La familia de María: 1 El video.

Desde que María y yo somos novios he notado un comportamiento muy peculiar en los miembros de su familia, llegando a sentirme incomodo un para de veces, y nunca entendí por quá hasta después de un par de años de casados, que ocurrió lo que ahora voy a contarles.

El otoño recién comenzaba y María y yo íbamos de visita a casa de su familia, las hojas recién secas volaban al paso del automovil mientras nos acercabamos a nuestro destino, que quedaba a sólo un par de horas de la ciudad donde vivimos, solíamos ir con frecuencia pero según María esta se trataba de una ocasión especial.

Antes de describir a mis suegros voy a describirme a mí y a María, aunque esto pueden leerlo en alguno de mis otros relatos.

María, es de tez clara, cabello castaño, labios carnosos y ojos verdes; cuando la conocí era bastante delgada, pero a medida q pasan los años, mas q engordar, he notado como sus senos se han redondeado y sus caderas se ven un poco mas anchas y sus nalgas se han puesto de un tamaño bastante apetecible, nada grande; me encanta sobarle las nalgas y el culo cuando tenemos sexo. Yo, Jorge, me describiré como un tipo promedio, pelo castaño, delgado, no musculoso, pero en forma. Los dos de estatura mediana 1.75 aprox.

Pues bien, mi suegra es bastante parecida a María, o mas bien al revés, mi suegra tiene apenas 45 años, es tambien de tez clara, cabello castaño muy claro, y al decir que se parecen mucho es por el cuerpo, tienen la misma figura pero el cuerpo de mi suegra se ve mas ancho, caderas amplias y senos muy redondos, siempre se ha vestido muy entallada, con pantalones o legins, verla vestida así y sentarse con el culo respingado es un deleite, en mas de una ocasión María me ha sorprendido viéndole el culo, a lo que sólo responde dándome un pellizco. Mi suegro, un hombre de 50 años alto, delgado y de tez blanca, siempre ha tenido barba o bigote, nunca lo he visto rasurado de cabello muy negro apenas tornándose cano y siempre está haciendo trabajos físicos en casa; se casaron muy jóvenes y por eso seguían muy bien conservados.

El detalle incomodo en su casa ha sido ver como mi suegro saluda de la misma forma a María, la abraza de la cintura, se la pega muy fuerte a él y le dice "Que nena tan linda. Preciosa!" entonces le besa el cuello o la mejilla de una forma que nunca he visto que un padre lo haga con su hija. María se limita a sonreir y decirle "Basta! Papá!". Un par de veces incluso la sorprendía abrazándola por detrás, una de esas veces María llevaba falda y pude ver como la tela de la falda de restregaba con el cuerpo, y seguramente el miembro de mi suegro. En todas esas ocasiones no dije nada, hasta hace un par de semanas antes a esta visita, donde le comente que me parecía extraño o algo peculiar, y es por esto que ahora se dio esta "ocasión especial" por la que fuimos de visita.

Llegamos a casa de mi suegros y nos recibieron de una forma muy sobria, mi suegro se limitó a saludar a María con un beso de ladito y un abrazo tierno nada más. Esta vez fue mi suegra la que al saludarme me dio un abrazo que me hizo sentir sus senos contra mi pecho, cosa que no había pasado antes, con este abrazo pude sentir como mi pene palpitaba lentamente y muy seguramente los ahí presentes vieron como mi bulto se hinchaba aunque nada dijo nada; llegamos justo a la mitad del día por lo cual nos fuimos directo a comer y después a la sala a platicar un rato antes de pasar a descansar.

Ya en la sala y entre platicas mi suegro fue al grano y me dijo "Jorge, sabes que en esta familia te queremos y apreciamos mucho, no por nada estás con nuestra preciosa hija y ahora que ya han pasado un par de años de sus matrimonio, y como ya eres parte de esta familia, sentimos que es momento de que participes con la familia de lleno, además ya extrañamos a nuestra nena". Yo no entendía nada de lo que mi suegro me decía pero lo escuchaba atendo y en espera de una conclusión, en lugar de eso, mis suegros se levantaron de sus lugares en la sala y dijeron "Vamos a dar un paseo y los dejamos solos para que platiquen".

María y yo nos quedamos solos en su casa, ella me tomó de la mano y me llevo directo a la habitación de sus padres, nos sentamos en la enorme cama king size y María me dio un beso profundo y cachondo, entonces me dijo "tú sabes que te amo mas que a nadie en este mundo y por eso quiero vivirlo y compartirlo todo contigo, hemos tenido muchas aventuras juntos, y muchas experiencias, sobre todo en el sexo, nos conocemos a fondo y sabemos lo que nos gusta, pero tambien sabemos que no existimos el día que nos conocimos y muchas de las cosas que nos gustan las aprendimos de experiencias con otras personas". Yo sólo escuchaba a María y hasta ese momento ya le estaba acariciando un seno y seguía sintiendo como mi pene se endurecía poco a poco, pues ya veía venir la frase que María dijo a continuación "Muchas de las cosas que a mí me gustan las aprendí en casa, en familia" Al decirme esto dejé de acariciarla un poco sorprendido, aunque me imaginaba que me diría esto; María dijo "Vamos a ver un video, un video casero, para que entiendas un poco más de qué te hablo" entonces fue al buró del lado de su madre y abrió un cajon que tenía varios cartuchos de video, sacó uno y lo puso en un viejo video player que aún conservaban en esa habitación.

Mientras la cinta comenzaba, María me decía "Mi familia y yo siempre hemos sido muy unidos y muy abiertos respecto a cualquier tema, desde pequeña aprendí la diferencia entre un hombre y una mujer, ya que muy seguido nos bañábamos todos juntos, incluso con mis hermanos". (Olvidé mencionar que María tiene un hermano mayor y una hermana menor, los cuales tampoco viven con sus padres ya, y no estaban de visita en esa ocasión) Y añadió "Este video, es un ejemplo de lo que he aprendido con mis padres".

En el video aparecía María, hincada a la orilla de la cama de sus padres, cono si fuera a hacer oración de buenas noches, pero en lugar de eso veía la televisión con ellos, como muchos hijos acostumbran con sus padres, la única que salía a cuadro era ella y se veían las piernas de quien parecía ser mi suegro, quien traía un pantalón de pijama de color gris, María portaba una camiseta de color aqua; Nadie hablaba y no se podía escuchar bien diálogos viniendo del televisor, al ver con atención pude notar que María tendría unos 14 o 15 años como máximo. Entonces comenzó la platica entre María y mi suegro:

María: Está aburrido.

Suegro: No te gusta? Apenas comienza, mira no te gusta eso?

M: sí pero se ve muy lejos, deberían de acercarlo.

S: en un momento ya verás.

M: Ay sí! Que rico papi!

S: Te gusta?

M: Sí.

S: Se te antoja algo así?

M: Sí

Entonces la camará dejó de grabar a María e hizo un zoom leve al televisor, al fin pude ver la escena que ellos veían, una chica desnuda sobre acostada y siendo tocada por 6 u 8 personas, hombres y mujeres, una mujer se acostaba sobre ella para hacer un 69 y la cámara hacía un enfoque de las nalgas abiertas de la mujer de arriba, la chica acostada se las abría y lamía su clitoris y alzaba la cabeza para lamerle el culo rosado entonces comenzaba la lluvia de semen de dos hombres que se masturbaban subre las nalgas de la mujer de arriba, la chica de abajo se tragaba todo lo que podía y seguía lamiendo a la chica de arriba, otros se acercaban y las penetraban a las dos.

La cámara dejó de hacer el zoom y volvió con María, que se mordía los labios y gemía sólo con ver el televisor. La voz de su papá le dijo "Mira nena, mira lo que tengo para tí". María volteó y la camará tambien se movió un poco para ver lo mismo que ella, la verga de mi suegro salía de su pantaloncillo, se veía muy dura, unas venas gruesas la atravesaban y  estaba roja, llena de sangre; María entonces se subió a la cama, se hincó en medio de las piernas de su papá y sin siquiera tocarla con sus manos acercó su cara lo mas que pudo a esa enorme verga y comenzó a darle lengüetazos, su papá respondía con gemidos leves y le decía "Así nena, así", ella seguía lamiendo y se recogía el cabello con una mano, ahí estaba la chica de 15 años lamiendo la verga de su papá, poco a poco dejo de lamerla para comenzar a chuparla de lleno, su cabeza subía y bajaba y aún seguía sin ponerle una mano encima; La camará dejó de grabar a María e hizo una toma del dueño de esa verga, el rostro de mi suegro se retorcía de placer, el señor traía el cabello un poco largo, se veía mucho mas joven y no tenía ni bigote ni barba, ahí comencé a encontrar el parecido que tiene María con los dos, antes no lo había notado.

La cámara se acercó al rostro de mi suegro y comenzó a grabar a María desde ahí, tenía la perspectiva que tenía el mientras su hija se la chupaba, entonces la cámara hizo un movimiento brusco hacia abajo y fue ahí cuando apare ció a cuadro un hermosa teta blanca que apenas se podía enfocar, mi suegro comenzó a amamantarse de ella, pellizcaba el pezón, me recordaba a las tetas de María, de areolas muy grandes, marrones y pezones gordos como canicas, la cámara entonces pasó a manos de mi suegro, él comenzó a dar una toma de toda la habitación, haciendo un zoom a la mamada de su hija y luego al televisor que seguía proyectando la película porno, y al fin llegó a lo que tanto ansiaba ver, mi suegra, estaba completamente desnuda, se veía bastante mas joven aún y tenía la misma figura que ahora tiene, y vaya que María se parece a ella, era como una versión alterna de mi mujer, un poco mas ancha, mas caderas, mas tetas, mas nalgas; Mi suegra se acercó al mismo buró del cual María sacó el video y de ahí sacó un strap, que es un cinto con un dildo, este dilo era muy largo, con dos puntas, y algo curvo como un bumerang, ella se volvió a subir a la cama, y dandole la espalda dejó ver sus hermosas nalgas, las abria y mostraba el ojete oscuro y viscoso, se metía un dedo en el culo y se ponía lubricante de una botella, ya teniendo las nalgas y el culo bastante lubricados comenzó a juguetear con el dildo, lentamente se sentó sobre el metiéndolo en su culo, el dildo era muy largo y parecía no dejar de entrar en ella, la imagen de las nalgas de mi suegra con un dilo adentro era deliciosa, sentí ganas de oler y lamer su culo, de meterle un dedo y de que ella me metiera un dedo un mi culo; en este punto del video todos estaban gimiendo, tambien María, que seguía mamando la verga de su papá.

Mi suegra sacó el dildo de su culo, lo volteó y metió la otra punta en su chocho mojado sin necesidad de lubricante, lo metió bastante y entonces abrochó el cinto, dejó la otra punta al aire como si ella tuviera una verga y estaba lista para usarla, le quitó la cámara a mi suegro y rodeando la cama quedo parada frente a esta, entonces vi que María no tenía ropa interior y que al ser una adolescente recién había reventado sus nalgas se veían gordas y tiernas, rosas y carnosas, listas para ser disfrutadas.

Mi suegra se acercó a ella y comenzó a dejarle caer un chorro de lubricante en el culo y las nalgas, masajeó, pellizcó y apretó esas nalgas con una sola mano, le daba nalgadas, entonces escuché la voz de mi suegra que decía "Ahora nuestros culos estarán unidos con esta enorme verga negra", apuntó al culo de María  la punta que ella misma se había metido a su culo, y poco a poco esta fue entrando, María dejó de mamar la verga de su papá para gemir a boca abierta la cogida que le daba su mamá, al cabo de unos minutos la espalda de María se contorneaba de placer y gritaba "Me vengo, me vengo" mi suegra sacó el dildo de su culo y volvió a incorporarse al lado de su marido para ver como su hija ahora lo masturbaba. Mi suegro comenzó a gemir cada vez mas y le dijo "Ya nena, ahí va!" Comenzó a mamar y lengüetear la verga de su papá por los costados, mientras la leche salía primero disparada y luego a borbotones por la punta, ella seguía lamiendo y comiéndose toda la leche como si fuera una paleta de helado derritiéndose en su boca. Mi suegro dijo "Que nena tan linda. Preciosa!" y entonces el video terminó.

Mi atención estuvo todo el tiempo en la acción de el televisor y entonces me dí cuenta de que yo mismo me había sacado la verga de los pantalones y me la masajeaba a paso lento pero firme, la tenía toda mojada, tiesa y roja de tanto manoseo. Frente a mí estaba María, mi hermosa esposa, hincada en la alfombra de la habitación detrás de ella había un espejo que llegaba hasta el piso vi su espalda arqueada hacia adelante y sus nalgas redondas sentadas sobre sus tobillos, sus tetas se apretaban contra mi verga mientras ella me abrazaba, se agachaba y daba pequeñas mamadas a mi verga, se agarraba una teta y restregaba su pezón contra mi punta.

Alcé la mirada y vi que no estábamos solos y no sabía desde cuando, mis suegros estaban ahí parados los dos estaban completamente desnudos, pero mi suegro detrás de mi suegra, restregándole la verga en su culo, y apretando sus tetas, teniéndolas frente a mí se veían exactamente iguales a las de María pero mas grandes; Mi suegro se dejó ver frente a mí y mis ojos se clavaron en su verga, dura y grande, de la punta le escurría lubricante y se resbalaba por toda la base. Volteé a ver a María, ella sonreía, mi suegra me veía con ternura, como a un hijo, pero aún así se mordía los labios, entonces mi suegro habló: "Que dices Jorge?"

Continuará.