La cita soñada

Dos chicas tiene una cita pasional, para ellas es natural amarse, disfrutarse o es lo que creen

Frente a frente,el latir de sus corazones, sus miradas fijas una a la otra no hay nada más alrededor. Si, nada más existe, solo el presente, sus mentes no tienen más recuerdos ni más objeciones.

Ella, la de pelo castaño no puede resistirse y la besa con pasion, asi en plena calle a lena vista de los transeuntes y de no ser por la otra, una menuda morena de pelo de ebano, que resistio el embate pasional resibiendo ese fogozo beso, ambas abria caido en la baqueta hi mismo darian rienda suelta a su furor sexual.

¿Cuándo fue que hicieron ese primer contacto? Aquella tarde en la calle cuando una la miró a la otra y quedaron flechadas ¿Cuando y cuando sucedió? No pueden recordar, ninguna de las dos puede rememorar cuando fue, lo único que saben es que se desean, corriendo de la mano hasta un callejon donde una llena de saliva y chupetones el cuello de la otra; para hacer un efuerzo por nesurarse, sonreise y perderse entres sus ojos, para ir a comer juntas como...siempre, como creen que lo han hecho, aunque en instantes una dude e incluso se asuste al no reconecer a su pareja, la morena a veces duda siquiera de conocer a la voluptusa muchacha de pelo castaño. Y ésta no sabe en ocasiones el porque se muerde los labios al ver a la tierna y dulce mujercita que lleva de la mano, no esos segundos de extrañeza pasan, solo saben que quieren tocarse, amarse.

-“Se aman mutuamente”- se escucha en sus cabezas mientras se contemplan en aquel bar, comiendo despacio, pues no pueden ni deben perderse cada acción y movimiento que las cautiva, las atrapa, que las encierra en un placentero momento.

La música, rítmica, hermosa, romántica, sutil y elegante... ellas se sonrojan al observarse salvo por los movimientos en su baile al atardecer en el... ¿Departamento?. No importa, no, no deben distraerse... mientras bailan al son de aquella hermosa música, la melodía que las envuelve, que las embriaga; no duermen, deben seguir aquella danza, aquel vals lento, sin comprender bien a bien ni como, cuando o porque, lo único que saben es que están una enfrente de la otra, que no están soñando, pues uno que otro beso en los labios, sentir su calor, su aliento; el sonrojo al sentir sus manos sobre sus hombros y en su piel es prueba suficiente de su realidad...su cita.

La expera saborea y chupa la piel de la inocente, y se arranca las prendas que le queman y le estorba, excitando a la primera que sin miramientos lame la vulva y su amante aprisiona con sus piernas canela la cabeza para que no la aprte, no hasta que le hace gemir y gritar que la ama; mientras la dueña de esa buca siente la sed de la desesperada ansiedad ardiente, si necesita beber ese jugo de la vaigina, no sabe porque solo lo hace.

Despues de arrancar el primer climax la morena toma el control, llelos labios al seno blanco y toma para si el pezon café calaro de ella y mama como una infante del pecho materno, la sensacion de que alimenta a su amante hace que la castaña se estr,ezaca, que su vagina se humedezca y su nena lo sabe y lleva sus dedos hasta ella para masturbarla mientra continua alimentadose.

Los ojos de quien ha despertado en ellas el cariño más sublime y maravilloso no deja de contemplarlas; un individuo el cual no notarias si se cruzara contigo en algún momento del día, que hoy para mitigar su interior tuvo una inspiración cuando las miro caminando casualmente a la distancia. Dos mujeres , dos personas que solo se han cruzado en la calle mientras el esta ahi recargado en la pared.

Oh si, ¿Porque no?” ¿Porque no trastocar sus mentes, sus corazones para alegrarse el día? Y así fue como con observarlas, en el momento que toma inhalar y exhalar el aliento las toco, las detuvo y les hizo mirarse, encontrarse bajo el velo de una ternura, de una sencilla sonrisa. Conectar sus manos y sus labios en cada momento , mismo que va inflamando cada vez más sus pechos con el fuego de la pasión que cada una de ellas reserva en su interior, avivando esas chispas nerviosas. Activando con su voluntad los centros de placer y deseo de ambas desconocidas con la intensidad propia de dos amantes.

Para quienes se pasaban por la calle en ese primer momento, solo vieron a un hombre acompañado de dos jóvenes que entraban a una casa; la cena romántica, el baile, toda aquella cita era una ilusión depositada en aquel momento fugaz, nutrida por la mirada de aquel hombre que disfruta de verlas inmersas en todo aquello, actuando una obra para él.

Lo que él esta alimentando poco a poco, protegidos por las paredes de su hogar, mientras las miraba contenerse la una a la otra en la creciente atracción que le había ido germinando, en algún momento disfrutaría de un momento inolvidable que le haría gozar el fin del día y el transcurso de la noche una vez que estallara en el clímax, mientras suavemente hace bajar las luces la luz alrededor de aquellas chicas que lo deleitaran con un baile diferente en unos momentos.

Así mientras un quinto canto orgásmico llegue a sus oídos , la idea de liberarlas de la fantasía fue descartada, las dejaría así, fomentaría aquellos sentimientos al punto que se volvieran verdad, hablándoles, reescribiendo sus recuerdos como la conciencia que todos tenemos, una conciencia que se divierte se ver, escuchar y manipular a dos chicas que harán toda acción lujuriosa que les instruya, siendo novias, amantes, sumisas actrices de un espectáculo que les hará repetirlo una y otra vez... para cuando él lo deseé.