La dominación de Cristina (3)

El rasurado y bautizo de mi hermana como sumisa.

La Dominación de mi hermana cristina 3º capitulo

Los dos días siguiente, antes del fin de semana, fuero normales Javier no estaba y nuestros encuentros eran esporádicos, en la cocina, en la sala, o en el cuarto de estudios. Momentos que yo siempre aprovechaba para comprobar la ausencia de ropa interior y a ponerla un poco caliente, y cada vez que coincidíamos en la salita, ella procuraba ponerse en frente MIA para mostrare sus entrepiernas.

Por otro lado, yo seguía MIA averiguaciones y búsqueda de información cosa que iba bien avanzada, ya había conseguido un pequeño manual de instrucciones y otro de posturas básicas, también había leído sobre el afeitado del sexo en las sumisas, cosa que me excito en extremo, esa iba ha ser la sorpresa del fin de semana, ya que de momento no quería desvirgarla (reconozco aun estaba verde para conseguir esa entrega total de Cristina) compre cuchillas, y crema de afeitar. El sitio, bueno eso no era un problema, ya tenia un piso comprado cerca de nuestra ciudad, en una zona residencial de veraneo, y como mi novia no tenia coche, sabia podríamos estar allí sin peligro alguno, encima era invierno, tenia asegurado la zona estaría semi-desierta.

Por fin llego el sábado, lo tenia todo preparado. Cristina saldría 20 minutos antes que yo y me esperaría una manzana mas adelante de la casa de nuestros Padres. Yo había dejado todo preparado en el maletero del coche, salvo una gabardina de color marrón de 3/4 que deje en el sillón de atrás junto a unas medias Negras.

Salí a los 20 minutos y como habíamos quedado estaba en una esquina una manzana mas adelante, pare el coche y ella subió en la parte de atrás y continué la marcha, indicándole lo que deseaba que hiciera.

Yo.-cuando salgamos de la ciudad quiero que te desnudes y pongas esas media     que ves ahi y la gabardina.

Cristina.-Si Señor, ....Perdón Señor, ¿puedo subir la persiana de los cristales?

Yo.- ¡ N O ¡

Dicho eso se quedo callada, con la cabeza cabizbaja, sentada en medio del sillón trasero y con sus piernas bien abiertas. Yo acomode el retrovisor del coche para poder verla cuando se desnudaba, ella se apercibió de eso y me sonrió, con una sonrisa de cómplice.

Salimos de la ciudad y no tuve que volver a repetir mi orden, ella comenzó a quitarse la ropa, llevaba un yérsey gordo de lana color verde, con el cuello vuelto, prenda que saco por la cabeza, de manera que me regalo una preciosa vista de sus pechos, y a continuación se saco la falda y quedo en pelotas (que horrible se me antojo ese coñito con tanto pelo....), tuvo que ponerse de costado hacia un lado de una de las puertas para poder comenzar a ponerse las media,

Yo.- Cristina apóyate mejor en la puerta de la derecha, esta cerrado el cestillo      y estarás mas segura.

Cristina.- Pero Señor, de ese lado me verán los coches que vienen en dirección            contraria.

Yo.- ¿Y.....?

Cristina.- Nada Señor, perdone lo haré como el Señor sugiere.

Seguido hacia la otra puerta y se puso las dos medias, lentamente como queriendo regalar la vista a los demás, esperando yo le dijera que fuera mas rápida, cosa que por su puesto no estaba dispuesto ha hacer, termino y fue a ponerse la gabardina.

Yo.- No te la pongas todavía, espera que lleguemos a la gasolinera del      desvió.

Se volvió a poner de nuevo en el medio del sillón, con las piernas abiertas y con la cabeza bien apoyada en el respaldo, como queriendo esconderse de las posibles miradas. Pero ofreciéndome a mi todo un espectáculo de su hermoso y joven cuerpo.

Llegamos a la gasolinera y unos metro antes le permití ponerse la gabardina nos desviamos hacia la playa en seguida llegamos a la Urbanización entramos al garaje y aparque el coche y nos quedamos un momento en silencio.

Yo.- Puedes salir del coche ponte junto a la maleta.

Cristina salio del coche y se dirigió al maletero, yo baje a continuación y abrí la maleta, había comprobado como yo ya imaginaba el edificio estaba vació por la ausencia de coches en el garaje, axial que solté los botones de la gabardina de Cristina y también el cintura.

Yo.- Coged esas 3 bolsas y sígueme.

Cristina.- si Señor.

Cojeo las 3 bolsas y yo un maletín, cerré la maleta del coche y nos dirigimos hacia el ascensor que nos llevaría a mi casa. Durante la subida (once pisos), Cristina no pronuncio palabra, estaba con la miraba baja y se le notaba en la respiración un

cierto nerviosismo.

Llegamos al piso, abrí la puerta, entre y ella detras mia, cerro la puerta.

Yo.- Pon las bolsas en el suelo, quítate la gabardina y cuélgala en el perchero.

Cristina.- Si Señor, en seguida.

Soltó las bolsas en un lado y se quita la gabardina y se dirigió a la entrada para colgar la gabardina, era la primera vez que podía contemplar su cuerpo totalmente desnudo, y joder...mi hermana tiene un hermoso cuerpo (pensé para mis adentros).

COI de unas de las bolsas un par de zapatos de tacón de aguja que había comprado para ella y se los di.

Yo.- a partir de ahora y cuando estemos solos, estos serán los zapatos que usaras.

Cristina.- Si Señor, muchas gracias Señor

Diciendo esto cojeo los zapatos que lo le ofrecía, fue a sentarse en una silla para ponérselo

Yo.- No te he dado permiso para sentarte.

Cristina.- (poniéndose un poco nerviosa) Pero Señor, como debo............ya, comprendo Señor,           disculpe mi torpeza.

Se saco los zapatos que llevaba, ayudándose solo de los pies, puso los otros zapatos en el suelo

coloco primero su pies derecho sobre el zapato, y después se puso en chanclilla para atárselo, de manera que quedaba con sus piernas abiertas mostrando todo su coñito. después se puso de pie y repitió la misma operación con el otro pies.   Como ella es alta y delgada, la vista de su cuerpo con esos tacones ganaba mucho jejejej.

Procedí a abrir el maletín del que saque unos papeles, primero le ofrecí un contrato de sumisión con una entrega total, en el que ella se comprometía a no tomar dediciones, ni hacer nada en su vida, sin mi consentimiento.Por otro lado le marcaba sus deberes y obligaciones para con su Amo para que la relación fuera lo mas grata para ella.

Yo.- Puedes leer, y una vez leído dudes acercarte a la mesa y firmar el original y la copia

Se los di en la mano, y yo me dirigí hacia el salón y salí a la terraza, la vista era esplendida un onceavo piso con vista al mar y a una playa completamente vacía. Encendí un cigarrillo y me senté en la terraza observando como cristina parada, sin mover un solo músculo del cuerpo, leía atenta lo que le había entregado. Tras 10 minutos, me miro y se acerco a la mesa, apoyo los papeles copio el bolígrafo y firmo uno a uno todos los papeles.

Cristina.- Ya esta Señor.

Yo me hacerse de nuevo a la mesa, cocí los papeles y los metí en la maleta, que cerré con llave. sobre la mesa había un dossier sobre posturas sexuales, lo coja y se lo mostré.

Yo.- estas posturas axial como el nombre de cada una, debes aprendértela de memoria y practicarlas como la chica de la      foto.

Cristina.-Si Señor, gracias lo haré.

Deje el dossier en la mesa de nuevo

Yo.- como has podido leer en tu contrato lo primero que vamos ha hacer, es que desaparezcan esos      pelos de tu coñito. Porque quedan horrible no te parece a ti?

Cristina.- Si Señor, tiene usted toda la razón.

Yo.- por esta vez, y solo para demostrarte como debes tenerlo, tu Amo, va a hacerte el rasurado

Cristina.- gracias Señor.

Yo.- axial que no perdamos mas tiempo, ve al cuarto de baño principal siéntate en el bidet y espérame

Cristina se dirigió al cuarto de baño, mientras yo busque la bolsa donde estaban , la maquinilla eléctrica, la cuchilla y la crema de afeitar ( la había comprado con mentol, me imagine, la haría excitarse mas...). Tarde un rato en llegar al baño. Cuando llegue  estaba ella sentada en el bidet con sus piernas bien abiertas, y un brillo en sus ojos porque sabia iba a tener lo que mas deseaba en la vida, la primera oportunidad de complacer a su Señor.

Conecte la maquinilla eléctrica y puse el corta patillas, para acelerar el corte del pelo mas largo en 6 pasadas, ya la situación había cambiado, los labios se comenzaban a ver..

Yo.- date la vuelta y limpia con el agua tu coñito, para poder poner la crema y terminar el depilado

Cristina se lavando y giro, para de nuevo sentarse, esta vez mirando a la pared, podía ver su lindo culo, bien redondo y bien abierto, mientras comencé a oír correr del agua. Termino y se volvió a girar.

Yo.-Dame la mano

Cristina extendió su mano, y yo aplique una buena cantidad de crema sobre ella.

Yo.- unta bien tu coñito y todo lo que tenga pelo.

Cristina embadurno bien su coño y todo su pubis con la crema, y cuando iba a agacharme para comenzar, pude ver como su rostro cambiaba, la crema estaba  haciendo su efecto jejejejeje. comencé mi trabajo de rasurado, y note como poco a poco su respiración se agitaba, axial que pase un dedo por los labios mayores, presionándolos un poco, se notaba la humedad del agua y la secreción de su coñito, estaba súper excitada...pero no le di mas importancia, y continué mi labor.

Yo.- Bien ahora lávate bien y sécate y ven a salón.

Me fui al salón y cogí una de las bolsas y me senté en el sofá a fumar un cigarrillo, mientras venia mi sumisa.   Cristina llego por el pasillo, bien coqueta y luciendo su cuerpo, sabiendo que la estaba mirando se paro frente a mi, lucia ahora bien bonito su coñito depilado, solo le había dejado un mechoncito de pelo justo en el comienzo de su rajita, a modo de colita de conejo, sus labios se veían ahora jugosos y carnosos y su clítoris se asomaba tímido entre sus labios mayores.

Yo.- ponte a 4 patas como la perrita que deseas ser y ven a mi

Cristina se puso a 4 patas y muy despacio, cuidando no lastimar sus rodillas camino hacia mi, yo saque de la bolsa un collar, se lo enseñe y le dije seria su collar a partir de ahora, y que cuidara mucho nadie de la familia lo viera, ya que llevaba una inscripción que leyó con detenimiento, y pareció alegrarle mucho, ("Cristina la perrita de JD"). Se lo puse en el cuello y pase ha hacer la pregunta de rigor antes de darle su bautizo como sumisa.

Yo.- Cristina, deseas ser bautizada como sumisa MIA, y respetarme y obedecerme en todo lo que yo      te ordene, sea bueno o malo, y hasta que la muerte o yo decida dejarte?.

Cristina.- Si Señor, quiero.

Le entregue unas gafas pequeñas de buceo, y le ordene que se la pusiera. Yo llevaba desde la tarde anterior sin orinar. Ya podéis imaginar en que consistirá el bautizo.

Yo.- (poniéndome de pie) Desnúdame.

Yo sabia bien que Cristina jamás había visto un hombre desnudo, titubeo, y templo, pero poco a poco fue desnudándome. comenzó quitándome los zapatos, ya que estaba a 4 patas, después los calcetines. se puso de rodillas y abrió torpemente la cremallera del pantalón, después la correa y el botón y bajo los pantalones y los saco. Mi miembro estaba ya bien duro y se apercibía bajo el slip. Paso tímidamente sus dedos por el dibujando su forma, y saco mi slip lentamente. Sus ojos parecía iban a salirse de las orbitas. Su primera polla y a esa corta distancia de sus ojos...

Yo.- Aligera..no tenemos todo el DIA.

Cristina se puso de pie y desabotono la camisa y me la saco.

Yo.- ve al baño principal nuevamente y túmbate en el baño boca arriba

Fue lentamente caminado, deseando exhibir su cuerpo, yo me demore para que mi erección bajara y me dirigí al baño, cocí el taburete lo puse en el filo del baño y me subí en el  a.C. estaba ella con sus ojos abierto.

Yo.- Abre tus piernas, la boca y mantén los ojos abiertos.

Yo cerré un momento mis ojos, apoye mi mano en el frió azulejo y al poco tiempo el dorado liquido caliente comenzó a salir, procure no acelerar el ritmo de la meada y fue midiendo para que ninguna parte del cuerpo quedara sin mojar. Me concentre y forcé para de mear

Yo.- Ponte de rodillas mirándome a mi

Cristina con dificultad, se puso de rodilla frente a mi polla

YO.-Cojéeme mi polla y dirige el choro a tu cara y mantén la boca abierta

En cuanto lo hizo, volví a continuar mi meada...viendo como toda su cara y pelo era banano por mi orina.

Yo.-Por el poder que tengo como tu Amo y Señor yo te bautizo como mi sumisa.

Baje del banco y me dirigí al salo, mientras le ordene que se duchara y se presentara a mi lo antes posible.

Continuara....