La coincidencia (3)
Sigue el fin de semana de dominación.
LA COINCIDENCIA(III)
Ane se levantó tenía que preparar todo para la sesión que iba a ocurrir, fue al sótano y habilitó la mazmorra con todos los objetos que habían adquirido y fabricado su Amo y ella. Vestía una túnica transparente negra atada.
Cuando lo hubo preparado todo, llevó el desayuno a su Amo y un cuenco con leche a Alazne, ese era su desayuno, la acompañó luego al baño donde la puso dos enemas en el coño y el culo y la hizo ducharse a conciencia cosa que también hizo ella. La bajó a la mazmorra y la colocó en el centro de la estancia de pies con las manos atadas al techo y desnuda y fue a ayudar a vestirse a su Amo que también vestía otra túnica pero de tela más tupida.
A las 10 como estaba previsto llegó la otra Ama que se llamaba Patricia con sus dos perros, cada uno de ellos llevaba una camiseta negra ceñida y unos pantalones también ceñidos, Ane la recogió la bolsa y la llevó a la mazmorra.
Ama Patricia y sus dos perros se fueron a cambiar y aparecieron con las mismas túnicas que las perras ellos y la Ama con la misma que el Amo.
Los perros se pusieron en postura de presentación con las rodillas en tierra y el culo sobre los talones mientras observaban a su Ama como llegaba donde Alazne que estaba colgada y la ponía dos pinzas en los pezones, las fue girando y retorciendo una a una mientras la perra hacía esfuerzos por no chillar pero no pudo resistirse.
Esta perra se merece un castigo, vosotros perros desnudaros y venir aquí con las fustasordenó ella.
Los perros se acercaron con dos fustas, una cada uno y empezaron a descargar golpes sobre la sumisa, alternativamente en las nalgas y los muslos variando la velocidad e intensidad consiguiendo que ella comenzase a llorar, cuando estuvo toda roja, les ordenó traer una bolsa de hielo químico que tenía y se la aplicó, el contraste hizo que la chica gimiese y se retorciese en sus ataduras.
Ahora ella cogió un pequeño látigo de siete colas con la empuñadura con forma de polla y la fue dando golpes de forma alternativa en el interior de los muslos y las nalgas, cuando hubo terminado le metió el mango de un golpe en el coño, parecía una yegua con aquello metido allí.
Roberto entretanto estaba sentado en un sillón observando toda la escena y Ane arrodillada y desnuda le había empezado a comer la polla, pasaba la lengua por los huevos, luego por la polla hasta engullirla por completo, le acariciaba el perineo, los huevos etc.
Ya tenía la polla lista para follarsela, Ane se estaba regodeando pensando en ser ensartada por ese pedazo de carne pero no, la verga no era para ella era para la Ama Patricia que vino y sin más ni más se sentó encima del Amo observando la escena de Alazne colgada y azotada, se empaló por completo comenzando a cabalgar al Amo, era una experta amazona que conocía todos los secretos del sexo, cada vez que se elevaba relajaba sus músculos vaginales para volver a comprimirlos cuando descendía haciendo rozar toda su vágina contra la polla.
Ordenaron a los dos sumisos que montaran a las perras, las colocaron a cuatro patas como dos autenticas perras, primero las olfatearon en el coño y las lamieron estremeciéndose ellas y después colocaron sus manos en los hombros de ellas elevándose y clavándosela de un golpe.
El ritmo era el mismo que marcaba la amazona y debían de hacerlas tener el orgasmo al mismo tiempo que ella sino serían castigados de forma cruel. Ellos embestían penetrándolas profundamente, Ane jadeaba y Alazne también pero de vez en cuando emitía pequeños gritos por el dolor y el escozor pero al final estaban los cuatro desatados por el placer.
La Ama anunció su orgasmo con un gran grito que hizo que como por un resorte las dos perras que estaban extremadamente concentradas en conseguir el orgasmo simultaneo se corrieron apretando las pollas de los esclavos dentro de ellas, haciendo que al descabalgarlas ellos por el tirón que pegaron y volver a embestir las pollas resbalasen sobre las nalgas mojándolas la espalda de semen.
Cuando hubieron acabado recibieron la orden de cada uno llevar a su perra con un collar a la ducha para lavarlas, ellos obedecieron sumisamente. Patricia aprovechó para orinar mientras tanto y observar el espectáculo, veía como la rojez de las nalgas de la sumisa Alazne se bajaba y pudo observar lo bonito que tenía el culo y le estaban entrando ganas de poseerlo.
Roberto tenía 16 cms de polla, casualmente los perros tenían 17 y 18 cms respectivamente así que la Ama sacó dos arneses uno para Ane de 19 cms y otro para ella de 20. Sacaron a Alazne y la llevaron a una pared donde había una cruz de madera en forma de x gigante, ataron una muñeca a una argolla, la otra a otra argolla y cada tobillo de igual manera y de frente a la pared.
Estaba en posición vertical y bien sujeta, para que se quedase más fija todavía l ataron una pequeña cadena de cuero por los riñones a la pared. Primero fue el Amo Roberto el que con la polla dura después de habérsela puesto así su otra perra Ane la penetró el culo comenzando a follarla, primero suavemente sacando y metiendo la polla y luego rápido como si exclusivamente usase su culo para masturbarse.
Al fin se corrió, luego le tocó el turno al sumiso de 17 cms, repitió el mismo proceso, cuando se la sacó Alazne ya tenía el ano dado bastante de sí, entonces entró en escena el de 18 cms y lo mismo, luego Ane y por fin la Ama Patricia, no le costó meter la polla de latex a pesar de que era bastante gorda en el culo.
Mientras hacía esto la colocaron unas pinzas en los pezones y en los labios vaginales y unieron todas con dos cadenitas una desde el pezón izquierdo por el labio izquierdo y a el asa de una bolsa de plástico y por la derecha igual, a las pinzas de los pezones iba unida una pequeña toma de electricidad de una batería. A cada embestida de Patricia Roberto la daba una descarga a Alazne, esta se ponía todavía más cachonda y pidió que acabasen rápido porque no podía aguantar las ganas de mear que se acentuaban con la corriente, Roberto se lo autorizó pero que orinase así como estaba en la bolsa, de tal forma que cada vez que orinaba y se llenaba más la bolsa ella sentía más dolor en los pezones y hasta que la Ama que la estaba follando el culo se corrió con el pequeño vibrador que llevaba metido en el coño y ella también por la electricidad y la sodomización que la habían hecho.
Continuará.................
Este relato es imaginario pero si queréis podéis escribirme sobre todo mujeres a: