que le había pasado algo.

Terminado este intercambio, nos “volvimos a la normalidad”. Dada la ocasión, de pronto por primera vez en mi vida, me encontré probando un Jacuzzi, era una sensación nueva y si a eso sumamos a que en él follé a Juli en la tibia agua agitada, usando el último condón que me quedaba, fue toda una gran pasada. Finalmente, agotados nos regresamos a casa, la algarabía y excitación inicial se fue apagando hasta quedar en un silencio tan inimaginable, como tan inimaginable fue la aventura que habíamos tenido con Feli. Después de dejar a las “alocadas” chicas, con Feli tuvimos el siguiente diálogo:

  • Feli: ¿Qué piensas de lo que pasó?
  • Yo: Fue increíble, pero no lo repetiría
  • Feli: Lo mismo pienso, somos amigos, pero eso de ir cambiando parejas… no sé
  • Yo: Es mucho, hay cosas que son “privadas” y para mi el sexo es una de ellas.
  • Feli: Sí, es distinto contar una “hazaña sexual” a que tu mejor amigo participe de ella.
  • Yo: Sí tienes razón…
  • Feli: ¿Volverás a salir con Juli?…
  • Yo: Sí, pero no es la “indicada”, jajaja
  • Feli: Yo pienso lo mismo con Simona, jajaja, ¿te imaginas la despedida de soltera?
  • Yo: No quisiera ni pensarlo, jajaja

El sábado por la mañana no muy temprano decidí ir a trotar por el parque, por un momento necesitaba dejar de pensar en sexo universitario, pero recordé a Coni, lo cual me hizo cruzar la calle. Entré como de costumbre, descubriendo solo a tía Sole en la cocina preparando el desayuno de los demás, el cual me ofreció con su gentileza usual, pero me negué a aceptarlo. Tía Sole estaba digna de una gran paja, pues a pesar de estar con una pijama entera, su silueta era notoria bajo ella.

Pregunté por Feli el cual aún dormía y por los demás, o sea por don Feli el cual remoloneaba en su cama, luego de una intensa noche en su restaurante y por Coni que andaba por ahí, no alcancé a preguntar nada más cuando ella apareció en tenida deportiva, al verla preciosa como siempre la saludé muy afectuoso lo que provocó que me pusiera todo tipo de caras de reproche a espaldas de su madre que cocinaba unas tortillas.

  • Yo: ¿Vestida para trotar?
  • Coni: No, pensaba ir al gimnasio…
  • Tía Sole: Te acompañaría, pero tengo muchas cosas que hacer, ¡tal vez puedas llevar a Claudio con mi tarjeta!
  • Coni: No lo creo mamá, el no se parece en nada a ti, jajaja
  • Tía Sole: Pero tu puedes pasar por mí, inténtalo, lleva mi tarjeta.
  • Coni: Bueno mamá

Finalmente salimos después de desayunar, en mi caso por segunda vez, la mañana estaba perfecta e iba acompañado de la chica perfecta, pero al poco andar Coni me preguntó:

  • Coni: ¿Follaste mucho anoche?
  • Yo: ¿Por qué preguntas eso?
  • Coni: Saliste con tu amiguita, por lo que follaste
  • Yo: No he dicho eso
  • Coni: No lo negaste.
  • Yo: ¿Celos?... ¿qué hay de tú y Tony?
  • Coni: No y follé con Tony hasta que se me tapó el coño, respondió mal humorada.

Me detuve y tomándola de la cara la besé con pasión, ella sorprendida en un comienzo se dejó llevar, pero a los segundos me empujo, diciéndome:

  • Coni: ¿Estás loco?... Nos pueden ver
  • Yo: ¿No te excita?, jejeje, además, no creo que nos vea alguien…
  • Coni: Eres un tonto, ya te dije que yo soy muy mayor para ti…
  • Yo: Pero te gusto, jejeje
  • Coni: Me gusta como follas…
  • Yo: Pero te gusto…
  • Coni: Sí algo… vamos al gimnasio al trote…

Logramos entrar  al gimnasio, más que nada, porque el tipo de la entrada se dejó embaucar con la sonrisa coqueta de Coni, el cual nos derivó a uno de los instructores que no dejó de mirar el culo de Coni, cosa que me molestó un poco pero nada podía hacer al respecto, pues en mirar no hay engaño… tal es la verdad que en un momento entró una de las instructoras que tenía un cuerpo digno de todos los pecados del mundo, era tan apetecible que podría decir que hasta Coni la miró, lo sé, porque después me lo comentó al regreso a casa.

El sábado por la tarde Feli y yo salimos con las chicas al cine y por unas pizzas. No sé que pasó con ellas, pero ahora estaban algo menos osadas, por lo que solo tuvimos unos breves magreos en la oscuridad de la sala del cine, más que nada porque la película de acción no se prestaba para mucho más. Luego volvimos temprano a casa, pues el domingo todos debíamos estudiar desde temprano, así es la penosa vida del estudiante universitario.

El domingo por la tarde hice una breve interrupción de mis estudio y pasé a ver a mis vecinos de enfrente, como siempre estaba tía Sole, a la cual saludé como de costumbre, ella me dijo que Feli no estaba pues había salido a la casa de un compañero y que Coni estaba en la salita… Fui a ver a mi musa… como siempre estaba bellísima, se levantó de su sillón para saludarme, yo la abracé y la atraje hacia mí, tomándola de su precioso culo, ella inicialmente trató de detenerme, pero finalmente se dejó llevar, así y todo me dijo:

  • No seas loco, estamos en mi casa, es territorio vedado, cualquiera nos puede ver
  • Yo: Pero solo un poco…
  • Coni: No, está mamá y pronto llegará Javi con su marido

Después de tanta negativa nos sentamos en el sofá a ver una película, de vez en cuando ella me miraba y sonreía coquetamente, la verdad es que se veía preciosa y el ser tan “ella” me excitaba y me hacía desearla, pero todo lo bueno debe terminar, pues llegó Tony a verla, por lo que me fui para volver a mis estudios, ¡Oh, porca miseria!

Mi vida no tuvo mayores cambios por las siguientes tres semanas, a Coni la follaba los martes en su casa, pues ese día llegaba primero que todos los otros, luego los jueves me recogía de la universidad y la follaba hasta que quedábamos agotados, pero Tony seguía metido en nuestras vidas, ya que Coni no me veía como una posibilidad de algo más que un folla-amigo; en tanto los viernes por la noche, era el turno de Juli, y en cuanto a Simona, no volvimos a repetir lo que ustedes ya saben… en fin no avanzamos mucho.

Continuará