La esposa ideal (el primo y el burro)

El fatidico dia en que conoci al enemigo de la adolescencia d emi esposo y como junto con el primo siguieron en el camino de convertirme en una gran puta, para el disfrute de ellos y todos sus amigos mas adelante.

Esa semana fue llena de adrenalina, en cuanto se levantaba mi esposo para meterse a bañar, yo salía corriendo al otro cuarto y en mas o menos 15 minutos le proporcionaba la mamada de los buenos días a su primo, jajajajaja, y yo todas esas noches la verdad lo único que esperaba era que amaneciera pronto.

Durante toda la mañana era por completo su puta, en cuanto se iba mi esposo a trabajar, yo  me ponía a hacerle desayuno, lo que a el se le antojara, se lo llevaba al cuarto y mientras el desayunaba y miraba la tv yo jugaba con su verga y sus bolas, ya sea con mis manos o con mi boca.

Casi todo el día pasaba con mi cara entre sus piernas y aunque en las tardes mi esposo estuviera ahí buscábamos la forma de mamársela o de un rapidito, por eso ya siempre usaba puras faldas o vestidos, para cuando el me ordenara nada mas levantármelo y que el me pudiera penetrar en donde fuera.

Salíamos a alguna compra y el me ordenaba que me pusiera la ropa más sexy y provocativa, falditas cortitas, de esas que solo tapaban el culo o shortcitos que dejaban medio culo de fuera, blusitas súper escotadas y claro está sin llevar nada abajo, ni bra ni tanga. Eso hacía que muchos hombres me voltearan a ver, me decían cosas cuando íbamos en la calle y todo eso lo excitaba muchísimo, porque siempre que alguien me decía cosas en la calle por mi forma de vestir, llegando a al depa me daba unas cogidas muy fuertes y los dos terminábamos cansadísimos.

Por la tarde, estábamos esperando que llegara mi esposo de trabajar, habíamos quedado en que saldríamos a un bar a tomar algo y a divertirnos, a lo cual estuvo platicando con un amigo de el por el cell diciéndole que fuera al bar y aunque yo no lo entendía por qué se soltaban riendo, según ellos que sería una sorpresa para mi esposo.

Faltaba una media hora para que llegara mi esposo y yo mientras tanto le estaba dando una muy buena mamada, en eso sonó su cell y era ese amigo invito a salir con nosotros, como que le pregunto que estábamos haciendo y el tomándome una foto con toda su verga dentro de mi boca se la mando por mensaje, mientras le decía que yo era toda una experta en mamar y coger, que no me llenaba con una sola verga, que por eso lo invito, el amigo le pregunto que como podrían hacerlo si mi marido estaría con nosotros, a lo cual contesto que con unas cuantas cervezas el quedaba totalmente inconsciente y que por eso no se preocupara.

Termine de mamársela y me trague hasta la última gotita de tan rica lechita, me esmere por dejársela súper limpia y el con una enorme sonrisa me hizo sentir que si le gusto la mamada que le di. Me sentí muy bien al ver que el estaba satisfecho, como que algo dentro de mi me hizo sentirme orgullosa de ser tan buena mamadora.

Me levante y me fui a lavar la boca, y cuando estaba saliendo llego mi esposo, la verdad se notaba cansado, pero ya habíamos quedado y el al verme tan entusiasmada con la salida, fue y se puso una camisa limpia y unos zapatos mas presentables.

Le di de comer y juntos los tres platicamos de como estuvo el día, que habíamos hecho y pues claro que le menti, jajajaja, le dije que habíamos ido a comprar unas cosas para la comida y que estuve viendo las telenovelas toda la tarde, el pobre no sospecho que desde temprano me dio una muy buena cogida su primo y que durante el transcurso del día se la mamé varias veces, incluso cuando platicaba con su amigo por el celular.

No entendía porque su primo no le decía que su amigo se uniría con nosotros en el bar, nunca había escuchado hablar de el a mi esposo, pero como era amigo de la infancia de su primo, mejor guarde silencio y espere ver su sorpresa cuando estuviéramos en el bar.

Salimos de la casa cerca de las 8 pm, llegamos directo al bar, todavía no se llenaba, así que tomamos una muy buena mesa, en un rincón, con poca luz y poco transitó de personas. Nos sentamos y pedimos cervezas, estaban muy frías, riquísimas y no tardo el bar en llenarse y pronto un grupo local comenzó a tocar en vivo. El ambiente estaba muy animado, ya con un lleno total.

Mi esposo creo que por lo cansado tomó muy rápido, en menos de una hora se tomó 4 cervezas y como ya ustedes saben no tardo en ponérsele los ojos rojos y con una cara de sueño, el pobrecito. Su primo mas lo animaba a que siguiera tomando, a lo cual mi esposo no se negó y también en un tiempo muy corto ya se había terminado otras 4 cervezas.

Estábamos escuchando al grupo local cuando de pronto se paro en frente de nosotros un tipo, y haciéndole señas al primo el cual rápidamente se levanto y se saludaron fraternalmente, al fin había llegado el amigo con el cual estuvo platicando en el día.

En cuanto mi esposo lo vio, no lo reconoció, su primo haciéndole señas para que se parara y así presentárselo. Cuando mi esposo lo saludo puso una cara de enojado que no podía disimularla y rápidamente se regresó a su silla, yo me le acerque para que me dijera el porque de esa cara. El explicándome me dijo que el era el “burro”, el chico aquel que desde la infancia le había hecho la vida imposible, era el gandalla del barrio.

Yo voltee a ver al primo y le hice unas caras de que se haba pasado con esa broma, me pare y me puse a su lado y le dije que mala onda, que eso no estaba bien, el dándome una nalgadita me dijo que todo estaba bien que el sabia porque lo había hecho. Me presento con su amigo como su putita, yo me puse roja de la pena y el amigo acercándose a mi me dio un beso casi en la boca, pero gracias a que mi esposo estaba enojado no miro que su primo me agarro una nalga y gracias al ruido del grupo no escucho que me presento como su putita.

Nos sentamos y la verdad que mi esposo ya no dijo ni una palabra, solo se dedico a tomar y tomar. Yo sin pensarlo me quede en medio de su primo y de su amigo, no tanto deliberadamente sino mas bien por estar escuchando la plática.

Ya con un poco de confianza le pregunte que porque lo habían hecho, el amigo sonriendo y ya poniendo una mano en mi pierna comenzó a platicarme que desde chicos no se llevaban bien el y mi esposo, que siempre se peleaban por cualquier tontería.

Y acercándose a mi oído me dijo que todas las novias de mi esposo, desde la primera habían terminado teniendo sexo con el, yo me le quede viendo asombrada, y le pregunte que porque, a lo cual el riéndose me contesto que no por nada le decían el burro y agarrándose su paquete se soltaron riendo los dos.

No podía creerlo, el enemigo desde la adolescencia de mi esposo, estaba en la mesa con nosotros y eso no era todo, todas sus novias le habían puesto el cuerno con el, y a como pintaba la noche era muy probable que yo también terminara ensartada por el, si pensé en dejarlos ahí e irme con mi esposo, pero no se, el buen ambiente, el sentir sus manos en mis piernas y el ver a mi esposo casi dormido en la mesa, termino por vencer mi poquita dignidad.

Una hora mas tarde ya los dos tenían sus manos separándome las piernas, estaba totalmente abierta, mi tanga de lado y sus dedos hurgando en mi mojada panochita, y ya sin ningún esfuerzo deje que los dos hicieran de mi lo que se les antojara. Mientras sus dedos entraban a placer en mi, mis manos sobaban sus vergas por encima de sus pantalones, estaba a punto de un orgasmo y me entrege cerrando los ojos, sin importarme si me miraba mi esposo o alguien mas y dando un grito que el ruido de la música ahogo les llene sus manos de mis jugos, estaba roja de lo excitada y jadeando y pensando como le iba a hacer para disfrutar de esas dos ricas vergas.

Se me quedaron viendo, los tres volteamos a ver si seguía dormido mi esposo,  sin decir ni una palabra, nos levantamos y entre ellos tomaron a mi esposo y nos dirigimos a la salida, yo en mi mente lo único que quería era llegar a la casa y disfrutar de los dos, ellos apurados y sin fijarse como venia mi esposo en unos cuantos minutos ya lo habían sentado en el lado del copiloto, el primo se puso al volante mientras que el amigo me tomo de la mano y me invito a subir con el en los asientos de atrás.

En cuanto cerro la puerta se bajo el pantalón y una gran verga, increíblemente llena de venas, con una punta muy gruesa, salio como resorte y aunque estaba bastante chueca, no me importo y como una loca me abalance sobre esa enorme verga y se la comencé a mamar. Apenas me cabía la punta pero aun así me atragantaba por tratar de que entrara un poco mas. El tomándome fuertemente del cabello literalmente me cogió la boca, y aunque me estaba ahogando y mis ojos llenos de lagrimas no deje de abrir lo mas que pude mi pobre boquita.

No me importaba el gran ruido que estaba haciendo, yo lo que quería era disfrutar de esa enorme verga, de tan solo mamársela estaba totalmente empapada en mis propios jugos, llegamos al depa y dejando a mi esposo dormido en el auto, subimos los tres casi corriendo, entramos y bajándose los dos sus pantalones yo ya estaba hincada entre los dos esperando tragarme aquellos enorme trozos de carne.

Por mas de media hora se las mame a los dos, alternado mi boca y mis manos entre ellos, saboreando sus líquidos pre seminales, y sobre todo esa piel tan rica que cubre sus testículos, automáticamente les estaba ofreciendo una de mis mejores mamadas, a lo cual los dos gemían y resoplaban como animales en celo.

Me ordenaron desnudarme y en unos segundos ya estaba sin ninguna prenda delante de ellos, me pusieron de a cuatro en el sillón y el burro apuntándomela a mi panochita y de un solo golpe me ensarto, yo di un grito muy fuerte, me sentía que me partía en dos esa gruesísima verga, además con esa curvatura hacía que sintiera cosas que nadie me habían hecho sentir, en ese mete y saca violentísimo tuve fácilmente dos o tres orgasmos, los cuales hicieron que mojara hasta el piso.

Mientras tanto al primo se la estaba mamando, y cambiando de lugar el me cogía mientras al burro intentaba mamársela, ufffff fue una de las mejores cogidas que había tenido, no se si por lo excitada que estaba o por que cada día era mas puta, pero en cuestión de un poco mas de media hora tuve varios orgasmos lo cual fueron coronados por esas dos buenísimas corridas que tuvieron en mi boca y a lo cual como buena putita me trague hasta la última gota de leche de esos dos machos.

El burro me decía que la historia se repetía, que puras putas se conseguía mi esposo y como siempre el terminaría por disfrutarlas, y mas ahora que era con la esposa y que además hasta por el culo me daría, yo solo sonreí y cerrando lo ojos disfrute del rico sabor que me habían dejado esa mezcla de dos lechitas en mi boca.

Nos quedamos descansando en el sillón, ellos no dejaban de meterme mano en mis agujeritos, y en unos quince minutos ya se estaban calentando nuevamente, un brillo en mis ojos y la sonrisa en mi boca daban a entender que los tres ya estábamos listos para el segundo round. Me levante, fui a la recamar y trayendo el botecito de lubricante, me les hinque y jugando con sus vergas los masturbe, se las mamé y en unos minutos ya las tenían duras como el acero.

Tome lubricante y les puse en las puntas a los dos, tome otro poco y lo introduje en mi culito, los dos me miraban con unos ojos de lujuria, como no pudiendo creer que yo solita estaba preparando mi culito y sus vergas para la cogida que se aproximaba.

Montando a el burro y tomando con una mano su enorme verga la apunte a mi culito, y dando pequeños brincos trataba de que me entrara al menos la punta, pero era tan gruesa y grande que no podía, el primo riéndose al ver que por mas que trataba no podía entrar, se paro atrás de mi, me levanto y empinándome me la metió de un solo golpe, su verga al ser menos gruesa entro de un solo golpe, yo di un salto, pero el tomándome fuertemente de la cintura comenzó una muy fuerte cogida y que el burro sorprendido miraba las caras que yo ponía cada vez que me embestía.

Por unos veinte minutos me cogió súper fuerte, después se separó y ayudándome a montar al burro otra vez me acomode la punta en la entrada de mi ya abierto culito, con la ayuda de los dos de un solo sentón me ensarte toda la enorme verga, sentí que las fuerzas se me iban y con sus fuertes manos me levantaba y me volvía a dejar caer y con el propio peso de mi cuerpo hacia que aquella enorme verga entrara todita hasta el tronco.

Como una posesa comencé a montarlo, yo solita subía y me dejaba caer, el ruido que mis nalguitas hacían al chocar contra el era muy fuerte pero a la vez muy excitante llevándome de esa forma a un lago y riquísimo orgasmo. Por varios minutos estuve de esa forma, después el primo se acomodó a un lado y levantándome de con el burro fui y me ensarte solita en la verga del primo y por varios minutos me estuve matando solita en esas dos grandes vergas.

Se pararon y tan solo empinándome un poco me volvieron a coger, primero el burro y después de unos diez o quince minutos de estarme martirizando mi pobre culito se corrió en un tremendo orgasmo que hasta se torcía cuando estaba eyaculando dentro de mi. Despues acomodándose atrás de mi el primo también me cogió durísimo terminando tambien dentro de mi. Las piernitas me temblaban, los dos riéndose decían que parecía venadita recién parida, me tuve que apoyar en uno de ellos porque si no me iba a caer.

Por mas de dos horas me estuvieron cogiendo a su antojo y por donde quisieron, mis agujeritos estuvieron a su disposición y yo la verdad termine con una gran sonrisa en la cara, sentía como su lechita salía de mi pobre culito y se escurría por mis piernas. Yo estaba que me pulsaba mi culito, lo sentía mega abierto. El burro no podía creer que yo aguantara tremenda cogida y que estaba sorprendido por el aguante de mi pobre culito.

Nos quedamos recostados en la sala mientras reponíamos las fuerzas, no dejaban de tocarme y la verdad eso me llevo a un orgasmo a lo cual los dos se soltaron riendo, lo cual les agradeci por darme tan tremenda cogida, que estaba a su disposición para todo aquello que quisieran, que podían contar con mis agujeritos para su total satisfacción

Ese día entendí el porque las ex novias de mi esposo terminaban ofreciéndose a su pero enemigo el burro, era esa forma curva de su verga aunada al enorme tamaño y gran gruesor hacia increíbles orgasmos llegaran al ser penetradas. Era algo muy raro, como una verga tan fea podía tener esa gran capacidad de hacer sentir cosas que nunca habían sentido.

Me hicieron prometerles que seria la putita de los dos, yo con una gran sonrisa lo prometí. Eran casi las 3 am y mi esposo seguía dormido en el auto. Les pedí de favor que fueran por el para dormirnos, los dos fueron mientras yo prepare la recamara para dormir. A cada paso que daba sentía como me entraba una gran cantidad de aire por atrás. Me habían dejado mega abierto mi culito y si me asuste porque ya habían pasado mas de media hora y seguía igual de abierto que cuando terminaron de cogerme.

Oí que entraron y salí para decirles que lo llevaran a la recamara, yo estaba totalmente desnuda y para mi sorpresa mi esposo estaba despierto, estos canijos lo despertaron para que subiera al depa y casi me descubre desnuda, regrese rápido a la recamara y me puse una batita de dormir y ya en eso venia mi esposo con su cara de enojado a la recamara.

Le dije que cuando llegamos el no se quiso bajar y que por eso lo habíamos dejado en el auto, el ya cambiando su cara de enojo me abrazo y me beso, yo estaba todavía lleva de sudor pero gracias a que estaba somnoliento ni se dio cuenta. Y acostándose no tardo ni cinco minutos en comenzar a roncar.

El primo y el burro estaban que se morían de la risa, no podían creerlo que no se habia dado cuenta de la mega cogida que me pusieron, que la casa olía a sexo y que yo tenia un muy fuerte olor a semen, que era algo insolito, que era demasiado despistado o que era muy tonto para no darse cuenta de lo putisima que era su esposa. Yo no supe que contestarles, solo sonreí.

El primo me dijo que el burro se quedaría a dormir en la casa porque quería ver como lo despertaba, yo lo mire y los tres nos soltamos riendo, el burro pregunto que si era cierto eso de que todas las mañanas lo despertaba con una mamada y como buena putita me tragaba toda la lechita, yo algo apenada le dije que si, que era cierto y que pues en la mañana así los iba a despertar a los dos, dándome unas nalgaditas los dos, se despidieron de mi y nos dimos las buenas noches.

En cuanto me acosté me quede dormida, estaba muy agotada y mis agujeritos necesitaban descansar un poco. Por la mañana me despertó el ruido de la tv, mi esposo me dio un gran beso y me dijo que le encantaba verme despertar con esa sonrisa en la cara, yo pensando dije que al parecer así seria por muchísimo tiempo, nos abrazamos y me quede dormida otro ratito.

Una hora después se levantó para irse a bañar, yo como rayo salí de la cama y desnuda fui corriendo a la recamara del primo, ya estaban desnudos y con la verga parada los dos, me acerque primero al primo y dándole una soberbia mamada un cuestión de menos de 10 minutos me trague hasta la última gota de ese manjar, acto seguido me incorpore y me acerque a la cama donde estaba el burro, y de tan solo ver esa enorme y venuda verga me moje todita y también dando mi mejor esfuerzo en menos de 10 minutos ya le tenía su gran verga limpia y yo saboreándome ese rico sabor.

Yo todavía sentía abierto mi culito, pero aun así ese cosquilleo dentro de el no paraba al ver tan buenísimas vergas a mi disposición. Corriendo regrese a la cama y me hice la dormida cuando salio de bañarse mi esposo. Mas tarde me levante y con solo una batita me dirigí a la sala donde ya estaban platicando mi esposo y su primo, el burro se estaba bañando.

Prepare el desayuno para los cuatro, desayunamos todos y mi esposo todavía enojado por que el burro estuviera en la casa se regreso a la recamara y se puso a ver tv. Yo me quede con los dos platicando mientras limpiaba la cocina, obvio que no desperdiciaban ni un momento a solas para meterme mano y hacer que yo se las mamara un poco, hasta el  burro me empino en la barra de la cocina y me cogió, sacándome varios gemidos y un orgasmo que me alegro la mañana con ese rapidin.

Me querían coger por mi culito, pero la verdad les tuve que decir que todavía lo sentía muy irritado,  y empinándome abriendo con mis dos manos mis nalguitas les enseñe mi pobre culito, los dos se quedaron muy sorprendidos al ver lo rojo y abierto que me habían dejado por la mega cogida de la noche anterior.

Me preguntaron que si no tenia alguna pomada para lo irritado, me acorde de una, fui por ella al cuarto y los muy cabrones se sacaron las vergas, se untaron de la pomada y según ellos haciéndome el favor de ponerme la pomada me ensartaron por mi pobre culito.

Fue una cogida lenta, muy despacio pero que me calentó de una forma que nunca y sin importarme nada comencé a ser yo misma la que llevo el ritmo de la cogida, ellos recargados en la barra de la cocian mientras yo solita me ensartaba. Sin importarme comencé a gemir y no tarde en tener un riquísimo orgasmo estando ensartada hasta el tronco del burro, me sentía llenísima, y al sacarla sentía como ganas incontrolables de hacer del baño, pero rápidamente me ensartaba solita en la verga del primo y se me pasaban las ganas, en cambio mi calentura aumentaba.

Creo que estuve ensartándome solita por mas de media hora, ya estaba sudando como animal perono me importaba nada mas que seguir sintiendo hasta lo mas profundo de mi ser ese par de grandes vergas.

El primo me tomo de las caderas y acelero la cogida hasta que me ordeno darme vuelta y no alcance a metérmela en la boca y me lleno toda la cara de lechita, el burro sin darme oportunidad ni de limpiarme me jalo hacia el y cogiéndome fuertemente termino también llenándome la cara de lechita calientita.

Cuando el burro saco su verga de mi culito, me hizo hincarme ante el llenándome la cara de lechita, cuando intente pararme mis piernas no me respondieron, me tuvieron que ayudar entre los dos y en cuanto estuve de pie una gran cantidad de aire, lubricante, semen y hasta la pomada salían de mi culito, no podía controlarlo, ellos se morían de la risa al ver como salían tantos gases se mi culito que hasta me puse a llorar. El burro se puso atrás de mi y sin decirme nada me ensarto de nuevo, sentí como mi culito se llenó de esa enorme verga e increíblemente me sentí contenta, el bromeando decía que de esa forma tendríamos que andar todo el día, hasta me llevo a la puerta de mi recamara, yo la abrí, mi esposo viéndome me pregunto que si todo estaba bien, yo nerviosísima le dije que si, mientras el burro me levantaba y dejaba mis pies al aire, estaba totalmente empalada por el y no se cómo no perdí el equilibrio, volví a cerrar la puerta y con mis pies en el aire caminó por toda la casa.

Me tiro en un sillón, sentía el culo muy abierto e instintivamente abrí las piernas invitándolo a que me volviera a ensartar, el no hizo caso y no fue hasta que se lo pedí por favor que me volviera a meter la verga por el culo, que lo necesitaba, ellos riéndose se acomodó y me ensarto de un solo empujón, yo gemi muy fuerte.

Me la saco y se fue a sentar en el otro sillón, con su mano en su verga la meneaba como incitándome a que fuera yo solita a ensartarme, ni la pensé, me pare lo mas rápido posible y aunque seguían saliendo gases no me importo y rápidamente me monte dándole la espalda. Tuve un orgasmo al llegar hasta el tronco de esa enorme verga, era yo quien subia y bajaba sintiendo cada centímetro de carne que me iba llenando y a lo cual no podía dejar de sentirme llena, sentirme feliz y completa.

Se paro el primo delante de mi, se saco la verga y todavía con el sabor de la pomada me la trague, no me importo nada, ni el sabor amargo de la pomada ni siquiera que mi esposo estuviera a unos metros de nosotros.

Estaba concentrada en el sube y baja de esa enorme verga cuando el primo me tomo de las piernas y las levanto, haciéndome que toda la gran verga se alojara dentro de mi culito, puso mis piernas en sus hombros y apuntando su verga en mi mojada panochita me la fue metiendo. Yo sentía que se me salían los ojos de tanto placer, una enorme verga ensanchaba mi culo a mas no poder mientras otra estaba haciendo el intento de penetrarme. En unos minutos ya tenía las dos vergas alojadas dentro de mi, sentía como el mete saca de la verga que tenía en mi panochita hacia que rozara la que me tenía hasta su mayor esfuerzo a mi culito. Fueron unos minutos que me llevaron hasta el cielo, haciéndome venirme en dos ocasiones abundantemente. Estaba entregada en cuerpo y alma a esos dos machos, si en ese momento me hubieran dicho háblale a tu esposo para que te mire como estas, la verdad yo le hubiera gritado para que saliera a verme, fue tanto mi calentura que accedí a una extraña petición del primo, quería metérmela al mismo tiempo por mi culito, yo solo cerre los ojos, el tomando como un si esa acción saco la verga de mi panochita y con la otra metida hasta el  tronco inicio un titánico esfuerzo por tratar de meterla en un maltrecho culito que ya la verdad no lo sentía.

Cada vez que intentaba meter la punta sentía como se me iba la fuerza, fueron bastantes intentos fallidos, el ya desesperado, tomo pomada y untándosela en toda la punta volvió a arremeter contra mi pobre culito. Fueron unos dos o tres intentos mas, cuando de pronto me entro la punta, se me nublo la vista, perdí el conocimiento momentáneamente, abrí los ojos y vi como sus ojos tenían una mirada como de demonio y en unos cuantos empujones ya la tenia toda adentro. Sentía como me desgarraban mi pobre culito, sentía como si me lo estuvieran abriendo con algo enorme.

El burro gemía en mi nuca y miraba como el primo se ponía rojo del esfuerzo que estaba haciendo por mantener su verga dentro de mi culito, yo la verdad no sentía nada, el dolor fue tan fuerte que ya no sentía nada, no sentía mi cuerpo. Solo sentía como la pelvis del primo chocaba contra mis nalgas y como poco a poco fue aumentando el ritmo hasta hacerme desmayar al sentir las dos enormes vergas dentro de mi, perdí totalmente el conocimiento.

Desperté y estaba acostada boca abajo en el sillón, sentía como mi pobre culito palpitaba y lo sentía al rojo vivo. Estaba los dos parados viendo el espectáculo que les ofrecía,  tenían una sonrisa malévola, yo sin poder decir nada solo les di una sonrisa tierna, como de una niña que le acaban de dar el mejor regalo de su vida.

Trate de pararme pero mis piernas no me respondían y el dolor era insoportable si trataba de sentarme, con ayuda de los dos me llevaron al baño y pude descansar un poco sentada en la taza, pero sentía que se me iba a salir todos los intestinos, no podía apretar nada y me asuste demasiado por no poder controlar mi esfínter.

Les pedí que miraran mi destrozado culito, ellos ayudándome a levantar me empinaron en el lavabo y yo con mucho cuidado y dolor abrí mis nalguitas y solo oí sus exclamaciones que no podían creer como me había quedado. Estaba totalmente rojo, inflamado y abierto a su máximo. Para darme la idea de que tan abierto lo tenía metieron el mango de un desarmador, lo movían y yo sentía como al moverlo tocaba una parte de mi ano y después se despegaba para pasar a tocar el otro lado. Me imagine de abierto a mi culo como una campana y el desarmador era el badajo. Me dieron varias nalgadas muy fuertes, según ellos para que el rojo de mis nalgas hicieran juego con el rojo de mi culo destrozado. Salieron los dos muy contentos por la gran hazaña que habían logrado en mi, me quede un buen rato empinada en el lavabo, sentía como el aire entraba hasta mis intestinos y por mas que intentaba apretar mi culito para que se cerrara no lograba nada.

Me metí a bañar y el agua calientita logro mitigar un poco esa rara sensación de mi culo abierto, no se cuánto me tarde, hasta que mi esposo fue a tocar la puerta y a preguntarme si todo estaba bien, le conteste que si, que me había quedado muy a gusto disfrutando del agua, e inconscientemente una de mis manos comenzó a jugar con mi clítoris, me masturbe tan rico que tuve dos orgasmos indescriptibles ya que cada vez que me corrí no pude apretar mi culo aunque lo intente y eso me llevo a tener unas descargas de energía las cuales casi me hacen caer al sentir como se doblaban mis rodillas, pero aun a pesar de sentir tanto dolor en mi ano salí de la regadera con una enorme sonrisa la cual no se me quito por varios días.

Lo que hicimos el siguiente fin de semana se los cuento después…….mil gracias!!!!!!