La energía erótica

LA ENERGÍA EROTICA

Cada oportunidad que la vida nos presenta de conocer personas y en especial nuevos compañeros o parejas, si es que, este apelativo puede ser usado para las relaciones post modernas es un don.

Hasta la fecha puedo decir que la fortuna ha sido benévola, en mi caso ha habido mas miel que hiel, siempre he pensado que la fuerza interior se encarga de atraer a todos aquellos con quienes se desea compartir sea una amistad o una relación que abra camino la compañía, el respeto, la pasión y el sexo, que puede ser llamada por cada quien como mas se acomode.

Siempre para mi el sexo ha sido un placer, eso aprendí desde la primera vez hace años, desde aquel momento delicioso, cada encuentro sexual para mi es una lucha por llegar al éxtasis y en manos de mi compañía está que la batalla resulte placentera.

Estoy convencida de que el máximo placer sexual se ata a la conexión de espíritus ardientes de deseo, supera el simple coito y se convierte en un espacio de intercambio de energía si se quiere llamémosla energía erótica.

La energía erótica de cada ser es diferente y se proyecta de diversas maneras, y es por eso que en lo que a sexo se refiere, las prácticas varían desde las mas puritanas hasta una diversidad de practicas que en su mayoría se consideran parafilias y vaya lista que se podría hacer, serían como haces de luz proyectados en un prisma, yo creo que si somos estrictos con el tema todos, así creamos ser seres convencionales, siempre hemos disfrutado o en palabras de pacatos hemos asumido algún patrón sexual parafilico.

Aunque se que estoy lejos de ser alguien con grandes ideas a la hora del sexo, creo que no por eso me salvo de entrar al grupo de aquellos que tienen placer sexual por cuenta de alguna parafilia en sentido extenso y no en estricto sentido.

El sexo y el placer que se obtiene en su ejercicio tiene varios tópicos que en mi criterio crean la atmósfera para lograr un orgasmo en pareja, aquí aclaro que no he vivido experiencias sexuales grupales y no puedo referirme a ellas ni bien ni mal, y no se si algún día llegue a vivir una orgía o situación parecida.

Por ahora para mi el sexo es entre dos personas en mi caso sexo heterosexual, es un acto intimo de comunicación, goce, contacto de piel y tacto.

Creo que la piel es el órgano que nos facilita obtener la mayor parte del éxtasis sexual, ella trasmite frio, calor, deseo, ella refleja cada estremecimiento y devuelve cada sensación a la piel del otro.

En general la estimulación durante cada encuentro sexual tiene su origen en la piel y el tacto, creo que si se está con alguien que nos despierta deseos y pasiones el primer paso al placer es el tacto sobre la piel, un beso, una caricia, un abrazo, y a medida que se va llegando al climax los contactos van explorando mayores espacios del cuerpo, pecho, espalda, cuello y genitales.

Debo confesar que para mi es mas erótico y deseable un compañero sexual que conozca mi debilidad en la piel y se aproveche de ella para conseguir mayor placer sexual cada vez que estamos juntos, que el compañero que se remite exclusivamente al coito puro y duro.

Cada centímetro de piel que puedo sentir en un encuentro sexual para mi es una ruta que me conecta con el deseo de mi compañero, el sudor, el rubor, el estremecimiento como manifestaciones externas del placer elevan mi libido hasta escalas de éxtasis que pueden ser casi comparadas con el que se obtiene al vivir un orgasmo.

Confieso que incluso muchos de los orgasmos que he vivido en mi vida, están mas relacionados con la sensación de placer que me produce el contacto natural del sexo con la pareja, pues la desnudez pone en contacto el cuerpo y el alma, y debo decir que un orgasmo en mi concepto mas que una simple sensación de placer físico, es una situación en la que las sensaciones y sentimientos se convierten en algo único, se supera el ámbito físico y el placer nos invade a raudales y resulta tan intangible que por momentos creo superamos la humanidad y logramos ser etéreos despojándonos de todo lo que nos hace simples cuerpos con conciencia e inteligencia.

Por eso digo que el sexo es un intercambio de energía erótica, pues no concibo un orgasmo meramente físico sino un orgasmo que nos despoja de la simple cópula y nos hace participes de la energía del universo.

En muchos casos puede ser que simplemente haya un mero intercambio sexual, pero el sexo que llega al orgasmo en pareja esta más allá del ejercicio de la inclinación sexual de cada individuo al intimar con otros individuos que le resultan atractivos.