La cobra

La cobra es algo que las chicas no aprenden, nacen sabiendo. Y los chicos tenemos que temer. A mi me hicieron la cobra. Pero sobrevivi!!

I parte

Venga quien es el primero que me dice ¿que es una Ophiophagus Hannah?

A que nadie o casi nadie le suena que animal es, pero a que a muchos más le sonara si le digo que es el nombre científico de la cobra real. ¿Y porque empezar hablando de cobras?, pues muy sencillo, porque hay un movimiento que muchas chicas dominan que se trata de la tan famosa y temida "cobra".

Quien no ha sufrido "la cobra" o no tiene un amigo que le haya pasado, todos los amigos cada vez que alguien empieza a contar una historia y sale el temido dicho, ponen su cara de compasión y dicen algo así como : lo siento tío, ya encontraras a otra, joder vaya putada.

Total una gran cantidad de frases que deberían de animarte pero que en verdad te joden más, porque ellos no lo han sufrido en carnes y encima te lo recuerdan. Así que nada supongo que ya sabéis de que va mi historia, pues de una cobra.

La historia comienza en las fiestas de un pueblo al lado del mío, hará unos meses, yo no tenia ni intenciones de ir ni de salir siquiera esa noche, pero me llamo un amigo (Luis), el y su novia (Pilar) iban a salir por la fiesta y además la novia de mi amigo había invitado a una compañera del trabajo a la fiesta. Su compañera es de otra provincia y había ido a Madrid por motivos de trabajo, no conocía a nadie en la ciudad pues se acababa de mudar y a Pilar le apetecía invitarla para que saliera un poco. Yo la verdad es que esa noche no tenia nada que hacer, y bueno salir de fiesta con mi amigo Luis me vendría bien, además la chica en cuestión me había dicho por teléfono que era guapa, pero que no era una doble cita.

Llegamos a recoger del trabajo a las chicas, a Pilar ya la conocía, una chica encantadora, guapa y con la que me llevo bien. Después de saludarla me presentaron a Beatriz, la verdad es que no me esperaba encontrarme con una chica como ella, 26 años, rubia, ojos verdes, un cuerpo de infarto, alrededor de 1.60 m vamos que podía estar en cualquier pase de modelos o de gogo en cualquier discoteca y no desentonaría.

Nos presentaron y que decir tiene que empezamos a hablar para romper el hielo, me conto que había estudiado historia pero que lo que le apasionaba en verdad eran las motos, bueno la verdad es que son dos cosas que a mi también, de hecho el mejor examen de selectividad fue el de historia y en el instituto también era mi asignatura favorita así que saque un par de temas que me podía lucir y así lo hice aunque claro ella saco un montón mas de los que no me acordaba o nunca me sonaron, en cuanto a las motos le dije que en mi familia éramos muy moteros y que yo la verdad prefería las motos "custom" cosa que a ella también pues son las mas cómodas y las más famosos, porque todo el mundo ha oído hablar de las harley-davidson.

Llegamos a la fiesta y la verdad es no era nada del otro mundo, en España las fiestas de los pueblos son atracciones, casetas para picar algo y tómbolas, bueno son muchas mas cosas pero esta era así, lo que si había era mucha gente.

Empezamos cenando, pues eran las once de la noche y por lo menos yo no había comido nada desde la hora de la comida, entramos en una caseta donde nos dieron un palo de 50€ por cuatro bocatas, una ración de bravas y 3 minis de cerveza después de la cena nos fuimos a dar una vuelta por las tómbolas y por las casetas de feriantes, las típicas de tirar muñecos con pelotas, dardos, con arco y con pistolas de bolas de plástico. Nos decidimos por una de estas para hacer un poco el tonto, y bueno no nos fue mal, entre mi amigo y yo ganamos un peluche para cada dama y una botella de sidra, que decir que la sidra no tuvo tiempo ni de calentarse, así que ya íbamos bien después de la cerveza y la sidra. Con nuestros peluches por la feria nos fuimos a ver si encontrábamos algún sito donde montarnos, al final encontramos una atracción en forma de V que te es como una coche de montaña rusa que primero te sube y después te deja caer y la gravedad hace el resto. Nos montamos en el primer y segundo coche, la impresión era menos que en una montaña rusa cualquiera pero no dejaba de impresionar sobre todo con el "contentillo" que teníamos ya.

Al bajar nuestro mareo se fue haciendo más grande, pero aun así nos dimos una vuelta mas por las casetas, ahora de las peñas del pueblo para tomar algo, afortunadamente mi amigo había sido previsor y no había bebido tanto como los demás para poder llevar el coche.

A eso de las 3 de la mañana cuando ya nos habíamos dado un par de vueltas a todo el recinto nos fuimos a la capital a un sitio que conoce Luis, llegamos y vi un típico pub de cualquier ciudad pero que estaba muy recogido, con sitio para aparcar en la puerta y la música no era nada mala, canción pop español algo de pop ingles, nada de estridente música disco.

Entramos y bueno me dio por invitarles, 4 copas pero que pague a gusto, después de una charla animada, Pilar nos dijo que había una maquina de trivial que juagáramos unas partidas, claro que jugamos aunque no quedamos los primeros al menos pasamos un rato en la noche dándole al cerebro.

Seguimos hablando y dejaron el futbolín libre, yo me lo temía en cuanto Luis lo vio se abalanzo sobre el, decir que Luis juega bien es quedarse corto, puedo atestiguar que él solo puede vencer a una pareja que juegue bien. Así que nada nos repartimos un par de juegos, para que al menos una vez fuéramos todos con él. En la última partida yo iba con él y Pilar y Bea juntas, Pilar que lo conoce y sabe que ante una apuesta de futbolín siempre acepta, nos retaron a que si marcaban más de dos goles les pagábamos una cena. A Luis le falto tiempo para aceptar.

Empezó bien la partida, 5 a 0 pero los dos últimos goles fueron suyos, no pude hacer nada como portero.

Contentas volvimos a cambiar y ahora iba yo con Beatriz, ante la situación les dije a la pareja que si por un casual ganábamos Bea y yo, ellos pagaban unos bolos. Aceptaron.

La partida fue reñida pero cuando íbamos 3 a 3, tenía la pelota mi defensa y con toda la mala ostia que pude le metí un gol que aun sonó en la pared detrás de la portería, ganamos y para celebrarlo me di la vuelta agarre a Beatriz la cogí de la cintura la levante en el aire y le di una vuelta al grito de somos los mejores. Cuando la deje en el suelo estaba un poco aturdida, así que solo le puse la mano para que la chocáramos, después mire hacia Luis y Pilar y vi como se miraban como si pensaran algo, era una mirada de complicidad.

Nos montamos en el coche, Luis y Pilar delante y nosotros atrás, seguimos hablando de cosas en común y después al final 3 calles antes de dejarla en su casa, me atreví a pedirle el móvil, me lo dio, y le dije en tono de broma que eso había sido su perdición, que la llamaría. Sonrió y me dio dos besos a la que se bajaba del coche y entraba en el portal.

Fue doblar la esquina de la calle para que enseguida Luis se diera la vuelta en el primer semáforo.

Vaya vaya Ducati (mi apodo) parece que has hecho buenas migas- dijo Luis.

No sabía que ibais a llevaros también, la invite sin pensar en que fuera una cita doble, la verdad es que Beatriz me cae muy bien, es una chica muy maja y está sola en la ciudad- dijo Pilar.

No ha sido una cita, hemos charlado, y teníamos cosas en común, pero nada más. – les dije yo.

Bueno, pues dado que le has pedido el número, creo que deberías de mandarle un mensaje, antes que se acueste.- me dijo Luis.

No sé, no quiero agobiarla el primer día, que después pasa lo que pasa (haciendo referencia a una chica con la que había salido el año anterior)- dije suspirando al final.

Cuando nos metimos en la autopista y ya no había semáforos para que miraran atrás, saque el móvil y le mande un sms, el típico que se manda la primera vez, que me lo había pasado bien, que espero que ella también, y que les debíamos a las chicas una cena, que espero que fuera pronto para que nos volviéramos a ver. Antes de llegar a casa me había contestado que ella también se lo había pasado bien.

Pasaron unos días antes de volver a saber algo de ella, por lo menos de manera directa por que lo que si hice fue hablar con Pilar sobre ella que me contara cosas, alguna pista. A los 3 días la llame justo a la hora que salen del trabajo, la pille que se iban a tomar algo las compañeras del trabajo, o sea ellas dos y otras 3 chicas mas, (trabajan en una gestoría) fueron 10 minutos supongo que se tuvo que quedar en la calle porque el bar al que suelen ir está más cerca que a 10 minutos pero por lo menos no me colgó para entrar.

En esa charla aparte de preguntarle que tal el día de curro, le sugerí que nos viéramos un día para tomar algo, solos nosotros dos, le propuse el viernes pero me dijo que se iba a su pueblo, que está en otra provincia (Salamanca) para ver a sus padres y amigos pero que la semana siguiente podíamos quedar. Sin nada que decir, y aceptando cualquier cosa que me propusiera quedamos en tomar algo el martes de la semana siguiente.

Ese viernes cuando salí del trabajo quede con los amigos para salir de fiesta, justo en el pub que solemos ir me encontré con una chica con la que había hablado un par de veces, que está muy buena pero que solo habíamos hablado, la vi y ese día llevaba un vestido que le hacía unas curvas irresistibles, pero no sé porque me dio que no podía ir a hablar con ella, y es que joder había estado esperando a una chica como Beatriz un montón de tiempo y por una mala noche no quería perder ese tren, y eso que con Beatriz no había habido más que palabras. Bueno para terminar de decidirme me llego un sms de Beatriz que me decía que en su pueblo ese di a se necesitaba manta para dormir, con diferencia de Madrid, que estos últimos días de Julio hace una calor de muerte. Y apara terminar la palabra besos, que aunque no dice mucho al menos se acordaba de mí.

Paso el fin de semana como otro más, y el lunes todos a currar, pero con la ilusión que no hacía falta llegar al viernes para que llegara un buen día, el martes quedaba con Bea.

Llego el martes, habíamos quedado cuando saliera del curro, así que ese día, termine antes mi trabajo en la oficina para poder ir a casa y cambiarme, me subí a la moto ese día pille la mía, tengo una Fazer, (me llaman Ducati porque mi padre tiene una Ducati Monster S2R y mi hermano una 999) soy el único que no tiene una Ducati.

Después de un rato en moto llegue y aun a tiempo de ver como salían sus compañeras, Pilar ese día salía más tarde porque tiene un horario distinto, así que no esperamos deje la moto y nos fuimos a tomar algo. La verdad es que fue algo más que tomar algo, de las 8:30 hasta casi las 11 de la noche, por suerte la casa que alquilo esta cerca del trabajo así que la acompañe hasta el portal y allí nos despedimos, nada del otro mundo dos besos y a por la moto.

No sé a qué velocidad volví a casa, pero se me hizo muy corto el viaje y justo cuando estaba en la carretera me vibraba el móvil, supuse que era Luis para preguntarme por la "cita". Cuando llegue al garaje, llame a Luis para contarle que no había sido nada del otro mundo.

El jueves la volví a llamar por si le apetecía volver a quedar, pero por desgracia me dijo que venía un amigo de su pueblo a Madrid y que se quedaba a dormir en su casa, que venía por motivos de trabajo y que no sabía si se quedaba todo el fin de semana o solo el jueves y el viernes.

Como no me llamo para nada en ese fin de semana supuse que su amigo se había quedado después del trabajo para pasar un fin de semana con Beatriz, el lunes me escribió un sms para decirme que lo sentía que su amigo se fue el domingo a medio día y que tenía que hacer la casa el domingo asique no me había llamado. En cuanto lo termine de leer la llame por si quería quedar a cenar un día de estos, no le propuse ningún día en especial, le dije que cualquiera me venía bien, ella me sugirió el jueves y acepte encantado, y nos despedimos hasta el jueves. La semana fue más larga que la anterior, pues la anterior había sido solo un día de trabajo y después verla, pero esta era hasta el jueves. La llame el jueves a medio día para ver donde quería ir, reservar mesa y la hora en que quería que la recogiera. Así que nada a las 9:15 en la puerta de su casa e iríamos a algún sitio.

Salí de casa con tiempo, vestido de sport con un pantalón fino y un polo de Burberry y hasta su casa le tuve que pedir el coche a mi hermano porque en la moto no era plan.

Llegue y otros dos besos para saludarnos, decidimos ir a cenar a un Ginos, que se cena bien, y es bastante normal para una "cita", cenamos muy bien entre risas de las cosas que decíamos y algún que otro piropo. No me fue mal la noche, sobre todo cuando a mitad de la cena se quito la blusa que llevaba para quedarse solo con el top que tenia, bueno top y lo que tuviera debajo que madre mía lo que tenia. Pensaba que se lo estaba pasando también ella bien. La cena termino sobre las 11 y bueno como al día siguiente teníamos que trabajar ambos nos fuimos, y directamente a dejarla en su portal. Aparque en doble fila y la deje en su portal, antes de que subiera a su piso me dio tiempo a sacar el móvil y hacerle una foto.

Fue un poco de sorpresa, y quizás no la pille en el mejor momento de la noche, pero al menos os hacéis una idea de cómo es Beatriz. Después de una gesto de vaya momento, nos despedimos, estuve tentado de darle un beso que ya iba siendo hora de probar sus labios, pero no era el momento. O quizás sí pero no lo aproveche, le pregunte si este finde tenía planes y me dijo que no, a lo mejor me estaba haciendo muchas ilusiones pero me hubiera gustado que me propusiera algo ella, cosa que no fue así, pero aun así saque un par de entradas del bolsillo y le dije que si le apetecía ir al cine el sábado. Me cogió una entrada, vio que era para "Los líos de Gray" y acepto, volvimos a quedar a las 9 para ir a la sesión de las 10:30.

Llegue a casa comiéndome la cabeza, porque no había intentado besarla, no sería por falta de ganas, joder dos días mas comiéndome la cabeza.

El trabajo era lo peor, esperaba una llamada o un sms, me distraía constantemente, en casa mis padres me decían que me encontraban ido, más de lo habitual, y mis amigos que a qué coño esperaba a que me pusieran un cartel, que o la besaba o seria un tonto más.

Llego el sábado y como no, volví a encontrarme en la misma situación, mariposas en el estomago, un sinfín de cosas en la cabeza pero solo una idea, besarla para pasar una situación diferente.

Llegamos al centro de ocio, uno en las afueras con no sé cuantos restaurantes y no sé cuantas salas de cine, cenamos algo en un restaurante de la cadena los 100 montaditos y seguimos a lo nuestro, una cena bastante interesante, le comente que el próximo día podía ir a buscarla en moto, pero me dijo que aunque le gustaban las motos, no se solía montar, malas experiencias me dijo.

Entramos en la sala, y a ver la peli. Y que se puede contar de una peli de verano, pues eso que era para pasar un rato, no va a ganar ningún oscar ni tampoco va a pasar a la posteridad como la peor película del mundo, eso sí entretiene.

En el cine no soy de los que hablan, como mucho dos o tres comentarios sobre algo que me haga gracia o que cause impresión por novedad o porque ya lo haya visto en mas pelis, recuerdo que ese día Beatriz llevaba unos pantalones tipo gasa, blancos y aunque no me había fijado mucho no se le veía un tanga también blanco de hilo. Arriba una camiseta rosa de botones, cubriendo un top blanco. Cierto que pase rato viendo o mejor dicho intentando mirar su cuerpo pero me centraba también en la película, pero claro con la manía de los cines de poner el aire acondicionado en verano al máximo, pues no pude dejar de mirar como dos pequeños huesos de ciruela se marcaban en el top.

Salimos del cine y aunque la temperatura era más bien sofocante, los pezones de Beatriz aun se marcaban, yo no quería parecer un mirón, así intente casi con todas mis ganas no mirarle las tetas. Llegamos al coche y nos montamos para llevarla a su casa, con la esperanza que me dijera de quedarnos a tomar algo, pero no fue así. Llegamos a su portal, después de una charla sobre que tal la peli, que el actor principal me ha gustado más en otras pelis, y sobre otros temas que solo se utilizan para que no haya un incomodo silencio.

Por su parte Beatriz se revolvía en el asiento, no sé si por incomodidad o porque sabía lo que pasaría después. Llegamos a su casa, y nos quedamos hablando en doble fila, por suerte es una calle ancha, en el último momento antes de bajarse, me gire hacia ella para intentar besarla, fue en ese momento cuando si estuviéramos en una peli, hubieran puesto la escena en cámara súper lenta. Yo me tiraba a sus labios cuando ella tiraba de su cuello para atrás para evitar el roce de nuestros labios. Y si a eso es a lo que se le conoce como "la cobra".

Por supuesto ante semejante movimiento me volví a mi posición original y espere su reacción, ante mi acción. Me miro a los ojos, pero solo un segundo y fue peor ese segundo que el momento anterior. Pero sus palabras me hicieron más daño aun.

Quieto, quieto. Sabes me temía que pasara esto, Pedro, lo siento.- me dijo Beatriz

Si bueno yo lo siento más.- le dije sin saber que decir.

Veras te acuerdas del amigo que vino el otro día, pues más o menos estamos saliendo.

Vaya.- y pensé para mi, primera noticia que tengo.

Sabes me lo paso muy bien contigo y si quieres podemos volver a quedar pero, nada mas.- me dijo con voz fría

Bueno pues cuando quieras, no pasa nada.- le dije queriendo salir de allí haciendo rueda y estar solo durante un buen rato.

Se bajo del coche, pude admirar que sí que lo que tenia era un precioso tanga blanco, que posiblemente no vería nunca más, porque para ser sinceros, acababa de pasar una escena que te deja marcado con una chica por mucho tiempo.

II Parte

El viernes fui yo quien llamo a Luis, quería darle la noticia antes que se la contara Pilar porque supuse que Bea hablaría con Pilar sobre la noche anterior.

Cuando le llame le dije de tomarnos un café a medio día, ya que ambos tenemos horario de verano y salimos bien pronto los viernes, sobre todo si como pasaba este viernes no había jefe y podíamos escaparnos antes.

Llegamos al bar y cuando me vio sentado con cara de pocos amigos, o más bien de que la noche no había sido como hubiéramos esperado ya se imaginaba algo.

Que ha pasado?.- pregunto Luis

Que quieres que pase, todo iba bien hasta que, va y me hace la cobra.- le digo yo, gesticulando también un movimiento del brazo

No jodas, vaya putada tío, y que te dijo, o solo te hizo la cobra.- me dice con un gesto de amistad.

Me dijo que tenía un "amigo", así que nada. Pero joder me lo Podía haber sugerido, o que me hubiera dicho algo una pequeña pista. Que quieres que haga, no puedo luchar así.

No te había dicho nada?.- me pregunto

No y joder si lo hubiera dicho, me hubiera dedicado a buscar a otra chica, que por cierto menos mal que no me había dado fuerte con ella.

Pues es cierto, normalmente con las tías te enchochas pronto, y te digo una cosa pero no se la cuentes a Pilar, Bea tenía un polvo de los de hacer historia.

Joder, lo sé. El último día no podía apartar la vista de sus pezones, los tenía como un huso de cereza.

Y que vas a hacer estos días?.- me pregunta Luis

Esta tarde me voy a Cuenca a ver a mi hermano y volveré el domingo.

Bueno pues dale recuerdos. Me tengo que ir que, he quedado con Pilar, vamos a ver una casa, así que deséame suerte.

Para que te guste o para que no te guste.

Aun no lo sé. Nos vemos tío.

Pase el fin de semana en Cuenca, en casa de mi hermano. Mi hermano se independizo hace un año, le salió un curro de profesor de instituto en cuenca y vice de puta madre, en una buena zona y el curro es lo mejor, pero bueno está un poco lejos de Madrid, lejos, lejos no. Pero no para ir a verle todas las semanas. Nos divertimos comimos con sus compañeros de curro, o sea otros profesores y me presento a una profesora de gimnasia que se llama Laura y es con la que sale actualmente.

El domingo volví para Madrid y por muy extraño que pueda parecer, Bea me escribió un mensaje para ver si estaba bien, pero que se había creído. Que ser rechazado era igual a que te operaran a vida o muerte. Pero claro no podía contestarle una grosería y tampoco podía hacer como si no hubiera pasado nada. Así que decidí contestarle que me encontraba bien, que la vida sigue.

Y claro que sigue, el lunes por la mañana desde la oficina llame a una floristería y encargue un ramo de rosas para Julia, para que se las llevaran a su oficina.

Quien es Julia, pues mi ex. Y porque le envio rosas a mi ex, porque aun mantenemos una relación amigable, tan amigable que si los dos estamos sin pareja y uno de los dos quiere follar quedamos y follamos, afortunadamente hace un par de semanas me llamo para que cenara en su casa, y como no he tenido noticias de que este con alguien, pues creo que es hora de que me devuelva el favor. Y una buena manera para empezar es mandarle rosas. Porque esto no es llamarla quedar a las ocho en mi casa y un polvo y después cada uno a sus cosas, esto necesita tacto, y un ramo de rosas con solo mi nombre ya es un manera de empezar.

Les dije a los de la floristería que se las entregaran a las 11:30 y a las 11:41 ya me estaba llamando.

Buenos días corazón.- me dijo en cuanto descolgué el teléfono.

Buenos días, guapa. Que tal tu lunes?

Pues mejor desde que tengo en el despacho este ramo de rosas. A que se debe?

Es una manera de invitarte a cenar esta noche, y como se me da muy mal avisar con antelación a un restaurante he pensado que podrías venir a casa y preparo la cena.- Le dije

Con esto le estaba diciendo que después si quería podía quedarse a calentarme un poco la cama. No es plan decirle que tu ex, por mucho que hayas pasado con ella que lo que quieres es desfogarte porque la chica con la que tonteabas te ha hecho la cobra.

Julia se lo pensó un momento o más bien se hizo el silencio durante un par de segundos. Pero a los tres segundos.

A qué hora me acerco?.- me dijo con voz dulce

Cuando quieras a partir de las 7:30 que tendré que tener algo preparado para que piques.

Como me conoces, llevo yo el vino?- me pregunta

No hace falta con que lleves tu presencia me vale.

Ok, a las 8 en tu casa y gracias por las flores.

Las que tú tienes. Te veo a las 8. Ciao

Ciao.- se despide y cuelga.

Todo perfecto vendrá a las 8 y algo y me dará tiempo a preparar alguna pasta o un pescado al horno, lo que primero se me ocurra.

Ya por la tarde, después de hacer la compra decidí que lo mejor era una pasta con setas y gambas, un vino blanco y de postre un tiramisu comprado pero del bueno.

Como ya suponía, Julia se retraso y hasta las 8:20 no llamo a la puerta, pero cuando lo hizo se me olvidaron cualquier palabra por el retardo al verla entrar por la puerta con un vestido azul oscuro ceñido. Un colgante que le regala en nuestro primer aniversario. Que estaba casi seguro que no se ponía habitualmente, pero que siempre es un bonito gesto para la persona que regala que la otra persona se ponga algo que le regalaste.

Como seguía estando de buena la jodida. Se había rizado el pelo, y eso que siempre le dije que con el pelo liso estaba más guapa. Que le resaltaba más los ojos, y le daba otro significado a la palabra belleza.

Madre mía, como explotaba su 1,70 de altura, su pelo rubio y sus prominentes y bien puestas tetas. Casi casi la mujer perfecta, encima abogada con un buen sueldo, lástima que fuera tan puta. Porque si no es porque se follo a uno de sus compañeros de trabajo yo seguiría con ella, pero si, en un congreso en Austria sobre el derecho internacional se fue con un socio del buffet de abogados donde trabaja y estuvieron follando como locos, después cuando me lo conto me jodio bastante (pero claro yo había tenido un lio con una amiga suya al principio de la relación) así que no pude decir nada, todo se termino entre nosotros pero surgió una buena amistad. Más que amistad pero los dos sabíamos que no era nada serio, solo follar.

La cena fue una delicia, menos la charla. No sé porque aun intento mentirle en temas de amores, me fue preguntando por mis últimos ligues y yo le dije que no había nada serio, peo como suele pasar con las chicas, Julia tiene un 6 sentido para esas cosas, y sus comentarios iban desde la mínima ironía a los cuchillos por la espalda. Afortunadamente para mí que me cuente sus ligues o mejor dicho sus últimos polvos me es indiferente, la he tenido como novia y sé que el tío que salga con ella, me apiado de él. Aunque quiero dejar una cosa clara el día que me diga que esta con alguien y que es serio dejaremos los polvos tan estupendos que nos damos cada cierto tiempo para que al menos intente ser feliz con una persona, y sé que al menos eso no pasara hasta dentro de cierto tiempo.

En el postre la temperatura ya empezó a subir, su canalillo me estaba poniendo muchísimo y el recordar jornadas enteras dedicadas al sexo no ayudo a bajarme la calentura, cuando terminamos el postre Julia se fue al baño un momento y a mí me dio tiempo a poner unas velas aromáticas y a disminuir la luz, cuando salió del baño y llego al salón la agarre por detrás y la bese como si fuera el primer beso que le daba. Me encantaba agarrarla por detrás y besarla mientras le sobaba el culo. Julia no se quedo atrás y ya me estaba empujando para ir al dormitorio, cuando llegamos ambos estábamos muy cachondos, parecíamos en celo. En la puerta del dormitorio le baje la cremallera del vestido y ella me iba quitando el cinturón y los botones de la camisa. Al tumbarnos en la cama yo solo tenía los pantalones y a ella el vestido le quedaba por las rodillas dejando al descubierto un sujetador negro que le apretaba las tetas.

Su vestido y mi pantalón se quedaron a los pies de la cama mientras un seguíamos besándonos en la cama, mis manos fueron a sus pechos, tan conocidos y tan deseados. Sus manos apretaban mi cabeza contra ella para que el beso fuera un beso lleno de pasión, de deseo.

Al fi pude desabrochar su sujetador y tirarlo con el resto de su ropa, ahora ambos teníamos puesto la misma ropa, solo una pequeña prenda nos separaba de la desnudez a ella un tanga a juego con el sujetador y a mí un calzoncillo de cK.

Me puse a jugar con sus pechos a amasarlos a pellizcarle los pezones y por fin me fui de su boca a sus pechos, los bese los lamí les dedique tiempo para que tuvieran el trato que esos pechos necesitan.

Después mi cabeza fue directa a su ombligo una de sus zonas erógenas que tan bien conocía y de la que intentaba sacar el máximo placer para ella. Descubrí que se había quitado el pirsin que se había hecho años atrás, aun así le dedique tiempo a que gozara. Y por ultimo su tanga me ocultaba su sexo, sus labios su vagina tan apretada como la primera vez y tan húmeda como todas las veces. Sus coño que tanto conocía y tanto placer me daba. Solo recordarlo me hacia desearlo más. Le quite el tanga y me encontré lo que tantas veces me había encontrado. Un coñito depilado y húmedo listo para lamerlo para penetrarlo. Pero aun me esperaba una sorpresa, Julia saco de debajo de la almohada un pequeño juguete, un anillo de durex que vibra. Me conocía tan bien que en vez de ir al baño había ido a mi habitación a esconderlo, así que no podía dejar de utilizarlo.

Entre lamida y lamida le iba dando un poco de uso al nuevo juguete, ya habíamos probado juguetes antes y puedo decir que dan un poco mas de juego a las habituales noches de sexo.

Después de conseguir que tuviera un orgasmo bestial, cambiamos de posición, se recogí un poco el pelo, me tumbo en la cama y se dirigió a devolverme el favor. Esta vez empezó por el capullo, porque no sé porque algunas veces tiene la manía de empezar por los huevos y aunque no le doy importancia, prefiero que me coman la polla a que me toquen los huevos.

Estando a mitad más o menos de faena cambio de posición y puso su culo delante de mi cara, y con ello su rajita enfrente de mi boca, que puedo decir a eso, comenzamos un 69 que tantas veces realizado en esa misma cama.

Cuando note que me iba a correr, la avise y además le enchufe el anillo directamente en su clítoris para que gozara. Me corrí abundantemente, porque no me había dado tiempo a hacerme una paja en todo el día.

Julia se asusto de la cantidad y aun así se lo trago todo, o casi ya que fue al baño a limpiarse un poco y a escupir supongo.

Cuando volvió verla de nuevo en la puerta desnuda me trajo buenos recuerdos. De tantas noches que se había quedado a dormir, de tantas noches de sexo salvaje y de amor. Y de otras tantas noches que habíamos sido una pareja hasta que se rompió. Pero verla así de nuevo me calentó tanto que enseguida mi polla se puso dura y tiesa como un mástil, Julia la vio y se acerco a la cama. Nos besamos otra vez y la tumbe en la cama. Me puse encima de ella.

Que cariñoso estas hoy, me lo vas a hacer despacio y con amor.- me dijo con ojos dulces y voz melosa.

Verte de nuevo me ha hecho recordar nuestros días de amor y desenfreno, y porque no decirlo, se me ha levantado algo más que la moral.

Yo te he visto como has izado la bandera al verme. Pero sabes una cosa, me vale con el palo de la bandera no hace falta que te pongas nada mas, hace 4 meses que no me acuesto con nadie que no sea contigo y además hoy no es un día de peligro. Pero si quieres hacerlo con condón no me importa.

Sabes que a mí tampoco, así que gorrito fuera.

Me saque el condón y empecé a penetrarla primero suave y cuando ya la tenía toda dentro de Julia a hacerlo con más rapidez.

Ahhhhmmmmm, si si ,como necesitaba una velada como esta. Sigue cariño sigue.- me decir Julia.

Como me gustas cuando me dices esas cosas. Y como me pone ver tus pechos dar botes.

No empieces con tus ahhh, guarrerias. Y no pares no pares. AHHHHH.

SI SI, Julia como me gusta follarte.

No hables y cómeme las tetas.

Me puse a comerle las tetas y después a besarle el cuello. Después de un buen rato de misionero cambiamos de posición. Primero me puse yo abajo y ella sentada sobre mí, con sus piernas a mis lados. Me gusta esa posición porque puedo ver como mi polla entra en su coño y porque mis manos llegan a sus pechos para cogerlos.

Pero sin duda la mejor posición es la del perrito, Julia tiene un culo de infarto, (su agujerito pequeño es una delicia) y metérsela desde atrás estimula tanto que es siempre la última posición que realizamos.

Cariño, me estas llenando, hacia meses que no me lo hacías tan bien.

Te quejaras de cómo te trato, soy todo tuyo. Y siempre me esfuerzo para llenarte.

Ahhhmmm, si pero otros días no tenia tantos orgasmos.

Tantos, cuantos has tenido?

Este será el tercero, así que porfa no tardes mucho que me quiero correr contigo.

Por fin me vino el espasmo inminente antes de correrme, lo estábamos haciendo a pelo y estuve tentado de correrme dentro pero en ese momento sentí algo y la saque, le llene el estomago de mi corrida y ella me lleno las sabanas de la suya. No se enfado por que se la sacara en el último momento ni de que me corriera en su estomago otra cosa hubiera sido que lo hiciera en su cara, que estoy seguro se hubiera puesto como una loca y me hubiera arañado.

Así lo único que hizo fue ir al baño a limpiarse mientras yo me quedaba en la cama esperándola, encendiéndole el cigarro que le gustaba fumar después de hacerlo.

En cuanto llego le pase el cigarro y le pase el brazo por detrás de la cabeza. Me miro me tiro el humo y empezamos a hablar.

Y bien a que debo que me llamaras? La última vez que me llamaste fue porque tenias una cena en la empresa y querías llevar a alguien. Esta vez porque Ducati?

Me apetecía verte, además la última vez fuiste tú quien llamo y yo no te pregunte porque me llamaste, de hecho creo que el pacto no escrito era que si no estábamos con nadie y queríamos podíamos llamarnos.

Te conozco mejor de lo que crees, Pedro. Sé que tienes alguna razón, pero bueno no hace falta que me la digas. Solo una cosa

Qué?

Me ha encantado volver a verte, y saber que eres el mismo de siempre.

Gracias. Me pasa el cigarro

Ahora fumas?

No pero quiero apagarlo y comerte entera.

Goloso. Ven aquí.

Así empezamos otro más que duro hasta las 2 de la mañana, esta vez fue más amor que sexo, y al acabar me corrí dentro de ella cuando llegamos al orgasmo.

No sé a qué hora se fue pero al levantarme tenía una nota en la nevera, que decía: Dale una segunda oportunidad. La que nosotros no tendremos

III Parte

Paso una semana desde que vino a casa Julia hasta que le mande un sms a Bea, no quería cerrar ninguna puerta, me lo pasaba bien con Bea es cierto, y aunque me encantaría mas, bueno no está mal tener una amiga, (para que mentir, yo lo que quería no era ser su amigo precisamente) además Pilar me había dicho que nunca se sabe lo que puede pasar, que hablaban en la oficina y nunca dijo nada malo de mi. Pero también es verdad que las palabras de Julia me habían hecho pensar, tenía toda la razón era por una chica por lo que la llame, pero también sus palabras me hicieron recapacitar. Aunque no se lo había dicho, cada vez que estaba con ella pensaba en volver a salir con ella en pedírselo. Pero por lo que parece ella tenía claro que no habría esa oportunidad.

Volvimos a retomar la comunicación, no quedábamos tanto, dado que este mes han tenido mucho trabajo con el tema del IVA y otros asuntos así que me ha dado la excusa perfecta para no quedar tanto.

A principios de agosto me sorprendió que me llamara ella, me recordó que tenía una cena que pagar y ella una partida de bolos, lástima que la pareja oficial estuviera de vacaciones en Ibiza, pero me reconforto que me dijera que podíamos quedar nosotros solos. Y bueno después de pensarlo con bastante rapidez no me importaba quedar. Sabía que tenía posibilidades cercanas a cero de conseguir algo mas que un strike en los bolos, pero la esperanza es lo último que se pierde.

Al menos había dado el paso ella de llamar, yo por mi parte fui sin esperanzas ninguna y por el simple hecho de que ceno todos los días y ese no iba a ser menos.

Como venía siendo habitual la recojo en la puerta de su casa, nos damos dos besos y le pregunto que a donde le gustaría ir esta vez, me dice que ella es la de otra provincia que si puede ser un centro comercial con bolera y restaurantes. Conozco un par de esas características, así que pensándolo rápido elijo el más cercano, porque la vuelta puede ser mortal si la noche se enrarece, me empieza a contar cosas sobre el trabajo, como trabajan con muchas empresas de gente famosa, me cuenta facturas de personajes del mundo rosa, que con algunas de esas facturas ella podría vivir un año. Yo nada le sigo el juego y le también menciono cosas del trabajo pero de vez en cuando suelto algo gracioso porque si no vaya noche nos espera.

Llegamos al centro comercial que por suerte no es el mismo que fuimos aquel fatídico día, esta vez le voy a decir que la cena en un sitio distinto, como aun teníamos tiempo, entramos en un italiano, no estaba mal la verdad comimos bien, Bea pidió pizza italiana y yo un plata de pasta, aun tuvimos tiempo de un helado digestivo antes de ir a jugar a los bolos.

Hasta ese momento no me había fijado en su ropa ni en nada, parecía que la estaba evitando que simplemente actuaba como si fuera un maniquí. Pero eso cambio cuando la mire de nuevo. Vaqueros de tiro corto, una camisa blanca. No sé cómo no me fije cuando subió al coche.

Llegamos y nos pusimos en la calle numero 5, la primera partido fue bastante fácil, la gane casi sin esforzarme porque todas sus bolas se caían por los laterales y con pocas que acertara yo gane.

La segunda pusimos barras laterales para que las bolas no se cayeran, le estuve diciendo que así jugaban los niños pequeños, cada vez que se lo decía ella me daba un puñetazo en el brazo a modo de reprimenda pero sin querer hacer daño. Esa ya estuvo más reñida pero como ya había calentado y me había pillado la misma bola siempre para lanzar hice un par de strike y también gane. Pero lo que me hizo perderme fue en la última tirada de ambos, cuando se agacho para tirar se le levanto el tanga negro que llevaba y todo lo que había pasado antes se me había olvidado, eso de solo amigos se borro de mi memoria, eso de no volver intentar besarla se evaporo de mi mente. Claro que el pensamiento de intentar algo solo duro un momento tras recordar su cobra. Lance hice un strike me acerque a ella y le hice un baile tonto delante como si tuviera cinco años y la hubiera ganado en algo. Me puso cara de que tonto eres, esa cara que ponen las chicas que es de enfado pero de chica mala. Le propuse otra por lo menos para que ganara una pero me dijo que no quería limosnas que ya me ganaría otro día. Me reí y le dije que antes dejara de soñar, nos quitamos los zapatos de los bolos y a la salida. Cuando nos íbamos se me agarro al brazo y me dice que aún es pronto, no eran más de las 00:30 de la noche que aun estábamos a tiempo de irnos a algún sitio de marcha de la ciudad. Hay fue cuando yo pensé, vamos a ver, somos un tío y una tía, que hemos ido a jugar a los bolos porque no somos pareja, y no porque yo no quisiera, tú tienes novio en tu ciudad natal, me estas pidiendo salir de fiesta.

No entendía esa proposición pero vamos que tampoco tenía otra cosa mejor que hacer.

Salimos del centro comercial y nos dirigimos a Torre-Europa que es una zona de marcha de Madrid donde se puede tomar algo y no suele haber problemas, lo malo es que tampoco teníamos unas pintas como las que tiene la gente que va allí, bueno estaba seguro que a Bea la dejaban entrar, como estaba la tía, además se subió la camisa y le hizo un nudo para que pudiera ver su estomago plano y su pircing en el ombligo cosa que no sabía que tenía.

Yo aunque llevaba un polo, no era nada del otro mundo así que como siempre tengo una camisa del traje en el maletero me cambie cuando aparcamos. No sé porque pero no perdió ni un momento la vista de mi cuerpo cuando me cambie, no es que tenga un cuerpo de modelo, pero me mantengo en forma, y tengo mucho bello en el pecho y abdomen. El hombre y el oso cuanto más velludo más hermoso.

Beatriz en cambio nada, ni un pelo fuera de su sitio más que nada, porque yo también me había fijado en su cuerpo cuando se anudo la camisa.

Llegamos a torre Europa y nos pusimos a esperar la cola de uno de los locales, justo cuando solo había un grupo delante de nosotros salen unas compañeras de mi anterior trabajo, Laura y Monse, ambas de unos 26 años y guapísimas, las saludo y nos quedamos a hablar pero noto como Bea me abraza por detrás y me dice que ya podemos pasar. Me despido de mis antiguas compañeras más por no hacerle un feo a Bea de poner en evidencia su actitud. Entramos en el local y nos ponemos a bailar, se que la mirada de todos los hombres se ha puesto en su tremendo culo.

En esta foto se le bajo la camisa, pero que lo que quería enseñar, no soy de los que le mole hacer fotos a un culo, pero este era una excepción. Pero que mas daba no iba a poder hacer nada, menos mal que al menos parecíamos pareja y los demás tío no se acercaban a ligar, que si no me da algo si se le ocurre empezar a morrease con algún subnormal.

Después de movernos un rato y tomarnos unas copas le digo que ya deberíamos de irnos.

Pero si nos lo estamos pasando bien, porque te quieres ir?- me dice

Porque en realidad no se que estamos haciendo.

Pues divertirnos.

Ahh vale. Y si nos vamos a divertir a otro pub, es que este no tiene buena fama, demasiadas broncas. (mentira, es un sitio donde no hay broncas, pero ella no lo sabía)

Bueno tú mandas, pero en el próximo quiero un baile cuerpo a cuerpo. Concédele eso a la chica que ha perdido contigo a los bolos.

Nos salimos del sitio y nos vamos a otro, pasamos por uno que tenía una música muy alta y seguimos de largo. Pasamos enfrente de otro con música relajada casi decir lenta, y me toma para entrar. Por desgracia le miro el culo y entonces mi conciencia desaparece.

Entramos y bailamos y hablamos, pero yo sigo con la cabeza a mil, pensando que hace la tía esta. Así que voy a intentar jugar y ganar, me acerco a ella para bailar y nos pegamos aun mas, ella me sonríe como si al final me hubiera decidido por disfrutar la noche, pero en vez de eso yo lo que voy a intentar es besarla. Ya me causo daño la ultima vez, esperemos que esta no sea así.

Y justo en un movimiento que ella se hecha para delante y yo debería haberme ido un poco para atrás me lanzo calculo que no nos demos de morros y sea un espectáculo de risa y sangre y cuando ya viene hacia mía, le hago un movimiento y le doy un pico, pero Beatriz se separa y me dice con la cabeza que no. Y desde ese momento ya guarda mas distancia. Yo me hago el indiferente como si no hubiera visto su gesto pero tampoco ataco. Le hago señas que me voy a la barra y le pido algo a ella.

Cuando vuelvo estoy mirando como tiene locos con sus movimientos y su simpatía a un grupo de chicos, uno de ellos parece que le dice al resto que va a atacar, yo no sé qué hacer si mantenerme al margen y mirar o ir y poner las cosas en su sitio. Me decido por la primera, detrás de una pareja que se estaba dando el lote miro como el tío se pone a bailar alrededor de ella. Cuando Bea se da cuenta, le evita, intenta buscarme y no lo logra asique poco a poco se separa del tío, y el pesado la sigue un amigo del plasta va a cerrarle el camino pero esto ya me parece abusar.

Me acerco a Bea y cuando me ve, se alegra más que nunca, supongo que prefiere mi compañía a la de sus nuevo amigos. Me acerco y me quedo a unos pasos de ella y tiene que venir a mí, lo hago solo como símbolo de que me necesita. Ella nota que tiene que recorrer mas camino pero le sigue pareciendo mi compañía más grata.

Le tiendo su bebida la misma que ha pedido en todos los sitios a los que hemos ido, sus seguidores vieron como la pobre muchacha estaba acompañada y se llevaron una desilusión, excepto el macho de la manada que aun se mantuvo cerca de Bea. Bea en seguida se dio cuenta y se acerco mas a mí. Yo estaba disfrutando de todo esto hasta cierto punto no me podía mantener demasiado deleitado porque la chica era capaz de darse le vuelta y morrear al chico, que por desgracia una ex de un amigo se lo hizo a mi amigo un día hará unos años.

Bea se acercaba cada vez más, hasta que ya no pude más y le tuve que decir al oído que me encantaba la situación.

Y que es lo que te divierte tanto?- me pregunto.

Que han intentado rodearte una manada de hienas, para que te ataque el macho de la manada.

Si ya lo he visto, por suerte tengo un león a mi lado y me protege.

León? Eso te convierte a ti en..?

Quién sabe?

Solo se me ocurre un par de animales.- le dije yo.

Como uno de ellos sea zorra, te juro que me voy a los brazos de la hiena jefe.- me dijo con cara seria, con cara de enfado.

Pues no, yo había pensado en dos, en una leona, que sería lo justo al estar con un león, aunque también se han dado casos de tigresas que han estado con leones

Vale y el otro.?

El otro animal, es uno que me demostraste hace poco. Una cobra bien ejecutada, te suena de algo.

Si, el día que te tiraste a mi cuello. Pero no me parece que solo por eso me vayas a llamar cobra.

Entonces que animal, prefieres?

No lo sé, déjame decírtelo al terminar la noche.

La noche es aun es larga para que me hagas esperar tanto.

Bueno te prometo que valdrá la pena.

Y se puso de nuevo a bailar pegada más a mí. El otro chico viendo que las posibilidades eran ahora nulas se fue con su grupo de amigos, seguro que diciendo que la tía era una calientapollas y muchas cosas más que ni nos enteramos ni nos importaron.

Por fin nos fuimos de torre Europa, serian las 4 de la mañana, aun me tenía que contar lo del animal, y de paso preguntarle por todos los mensajes que le llegaron esa noche, pero bueno aun teníamos tiempo de camino a dejarla en su casa.

Lastima que el viaje fuera tan silencioso, yo no quise decir nada y por su parte Bea tampoco así que lo único que sonó fue la radio y un par de avisos de sms.

Ya cuando llegábamos a su calle, se me ocurrió preguntarle por los sms.

Si que has estado esta noche reclamada, si no has recibido 14 mensajes no has recibido ninguno.- le dije sin apartar la vista de la carretera.

Bueno habrán sido alguno más, pero gracias por darte cuenta. – me dijo a la defensiva

Vaya veo que mantienes las amistades con mucha gente, y que dice tu novio de esto. Si es que tiene que decir algo.

Justo esas palabras las dije mientras aparcaba como la última vez delante de su puerta y justo como aquel fatídico día la mire mientras iba a bajarse.

Novio no lo sé. Si te refieres al amigo que te comente, que estábamos saliendo se acabo. Es uno de los pesados que me escribe tanto, el resto supongo que serán de mis amigos animándome por haberlo dejado o de sus amigos pidiendo que no le haga eso al pobre chico.

Perdona??!!!!!.- dije con cara de incredulidad.

Estas perdonado, jeje (risas) y como te iba diciendo mi novio no creo que pueda decir nada porque está claro que no tengo. Si tuviera a lo mejor diría algo. Y como también abras visto mientras he estado contigo no he mirado el móvil.

Bea, no te entiendo.

Pues te hago un mapa.

Y diciendo esto fue ella la que se tiro hacia mí, me hubiera gustado hacerle una cobra y durante un breve instante me fui para atrás, pero justo cuando ella pareció darse cuenta de mi movimiento me tire hacia delante para besarnos como llevaba esperando tanto tiempo.

No fue un beso largo, no fue un beso húmedo ni caliente, fue el beso que marcaria el inicio de algo.

Se separo de mi, abrió la puerta y me dijo mientras sus ojos apuntaban a los míos.

Ahora soy tu leona. Pero cuidado que algunas veces soy una tigresa.

IV parte

La ruptura con su "amigo" fue el día de antes de que quedáramos, había ido en viaje relámpago a Salamanca con vuelta en el mismo día solo para dejarle las cosas claras al chico. La relación por lo que me comento aunque llevaban casi dos años, la mitad la habían pasado separados, un curso del chico en Barcelona ahora ella trabajando el Madrid.

Por suerte para mi, Bea se había tomado la ruptura bien, y no tenía pensado pasar por una fase de luto ni de espera. Yo le gustaba ella a mí también. Así que porque esperar a lo inevitable.

Desde entonces hemos quedado varias veces, la recojo al salir del curro y tomamos algo, quedamos para cenar. Por fin pudimos pagar la deuda que habíamos contraído Luis y yo en el futbolín, las invitamos a un restaurante del centro de Madrid, la ocasión lo merecía. Buena comida, vino para la ocasión y mejor compañía. La cena fue la ocasión perfecta para confirmarles que habíamos empezado a salir, los dos se alegraron por ello y nos dijeron que desde que nos vieron el primer día ya pensaban que teníamos muchas cosas en común y que éramos tal para cual. Claro que no sabían toda la verdad, a Luis no le había contado lo del "amigo" sabia partes de la historia pero no toda.

Afortunadamente cambie de tema para que Bea no se sintiera presionada, les pregunte por la casa que habían ido a ver, y si habían visto mas o si ya se habían decidido. Pero claro comprar una casa no es como comprar una barra de pan, hay que pensar mucho y hay que hacer muchas cuentas.

La cena termino bien, no habíamos bebido tanto pero no queríamos coger el coche tan pronto, mejor dejar pasar unas horas. Salimos del restaurante y cerca había una par de discotecas para jóvenes y no tan jóvenes, pasamos a un par de ellas pero al final nos decidimos por una terraza en la zona de huertas, que queda cerca de muchos pubs.

Como siempre pasa en una pareja que empieza nada más entrar en los pubs, nos besábamos con pasión pero no con moderación, pero para que mentir esa noche estaba de un caliente que esperaba que la noche acabara con los dos en la cama durmiendo juntos pero después de una buena sesión de sexo. Con Julia me acuerdo que la primera noche fue espectacular, una noche que recordare siempre, era invierno y estuvimos 4 horas haciendo el amor hasta acabar agotados.

A las 4 de la mañana nos despedimos de Luis y de Pilar, tomamos rumbo al coche, cogidos de la mano y hablando de nuestros amigos, por lo menos yo les debía mucho. Bea estaba aun un poco callada, pensando.

Nos paramos a la altura del coche y el beso antes de abrir las puertas. Al montarnos me dice que si prefiero mi casa o la suya, a decir verdad la suya queda más cerca, pero en la mía tengo ventaja además de una cama mas grande. Pero no quiero perder tiempo, ahora mismo estoy seguro que podría parar el coche en mitad de la carretera y empezar a comerle el coño hasta que se hiciera de día.

Vamos a su casa y parece que después de pensar en esa última frase ya empieza a hablar, nos contamos o más bien me empieza a preguntar cosas intimas.

Ese día Bea llevaba un una cazadora blanca, una camisa amarilla y un pantalón blanco de algodón, que dejaba intuir un tanga de color blanco o de color carne, pues lo mejor estaba aun sin verse. Que se puede decir ante semejante belleza.

Llegamos a casa, no era la primera vez que entraba pero si la primera que me iba a quedar a dormir, lo primero que hizo fue ir al baño, en ese momento abrí las ventanas de la habitación, una manía que me pego Julia y que no me disgustaba en absoluto. Después algo de música romántica y por ultimo deshacer la cama. Escuche el ruido de la puerta del baño y me asome para ver a Bea. Venia ya sin la cazadora y su camisa dejaba ver unos pechos que me moría por morder y el pantalón abierto enseñándome el borde de un tanga blanco.

Yo me quite el polo dejando mi pecho y abdomen velludo al descubierto. Se acerco a mí y me empezó a recorrer el abdomen dejando que sus dedos atraparan los pelos, yo por mi parte la ayude a quitarse el pantalón, dejando que callera al suelo, y pudiendo ver unas piernas largas y delgadas, un culo que si antes lo había adorado viéndolo cubierto ahora me moría por verlo sin nada. Y su pecho con cada respiración subía y bajaba que daba gusto verla respirar.

Nos empezamos a besar cuando una brisa de aire caliente entro por la ventana, esto es Madrid y el calor no se va. Pero ese soplo dejo también pasar algo de luz, y vi el bellezon que tenía delante. Mis manos la atrajeron hacia mí para poder besarla, sus besos eran tan cariñosos como los que me daba Julia cuando estaba enamorada, pero los de Bea también son húmedos, mueve su lengua por mi boca succionando y golpeando a mi lengua.

Sus manos ahora no pierden tiempo, desabrochan mi pantalón y dejan al aire una erección aun cubierta por mi bóxer. Pero ahí no se para y mete sus manos por los laterales de mi única prenda, yo mientras le desabrocho el sujetador dejando que sus pechos dejen de estar aprisionados, me separo de ella para que se lo quite del todo, y veo sus aureolas, sus pezones rosaditos y tiesos. Mis manos no pueden mas y van a tocarlos, vaya tetas tiene el tamaño justo para cogerlas en las manos. Por desgracia pierdo la concentración cuando sus mano roza mi bóxer por fuera, me está sobando, restregando su mano. Y me empuja a la cama, me tira y que quedo en la cama, viendo como se pone delante de la cama, se agacha y me enseña su tremendo culo solo tapado por la fina tela del tanga. Se vuelve a incorporar de espaldas a mí, parece que quiere hacerme un baile pero lo que hace es aun mejor, se quita el tanga, y se pone de espaldas a mí, tapándose los pechos, ahora se da la vuelta, la luz que entra por la ventana solo le ilumina de la cintura para arriba, y por desgracia no le veo mucho, menos mal que se como es la forma.

Se acerca a la cama, se pone de rodillas en la cama y viene hacia a mi poco a poco, cuando sus cabeza está a la altura de mi cabeza me besa el cuello y me lame desde el culo hasta la oreja un par de veces, después me muerde el lóbulo de la oreja y por ultimo me muerde el cuello, ante este comportamiento solo me dice.

También puedo ser una tigresa, lo recuerdas verdad.

Su cuerpo se situó encima del mío, aunque su la temperatura de la noche fuera de 36 grados su piel parecía más fría, el tacto de sus pechos sobre los míos me dio la sensación de que no pesaban. Y sus labios, tan húmedos hacia media hora eran ahora más calientes que el resto de su cuerpo. No podía creer la suerte que tenia.

Empezó besando la tripa, lamiéndome en círculos el ombligo para después bajar a mi polla la cual estaba esperando caricias, aun no estaba erecta pero sin duda ya morzillona, comenzó con lengüetazos pequeños en el glande, paso a besos y después se engullo entera la cabeza lamiéndola en cirulos y sintiendo sus dientes en la piel sensible. Poco a poco fue metiéndose en la boca el resto de mi aparato, hasta que ya la longitud no le permitía metérsela entera, cuando ya llego al tope bajaba y subía la cabeza, un par de veces se la saco entera para quitarse el pelo de la cara o para respirar bien, pero volvía otra vez a comerme la polla. Sin duda hacerme la cobra no era lo mejor que hacía con el cuello, pues la verdad es que era la mejor mamada que me han hecho hasta el momento.

Paro cuando ya le dije que me iba a venir que no quería hacerlo en su boca, paramos y vi que mi polla había adquirido una longitud que me sorprendió a mí mismo, me parecía que de tanto chuparla me había crecido a lo largo y a lo ancho. Mire la cara de Bea y tenía una cara de chupadora de pollas que además le gusta, y además para darme más morbo se paso la lengua por los labios, se tumbo y me abrió las piernas para que viera que tenía que hacer yo ahora.

Me puse de rodillas en la cama, con la mirada en sus labios vaginales, intentando oler el aroma que salía de ellos, pero solo podía oler a sexo; primero me tome la libertad de besarle el ombligo como ella me hizo a mí.

Pase después a pasar mi lengua por sus labios vaginales, pero lo más seca posible para saborear y ver cómo reaccionaba, después ya con la punta de la lengua fui introduciéndome en ella, lamiendo cada centímetro de su coño, y relamiendo todo lo que pude su botoncito, tan sensible que cada vez que lo hacia Bea gemía de gusto. Estuve así hasta que la hice correrse, claro que además de darle un repaso a su coño también mis manos le daban un buen magreo a sus pecho, así que ya cuando me canse después de un trabajo bien hecho me incorpore, saque un condón de la cartera pero me dijo que no hacía falta. Mejor para mí, me moría de ganas de follar ese coñito a pelo.

Nos colocamos casi como estábamos ella debajo y yo encima, no era el misionero, ya que le coloque las piernas en mis hombros.

Bea se agarro a las sabanas mientras iba introduciéndome en ella, se mordía los labios para no gritar, o porque le estaba encantando. Mi polla se iba haciendo más gorda cada centímetro, notaba sus paredes como me apretaban y lo caliente que estaba, por fin llegue a tocar con mi huevos su culo, me quede un momento parado esperando que Bea se adaptara a mi grosos y después inicie un movimiento lento de retroceso, le saque la polla hasta la mitad para de nuevo metérsela de nuevo pero más rápido, así hasta que el ritmo fue constante, las penetraciones iban al compas de los jadeos de Bea, mientras yo veía como sus pechos danzaban de arriba abajo como sus pezones aun con poca luz se veían tiesos antes esas dos montañas en movimiento.

Ya no podía mas, después de estar 15 minutos con el mete-saca quería correrme, Bea había tenido al menos un orgasmo mas con la penetración pero yo aun tenía que descargarme. Se la saque y me la cogí, le dije que la quería coger a perrito, así que bea se dio la vuelta y me puso el culo a la altura para envestirla, se la coloco en su coñito y en un movimiento se la comió entera, ahogo un gemido pero se le noto bastante, volví a empezar y le dije que me iba a correr, a lo que Bea me dijo que podía hacerlo dentro pero que mejor lo hiciera en el último de la noche, así que se la saque y me corrí en su espalda, el semen le fue desde el culo hasta el cuello en unas cuatro explosiones, no me podía creer la fuerza que llevaban pero era verdad después tanto tiempo la presión hizo que al menos la primera recorriera toda su espalda.

Sin esperar nada, me dijo que siguiera que le había gustado ponerse a cuatro patas.

La cogí de las caderas, mi polla estaba aun blanda después de la corrida, pero verla en esa posición hizo que al momento se pusiera tan tiesa que casi dolía. Primero fue el capullo, en su coño, y al instante otra vez poco a poco el tronco, mi pelvis choco con su culo y empezamos el mete-saca, fue otra sesión de sexo para gozar, al principio solo fueron penetraciones pero poco a poco iba haciendo que su cuerpo se sentara, con lo que sus pechos estuvieron al alcance de mis manos. Con su coño perforado por mi polla y sus tetas en mis manos empezamos una carrera al orgasmo. Pero como paso antes, me canse de esa posición y le pedí que cambiara.

Ahora me tumbe yo y ella se sentó encima de mi, con sus piernas a cada uno de mis lados, la penetración no era tan profunda pero la podía besar, y comerme esos pechos tan ricos que tiene.

No se cuanto aguantamos, pero fue algo más que con el primero y esta vez me corrí dentro de ella. Llegamos al orgasmo los dos a la vez. Descansamos un momento mientras la corrida de ambos intentaba salir del coño de Bea, después ella se fue a lavarse y yo con unas toallitas húmedas me secaba. Volvió al momento como lo hiciera una hora antes, pero esta vez tenía una sonrisa en la cara que no tenía antes, se tumbo a mi lado de cara a mí, nos fuimos besando pero no como para empezar otra vez. Y poco a poco lo dejamos, pero yo mantenía los ojos abiertos mirando sus pechos, sus pezones aun seguían tiesos, seria que aun estaba excitada, no lo sabía. Solo había una manera de saberlo, baje mi mano a su coño, bea lo noto y me miro como sabiendo que no tenia suficiente, abrió un poco las piernas y note que aun seguía mojada. Fui introduciendo un dedo poco a poco, notando que aun seguía mojada por dentro, y ella alargo la mano a mi polla, empezando una maravillosa paja. Cuando note que ya estaba muy mojada y yo con la polla tiesa me coloque en el misionero y empezamos de nuevo.

Esta vez fue más delicado no tan rudo y al corrernos nos quedamos unidos, yo encima y ella debajo un buen rato hasta que me fui a limpiarme y ella se limpiaba con las toallas húmedas. Volví y se había dado la vuelta dejando ver su culo y un regalo para la vista.

Por la mañana lo volvimos a hacer, y así hemos empezado una relación que espero que dure mucho, pues aparte del sexo que nos compenetramos muy bien tenemos mucho en común.