La Chuchi-Barbie del Gimnasio

Una hermosa cuarentona bastante pervertida que me vuelve loco.

EL CUCHI-BARBIE DEL GIMNASIO.

El relato que les voy a contar es totalmente real, pasó en las anteriores vacaciones de mitad de año en pleno verano 2004. Me encontraba en la playa ejercitando un poco la vista, había niñas muy lindas tomando el sol con pequeños vestidos de baños. Seguía yo mi recorrido por la playa cuando de repente divisé a lo legos un culo espectacular, el cual me pareció bastante conocido. Me fui acercando cautelosamente, cuando estuve cerca confirme que era mi vieja amiga Olga (en la actualidad tiene unos 48 años, pero parece de 25 años, gracias a las cirugías), vestía una pequeña tanga seda dental de color negro que dejaba ver todo el esplendor de su hermoso culo y un sujetador que solo te cubría los grandes pezones de sus teteros. Nos pusimos a conversar por un largo rato y cada vez se ponía la conversación más caliente y subida de tono.

De un momento a otro, se me dio por preguntarle que cirugía se había realizado ya que lucia como mujer de 25 y me dijo, que hacia dos meses se había practicado un operación en la vagina para quedar como si fuera virgen. Y me dijo: nene no ves como tengo mi puvis sin un pelito ya que para esta operación me depilaron totalmente. En realidad su puvis estaba lindisimo, abultadito y completamente plano. Mejor dicho como manjar de obispo.

Seguimos hablando y me dijo que asistía dos horas en la tarde al gimnasio; le pregunté a cual estaba inscrita y me dijo: Body Fitness, yo le contesté que yo también asistía (era mentirás al día siguiente me fui a inscribir) en las mañanas. Nos pusimos a acuerdo para encontrarnos al día siguiente. Esa noche no pude dormir bien de pensar lo linda que se encontraba mi vieja amiga. Llegó la tarde y me vestí con la ropa adecuada para hacer mis ejercicios y de camino al gimnasio se pasaron muchas morbosidades por la mente con decir que llegué con mi miembro bastante alterado.

Me encontraba haciendo mi rutina de ejercicios, cuando para sorpresa mía veo venir a mi amiga Olga, lucía una espectacular lycra negra con una pequeña seda detal roja y un pequeño top que le delineaba sus bellos teteros. Desde que la vi se me paró la verga, parecía carpa de circo. Estuvimos hablando un rato y me dijo que entraría a la clase de aeróbicos y luego nos encontráramos, al alejar solo veía como se contoneaban sus hermosas nalgas. Y yo con un deseo de convertirme en que hilo que separaba esas masas de carne firme. Nos encontraos hablamos un poco y quedamos de vernos nuevamente al día siguiente.

De camino a casa solo pensaba en mi amiga y lo hermosa que estaba. Se me ocurrió comprar una par de bicicleteros en lycra (uno de color negro y el otro de color blanco) bien ajustado para provocar a mi amiga.

El día de la cita me coloqué el bicicletero negro y se me notaba todo el mazo, cuando llegue al gimnasio ella se encontraba haciendo sus ejercicios de calentamiento, la sorprendí por la espalda y la abrasé fuertemente y solo sentí como su hermoso culo se acomodaba para dar paso a mi verga, el dije que me gustaría convertirme en su ropa interior para estar más cerca de ella y oler sus perfumes íntimos. Me dijo papito estas como bastante cachondo y le respondí: adivina quien es la musa que me inspira todos los malos pensamientos del mundo, me contestó seré yo?. Por supuesto amorcito mío. Hicimos muestra rutina de ejercicios.

Al día siguiente me coloque el bicicletero blanco y por su confección trataba de ponerse transparente llegue al gimnasio y muchas señoras me miraron morbosamente pero eso subía más mi ego. Hicimos nuestros ejercicios, ella finalizó primero, y se me acercó y me dijo ese mazo quiere probar mi cirugía, en el día de hoy te voy a dar un pequeño adelanto, chao nene. Cuando entre al vestir a cambiarme de ropa encontré sobre mi maletín una diminuta tanga seda dental blanca enrollada; la inspeccioné cuidadosamente y estaba bastante sudada, percibía un olor a perfume vaginal y anal que combinación más perfecta, se me poso el corazón a mil y por consiguiente la verga se me paró, no me importó y salí en busca de ella, cuando la alcancé se encontraba en el carro y le dijo: te gustó mi regalo bebe?, me tiene enloquecido, mientras hablábamos en el parqueadero del gimnasio ella con su uña del dedo índice acariciaba mi verga hasta el punto de ponerla bien erecta, por mi cuerpo pasaban miles de voltios de corriente hasta el punto de decirle que me podía venir, me contestó: eso es lo que quiero a cambio de mi regalo hoy. Me masturbó con su uña hasta venirme por completo su un corro salvajemente abundante de leche caliente; el olor a semen me enloquece me dio un beso sobre la mancha de leche y me dijo, esta noche te espero a eso de las 8.30 en mi casa para que recordemos viejos tiempos.

Cuando llegue a su casa, timbre y me abrió ellas tenía un baby doll transparente negro con adornos de color rojo y debajo una diminuta tanguita transparente negra, cuando sí semejante espectáculo se me paró la ver y me dije esta noche hay buena faena. Nos dimos un beso en la boca bastante apasionado, hubo intercambio de legua y saliva un poco de escaneo corporal y la textura de su pijama me ponía más atento. Nos sentamos en la sala hablamos tomamos un poco de whisky, música suave, nos pusimos a conversar y ella me dijo ponte cómodo que veo que estas maltratando el trazo de carne que pienso comerme esta noche, me sonrojé un poco, pero eso era el objetivo de nuestro encuentro comérmela con todo y por las tres orificios que tiene toda mujer (Boca, vagina y ano).

Me quedé en tanga, nos pusimos a bailar un poco de música romántica, nuestros cuerpos estaban bastante juntos ella sentía la erección de mi bulto y cada vez hacía movimientos más sensuales, hasta el punto de empezar a percibir en el ambiente un olor a perfume vaginal intenso. El baby doll se fue escurriendo por su cuerpo y solo quedó con su pequeña tanguita negra transparente y me dijo: lo que más me excita es que un hombre me saque el hilo que tengo en medio del culo, contesté tus deseos son ordenes para mí, le saqué el minúsculo hilo el cual es encontraba caliente.

Le bajé la tanga y empecé a olerla, era un olor culo-vaginal indescriptible. Me percaté de la hermosura de puvis bien depilado y parecía el de una niña de trece años, su labios estaban ocultos, el cirujano habían hecho una buena labor. Me dijo: quiero que esta noche me desde verga solo por el culo y si eres buen amante te daré el gusto de desvirgarme por segunda vez en mi puta vida. Comenzó la sección de manoseo tenia unas tetas grandes con pezones rosado erectos, los cuales le chupé hasta la saciedad, me sentía como cuando mi madre me amamantaba, mientras volvía a mi infancia acariciaba su pubis me dijo: solo caricias con mi chocho.

La acaricie y note que su vagina estaba completamente humedecida, me baje y comencé a lamer como un perrito faldero sus deliciosos flujos vaginales y con mucho cuidado fui abriendo paso con mi lengua en medio de sus labios hasta llegar al clítoris era sensacional esta bien erecto parecía una almendra. Lo lamí y goce de un buen rato de su perfume y de su flujo, cada vez que lamía su clítoris esta mujer saltaba de la excitación y me cogía la cabeza con su mano diciéndome que le siguiera haciendo feliz que se sentía en la luna. Pero, ella me dijo tus has gozado conmigo un buen rato ahora es mi turno. Me cogió la verga y comenzó a masajeármela hasta llegar a un buen punto de erección, comenzó a lamer el contorno del glande, este estaba rojo y brillante, me hacia correr por mi cuerpo miles de voltios de corriente, de un momento a otro, fui sintiendo el calor y la humedad de su boca.

Me la mamó un buen rato y me dijo bebe quiero hacerte una cubana bien buena; se acostó en el piso me monté en su pecho y puse mi verga en medio de ese par de naranjas que iban a exprimir mi verga, masturbé hasta el punto de sentir que ya no podía aguantar más y me vine en su caro, le arroje un chorro de leche caliente y espeso en su toda su cara. Mi verga se puso un poco flácida y ella empezó a darme unos masajes con su lengua y me dijo ahora quiero que me comas por el culo; le dije claro que te voy a dar buena verga por ese lindo culo, la cogí y le dí la vuelta y descubrí unas hermosas nalgas en forma de melocotones con diminutos bellitos mono, metí en medio de su lindo culo mi nariz y percibí un olor que no era el característico de un culo me dijo tranquilo que me aplicado un lavado con esencia a rosas para que disfrutes sin ningún temor de eses fecal durante la penetración.

Le acaricié el ano con mi dedo índice por unos minutos, con el objeto de lograr una pequeña dilatación, mientras yo hacía esta actividad ella se contoneada porque sentía placer, cuando vi que era el momento justo; para dar la estocada la puse en cuatro patas y mi verga iba abriendo paso y cuando ya estaba en la entrada de su ano me dijo fuerte metemelo como todo un varón bebe; se lo metí de un solo empujón y solo sentí un grito desgarrador y se escuchaba en medio de la noche el mete y saca de mi verga y el golpe de mis bolas en sus nalgas, solo vía que empuñaba sus manos sobre la alfombra como queriendo apaciguar el dolor que sentía por tener mi verga en su hermoso culo. Cuando ya estaba pronto a venirme de dijo chorreame el culo de buena leche acabada de ordeñar.

Me vine en medio de sus monumentales nalgas y solo veía como escurría mi leche en medio de su culito. Nos acostamos en la alfombra por un largo rato para recobrar fuerzas. Y le pregunté porque no quería practicar sexo vaginal y me dijo que estaba muy reciente su operación y todavía tenía algunos puntos. En el primo relato le comentaré como fue la desvirgada de la chuchi-barbie del gimnasio.

Espero que hayan disfrutado con este relato el cual es cierto, y espero que las mujeres cincuentonas se operen y disfruten del sexo.