La chica del cyber

Quien dijo que el cyber es aburridon...

Internet

Hola mi nombre es Leo Absalóm y quiero compartir con ustedes lo que me paso hace unos meses, para ser exactos marzo de este año 2004.

Bueno, una noche fui al Internet que esta cerca de mi casa, ya que mi línea estaba fuera de servicio. Ya había ido a ese local antes, por eso fue mi sorpresa al ver que una chica nueva estaba atendiéndole lugar, era una niña bonita y estaba vestida con un pantalón blanco pegadito a media cadera y una blusa color rosa muy ceñida al cuerpo que dejaba entre ver su ombliguito, realmente me quede en impresionado. Tome una maquina, solo iba por una hora pero por unas u otras mi trabajo se incremento y tarde mas tiempo, cuando me dijo que ya había acabado y era hora de cerrar, eran casi las 11 de la noche, me levante, y al momento de ir a pagar por estar viendo su figura, me tropiezo con una banca y sin querer mi mano toco su pierna, a lo que ella voltio y se sonrojo yo me disculpe diciéndole que no era mi intención, entonces ella dijo que la próxima tuviera mas cuidado y se sonrió. Pasaron los días y poco a poco le hacia plática, supe que era la sobrina del dueño de Internet y que había llegado a vivir ahí. Una noche que estaba en la computadora del cyber, me puse a ver unos correos que un amigo me había mandado, no me di cuenta cuando Alejandra (así se llama la chica) se colocó detrás de mí, se quedo sorprendida, yo la mire y estaba roja.

En eso me volteo hacia ella y me pregunta que por que veía eso, yo le explique que me los habían enviado, me sorprendió cuando me dijo que tenia curiosidad, ya que nunca había visto una foto así (me enviaron una serie de fotos infragantes, de sexo), entonces yo le dije que si quería yo le podía enseñar a lo que ella accedió. Nos fuimos a su computadora y le mostré la serie que mi amigo me había mandado. Ella estaba roja y se sentía su calor y nerviosismo.

En eso yo acerco mi mano por pierna y le empiezo a frotar y como estaba con un vestido holgado logre tocar su piel y la estuve acariciando por buen tiempo hasta que ella no se aguanto mas, Le pregunté si le molestaba, me dijo que se sentía rara, se paro me beso cerca de los labios y me dijo que no tardaba. Tardo como 5 minutos, regreso y comenzó a besarme, así nos estuvimos de pronto sentí que su mano izquierda buscaba la mía y sin el menor reparo la ponía toda abierta sobre su vientre, planito, muy suave, y luego lo empezó a acariciar con nuestras manos juntas, la suya sobre la mía. Como ya no había gente y ella fue a cerrar la cortina, nos dio más confianza para hacer más cosas.

Me hizo sentar en la silla, la sensación de su aliento acelerándose en mi pierna. Para este momento ella podía sentir ya, en el lugar en que estaba los movimientos de mi palo parándose y muy suavemente movía su mejilla derecha sobre él. Sentí entonces que con su mano, movía la mía por debajo de su vestido y luego, como lo supuse, por debajo de su tanguita. Estaba completamente depilada y ya se podían sentir los estragos de mis caricias. La humedad le empezaba a brotar de su conchita y hacia más fácil el movimiento de mi dedo en su rajita. Mi dedo medio había alcanzado a la perfección su clítoris duro y mojado, y lo acariciaba en círculos, de arriba abajo, hacia los lados, mientras ella se limitaba solo a resoplar y gemir igual que yo sin hacer muy pronunciados los movimientos de su cadera de acuerdo al ritmo que le marcaba mi caricia

Cuando menos pensé, apretó mi mano completa entre sus piernas, dejando sentir en mis dedos que estaba teniendo un rico orgasmo. Dejó caer suavemente su cara sobre mí, sobre mi erección al final de su temblor y su respiración se hizo mas acompasada. Con lentitud volteó y me dijo:

-Oye, no te detengas, quiero más.

  • ¿Cómo negarme?

Ella bajó mi cierre, liberó mi verga de la prisión y sin decir mas la empezó a acariciar con ternura y alegría. Yo por mi parte seguía acariciando su cosita húmeda. Al estar metiendo y sacando mi dedo de su cosita, ella no había resistido más y tenía ya en sus caderas también un movimiento que le permitía a mi dedo lograr más profundidad en la penetración. Ella continuaba acariciando y a ratos besaba la cabecita de mi verga, mientras con mi mano derecha le tomaba por el pelo y la acariciaba. No había nada que nos detuviera.

Al poco rato, empecé a sentir ganas de venirme y se lo dije bajito al oído, tanto como me pude acercar a ella. Desocupó su boca, volteó y me miró a los ojos mientras me decía

-Aún no, quiero sentirla dentro de mí

Sorprendido le dije:

-Ok

Ella se quito el vestido, la tanga y vino y se sentó en mis piernas frente a mí, no sin antes hacer que me bajara los pantalones hasta los tobillos junto con todo lo demás.

-Ahora si... quiero sentirlo dentro- y con su mano coloco la punta de mi verga en su cosita, dejándose caer despacio.

-aahh!!! Despacio, déjame a mí – dijo mientras se movía despacio. Sus pechitos quedaron justo frente a mi boca para poder lamer, morder, acariciar sus pezones.

-Que ricos pezoncitos tienes!!! mmmm – le decía susurrando sin dejar de acariciárselas.

-¿Te gustan? –Jadeaba – ¿Son ricas? Muérdelas despacito, eso me esta gustando amásalas, muérdelas son tuyas nene, hazlo mientras me muevo.

-Si, así muévete, un poco mas bebe, no te detengas –le decía casi queriendo gritarle.

Se abrazó a mi cuello para apoyarse aún más y pegarme mas sus senos en la boca, restregándose a mí con fuerza, dejándome a ratos casi sin aliento.

-Me encanta, me aloca, sigue!!!!! Más rápido!!!

En ese instante empecé a sentir nuevamente la presión de sus paredes vaginales. Dejó de moverse. Me vio a los ojos y me preguntó

-¿Te gusta como aprieto? –al momento que apretaba con su conchita mi verga.

Seguido de esto me dijo:

  • Me vengo!!!

Y aún después de sus movimientos orgásmicos continuó moviéndose mas lentamente mientras sentía que su humedad me bajaba hasta los huevos. Para rápidamente retomar el ritmo de su ensarte y seguirle dando juntos.

Así fue, rico, al unísono, como una maquina perfectamente acoplada. Se abrazó a mí, con la frente llena en un sudor rico mezclado con ese olorcillo suave a sexo y excitación. Nos seguimos besando así, frente a frente, mientras mi palo iba poniéndose flácido, cosa que me obligó a incorporarme. Ella me dijo

-Quiero más. Más. Pero diferente. ¿Me entiendes?

-Como quieras, le damos.

-Es que… ¿podrías ocupar esto también? – dijo al momento de sacar una cremita para manos.

-¡Órale! ¿Quieres por ahí? – le pregunte un tanto sorprendido, pero con deseos.

-si, me gustaría probar... ¿A ti no?

-Claro –respondí al momento de sentir el contacto de sus manos que ya llevaban un poco de cremita.

La vi voltearse y con el dedo untarse la crema entre las nalgas, deteniéndose un poco hasta meter la punta del dedo en el culito para que este quedara también lubricado. Todo esto me parecía una fantasía, ver que la chica de Internet era toda una cachorrita caliente. Se paró frente a mí y dándome la espalda, se abrió las nalgas con las manos al momento que con las mías la sostenía y la iba dirigiendo a mi palo que ya la esperaba.

Se sentó despacito, con los que resopló un poco y me volteó a ver diciéndome

-Esta cabezoncito, me va a doler.

-Despacio, tu quieres así ¿O no?

-Si, yo también quiero que me cojas así – mmmmmmm - dijo al momento de darse un sentón que llevó a mi verga casi a la mitad dentro de ella.

Aaayysshhh!!!! –dijo susurrando – despacio, duele!!!

Y se ensartó todo mi palo. La sensación de estreches y presión era mayor todavía que lo que había sentido en su vagina. Que culito tan rico, le dije a la vez que llevaba mi mano derecha a su cosita con el fin de masturbarla mientras le clavaba.

Ahh!!!! Así tocame!!! Que rico, que rico, que rico –decía

A momentos, se quedaba agarrada con una sola mano y con la otra se acariciaba la pepa junto con mi mano y la llevaba a sus pezones y los humedecía. Apretaba sus pezones, uno, el derecho, luego el izquierdo. Y a cada segundo que pasaba acelerábamos mas el movimiento hasta que

-Yaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!! –gritó ahogadamente, mientras se dejaba caer pesadamente en mi verga que también alcanzaba con el último sentón el éxtasis de tanto movimiento.

Se saco mi verga, saco un poco de papel y se limpió. Tomamos un respiro y nos vestimos, mientras lo hacíamos platicamos y reímos. Me miro antes de despedirnos y se fue…es una pena, por mi trabajo ya no pude verla por mucho tiempo pero mientras duro, como la gozamos y nos divertimos.