La Excursión al zoco
Trío que disfrutó mi esposa con dos machos árabes dotados en la excursión del zoco de un crucero que hicimos hace un par de años, no te pierdas este cachondisimo relato
El crucero llegó a Túnez y nos propusimos una excursión al zoco del lugar. Sin más y con un calor sofocante, después de media hora de bus desde el muelle, llegamos al lugar y el guía por el camino nos fue contando que intentáramos en todo momento estar el grupo unido para evitar posibles problemas como pérdidas o robos pero por el bullicio que allí se formaba no por ser un lugar peligroso pues viven del turismo y obviamente no van a arriesgar a llevar al turista a un sitio poco recomendable. El guía, tal como vió a mi mujer se la comía con los ojos e incluso le llegó a soltar una indirecta por su indumentaria avisándola de lo “salidos” que eran los hombres del lugar y que iba poco más o menos que ser carne de cañón para esos machos árabes; en sí tampoco iba demasiado provocativa, pero ella es muy zorra y le fascina insinuar con su sinuoso cuerpo y llevaba un vestido de tela fina por encima de las rodillas, escotado y con un cinturón que marcaba sus caderas señalando obviamente su espectacular culo que al llevar tanga cada vez que marcaba el paso con sus alzas de tacón de esparto veraniegas ambos glúteos se meneaban sin control hipnotizando a todo buen macho que se precie. Así pues nos introducimos en el zoco y aquello era un anarquía de lugar, gritos de los vendedores, bullicio por doquier y como no corrillos de machos evaluando a las mujeres que se bajaban del crucero hasta que sucedió lo inevitable.
Dentro del paseo, se le acercan dos tipos uno de ellos ridículamente enano, no llegaría ni al metro sesenta y en un más que digno castellano se dirige a nosotros de esta manera…
- “ Señora , me percaté de su belleza y he de decirle que su hombre se ve, grande, fuerte, vigoroso …. Pero…… hombre alto, picha corta, yo hombre bajo picha ¿??? …. Probamos ¿??? “
Mi mujer se sorprendió y ambos por nuestra cultura liberal de vivir la sexualidad, no nos sentimos ofendidos pero amablemente mi mujer declinó la invitación por motivos obvios aunque me reconoció que el acompañante del enano era un hombre varonil y bien parecido… a lo que sonreímos de manera cómplice y proseguimos nuestra ruta. En un momento de la excursión, nos dividen a las mujeres por un sitio y a los hombres por otro lado ya que las unas visitarían una casa donde se fabrican alfombras y a nosotros nos llevan como a una tetería para tomar unos tragos del lugar y a partir de ahí sucedió lo que mi esposa me comentó a continuación.
La casa de las alfombras tenía varios patios y en uno de ellos aparecen de nuevo el enano que se llamaba Farid y el otro que se llamaba Ali y el acoso y derribo de nuevo fue inevitable y esta vez sin mi presencia conque el camino para ellos era muy cómodo.
- “ Mujer bella, nosotros estamos aquí para cumplir fantasías de mujeres hispanas que jamás tendrán la oportunidad de probar dos enormes pollas árabes, no seas tonta, no habrás sido la primera, te lo adelanto, sois demasiado putas y todas las semanas cae alguna y hoy tu eres nuestro objetivo, eres un bombón muy apetecible y aprovechamos que los esposos están en la tetería para haceros disfrutar”
Farid no perdía el tiempo y a pesar de no tener un físico prodigioso, mi esposa advirtió que tras su apretado pantalón de chándal se le vislumbraba un paquetón fuera de lo normal y que por su estatura saltaba a la vista, mientras Alí de una manera decidida le agarra la mano y se la besa de una gentil manera que hace derretir a mi esposa y mientras la excursión proseguía, ella se quedó rezagada y ya no había vuelta atrás… ese mensaje directo del enano Farid le llegó y quiso aprovechar la coyuntura para darse el festín con esos dos pollones árabes que probablemente nunca más lo haría. Dentro del laberinto de esa casa y tras recorrer varios pasillos abrieron una puerta como un cobertizo de no buen aspecto lleno de mantas cojines y alfombras y con un pequeño lavabo y lo cerraron por dentro para tener la intimidad suficiente como para hacer disfrutar a la puta de mi mujer durante un rato. Ella les advirtió que luego necesitaría incorporarse al grupo a lo que ellos dos la tranquilizaron diciendo que eran unos caballeros y que incluso si hiciera falta la acercaban al muelle pero la excursión era larga y aún sobraba bastante tiempo para la vuelta y que podía estar tranquila. Despejadas sus dudas el festín estaba servido y los machos árabes no dudaron en empezar a meter mano a mi mujer por encima del vestido acariciando sus muslos y tetas mientras ya besaban el cuello de Frida mi mujer, ella iba palpando igualmente sus braguetas dando fe de lo que se iba a comer y sus vergas realmente eran gigantes .
- “Madre mía menudos dos machos árabes esto no son pollas, son trompas de elefantes , “
- “ Serán todas tuyas gran puta, sois todas iguales “ …. Espetó Ali bajándose el pantalón del chándal y mostrando sus credenciales a Frida.
Ambas `pollas medían justo del codo en adelante del brazo de Frida y ella muy golosa fue besando dulcemente ambas vergas ya de rodillas y sin el vestido pero con el sujetador y el tanga puestos y sus zapatos…. Los árabes ven mucho porno y les recuerda a las actrices de las películas y le pidieron a mi mujer que ella fuera su actriz para hacerla disfrutar y ese rol le va a la puta de Frida de maravilla. Se empecinó en mamar polla de lo lindo y jugaba con ambas pollas poniéndosela en la cara mientras absorbia sus enormes huevos y lamió succionó y hasta mordió el tronco de esas grandes pollas ante el asombro de ambos.
- “ Sabes puta Frida, Ali y yo creíamos que estabas muy buena pero que las que soléis serlo así luego no sois tan putas ni folláis ni mamáis bien la polla pero tú lo reúnes todo eres una maravilla de zorra y ojalá te quedaras con nosotros para siempre “
- “ vamos puta , vamos me toca a mí ahora deja de meneármela y chupa “ decía mientras Ali.
Después de un buen rato la tumbaron y el enano Farid le apartó la tanga y saboreó su coño moviendo su lengua a una velocidad de vértigo y Ali se afanaba con sus enormes tetas pajeando su polla con ella montado encima suya y escupiendo entre ellas para aumentar su lubricación sin parar de decirle lo puta que era y que de todas las españolas que follaron ella sin duda era la más guarra y fue inaudito, pocas veces llegó a orgasmar Frida tan pronto, buena señal que esa situación y de la manera con que se provocó la follada la puso a mil de caliente y ambos querían ya clavar a mi mujer y por su impaciencia fueron directo a la doble penetración jugándose con una moneda quien le abría el culo primero… ambas pollas eran descomunales, de unos 25 ctms y la verdad que ella estaba muy cachonda tolerando en todo momento las indicaciones de esos machos.
- “ Ohhhhhggg por Alá que cosa más rica Farid, este culo se traga mi polla y nunca vi mi polla tan hundida dentro de uno de una puta infiel española casi la tengo entera adentro”
- “ Si es bien puta Ali, mira la cara de deseo de polla que tenía, acaso el cornudo de tu marido no te da lo que te mereces puta?? “
- - “ No paréis, no paréis, no paréis hijos de puta , no paréis que me corro de nuevo aaaaaaahhhhhhhhgggggg “
Frida se entregó por completo a esos árabes folladores de guarras españolas que follan al bajar de sus cruceros. Cambiaron de postura y poniéndola a cuatro, fueron percutiendo sus agujeros mientras alternaban siendo acribillada por su boca y bien por el culo o por el coño por ambos hasta que se coordinaron para eyacular de esa misma postura, Ali lo hizo dentro de sus entrañas con su nabo introducido hasta las pelotas en el culo y Farid fue bañando su boca hasta dejarla repleta de leche casi ahogándola e incluso demostrando ese enano ser un lechero top, aún dispuso de dos o tres chorros que cayeron en su cara y sus tetas. Ya repuestos y aseados, como prometieron, llegó la sorpresa, usaron un teléfono y a quien estaban llamando era al guía de la excursión nuestra que por lo visto estaba compinchados con ellos para elegir su víctima de esta semana y así poder incorporarme de nuevo al grupo… así fue la follada árabe de Frida mi mujer que me fue contando estos detalles en el viaje de vuelta al barco.