La despedida de soltera de mi prima Ana - 3

Después de los magreos de la disco, llegamos al pub y follamos a lo bestia.

La despedida de soltera de mi prima Ana:

  1. El pub.

Llegamos al pub, Carlos se sienta al lado de Ana, yo junto a ella y Jorge a mi derecha en unos sillones en una esquina del pub. Los demás se juntan alrededor de dos mesas redondas más en el centro.

Ana, al igual que Carlos, en la entrega anterior, nos confiesa sus dudas en casarse, a menos de una semana de la boda, y el motivo también es el sexo. Aunque Luis y ella se lo cuentan todo, han protagonizado demasiados desmadres sexuales como para llevar una vida recatada de casados. Os acordáis de la jodienda de Luis con Caridad y Miriam que os conté en el primer relato, pues Ana organizó “la venganza”.

Ana quedó una noche con Caridad y Miriam y se las llevó a su casa, Luis se escondió detrás de unas cortinas para ver todo lo que sucedía. Ana les ofreció de beber y rápidamente les preguntó por lo sucedido con Luis, ellas sorprendidas se hicieron las suecas al principio y luego aceptaron que algo hubo pero muy inocente, según ellas. Entonces Ana propuso un juego de cartas y quien ganase hacía pagar prendas a las que perdiesen para así saldar el tema de Luis. Lo que no sabían Caridad y Miriam era que las cartas con las que iban a jugar estaban marcadas por la misma Ana que lo había preparado con Luis.

Empezaron a jugar y claro ganaba Ana. Al principio fue suave y les hizo que se fueran desnudando. Así consiguió que tanto Caridad como Miriam se quedasen en ropa interior. Pero ella para disimular también perdió alguna partida y le hicieron que se desnudara por completo. Como la siguiente la ganó Ana, ella dijo que ya estaba bien de tonterías y que le chuparan el coño. Esto no les gustó mucho a Caridad y Miriam pero Ana muy seria les hizo ver que un trato es un trato y que a la próxima podían ganar ellas. Así que primero Caridad y luego Miriam le tenían que chupar la concha a Ana, pero hay que decir que no les desagradó demasiado. Caridad se excitó con la lamida de coño y a la vez que chupaba se masturbaba su clítoris. Y cuando le tocó el turno a Miriam de chuparle la concha de Ana, Caridad se colocó detrás de Miriam y le retiró las bragas para seguir chupando ahora la concha de Miriam. Mientras tanto, Luis se pajeaba detrás de la cortina. Ahora era Miriam la que ardía y ella dijo que ya estaba bien de jueguecitos, que jugaran una última partida y la que ganara dispondría todo lo que había que hacer. Por supuesto ganó Ana y lo primero que hizo fue terminar de desnudar a Miriam y a Caridad, se puso a cuatro patas, levantando el culo, y le dijo a Miriam, “vamos chúpame el ano”. Miriam no se lo creía pero entre la determinación que mostró Ana y su propia calentura, acerco su lengua al agujero de atrás de Ana y comenzó a chupar. Al cabo de unos minutos Ana hizo que Miriam se tumbara boca arriba y le colocó el coño en la boca, en posición de 69 y a Caridad le ordenó que ahora fuera ella la que le chupará el ojete del culo. Ana tuvo su primera corrida con las dos lenguas de Miriam y Caridad en sus agujeros. Ana se levantó y les dijo a Miriam y Caridad que ahora ella les iba a dar placer, pero para que fuera más intenso les iba a tapar los ojos. Con unos pañuelos las tapó los ojos, las puso a cuatro patas y les acariciaba el culo con las manos. De debajo del sofá sacó una caja con cremas y consoladores de diversas formas. Se untó un poco de crema en los dedos e introdujo un dedo en el agujero del culo de Miriam y otro dedo de la mano derecha fue directo al culo de Caridad. Las dos se retorcieron pero Ana mantuvo los dedos firmes, hasta que empezaron a relajarse, momento en el cual les clavo un consolador a cada una por el ojete del culo. Ambas se retorcían primero de dolor y después de placer y todavía les gustó más cuando Ana sacó un tercer y un cuarto consolador y se los metió por ambas vaginas. El espectáculo hizo correrse a Luis que estaba detrás de la cortina masturbándose y también se corrieron Caridad y Miriam. Ana se introdujo también ella otro consolador en su vagina y se colocó de rodillas delante de Miriam y Caridad, poniéndoles las tetas al alcance de sus bocas, les quitó los pañuelos de sus ojos y les ordenó que le chuparan las tetas y así con el consolador en su concha y con Miriam y Caridad chupándoles los pezones se corrió otra vez. Pero Miriam y Caridad no dejaron salir los consoladores de sus agujeros hasta que se corrieron por segunda vez y también Luis volvió a eyacular otra vez detrás de la cortina.

Mientras Ana nos contaba esta historia, Elena se levantó para ir al baño y Miriam la acompañó y parece que también les entraron ganas a Esteban y Enrique, los cuales debían todavía estar calientes por el manoseo que Miriam les había dado en la disco, ya que se fueron tras ellas, Fran que quería terminar lo de la disco con Elena y Antonio que se apuntó rápidamente, también las acompañaron.

Lo que pasó allí me lo contó Miriam después. Detrás de ellas se colaron los cuatro chicos en el baño de mujeres, Fran y Antonio entraron primero y se fueron a por Elena, le subieron la blusa y le bajaron el sostén dejando sus tetas al aire, las cuales manosearon a su gusto, le bajaron los pantalones y las bragas hasta la rodilla, y mientras Fran le chupaba los pezones Antonio se concentró en mamarle el coño. Esteban y Enrique se colocaron con las espaldas contra la puerta para que no se pudiera abrir y se sacaron la polla, lo cual aprovechó Miriam para agacharse, agarrárselas con ambas manos y chuparlas una después de otra y las dos juntas también. Elena estaba de pie apoyando su trasero sobre el lavabo y en esa posición, levantándole un poco la pierna, Fran se la metió en el coño, mientras Antonio observaba dándole lengua y tocándole las tetas. Pero Antonio también quería metérsela, con lo que apartó a Fran y se la metió él. Fran y Antonio enseguida concertaron la estrategia y los dos situados frente al coño de Elena se turnaban en metérsela, ahora uno y después el otro. Elena gemía de gusto hasta que se corrió por primera vez. A Miriam ya la habían levantado del suelo y bajado las bragas y de pie, inclinada, se la chupaba a Esteban que seguía con la espalda en la puerta mientras por detrás Enrique se la introducía en el coño, hasta que Esteban protestó y le dieron la vuelta, de tal forma que ahora Esteban se la follaba y Enrique le llenaba la boca con su polla. Miriam se corrió también y cuando Enrique le sacó la polla de la boca tenía muy cerca al otro grupo, lo que aprovechó para chuparle el coño a Elena en uno de esos cambios de follada que hacían Antonio y Fran. Enrique vio también la oportunidad de metérsela a Elena cuando Miriam dejó de lamerle el coño a su compañera de fiesta y no desaprovechó la ocasión y Antonio como ya no le dejaban sitio en la concha de Elena, se fue a probar la boca de Miriam, ahora libre, aunque su coño seguía invadido por la polla de Esteban. Bueno los chicos estaban ya ardiendo y Enrique y Fran no se entendían tan bien compartiendo el coño de Elena por lo que sacaron las pollas del mismo y mientras Enrique le levantaba una pierna que ponía sobre su cadera Fran le abría el coño con los dedos, y ambos se masturbaban y apuntaban sus pollas hacia el agujero abierto de Elena que no tardaría en recibir la leche de ambos, que se colaba por la abertura hacia el interior, mientras ella tenía su segundo orgasmo. También Esteban y Antonio sintieron la llegada del orgasmo e hicieron que Miriam se arrodillase frente a los dos para descargar a la vez, Esteban sobre sus tetas y Antonio en su boca, Miriam también se corrió nuevamente tocándose el clítoris mientras recibía toda la leche.

No sé en qué momento se levantaron los demás de la mesa en que estaban, pero el caso es que cuando me quise dar cuenta Caridad, Laura, Héctor, Emilio, Martín y Lucas habían desaparecido. Caridad me contó que también ellas se levantaron para ir al baño y los chicos las siguieron, como el baño de mujeres estaba trancado, (las espaldas de Esteban), los chicos las invitaron a entrar en el baño de hombres. Aquí nadie se preocupó por la puerta y mientras Héctor y Emilio le metían mano a Laura en la entrepierna y en el culo, Martín y Lucas se encargaban de Caridad, uno le desabrochaba el sostén y el otro le bajaba las bragas. Héctor metía un dedo en la vagina de Laura y Emilio hacia que Laura le chupara un dedo, que ensalivado por la propia Laura no tardaría en introducir en su culo. Con lo que Laura con un dedo en la concha y otro en el culo sacó la polla de Héctor de sus calzoncillos y lamía la lengua de Emilio. A Caridad le habían hecho inclinarse, Martín delante de ella se saco la polla y se la metió en la boca y Lucas se arrodilló detrás de ella, le bajó las bragas y le empezó a lamer el agujero del culo a la vez que le metía un dedo en la concha. Héctor y Emilio enseguida cambiaron los dedos que tenían dentro de Laura por sus pollas, y así con Laura de pie, Héctor se la ensartó por delante mientras Emilio se la metía por detrás y Laura se corría inmediatamente. Caridad seguía de pie inclinada chupándole la polla a Martín cuando Lucas dejó de lamerle el culo, se levantó, sacó una polla de considerable tamaño y sin muchas contemplaciones se la hincó por el agujero de atrás, provocando en Caridad un alarido mitad dolor, mitad placer. Como ella era menudita y Lucas bien fuerte y robusto, sin mucho esfuerzo la agarró por detrás de los muslos a la altura de las rodillas y le levantó los pies del suelo. Caridad quedó suspendida en el aire, agarrada por Lucas, con su polla en el culo, las piernas bien abiertas y mostrando el coño también abierto a Martín, al cual le habían arrebatado de repente la boca de Caridad de su polla. Pero Martín no se lo pensó dos veces al ver a Caridad ensartada por el culo y con aquel coño abierto que parecía que le decía “cómeme”, se lo comió, se abalanzó sobre él, lo chupó, lo lamió e introdujo la lengua hasta el fondo de la vagina, mientras Lucas seguía bombeando por detrás y Caridad se corrió gritando de placer. Esto hizo reaccionar a Martín que se levantó y le ensartó la polla por delante, siguiendo Caridad en el aire agarrada por Lucas. Allí estaban las dos chicas penetradas por ambos agujeros por estos amigos de mi exnovio Jorge. Los chicos estaban ya al borde del orgasmo pero tuvieron tiempo para intercambiarse a las dos chicas. Fueron Héctor y Emilio que al ver la follada salvaje que le estaban dando a Caridad también quisieron probarla, sacaron sus pollas de dentro de Laura y se fueron hacia el otro grupo Héctor apartó a Lucas y se la metió por detrás a Caridad que siguió suspendida ahora sobre Héctor, Emilio quitó de su sitio a Martín y se la introdujo por delante. A su vez Martín y Lucas agarraron a Laura y también la alzaron follando ahora Lucas el coño de Laura y penetrándola Martín por detrás. Ambas chicas estaban alzadas, en brazos de los chicos, una al lado de la otra, las dos acercaron sus caras y se dieron lengua mientras se corrían todos al unísono. Héctor derramó su leche en el culo de Caridad mientras Emilio hacía lo propio por delante y Laura derramaba sus jugos. Lucas se corría en la concha de Laura y Martín en su culo cuando ella se regaba una vez más. A las dos las bajaron al suelo y de sus culos y conchas resbalaba a lo largo de sus muslos el semen de los chicos.

Mientras esto ocurría en los baños, los que quedábamos en la mesa del pub también estábamos calientes después del relato de Ana y de lo ocurrido en la disco. Con lo que de repente siento como una mano me acaricia el muslo por debajo de la mesa hasta llegar a tocarme los labios de la vulva, no puede ser otro que Jorge, pero también siento otra mano que me toca el otro muslo también hacia mi concha y esta tiene que ser de Ana. No puedo aguantar más, pierdo la cordura e imitando a Caridad en el pub, me meto debajo de la mesa. Allí veo como Carlos tiene la polla erecta fuera de los calzoncillos y Ana le está pajeando por debajo de la mesa, mientras él tiene un dedo en la concha de Ana con el que le acaricia el clítoris. Jorge se pone en mi sitio y también empieza a acariciar el coño de Ana y también mete un dedo dentro de su vagina que se junta con el de Carlos. Bajo la cremallera del pantalón de Jorge y le saco la polla fuera de los calzoncillos para pajearle y con la otra mano ayudo a Ana a masturbar a Carlos. Noto como un pie, creo que el de Jorge, sin zapato me acaricia mi concha y me excito mas, le agarro la polla y se la empiezo a chupar, después me voy a la de Carlos y también se la chupo, y así voy intercambiando una y otra. Noto ya dos pies que se pelean por acariciarme el coño y ahora noto un pie desnudo que se introduce debajo de mi sostén y me toca las tetas, es sin duda el de Ana. Tengo la concha de Ana ante mis ojos y los chicos han sacado sus dedos de dentro de ella porque ahora parece que le están tocando las tetas, bueno no me lo pienso y me pongo a chupar el coño de mi prima Ana, sin dejar de pajear ambas pollas con mis manos. Me gusta, estoy por correrme con mi cara entre los muslos de mi prima y mi lengua en su gruta, dos pollas en las manos, dos pies tocándome el coño y otro en mis tetas, me corro, pero también lanzan su semen al aire Carlos y Jorge, mojándome las manos y el pelo y Ana también descarga sus jugos en mi boca.

Es ahí debajo de la mesa cuando oigo voces y escucho como que nos están echando otra vez, ahora del pub. Alguien se ha quejado que no podía entrar en los baños y parece que también se han dado cuenta de nuestro asunto de debajo de la mesa, salgo con cautela, pero debido al follón que hay montado no me ven, agarró de donde puedo unas servilletas de papel para limpiarme manos y pelo y nos abrimos.

¿A dónde vamos? En la próxima entrega os lo cuento.