La chica que siempre dice Si

Qué le puede rondar por la cabeza a una chica que siempre dice SI, que siempre quiere más, que es una buscona que aprovecha cualquier oportunidad de reunión social para, saltándose todas las barreras morales, poner en aprietos a conocidos y extraños?

¿Qué le puede rondar  por la cabeza a una chica que siempre dice SI,  que siempre quiere más, que es una buscona que aprovecha cualquier oportunidad de reunión social para, saltándose todas las barreras morales, poner en aprietos a conocidos y extraños? Algunas de sus experiencias me fueron narradas de sus propios labios, le pregunté si estaba dispuesta a relatarme todo cuanto recordará de esos encuentros furtivos que suele perpetrar por toda la ciudad…  sonríe lascivamente y me dice: por supuesto…   Me cuenta algo de ese mismo fin de semana….

“Estamos por el centro, de vinos, de pulpo, de buen rollito en general... ya han caído varias copas de ribeiro, me acerco a una mesa para coger un canapé y uno de mis amigos sutilmente se acerca a mí, el resto del grupo, incluida su novia, permanece de espaldas... tira un trozo de pan al suelo, se agacha y permite que su mano ascienda por mi muslo y se pierda debajo de mi minifalda, en un segundo puede notar la humedad de mis braguitas, y al segundo siguiente se está llevando los dedos a la boca... Mientras le miro perturbada por su caricia, compruebo que uno de nuestros amigos  lo ha visto todo... ¡ mierda!  tendré que solucionarlo...

Me acerco a él y le susurro al oído: en cuanto a lo que acabas de ver, si quieres que lo solucionemos en 5 minutos te espero en el baño de chicos - y añado en un tono amenazante- no me gustaría estar hablando al oído de un hombre muerto...

Me uno al resto y manifiesto mis inmensas ganas de mear, ahora la gente está bastante entretenida, me dirijo a mi amigo cuyas caricias todavía  burbujean en mi entrepierna: 5 minutos baño, no necesito decirle  más...

Entro sola en el baño de caballeros, cierro la puerta, al poco se  une mi amigo cómplice de perversiones varias, es un ansioso, siempre lo ha sido, da un par de golpecitos en la puerta, le abro - espero que la traigas a punto porque esto va a ser más que rapidito - me coge de la mano y me obliga a que le palpe el paquete;

  • te gusta así, zorrita-

Por supuesto que me gusta ... comienzo a sobársela por encima de la ropa, a ponérsela bien dura, a morrearle y rustrirle mis tetas calentitas... golpean la puerta, le digo -abre- me mira desconcertado, le repito -abre- ;

Abre la puerta, allí está su amigo mirón, ha dudado si venir o no, pero ha terminado viniendo, lo cojo del brazo, lo empujo a entrar y cerramos la puerta de nuevo...

En mi cabeza sólo se repite una cosa -voy a comerme dos pollas, voy a comerme dos pollas-

Me pongo a la tarea....

Me siento en el W. C.  lo que ya forma parte de mi estilo... les  miro con cara de salidísima total,  uno no parece sorprenderse, el otro  está rojísimo pero a la expectativa... con cada una de mis manos agarro esas pollas que luchan por salir, aprieto, palpo, la cosa se pone interesante...

Dejo de tocarlos, pongo las manos sobre mis tetas y aprovechando que llevo un escote más que generoso, primero me saco una teta y después me saco la otra, les digo:

  • aquí están mis dos tetas a vuestra disposición, ahora quiero ver esas dos pollas a la mía -

Comienzan a desabrocharse  las braguetas, el de mi izquierda  sin vacilación, el otro no puede apartar los ojos de mis tetas, le invito a tocármelas…

-sácate la polla, quiero comértela-

La polla que ya está fuera luce deliciosamente chorreante, la engullo como acostumbro a hacer, su dulce juguito me gusta más que el ribeiro, una chupada grande y ahí está!  tengo otra polla preparada pidiendo lengua, no la conozco de nada, tendré que darla un besito para presentarme... eso hago, le doy un besito mientras la tomo con autoridad, está muy dura y tiesa... creo que terminaré pronto con ella; me voy turnando como se me antoja, primero una, después otra...Miro a mi amigo cuya polla he degustado más de una vez… sé que va a intentar no ser el primero en correrse, ha practicado, sabe que puede hacerlo...

Yo me afano en succionar ambos rabos con la misma intensidad, chupo  longitudinalmente y les babeo por igual, mientras continúo chupando , oigo sus tímidos gemidos, pienso: el primero que se corra en mi boca tendrá que ver como el segundo se corre cogiéndome por detrás...  Intento darle a mis tetas el protagonismo que les falta, por turnos repaso con sus vergas mis pezones que se endurecen estremecidos por el contacto.

Los gemidos del propietario de esta nueva y rica polla comienzan a ser fuertes, aplico mi lengua y mi mano  tanto como puedo, rápidamente mi boquita se llena de leche ¿ debería tragármela? En fin, un día es un día, me la tragaré...  Algo se desperdicia por mi cara, el chico para mi sorpresa, se agacha y recoge con su lengua las salpicaduras de más, eso me pone inmensamente cachonda...

Me incorporo, me pongo de espaldas, despejo mi culo dejándolo como blanco perfecto  con la minifalda subida y las medias por las rodillas…

  • Hoy voy a querer tu lechecita en mi coñito, fóllame por favor -

Ante la vista de mi coñito entregado, no duda, noto su mano palpando mi humedad, efectivamente no necesito ninguna ayuda extra que lubrique mi agujerito, directamente y sin miramientos de ningún tipo me la enchufa hasta el fondo, no puedo evitar que un grito de satisfacción se me escape... comienza  a  bombear como un diablo, el tercero ahora ejerce de mirón, alucina con lo que le está pasando, pero ya está mucho más relajado,  se atreve a buscar mi clítoris y ayudarme a llegar antes al orgasmo…

  • me gusta que la gente colabore-  pienso.

El rabo que tengo dentro  me está penetrando fuertemente…

  • córrete, puta-

Nada más oir  como  pronuncian  mi nombre me corro a lo bestia, acto seguido otra corrida inunda mi coñito por dentro…

Con las respiraciones todavía muy alteradas, vamos vistiéndonos como podemos...

Ahora, ¿cómo hacemos?... Saldré yo primero.

Me miro en el  espejo, tengo cara de viciosa satisfecha, giro la cabeza y veo un tio contra el urinario que me desnuda  con la mirada;

-¿Quieres que te ayude con ésa paja?- le espeto sin más.

Contemplo como un hilillo de baba se le cae por la comisura de los labios. Le sonrío, abro la puerta y me uno a mis amigos ya impacientados por mi tardanza…

-No os vais a creer lo que me ha pasado en el baño…

-¿El qué?

-Se ha roto el pestillo y me he quedado encerrada… hasta que una chica no ha ido a pedir ayuda a un camarero y han roto la cerradura no he podido salir… ¡que agobio!

Mis amigos me miran incrédulos… mientras pienso que comienzan a faltarme  buenas excusas y a sobrarme  ganas de follar en cualquier sitio, el caldito caliente que mi amigo me ha dejado como tarjeta de visita de su polla se desliza por mi rajita y me empapa las bragas… me encanta sentirme sucia y seguir conversando como si nada, no sé decir que no”