La dura señora Leclerc 12ª parte

Me entregaron a un perrohttp://www.todorelatos.com/admin55/admin.newrecords.php?del=1&deldummyid=121072

LA DURA SEÑORA LECLERC

12ª PARTE

Por fin acabaron todos de cogerme y tocarme. Estaba terriblemente sucia de semen y flujo en mis agujeros y partes de mi cuerpo. Una mujer, me acomodo el corto vestidito de novia y el tul. Me llevaron hacia el centro del salón, que raramente estaba oscuro. De pronto todo el salón se oscureció e inmediatamente se encendieron potentes reflectores para filmar. Iluminaban todo un escenario que había armado en el centro del salón. Tenía una altura de 0,70 centímetros de alto aproximadamente. En el centro del escenario se veía un armado de metal, que desde donde  estaba no podía precisar.

A los tirones me subieron y tenía que habituar mi vista a tanta luz. Me acercaron al armazón de metal y me ataron a el, bien fuerte mis dos piernas bien abiertas, exponiendo mis agujeros a la vista de todos. Reclinando un poco mi cuerpo mis manos fueron atadas a unas argollas que estaban sujetas en el suelo. Una tabla cruzaba delante mío a la altura de mi estomago, impidiendo me pudiera deslizar hacia delante.

A mí alrededor todo era fiesta, bebidas. Yo estaba sola en ese escenario, atada, casi no poder moverme, con reflectores que me iluminaban constantemente y me estaban haciendo transpirar una barbaridad. Había cuatro o cinco cámaras todas enfocándome a mí.

De pronto se hizo el silencio, pasaron varios segundos y apareció Carlo con un enorme Gran Danés. Cuando lo vi me quería morir, no podía ser que me hagan coger con un Gran Danés. Vino Patricia y acerco su cara a la mía.

PATRICIA: bueno perra, llego tu hora de ser una autentica perra.

DIANA: no te atrevas, Patricia

PATRICIA: que no me atreva? Sabes en la condición que estas acá. Todos los presente, ya lo viste te odian de hace años, por como eres, perdón eras. Ahora eres una simple perra. Tienes 6 cámaras para lucirte.

DIANA: no lo hagas Patricia.

PATRICIA: ya es tarde. Todos queremos verte coger como una perra, que llores, que implores, que sientas lo que es el dolor y la ser mancillada por un perro, como vos perra usaste y te reíste de todos nosotros. Llego la hora de la venganza

DIANA: por favor, te lo ruego Patricia no lo hagas

PATRICIA: ahora tienes sentimientos y ruega. Jodete!

Hizo una señal y empezó todo.

Con una cadena larga y fina ataron al perro al suelo. Carlo soltó la cadena y el perro, parecía querer mirar la gente que había. De pronto olfateo algún olor en el aire, supongo serian las mezclas de semen, flujos y orín que lo atrajeron hacia mi. Me miro y se acerco a mí. Yo estaba aterrada. Sabia de videos y había visto alguna vez perros con mujeres. Sabía también de la bola y que podía quedar pegada a él un largo rato y eso me asustaba. Se fue acercando y saco su larga y fina lengua comenzando a recorrer mi culo y mi concha. Fue infernal sentir esa lengua fría y rugosa pasar una y cien veces por mis agujeros, mientras las cámaras filmaban todo. Primero fue la lengua fría, luego el tiempo y la velocidad que la pasaba. En momento dejo de hacerlo  y se acerco detrás mío. Sentí sus patas delanteras en mi cintura y lo vi que se ponía en dos patas, su respiración fuerte. Se paro en la puerta de mi culo e intento varias veces penetrarlo sin éxito. Luego de varias intentonas metió en mi culo esa tremenda tripa con la punta roja y salvajemente entraba y salía de mí. Los gritos que pegaba yo era descomunales y todos estaban felices de mi sufrimiento.

Sentí mi culo como queriendo expandirse y entro la famosa bola. Mi grito fue desgarrador. Todos en el salón aplaudían a perro, que se quedo quieto como dormido sobre mi espalda. Sentí sus baba caer en mi espalda y sentí también que estaba su pija acabando dentro mío, mientras un hilo de su semen, salía de mi culo. Llore como hacia años, no recordaba, la cara eran sol muestras de dolor. Y asi quedo colgado un largo rato, hasta que la pudo sacar, produciéndome más dolor. Sentía el semen de él salir de mi culo y recorrer mi concha y deslizarse por mis piernas. Me dolían las piernas por aguantar  los empellones de del perro.

Una vez que la saco chorreando. Patricia tomo el micrófono.

PATRICIA: todavía tengo erizada la piel, por lo que vimos. Un gran danés haciendo suya a una nueva perra. Les pido a todos que mañana hagan llegar vía mail, los posibles nombres que les gusten para bautizar a la nueva perra. Ahora llévenlos a su nuevo hogar.

Tanto al perro como a mi nos llevaron a un jaulón, que según dijeron era nuestro nuevo hogar. Era bastante espacioso.

Ahí seguro el perro seguiría abusando de mi.