La chica rubia

LA CHICA RUBIA

Hace unos días estaba en el video club, buscando alguna película para alquilar. No, no seáis mal pensados, la película que iba a alquilar era una película "normal", no pornográfica.

Así, estaba en la sección de videos de acción, cuando levante la mirada, y vi, al fondo del video club, en la sección de videos pornográficos, a una chica rubia que estaba buenisima.

Era una chica joven, que más o menos tendría mi edad –18años-, bastante alta, con grandes pechos y con un trasero bien marcado.

El video club estaba casi vacío, y la gente que había en el eran personas bastante mayores y niños de corta edad. Ni los mayores ni los pequeños se fijaban demasiado en la chica, aunque pude ver como algún hombre de avanzada edad le lanzaba una mirada lasciva a la chica rubia. También vi a una pareja de ancianos lanzando una mirada de desaprobación a la chica. Como si ella tuviera la culpa de estar tan buena.

Mientras miraba diferentes cintas de acción, vigilaba disimuladamente todos los movimientos de la chica rubia que estaba buscando videos porno. La chica estaba tan buena que se me caía la baba, y verla agachada en la sección de videos porno del video club me daba un morbo difícilmente descriptible.

La chica se movía de un lado a otro en la sección de videos pornográficos, revisando minuciosamente todas las cintas. Tenia un andar muy particular, muy parecido al de las modelos. Yo seguía en la sección de películas de acción pero, había dejado de fijarme en las cintas, para hacerlo exclusivamente en la rubia. Cada vez estaba más excitado, pero aun no se notaba el bulto de mi polla.

Decidí dejar la sección de cintas de acción, para ir a la sección de cintas pornográficas, donde se encontraba la chica rubia. La chica que tan buena estaba.

Así, me dirigí al fondo de la tienda, disimuladamente, como si no me importase la presencia de la chica. Estaba excitado, muy excitado, pero lo estaba disimulando bien, al menos la chica no parecía percatarse de mi excitación.

Empecé a mirar diferentes videos pornográficos. Cogí uno en el que aparecía una chica que estaba bastante buena "no tanto coma la que tengo al lado" pensé. Le lance una mirada disimulada a la rubia, que en esos momentos tenia en sus manos un video porno de orgías. Verla de cerca, con un video porno en la mano me excito más.

Estaba bastante excitado, y ya estaba temblando un poco a causa de la excitación. La chica de cerca era mucho más guapa y hermosa que de lejos. Tenia una cara preciosa, totalmente limpia, sin ningún grano ni ninguna espinilla. Mi excitación iba aumentando por momentos.

Disimuladamente me acerque más a ella, estaba tan cerca de ella que podía oler su colonia y su aroma "que bien huele" pensé. En esos momentos estaba muy, muy excitado.

La chica pareció darse cuenta de mi excitación, porque se separo de mi.

Si quieres ligar conmigo olvídalo, tengo novio- me dijo.

Esto... yoo... no estoy intentando ligar contigo- balbucee nervioso

¿Que no?- dijo ella señalando a mi entrepierna.

Y es que en mi entrepierna había un inconfundible bulto que mostraba mi estado de excitación. Me quede sin saber que decir.

Parece que tienes un buen aparato- dijo- si alguna vez lo dejo con mi novio te la chupare, mientras tanto sólo puedo hacerte esto.

Me cogió la mano y se metió un dedo mío en la boca, ella actuaba como si me estuviera chupando la polla. Después de unos pocos segundos dejo de chuparme el dedo, me lanzo una sonrisa y se marcho. Yo me quede sólo, con un bulto enorme en la entrepierna.

Intente tranquilizarme un poco y me dirigí al dependiente del video club para preguntarle si podía usar el servicio "es una emergencia" le dije. Este accedió, y me mostró donde se encontraba el servicio.

Una vez dentro del servicio, cerré la puerta con el pestillo, me baje los pantalones, me saque la polla que estaba a punto de estallar, me la descapulle y empece a pajearme lentamente, pensando en la chica rubia que acababa de chuparme el dedo.

Estaba cachondisimo, a punto de correrme, por eso estaba pajeandome lentamente, para disfrutar más del recuerdo de la chica.

Pensaba en el culo, en los pechos, en la cara, en el aroma de la chica y en la manera con la que me chupo el dedo. Estaba disfrutando de lo lindo con la paja, estaba con los ojos cerrados, para hacer más realistas los recuerdos de la chica.

Llevaba cinco minutos pajeandome, ya no aguantaba más, me iba a correr,"aaaaaahh" exclame mientras expulsaba la abundante corrida. Me limpie un poco y salí del servicio.

Desde entonces vuelvo todos los días al video club con la esperanza de volver a ver a la chica rubia.