La decision de bea 3: el magrebí

Bea es una mujer recientemente divorciada que para recuperar el tiempo perdido decide prostituirse unos días, pero pierde el control. Imprescindible leer parte 1, parte 2

Advertencia: Antes de leer esta parte es recomendable leer la parte 1 y parte 2 de esta historia.


Parte 3.

No me dijeron nada más por el teléfono, colgaron inmediatamente. Quedé pensativa y hasta paralizada, quién sería quien me habia llamado , y lo más importante: cómo tenía el número del trabajo.

Salí a la calle nerviosa, saqué un cigarrillo de mi pantalón vaquero y me puse a fumar observando la calle.

El

dia en Madrid era luminoso y cálido pero afortunadamente corría un poco el aire, una señora mayor paseaba a su perro delante de mi, la carretera tenía un tráfico denso como era lo habitual a estas horas, nada me llamaba la atención,salvo que un hombre de tez morena, posiblemente marroquí o argelino me abordó.

- Hola guapa, ¿Tienes fuego?

Le dejé mi mechero, mientras, continuó hablando:

- ¿Trabajas en la agencia de viajes? Tenia que ir a Tanger , aunque no se cual sería la combinación más barata ¿Me lo podríais mirar?

  • Claro! ¿Me dejas terminar el cigarro? Mi jefa se ha marchado hace un rato y estoy sola.

  • Si, puedo esperar, así también termino el mío

Mientras daba las últimas caladas me fijé en él, su piel morena contrastaba con su camiseta de tirantes -que algún día fue blanca- , los pelos de la axila le sobresalían, y por su tipo de pantalón con manchas de pintura deduje que debía de trabajar en alguna obra. El no se cortó un pelo, y me estuvo repasando con la mirada, lejos de incomodarme, me sentí halagada.

Me abrió caballerosamente la puerta y entramos en la agencia, mi mesa estaba en el fondo, fui caminando delante de él y gracias a un espejo vi como el magrebí no quitaba los ojos de mi culo, ya no me hacia gracia la situación.

  • Vamos a buscar tus billetes ¿qué día te vas? ¿Cuantos sois?

  • Nos vamos ahora y somos tu y yo-

sonrió.

  • ¿ Cómo? Ahora en serio, dímelo para que busque los billetes, porque en unos minutos cierro la agenci

a.- Me puse en alerta.-

Date prisa, porque en breve empieza el puente y son varios días festivos, lo mismo suben los precios después.

-

Vamos a dejar de hablar de tonterías Bea. ¿Te han llamado antes? Era el Serbio. Y se ha fijado en ti.

En ese momento, mi sangre se heló delante de este individuo, el miedo se apoderó de mi, sabía como me llamaba y era imposible que hubiera leído mi nombre en algún sitio, tampoco se lo dije. Sabía que me habían hecho una llamada extraña poco antes y parece que conocía a quien me la hizo.

  • ¿Quien eres? ¿ Qué quieres?

  • respondí con voz temblorosa.

-

Antes de que te pongas a gritar, o que llames a la policía, te conviene que veas esto.

El magrebí sacó su teléfono móvil , buscó en el y me lo mostró. Pude ver unas fotografías en las que yo me encontraba follando con los tipos del “este”, mi cara se veía claramente, en otra de ellas se veía como me daban el dinero. Una colección porno en toda regla. En ese momento recordé que debían haberlas tomado desde el ordenador que estaba en la mesa delante de la cama y me maldecí a mi misma por mi ingenuidad. No solo me habían follado tres tíos durante más de una hora,pagando por mucho menos tiempo, sino que me habían grabado, posiblemente para extorsionarme.

  • ¿Quieres dinero ? o qué

.- respondí esta vez airada.

No me hables así puta! Ya es la hora del cierre y es el momento de habla

r.

El magrebí se levantó de la silla, se acercó a la puerta, cambiando el letrero a “cerrado” y puso un pestillo interno para que nadie pudiera entrar. Luego apagó parte de las luces por lo que aparentemente la agencia de viajes estaba cerrada. Yo me levanté, pero nada hice, solo ver sus acciones y esperar.

  • Bea, bea bea, siéntate de nuevo

  • el se puso detrás de mi silla y me habló al oído, casi susurrándome -

se que en tu tiempo libre eres puta, lo se porque los tíos que te tiraste se dedican a grabar videos porno amateur para vender en internet, ellos te siguieron y descubrieron que no eres una puta convencional, eres una puta que tiene mucho que perder. Nos dijeron que eras una puta de campeonato y vendieron al Serbio todo el material, todos los videos y fotos de ti. Ha pagado mucho dinero y quiere recuperarlos.

  • ¿Cuánto quiere? -

Miré a la cara del magrebí desafiante.

  • De 120.000 euros para arriba-

respondió seguro.

-

Yo no tengo ese dinero.

  • había comenzado a llorar- llamaré a la policía.

  • ¿Para que se entere tu familia que eres una puta?¿Para que lo sepan tus amigos? ¿Para que subamos el video a internet? Llama si quieres.

  • Me acercó el teléfono fijo de mi mesa de forma chulesca.

Lo miré, pero estaba atrapada en el chantaje. El magrebí desde su posición de detrás de mi puso bruscamente sus manos en mis pechos y comenzó a apretarlos.Le quité las manos y me levanté de la silla, pero no salí corriendo a la calle , no podía tenían mis fotos.

-

Mira putita, mi trabajo consistía en darte esta información, pero estás buena y no me quiero ir de aquí sin follarte. Dentro de poco , vas a follarte a tantos tíos que prefiero tu coño ahora. Y lo vas a hacer por las buenas o por las malas. Si quieres por las buenas puede que hasta disfrutes con mi polla,si es por las malas te juro que te voy a dar tan fuerte por culo que no te vas a sentar en varios días. Tu decides.

No solo sus ojos me daban miedo, ojos inyectados en esperma, o su cara lujuriosa,o su polla marcada en el pantalón signo de su excitación, sino también tenia una navaja en la mano y de filo largo.Desde el divorcio había decidido tener emociones fuertes, disfrutar del sexo y convertirme unas semanas en puta ocasional. Podía enfrentarme al magrebí , con resultado desconocido, o imaginar que se trataba de un cliente feo al que tenía que satisfacer, follarlo lo mejor que podía para que se corriera cuanto antes y se marchará de la agencia para irme a casa a pensar.

-

Mejor vamos al baño, es amplio y está retirado del escaparate, pero no me hagas daño- dije

Cuando entramos en el baño el magrebí me agarró de la nuca y me besó la boca, en inicio no respondí, pero quería que se terminara todo rápido y abrí mi boca para juntar nuestras lenguas. El me metió la palma de la mano en mi entrepierna por encima del vaquero. Frotaba su mano contra mi coño. El tenerlo tan cerca de mi me permitió olerle, un olor a sudor muy nauseabundo que me auguraba que el de su polla no fuera mejor precisamente.Con mi mano le acaricié su paquete que ya estaba duro.

-

Desnúdate del todo

  • me dijo.

Me quedé en sujetador y braguitas delante de el. Me acerqué para desabrochar su cinturón y bajar su pantalón para sacar su polla. Un olor a pis me llegó cuando tenía mi cara delante de sus calzoncillos. Se los bajé y me saltó una polla morena de tamaño normal pero con unos huevos grandes y muy peludos. Quería ir a buscar un pañuelo para limpiar algo esa polla cuando el magrebí me puso el glande directamente en mis labios y agarrando la cabeza me forzaba a que abriera la boca para metérmela.

-

No!por favor déjame limpiarte la polla, huele mal y está sucia-

Le imploré.

-

Peores pollas te vas a comer y follar, abre la boca puta o te rajo con la navaja! -

Me gritó.

Abrí la boca sabiendo que me iba a meter su polla hasta el fondo, hasta la campanilla y así lo hizo, las lágrimas me brotaron y le tuve que dar varios golpes en la pierna porque me asfixiaba. Mis babas caían sobre mi sujetador, algunas caían sobre mis piernas.El magrebí me estaba follando la boca literalmente con mucha fuerza y profundidad. No pude más y en un momento en el que sacó la polla para dejarme respirar vomité en el suelo.

-

Que guarra eres, ya no voy a meter la polla dentro de tu boca. Levántate.

Me cogió bruscamente de un brazo y me alzó. Me puso de espaldas y me sacó los pechos por encima de mi sujetador. Apretó luego los pezones mientras dejó su polla pegada a mi culo por encima de las bragas. Le oía gemir mientras movía su cadera sobre mi culo para frotar la polla. Su mano se metió dentro de mis bragas y comenzó a sobarme los labios y el coño. La acción sobre mis pechos, el tener una polla dura frotándome en mi culo y una mano acariciándome los labios del coño , me comenzó a poner caliente y cuando el magrebí metió sus dedos dentro de mi coño el se dio cuenta diciéndome:

-

Estás mojada, tu quieres polla, no me digas que no. Y la vas a tener.

Con mis bragas a medio muslo me di la vuelta y le comí la boca, era feo, olía mal y me estaba forzando, pero cuando con mi mano acerqué su polla a los labios de mi coño y yo misma la froté contra ellos un gemido tímido de placer salió de mi, pero también me di cuenta de que no tenía condones y de ninguna forma me iba a follar a pelo.

  • ¿ Tienes condones? Yo sin ellos no quiero follar, te puedo hacer una buena mamada pero no me la metas sin ellos ¿Los tienes? -

Le pregunté, sabiendo de antemano la respuesta.

-

Siéntate en el lavabo mirándome a mi y abre las piernas, no tengo condones pero ahora solo quiero frotarte la polla con tu coño.

Puse mi culo en el duro mármol del lavabo y abrí las piernas.Delante tenia a un tipo de unos 40 años con la polla bien tiesa que se aproximaba a mi coño. Con su glande inició un frotamiento con mi clitoris que me estaba dando mucho placer. Tanto que cerré los ojos para sentir. En ese momento sentí como su polla sin protección estaba penetrándome.

  • Sin condones no! , Que no se si tienes alguna enfermedad y además no tomo la píldora! - Le grité

El siguió sin prestarme atención metiendo y sacando su polla y yo ya viendo que no podía hacer nada me deje llevar sintiendo como su polla me follaba. Con mis brazos le agarre de la espalda y con las piernas las entrecrucé sobre su culo, para decirle al oído.

-

Al menos no te corras dentro tío.

-

Tengo los huevos llenos de semen, salí de la carcel hace pocos días y allí dentro no se folla.

Instintivamente ya que mi placer aumentaba, le comí la boca y fue en ese momento cuando sentí como se iba corriendo dentro de mi coño….1, 2,3,4 disparos prolongados y mi orgasmo final contrayendo el coño para meter aún mas a fondo su semen dentro de mi.

Cuando sacó su polla, era tal la cantidad de semen que me había metido, que parte de él se empezó a salir de mi coño resbalándose por mis piernas. Si estaba en los días de ovulación este tío me había dejado embarazada, recordé que tenía la píldora del día después en casa. En años de matrimonio casi siempre habíamos follado con preservativo y ahora en pocos días mi coño había recibido el semen de tres desconocidos. Había perdido el control.

-

Lávate, vistete y vámonos a ver al Serbio.

  • Tengo que pasar antes a casa por la píldora del día después. - Le grite.

-No es mi problema, vamos- Me respondió.

continuará…..