La Esposa del Paralítico, no es mujer de piedra

Al final paso a detenerme en esa hermosa masa de carne, en esas fabulosas nalgas; “que locura de nalgas, ummmm dios, no me merecía tanto

la Esposa del Paralítico, no es mujer de piedra.

Bueno esto sucedió hace tres semanas atrás.

Fui a la casa de un amigo de colegio, de quien tuve noticias que había sufrido un accidente durante su trabajo, en verdad no tuve conocimiento que tan grave era la situación de mi amigo, solo tuve noticias que estaba en su casa bajo al cuidado de su esposa, así que llegado el día fui a su casa.

Al llegar a su casa me atendió una dama muy elegante de unos 29 años de edad, unos años menor que mi ex compañero de estudios. La salude y pregunte por Juan mi compañero de estudio, ella me dijo que si se encontraba y luego preguntó que quien era yo, bueno le respondí que era un compañero de estudios de Juan y que me había enterado por otro amigo que él estaba enfermo y viene a visitarle, bueno pasa me invito a su sala.

Al entrar a la sala percibí un ambiente hogareño, me percate en la elegancia de esta dama, quien al parecer trabajaba de ejecutiva en alguna empresa, bueno ingresé al recinto y esperé un buen rato solo en la sala, observando algunas cosas de la mesa de centro, una ojeada a alguna revista por ahí, me entretuve en las páginas del magazín , que no me permitió percatarme del regreso de la dama quien me avisó que pase que Juan estaba listo para recibirme; al ingresar esperaba encontrar a mi amigo conciente o en capacidad de reconocerme, pero ingrata fue mi sorpresa cuando me di cuenta que Juan el amigo de antaño ahora estaba en estado vegetal, no supe que decir, la imagen me impresionó muchísimo pues en verdad, no me esperaba que tan mal fuese el estado de mi viejo amigo, bueno lo único que atiné a preguntar fue, si el podía oírme y entenderme, a lo cual su esposa me dijo que sí, que sí y que me respondería con un movimiento en los ojos.

Me acerqué y le pregunte si me reconocía, cerró los ojos, a lo que la dama me dijo que si, que si me reconoce, luego le pregunté, si deseaba estar solo, a lo que el cerró los ojos dos veces, la dama me dijo que eso significaba que no, luego de entender las señales, entable un monologo con mi viejo amigo, a lo que el respondía con un si o un no, me sentí mal en ese momento, pues en verdad fue impactante encontrar así a un amigo con quien años atrás solíamos conquistar alguna que otra dama, un joven lleno de energía y me imagino que fue un buen amante alguna vez, ya que tenía muchas pretendientes.

Luego de un par de horas de pasar junto a la cama de mi amigo, me despedí indicándole que vendría a verlo, a lo que el cerro los ojos lo cual indicaba que aceptaba mi propuesta, salí de su cuarto y me quede conversando con su esposa un rato más, ahí me enteré que Juan había perdido los sentidos y el movimiento luego del accidente en el trabajo, pues una maquina golpeó su cabeza y lo dejo inconsciente por más de 10 horas, cuando al final despertó no pudo moverse. Ella me dijo que esta situación estaba así desde más de cuatro meses y los médicos le habían indicado que no quedaba otra que resignarse o esperar un milagro para que el salga de esta situación.

Finalmente me despedí de aquella dama, quien ahora se encargaba de todos los cuidados de mi amigo, en el camino iba recordando aquellas experiencias que pasamos de jóvenes con Juan, muchas locuras interminables, muchas cosas que nos hizo identificarnos, pensábamos que la vida de jóvenes sería eterno, cosa que ahora el tiempo se encargaba de demostrarme que no es así, recordé que mi amigo tenía una fama de ser buen amante, y me puse a pensar ahora en su mujer, en como estaría pensando esta nueva etapa con el marido en ese estado y ella muy joven, en fin pasaron muchas imaginaciones por mi cabeza al punto que la recordé y me di cuenta que aquella era una gran hembra.

La siguiente semana cuando fui a visitarlo, salió la esposa de Juan con ropa algo más hogareña, es decir con una falda por la rodilla, de tela muy ligera, y con una blusa de botones color floreado – luego me percate que este era la forma de vestir dentro de casa -, la falda era de color negro. Bueno me invitó a pasar rápidamente, y me dijo que Juan se había quedado dormido, y si gustaba esperar a que despierte tome asiento, acepte, y nos sentamos en los muebles de la sala, ahí empezamos a platicar sobre ella, sobre como conoció a mi amigo sobre su época de enamorados, me dijo que lo conoció por medio de una amiga, quien al inicio salía con Juan, pero era muy celosa, así que Juan encontró en ella una amiga, posteriormente una compañera; en cuanto a la etapa de casados y a la vida conyugal me dijo que el era muy galante y muy apasionado con ella, cosa que ahora extrañaba, le respondí que imaginaba como lo estaba pasando, lloró un poco por lo sucedido, y bueno que al parecer Juan con respecto a mi le había hecho conocer de algún modo que yo fui uno de sus mejores amigos en los años de su soltería, a lo que ella me dijo tu ya lo conoces a Juan, que debía de saber cuanto ella lo extraña, y cuanta falta le hace, a lo cual le dije, si me imagino.

Ella se paró y se fue a ver si Juan estaba despierto a lo que me dijo que no, que seguía dormido, la recamara de Juan era muy distante a la sala y de seguro no sentía la platica que llevamos con su esposa en la sala. Me despedí y desde ese día empecé a frecuentar más seguido a Juan, bueno a la esposa de Juan. Mis visitan ya no era tanto de día lo hacía más seguido de noche, cada vez la confianza con Flor, la esposa de mi amigo, era más fuerte, incluso llegamos a platicar sobre secretos de su esposo y secretos míos durante nuestra época de jóvenes, bueno considerando que joven para mi es de 20 a 25 años, ella por su parte me contó que siempre se consideró una chica de su casa y ahora una esposa muy hogareña, me dijo que era abogada, que bueno por casualidades de la vida se enamoró de un ingeniero como lo es Juan, ella comentó que consideraba ser la mas sería de en su relación conyugal, que Juan era muy alegre que le gusta reuniones y bailes, eso no le agradaba de él, asimismo no dejo de mencionar que Juan fuera un tipo muy responsable, lleno de proyectos y que en la intimidad le enseñó mucho sobre lo que es el placer del sexo; bueno cuando llegamos a ese tema, yo me sentí mal, pues, en verdad me excitaba de alguna forma, saber lo muy afortunado que fue mi amigo al involucrarse con una chica de su hogar, de seguro que la pasó muy bien la noche de su luna de miel, no cabía duda de que el fue y es el único hombre en su vida.

Ya llevaba varias semanas frecuentando a mi amigo, cuando decidí ya no entrar mucho a su recamara, le dije a su esposa que era mejor que no ingrese a la recamara ya que puede sentir celos de mi presencia, a lo que ella accedió y nos quedábamos en la sala platicando, ella ingresando de rato en rato a verlo para luego continuar largas charlas en la sala, cada vez los temas eran más amenos, incluso pasaba más horas con ella que con mi amigo, llegando al punto que ingresaba a la recamara una vez a la quincena.

Cierto día se me ocurrió llevarle un par de videos para ver mientras ella atendía a Juan, pero al ingresar a la tienda de ventas de videos, me tentó por llevarle uno donde hay algo de morbo, que lo había visto años atrás y era muy excitante, bueno me decido al fin y lo compro, al llegar a casa de Juan ya era casi las 10 y media de la noche, al inicio pensé en regresarme, pues dije que me tomaría a mal mi iniciativa, en eso que ella sale con una bolsa de algo y me observa, hola, le dije a lo que ella me respondió el saludo, diciéndome que pasaba porque estaba ahí parado, bueno le dije, que había ido a visitarla y bueno pensé que era muy tarde y estaba por retirarme, a lo que ella me dice, no, no es tarde, hoy es fin de semana y sabes que mañana no laboro, bueno entonces, entonces pasa me dijo, al ingresar lo primero que hice fue preguntar por Juan, ella me dijo que el estaba dormido, duerme mucho, y bueno igual no se sabe si esta dormido o despierto, bueno y me dijo que tal que, que es lo que me llevaba a visitarla hoy viernes, bueno le dije, que pasé por un tienda de videos, y traje uno al azar para ver si te animas a verlo, ella me dijo de que es, a lo que respondí, que no sé, que no tenía ni la menor idea, solo que el titulo me llamó mucho la atención, se llamaba, LAS EDADES DE LULU, que en fin si gustaba lo veíamos si no platicábamos un rato y pasaba a retirarme, a lo que ella respondió, bueno, lo ponemos entonces.

A media parte de la película noté que estaba muy concentrada, no me quise aprovechar de la situación, le dije que se me hizo tarde y que le dejaba viendo el video, que yo lo vería en mi casa mañana, a lo que ella acepto, al parecer quería ver el desenlace sola, y eso era lo que yo deseaba, que se excite sola, para cuando llegado el momento tanto agua no podría caber en ese cántaro.

A los días, fui a verla, por la tarde, llevé un regalo para mi amigo, le sacamos a pasear, antes de eso, le pregunté si el deseaba, a lo cual asintió con la mirada, aquel día fue especial, ya que note algo de alegría en mi amigo, le afeite, le puse una gorra deportiva, un poco de colonia y una camisa que le regalé, yo estaba seguro que si le gustaría usar esa camiseta, como los viejos tiempos, le puse sus lentes negros.

Al finalizar la tarde me despedí de Flor, pero esta vez en su mirada, noté algo como que no deseaba que me vaya, como invitándome a quedarme. Entonces le dije:

oye, una consulta,

sí, me dijo,

¿no te sientes sola por las noches?,

hubo un largo silencio, me pareció que la noche se había tornado eterno y que el tiempo se detuvo luego de haber hecho mi interrogante, pasaron miles de ideas por mi cabeza, como que soy un tonto por preguntar eso, como que ahora me avienta la puerta, o quizá un ligero, sí, que me indique que ella al igual que yo, había empezado a sentir esto que es la magia del gusto por lo prohibido, esto que es el deseo de experimentar con lo negado con lo vetado para nosotros, cuando en eso oigo un SI, no quise quedarme callado, me acerqué y cogí su delicado rostro y la tire asía mi lado, noté que cerró los ojos como dejándose llevar por lo que estaba pasando, le impregné un beso algo tímido en un primer momento, para luego al ver que respondía, le di uno segundo, pero este fue mas apasionado, que me pegue a su cuerpo para que sienta como me tenía aquella dama que tanto me excitaba.

Ella se dejó llevar, no sé si era por el tiempo que andaba sin sentirse amada, o si era porque en verdad le gustaba, simplemente no lo pregunté y me dediqué al momento, a vivirlo lentamente pero bien disfrutado. En eso que la empujo dentro de su sala, cerramos la puerta, y mi mano se poso sobre su cintura, nos prendimos en un largo beso, donde nuestras lenguas jugaron y se mezclaron producto del fuego que se desataba entre la mujer de mi amigo y este servidor. Mis manos cobraron vida y me olvide de ese detalle por ese lapso de tiempo, simplemente éramos un varón y una dama, que estaban a punto de entregarse mutuamente por completo presa de la pasión que se desataba en el aposento que albergo estos últimos años a esta pareja que por causas del destino eran presa de la circunstancias, y ella era presa del deseo.

Como ella llevaba una blusa de botones, lo desabroche a la vez que acariciaba esos senos, en verdad, hasta ese momento no tenía idea de cómo serían, pero cuando por fin lo tuve a la vista, pude percatarme que era una maravilla de senos, era de una dama blanca, con pezón rozado, pecosito, muy duro, me imagino que esto se debía a que ellos aún no tenían hijos, entonces empecé a succionarlos, muy lento al inicio, produciendo en ella efecto de placer, ya que empezaba a dejar pequeños gemidos de placer, en ese momento, ella era simplemente una hembra, una hembra cuyo cuerpo deseaba esto, deseaba ser gozada, hace mucho que no sentía una lengua jugando con la punta de su pezón, hace mucho que no acariciaban de esa forma su senos, hace mucho que no le daban esos besos apasionados por todo el pecho y el cuello, mmm , que aroma, que placer sentía en esos momentos, nos olvidamos los dos por completo quienes éramos, ni nos importó que Juan pudiese oírnos, simplemente éramos presa del deseo, de la pasión y lo que haríamos sería apagar el fuego que tanto a ella como a mi, nos estuvo consumiendo.

Nos dirigimos a una habitación, era el de ella, cerramos la puerta y ahí, la desnude por completo, en verdad, era una hermosa hembra, tenía un cuerpo espectacular, no quise que esto acabe solo en verla así que la tumbe a su cama, y la devoré de los pies a la cabeza, me detuve en cuanto lugar se me permitiese, mis besos fueron fuego para esa piel llena de deseo, por donde lamía, ella emitía un gemido de placer, hasta que por fin quise dedicarme a lo que tanto deseaba, su vagina, ya para esto era una vagina humedecida, era una vagina rosadita, con bellos castaños, de labios muy grueso, mmm que delicioso describirlo, en verdad, era una vagina digna de ser comida, en cuanto le di el primer beso, pude sentir el estremecer de su cuerpo y el venir de uno de sus primeros orgasmos luego de varios meses de vivir enterrada en el cuidado de su marido, en ese momento ella era solo mía, no existía él, éramos los dos.

Luego del delicioso sexo oral que le brindé, ella me pidió que se lo meta, que ya no aguantaba más, así que aprovechando la oportunidad, le di vuelta, poniendo ese hermoso rostro boca abajo, acomodando su cabello para verla por un costado de su hombro, en eso desciendo por su espalda besando cada parte de su espalda, al final paso a detenerme en esa hermosa masa de carne, en esas fabulosas nalgas; "que locura de nalgas, ummmm dios, no me merecía tanto", era un culo digno de ser filmado, lo bese, lo separe un poco e introduje mi lengua en ese agujerito, al parecer eso no le afectaba a ella, en fin creo que ella, era en ese momento otra, no era la abogada delicada que había conocido semanas antes, simplemente era una mujer más, era una dama deseosa de ser amada de ser gozada y valla que manera de entregarse, era un entrega por completo.

Disfrute tanto lamerle el ano, que mi pene lo tenía para ese momento a mil, entonces sin contenerme mas, me eche sobre su espalda, besando su hermoso cuello y besando sus labios de esa posición, acomodé mi miembro a la entrada de su ano, valla, que lo había dejado tan preparado, y tan dilatado, que bastó empujar para que mi miembro ingrese, al inicio note que mordía los labios, luego abrió la boca algo así como queriendo sacar la lenguita, un gemido de placer con dolor, mmmm si que fue bueno, ese instante, era una fiesta para mi pene, ingresar así tan fácil, quizá a un agujero, que hace mucho no recibe una visita de este. Empecé a moverme con el clásico mete saca, cada envestida lo hacía con algo de malicia, pues ahora recordaba que era la mujer de mi amigo, que era la abogada, que era la chica sería que me recibió la primera vez, cada envestida le metí mas sadismo que el otro, apretaba sus senos, introducía al mismo tiempo mi lengua en su boca abierta por el placer, comía su deliciosa lengua que salía, aún no entiendo porque, en fin, era mi perra, le susurré al oído, " hace mucho que deseabas una cogida como esta no es verdad ", a lo que ella me respondió, " siiii, me coges como a Juan le gustaba coger, siempre le gusto coger por ese hueco, ese era el hueco por donde más disfrutábamos los dos, no te imaginas, mmm me vuelve loca, me gusta que me lo hagas por ahí, me siento como tu perra, me siento como que no soy nada, me siento una puta " dicho esto, hizo que acabara dentro, seguí moviendo creyendo que así disfrutaría más a lo que ella me dijo, mmm no sabes como lo disfruté, no te imaginas, ,, nos besamos y nos dormimos en su habitación hasta el día siguiente.

Esta historia continuara.

Espero sus comentarios. Si eres dama, y te sientes identificada con el personaje, no dudes en hacérmelo conocer, desearía saber ¿qué sentirías al coger en la misma casa donde esta tu esposo?. Besos a todas, escríbanme a leotodo1@hotmail.com