La compañera de mi esposa

Presentación

Mi nombre es Juan Pablo y Estoy enamorado de Verónica una zorrita, pelo castaño, ojos color miel, usa lentes y se ve divina con ellos,  mide 1.72, piel blanca,  es pelirroja, con unas pecas a modo de decoración, una bellísima sonrisa, unas preciosas caderas, un culo bonito pequeño y respingo hecho a base de puros sentó es, digo sentadillas, tiene unos pechos bonitos, ni grandes, ni pequeños, son perfectos, tiene un peso ideal, y se que parece que la idealizo, pero tiene defectos el primero de ellos es que tiene dos hijos completamente detestables, son aborrecibles a mi vista, pero tengo que soportarlos porque de otra manera ¿como le meto la verga? Su otro defecto como ya dije es que es una zorra, aunque este es su mayor defecto y su mejor atributo, yo también tengo mis defectos el primero es que soy casado, mi mujer Karen es todo lo contrario de ella es alta mide 1.90, peso acorde a la estatura, morena, unas tetas enormes jugosas, unas caderotas con un tremendo pedorron que tiene la capacidad de amasar cualquier pito, y lo hizo conmigo, por eso me case con ella, pero la zorrita es su compañera de trabajo, ambas son profesoras en una institución privada, maestras de primaria, allí conocí a esta chica, yo trabajo como responsable del área técnica del soporte técnico a equipos de cómputo, y todo lo relacionado al mantenimiento de equipos informáticos.

Al conocer a esta chica Adelin me cayó bien, es una chica muy sonriente y alegre, bastante dinámica, me agradaba y todo iba bien, muy bien la veía como una hermana pues es media torpe al hablar Talvez tenga algo que ver que sus padres son primos ja,  ja,  vamos no pasaba de ser una compañera más de mi esposa, y el tiempo pasó, mi esposa la invitó a la casa, ella acudió con su novio el cual resultó ser un delincuente menor y terminó huyendo de una ciudad a otra, pasó el tiempo, y comenzamos a tener pláticas, después me fui despegando pues no quería serle infiel a mi esposa.

Los mensajes

Tengo que admitir que comencé a coleccionar sus fotos y a mansturbarme con ellas, un día le escribí por wathsapp, le comenté que es esa foto se veía triste decaída, se rio y comenzó a conversar

V- cómo que me falla la vista

Jp- andale, es que no es acorde a tus fotos que suelen ser un poco más atractivas jeje

V- ¿te parece?

Jp- la verdad que si

Allí termino todo, pasados los días entre a su salón de clases y allí platicamos un poco más, nada del otro mundo, pero llegó el momento en el cual me pidió si podría apoyarle con su computadora, acepte sin dudarlo, fui a visitarla le tire algunos piropos, le hablé bonito pero sus hijos cortaron toda intención de ir más allá.

El papá mecánico

Su papá de ella es mecánico así que le lleve mi carro a mi esposa la lleve con la pedicurista, estando allí en el taller de su papá, salió ella resulta que en la parte de atrás está su casa de sus padres, me comentó que iría por algunas cosas para la comida, le pedí si podía acompañarla, me dijo que si gustosa. Ya en el auto le comente que su vestimenta era muy bonita, tenía puesto un vestido con un perrito de gorra roja,

V- Hay Juan en realidad es un bluson, pero me pongo las medias de tela negra para que no se vea mal

Jo- yo digo que se te vería mejor sin ellas jaja

V-¿Tu crees?

Jp- estoy seguro

V- a ver deja me las quito, jaja

Jp- te rajas

V- no, espera me orillo

Se orillo y retiro las medias, quedaron al descubiertos sus piernas blancas, solo podía imaginás sus pezones

Jp- wow, ya ves que diferencia

V- así ya no me da pena que me vean contigo dime (bromeó)

Llegamos a una pastelería por un postre, yo me quedé mirando las velas, caballero le habla su novia me indicó el empleado, ah claro sonreí, ella se sonrojo

V-te imaginas tu y yo casados (me susurro)

Jp- Uuuuuu si puedo imaginarlo (le dije picaramente)

Salimos de ahí y en el camino al carro ella me dice, ¿que haríamos si estuviéramos casados? Pues haríamos el amor y yo creo que muy bien dije en voz suave y rápido. Ella quedo en silencio un rato. Que te parece aunque sea una sola vez o te rajas me contesto. Soy materia dispuesta le dije.

En el motel

Me dio las llaves del carro y me diriji a un motel, justo cuando nos cobraban la entrada le conteste la llamada a mi esposa,

K- ¿todo bien?

Jp- si vine a comprarle una pieza al carro

K- ¿pero si queda hoy?

Jp- claro que si, no te preocupes

K- al rato te llamo aun voy a tardar

Ella se puso tensa, ya en la habitación, se puso con cara preocupada, Relájate le dije, bueno me contestó.

Pedí un par de copas de whisky

Ella comenzó a relajarse y yo le pedí que se recostara.

Le quite la ropa que traía encima solo el blusonsito le quite el brasier y esos bellos pechos y peones rosas quedaron al aire, comenzó a lamerlos, a besarlo a estrujarlos, le besaba el cuello y se lo recorría con la lengua comenzaron los gemidos, le jale el cabello y le bese la boca, comencé a bajar hasta llegar a su vagina, le quite una fina pataleta de encaje rojo,

JP- Verónica, se me hace que planeaba coger me mamasita

V- te lo juro que hoy no lo planeaba pero si quería que me hicieras tuya Juan Pablo,

Comencé a lamerle los labios, me regrese a su entre pierna, ella gemia, comencé a introducirle un dedo, ayy si papito, le separe las piernas y le lami la prepa, le pase la lengua entre sus labios una y otra vez hasta que comenzó a mojarje apreté su clitoris hasta que se vino, ufff.

Me levante y me quite la camisa, luego me quite los zapatos y ella miraba atenta, toda empapada en sus fluidos, después me quite el pantalón y entonces me rogó que ella me quitaría el bóxer así lo hizo y su cara de maravillada no tenía precio, un precioso, venudo, grande y tieso miembro se asomaba, ante ella veintitrés centímetros de pura maciza ante sus ojos, ay Juan Pablo ¿todo eso me va a entrar?  Seguramente te has comido más grande le conteste, ay pero no así de imponentes me dijo, ¿pero como que le falta algo o no?

V- ¿que?

JP- que le saques brillo mamasita

Y abrió su boca sonriendo y se introdujo el miembro, le empuje la cabeza

JP- no la desperdicies, tragatela toda.

Ahí le vi su cara de lujuria, aunque sus ojos se pusieron vidriosos pienso que fue reacción al sentido de atrangantamiento, jaja me encantó, me la chupo un rato mirando hacia arriba,  incoada de rodillas en la alfombra roja, después le pedí que se voltear a y comencé a mamarle el culo y con mi dedo frotaba su clitoris, se vino dos veces más, ella gemia, se chorreaba apestaba a sexo el lugar. Comencé a dilatar le el anocon mi lengua y pasándole los dedos, la coloque de lado en la cama con el culo expuesto y mientras delira a en sus órganos fui introduciendo mis dedos, después mi verga, ah que delicia de culo apretadoque tiene mi zorra, con la otra mano la seguía dedeando, ella no paraba de venirse tenía los ojos en blanco y gemia como una puta, le temblaban las piernas a la muy zorra, anda ponte en cuatro mi amor le indique, se puso en cuatro y yo me coloque detrás de ella, separe mis piernas e introduje mi pene en su culo ah que delicioso y floreado se ve tu culo mamasita, Ay Maldito perro me dijo, ¡por ahí no! Pero si por ahí te la llevo metiendo desde el principio putita. Comencé a nalguearla y ella comenzó a menear el culo como una salvaje, ella estaba sudando y yo también, comencé a apretarlo las tetas y a morder le la espalda y el cuello, le seguía nalgueando, más papi,  dame más,  más rápido, Dame más, ¿quiere mas mi putita? le pregunte y acto seguido le saque la verga y se la introduje por la pepa, se quizo inclinar para recibirla pero la levante de los cabellos, le puse mi mano alrededor de su cuello y le susure al oído va a coger a mi estilo mi perrita, ella asintió con la cabeza, mi verga le frotaba los labios vaginales e incluso el clitoris estaba de rodillas pero con la cabeza en lato, sudando, viniendo se una y otra vez, yo la seguí nalgueando, y sus glúteos rojos me pedían piedad, aunque ella pedía más. La voltee sobre la cama la tomé del cuello y le metí mi verga, con mi pelvis frote su clitoris haciéndola venirse una ves más y entonces me lo pidió, llenarme con tu leche papasito, llenarme ahora, y se lo deje ir hasta el fondo, ella comenzó a apretarme con su perrito, muerdeme perra, muerdeme le dije, ella jadeo y yo también.

De regreso por la comida

Regresamos entregamos la comida, ella con su sonrisa y sus caerles rojizos me miraban enamoro o lujurioso no lo se, cuando me salí a la calle ella me miró, me beso en la boca, sin tapujos, tengo que admitir que sentí nervios, me fui a la casa, me bañe y me cogi a mi esposa para que no hubiese mal entendedidos.