La celebración

LA CELEBRACION

Después de una tarde movidita, llenas de noticias buenas tanto para Rober, como para mí, decidimos tomar alguna copa para celebrarlo.

A Rober le había dicho, que me tendría que ayudar el sábado y el domingo, así que preparase una bolsa con algo de ropa, para quedarse en casa conmigo el fin de semana.

Bueno, mete algo para estar guapo, cuando salgamos a cenar, que este fin de semana correrá de mi cuenta.

Cuando llego a mi casa, se quedo de piedra, cuando en vez de dejarle pasar, cogí otra bolsa que tenía preparada y le dije vámonos.

Donde?

Estas tonto, me pides que venga a ayudarte y ahora nos vamos

Si es la forma que tendremos de celebrarlo, nos vamos a Sevilla a celebrarlo, ya tengo reservado hotel y mañana saldremos con mi amigo Pepe.

No jodas, no me lo puedo creer tío.

Yo lo que prometo lo cumplo y que mejor día que este para hacerlo, ya que además tenemos que celebrarlo por ambos.

Ya lo creo, en fin, veras como no lo pasamos, además esta noche iremos al local de osos que ami me gusta, y el hotel te va a encantar, es el mismo, donde paso lo que te conté en mi ultimo viaje a Sevilla. Me gusto y es donde he reservado la habitación, eso si, dormirás en la misma cama que yo.

No se tío, me da corte, dormir en la misma cama que un tío, ajajá,

Que cabrón eres, le digo.

Bueno y solo dormiremos o algo mas.

Eso Robert, nunca se sabe, todo dependerá como vaya la noche igual llegamos a la cama a rastras.

Nada mas llegar, y tomar algo de cena, fuimos a este local, al entrar el camarero me sonrío, y quedo un tanto sorprendido, al verme con Rober.

Al ponernos las copas, en un susurro, me comenta, vaya cambio, del otro día a hoy.

Si, no esta mal, a ti cual te gusta más? - le pregunto.

Bueno puesto a escoger, me quedo con los dos, cada cual con su punto.

Claro el cabron de Rober, en esta ocasión iba con zapas negras, pantalón de chándal rojo, con rayas negras en los laterales y camiseta de tirantes negras, bien ceñida, el pantalón, le marcaba un culazo de miedo, y claro por muy mal que le quedara por delante, el paqueton se tenía que notar.

El camarero sale de la barra, y diciéndome estamos solos, se lanza a mi cuello y me da un buen morreo.

Rober alucina, lo mira con ganas de darle una ostia, pero el camarero, mas zorro y astuto, se limita a darle un pico, mientras le mira a los ojos y le agarra el paquete con la mano derecha, aquello estaba dormido, pero ante la presión del camarero empieza a crecer y crecer, de modo que sin perder tiempo, quiere comprobar el tamaño real de aquello, le baja el chándal y allí de un golpe salta al aire, dándole en toda la cara, este hecho le vuelve como loco y empieza a lamer los veintitrés centímetros de chaval, yo le miro y me río, mientras Rober se encoje de hombres.

Es una buena forma de empezar la noche.

El camarero se incorpora, se lanza a mi cuello y mientras encima de la barra pone sobres de lubricante y condones, me morrea.

Es su oportunidad de follar esta noche y si hay suerte antes de que empiece a venir nadie, habrá descargado sus huevos.

Rober, se agacha se arrodilla detrás del camarero, y empieza a separar las nalgas, para pasar su lengua por la raja y el ojete, al empujar con su lengua se da cuenta de que no tendrá grandes dificultades para colarse en esa cueva, y sin tan siquiera poner lubricante solo con la saliva que ha puesto en el culo y en su propia polla, se hunde poco a poco, apretando, envistiéndolo hasta el tope final, sus huevos chocando con las nalgas del camarero.

Sus labios muerden el cuello del camarero, mientras este me morrea y en un giro de la cabeza de este nuestras tres bocas se juntan en un calido y jugoso beso, las enculadas de Rober se acentúan noto que le esta saliendo el puto cabron que tiene y algún azote se le escapa en las nalgas del tío, de modo que un ufff………, le sale de su boca, para a continuación decirle sigue cabron, follame hasta que se me salga la leche, dame duro, rómpeme el culo, aunque este una semana sin sentarme, méteme esa tranca hasta los huevos, así, mas, dama mas, fuerte, sigue, sigue, que me corro, dale, mas ,así , así, asiiiiiiiiiiiiiii,

Un gran chorro de leche se descargo directamente sobre la barra, al mismo tiempo que Rober le terminaba de lamer una oreja y empieza la retirada de ese culo fantástico.

El camarero se viste, limpia aquel desaguisado y suena el timbre, llegan nuevos clientes, Rober saca el primer porro del día, lo enciende y tranquilamente seguimos tomando nuestras copas, es el principio de nuestra noche de celebración.

En el local empiezan a llegar clientes. En un principio con cuenta gotas, pero a eso de las diez y media como si hubieran llegado en grupo, entraron en un momento diez o doce personas, ya éramos al menos veinte tíos, y a mi me apetecía algo de acción.

Dejo a Rober ultimando su porro y con la copa en la mano, y le digo que voy a dar una vuelta por arriba.

Según subía el primer tramo de escalera trataba de recordar los tipos que había visto subir y que me gustaban, pero no tengo memorizado a ninguno, al llegar a la primera planta, ya había por allí dos osetes, pero ninguno de ellos eran de mi preferencia, no tenían pelo en la cara y eso me obliga a continuar.

En medio del siguiente tramo me cruzo con un macarrita tipo Rober, pero mas fuerte, pelo y barba muy corta, una de mis debilidades, al cruzarnos lo dos volvimos la cara y sonreímos.

Al llegar arriba un tío alto, de metro ochenta más o menos, cabeza rapada y gran bigote, esta apoyado en un rincón, como vestimenta vaqueros ajustados y camisa negra sin mangas.

Un tercer tipo que andaba por allí, al verme llegar, inicia el descenso.

A estas alturas estaba claro, que las miradas entre el bigotes y yo lo habían dicho todo, el desde su posición, ya se frotaba el paquete, y se acariciaba los pezones, yo poco a poco, lentamente me iba acercando a el, ya nuestros cuerpos casi se rozan, nuestros alientos se entrecruzan, nuestras miradas arden, una atracción fatal nos lleva a entrelazar nuestros cuerpos a que nuestras lenguas se batan en combate en terreno contrario, le desabotono la camisa, el me saca a mi la camiseta, nuestras manos nos recorren cada rincón de nuestros cuerpos, nuestras lenguas lamen las orejas, el cuello, los pezones del otro, para volver a la lucha cuerpo a cuerpo, e invadir la boca contraria.

Sus manso se me cuelan através del pantalón y manosean mis nalgas, yo empiezo a desabrocharle el cinturón, le suelto el botón del vaquero, y empezó a bajar suavemente su cremallera, mientras le meto la lengua hasta el fondo de la garganta.

Saca las manos de mi trasero, mientras la izquierda juega con mis pezones, la derecha suelta el cinturón, me desabrocha el botón de mis pantalones de camuflaje y me baja la cremallera: casi al mismo tiempo, liberamos nuestras espadas, sacamos de los calzoncillos los huevos y mutuamente nos los masajeamos.

Nos volvemos a besar intensamente, rozando nuestros sexos, abrazándonos, acariciándonos, robándonos intensamente.

Al abrir los ojos, el barbitas de la escalera, allí a nuestro lado, con su polla fuera, deseando el menor gesto para entra en acción con nosotros.

El bigotes y yo, no miramos, y claro esta, no encanta a los dos, el le hace la invitación, y unos instantes después lo tenemos allí, de rodillas, implorando nuestras pollas en su boca, las alterna, las degusta, coge con ambas manso nuestros huevos, y mientras no los acaricia, lame nuestros rabos, los ensaliva los engrasa, para después refrescar nuestros huevos con su lengua húmeda, fresca, juguetona.

A un gesto del bigotes, dejándose caer este el pantalón a los tobillos, el barbitas, le baja los calzoncillos por debajo de las rodillas, unos calzoncillo blancos clásicos de Calvin Klein, se sitúa detrás de el y hunde su lengua en su raja.

Al darme cuenta del juego, mientras seguimos enzarzados los dos en un tórrido beso, con mis manos le abro bien las nalgas, facilito el trabajo a esa lengua experta, los brazos del rapado llegan a mi cuello, así, balanceándose hacia mi, deja el culo ofrecido, y la lengua y los dedos del barbitas realizan su trabajo a la perfección, se incorpora y con polla bien dispuesta la acerca, la mete despacio, el rapado, flexiona las piernas, ofrece su culo a la medida necesaria para que el barbas, pueda clavarse dentro de el, en un experto movimiento, se queda allí, totalmente acoplado, perfectamente ensamblado por unos segundos.

Desde mi atalaya, justo en frente del rapado, con sus brazos en mi cuello, tengo la sensación de que el tiempo se ha parado, hasta que de repente, con un movimiento brusco, comienza un vaivén tremendo, el mete saca es progresivo, es imparable, es como si fuera un follada pactada, rápida, violenta, sin tregua.

El jadeo del rapado aumenta en volumen e intensidad, su lengua busca la mía frenéticamente, le falta la respiración, su corazón se dispara, y una especie de gran descarga eléctrica recorre toda su columna, un espasmo, le sacude todo el cuerpo

En el suelo empiezan a aparecer grandes manchas blancas, sus descaras de leche son tremendas, su cuerpo tiene grandes sacudidas, mientras sus huevos se van quedando vacíos.

Permanecemos abrazados un instante, lo tres, el barbas a su cintura aun ensartado, mientras, el colgado de mi cuello y yo abrazado a su cuerpo.

El movimiento de separación lo inicia el barbas, lo suelta retrocede despacio, va sacando la polla poco a poco, hasta que un plofff, indica que ha salido totalmente de el, el rapado, se incorpora, se limpia, nos besa suavemente, se viste y baja al bar.

El barbas y yo, nos quedamos, desnudos, frente a frente, nuestros huevos aun no han descargado y el deseo se refleja en nuestros ojos.

Por primera vez, nos abrazamos mutuamente, nos besamos en principio con ternura, para poco a poco ir reconvirtiendo ese beso, suave, tenue, en un beso intenso, lleno de furor, de tensión contenida, me arrincona contra la pared, me besa como si en ello le fuera la vida, lame mi cuello, se mete mi nariz en la boca, muerde mis pezones con los labios, me levanta el brazo y despacio, lame mi sobaco, lo lame una y otra vez, pasa la lengua de abajo arriba mientras con una mano mantiene mi brazo en alto y con la otra, manosea mi culo, juega con sus dedos entre mi raja, busca el agujero par masajearlo, me relajo, pero la zona esta seca, no hay lubricante, y sabe que asi no puedo continuar.

Suelta mi brazo, me besa de nuevo, y casi de un modo violento me da la vuelta, me pone contra la pared, me hace levantar los brazos y apollarlos en el muro, me abre las piernas y con un suave gesto me obliga a sacar el culo, asi ofrecido se arodilla,desde atrás me coge la polla, la lame, la ensaliva, y continua haciendome una suave paja, mientrs su lengua se dirige a su objetivo final, mi culo falto de lubricante, escupe en el agujero, y de manera experta con la lengua, empieza a estender ese jugo fantástico, esa crema maravillosa, que como llave maestra, entra poco a poco en mi agujero, se introduce despacio, gira a su alrededor y cada vez lo abre, mas y mas.

Me siento vencido, entregado, hueco, vacio, y empiezo a apreciar la necesidad de llenar esa oquedad, de sentirme lleno.

Uno de sus dedos, el indice entra y sale sin dificultad, lo intenta acompañado del dedp corazon, noto los dos dentros, la paja que me esta haciendo, el masaje de prostata, me esta llevando a confines desconocidos.

Cierro los ojos y me dejo llevar por los sentidos, esos dedos, me abandonas, un nuevo escupitajo me da en la diana, aahora la lengua relaja mi esfínter, lo refresca, este tio me genera confianza, sabe lo que quiere y como conseguirlo, se acaba de follar un culo frenéticamente, violentamente, pero ahora con el mio va como con guantes de seda, se lo curra poco a poco, su lengua sabe trabajarlo bien, y ahaora sus dedos, bien ensalivados de nuevo, entra de un modo mas precipitado, mas trasgresor, mas imperioso, entran se retuercen en su interior, salen y vuelven a entra, mi culo relajado, lubricado, se siente invadido, casi lleno,mi cara apoyada contra la pared, mis ojos cerrados y mi voluntad anulada, inexistente.

En un instante abro los ojos, alli con la espalda contra la pared un tio con gorra calada, un arness, y un pantalon vaquero negro, me mira.

Su mirada turbia, perilla larga, piel oscura sonrisa calida me sonríe, sus manos trajinan la bragueta de su pantalón, intentando sacarse la polla, un pedazo de carne morcillon, oscuro, aparece.

Al verlos el barbas, le relampaguean los ojos, vuelve a escupir en mi culo, y sigue jugando con sus dedos de la mano derecha, pero con la mano izquierda ya esta sopesando aquel paquete, ya se relame en pesar en su sabor, acerca su boca, lo huele, el aroma de este macho lo excita lo pone mas cachondo aun, y sin pesarlo se lo mete en la boca, lo deja allí dentro, mueve su lengua acariciándolo el grande, llevándolo a lo mas profunda de su garganta, asi dandole esa caricia, con la lengua de rodilla a mis espaldas y delante de ese macho, la polla va creciende , ya no cabe dentro de la lengua, mi brazo izquierdo se cruza en el pecho del ti ode la perilla, en el camino se tropieza con un gran piercing en su pezon derecho, el tamaño es mucho mas grande que el de los mios, pero su pezon es de matricula de honor, grande, gordo, largo, el el pezon izquierdo no lleva nada, es donde se puede jugar y sentir plenamente las maravillas que encierra unos pezones asi.

El tio de la gorra, saca la polla de la lengua del barbitas, se intercala entre la pared y yo, y me abraza, me besa.

Ha quitado el juguete al barbas, y este ahora vuelve a su antigua ocupación, a jugar y engrasar mi culo.

El perillas, me abre las nalgas con las manos, la lengua entra dentro de mi orificio, noto como lo abre, como llega dentro de mi y lo engrasa con su saliva., las babas, recorren mi raja, y me estan empapando los huevos, que con la manos izquierda me esta masajeando.

Siento como manejan mi cuerpo, como lo desplazan, como se lo acoplan a su antojo los dos,cuando abro los ojos, me encuentro en la misma posicion, con los brazos apollados en la pared, pero enta vez el barbas, esta sentado en le sulo, su espalda tambien apoyada en el muro y detrás de mi el perilla, su polla preparada, humedecida previamente y apunto de terminar de taladrar el agujero que con tanto esfuerzo el barbas ha estado trabajando.

La herramientas, es grande, gorda, imponente, y con destreza se introduce en mi interior, entra despacio, y al llegar al final noto un liguero movimiento de elevacion, mis pies no tocan el suelo, por un momento estoy en vilo, el poderio del perilla me eleva obligandome a quedar ensartado en su tremenda `polla., mis nalgas apolladas en su huevos de toro, su posicion inerte, su brazos arropandome la cintura, abrazandome con fuerza, abro mis ojos, giro la cabeza y le beso, mi beso de entrega de sumisión a un macho, de entrega fisica y mental.

Mientras el barbas, acaricia mis huevos, controla como milímetro a milimero esa enorme polla hha ido invadiendo mi culo, como esos huevos se aplastan contra mis nalgas.

Una música de pronto se va haciendo mas fuerte, poco a poco lo que me rodea parece que experimenta un cambio, me ponen un poco de popper en la nariz, el ambiente es mas nitido, veo a algotro tio por alli pululando, y la envestidas del rapado, empiezan a notarse en mi culo, lo hace de un modo ritmico, sus evoluciones van siguiéndole ritmo de la musicade la música, mientras el barbitas, me sigue comiendo la polla, con su mano derecha se esta pajenado con la izquierda juega con mis pezones, y cada vez mas y mas mi culo es taladrado con mas fuerza de una manera mas potente.

Nueva mente el mi nariz ese frasquito que me termina de eliminar la voluntad, mi entrega es ahora total, ahueco el culo, lo pongo mas entregado, mas ofrecido, varias manso acarician mi pecho, mi polla, tocan m is huevos, el barbas no se la saca de la boca, mi piel es toda seensibilidad, cada dedo que la roza, saca de mi boca una esclamacion, cada clavada del tio de laperilla una exclamacion, cada mamada en mi polla un jadeo.

La excitación es incontrolable, los tres estamso al bordes del orgasmos, de nuevo me pasan el poppers, la cabalgada se acentua, mi polla no aguanta mas,, gritos, esclamaciones, jadeos, y de mi garganta, un me corrrrrrrrrrooooooooooooooooooooo, fuerte sonoro, destaca sobre la música, un caliente chorro de leche siento encima de mi espalda, al mismo tienmpo que el perillas me abraza, su pecho contra mi espalda, en medio su polla, su charco de leche, y el barbas deja soltar entre mis piernas encima de su propio pecho una gran descarga de leche.

Momentos de relax, de sentir nuestras pieles juntas, sudoroso, oliendo a sexo, a macho, las descargas de leche empiezan a correr por nuestros cuerpos, el sudor se va haciendo frio, nuestros corazones ya laten con normalidad, un tenue beso de despedida, tissu, acariciendo nuestras pieles y limpiando el testigo de nuestro instante de placer compartido.

Baje a la barra, allí aun continuaba Rober, sin moverse, dejándose querer por todo el que le miraba, se le veía como gallito en corral ajeno, presumiendo, sacando la parte mas macarra que lleva dentro, alardeando de todo aquello que puedo presumir, siendo como a el le gusta el centro de todas las miradas.

Pido una segunda copa. Nos la pone nuestro camarero, estamos invitados.

Rober, me pasa el canuto de maria, le doy un par de caladas, lo necesitaba, estoy aun muy excitado, el juego se me ha ido de las manos, pero lo he disfrutado.

Me fijo en el segundo camarero, alto, fuerte, guapo, bigotes grande, cabello negro engominado, vaqueros, muy desgastados, rotos por algunos sitios estrategicos, y camisa de cuadros sin mangas, esta cuchicheando con el otro, y me mira de reojo, tengo la sensación que hablan de nosotros.

En el local, va quedando poca gente, y Rober , sube a dar una vuelta,

Yo me quedo alli, en el rincón de la barra recostado contra la pared, sentado en el taburete y vigilando a cualquiera que se pudiera poner a tiro.

En el local además de los camareros quedaremos cinco o seis tíos, nuestro camarero, salen de la barra y sube a los pisos buscando vasos y botellas.

El otro camarero se me acerca y me pregunta ¿Cómo ha ido la noche?

Bueno no ha ido nada mal, creo que alguna he tenido mejor, pero la de hoy ha sido fantástica. Y guiñándole el ojo le comento, además esta aun no ha terminado.

Es cierto, pero por lo que veo, salvo que alguno de arriba se me haya escapado, hay poco que hacer por aquí.

Siempre es cuestión de criterios, a mi me parece que aun hay algunas buenas posibilidades, y vuelvo a guiñar el ojo.

Me sonríe, y me comenta en media hora cerraremos, si os apetece, nos quedamos aquí los cuatro y nos lo montamos.

Creo que es una idea muy sugerente, y lo podríamos pasar los cuatro muy bien.

Rober bajo un tanto decepcionado, solo un par de tíos follando, y un mirón, ninguno de los tres le gustaba, los dos que permanecen abajo, están pagando la consumición y se marchan.Le comento a Rober la nueva propuesta y el cabrón ya se ha empalmado.

Diez minutos después, ya bajan los tres restantes.

Rober enciendo un nuevo porro, y no sirven otra copa mas, el bigotes se ha desabrochado la camisa, dos buenos pezones se dejan ver.

Por fin solos nos dice el bigotes, acercándose a mí y comiendo violentamente la boca, espero que nos llevemos bien, y nos dejemos llevar un poquito para terminar la noche y quedarnos bien relajaditos.

Eso es lo que hace falta, dejarnos de llevar un poco, y disfrutar a tope.

Nuestro camarero vuelve del almacén trae dos bolsas una en cada mano.

En me dio del local vacía una y en unos momentos una gran cama de aire esta preparada, le coloca una sabana de látex, y sobre ella lanza el contenido de la segunda bolsa, esposas, dildos, algún látigo, condones, lubricante, poppers, guates, no falta de nada, solo que nosotros entremos en acción.

Rober al ver los preparativos se ríe, y solo con verlo ya esta disfrutando, los camareros ya están sin camisa y sus pantalones se los están desabrochando, nosotros les seguimos los pasos, y allí quedamos los cuatro, desnudos, únicamente con los calcetines puesto para no andar con los pies desnudos por el local.

Nos acercamos los cuatro y nos abrazamos un beso común, abre el juego, y nuestras lívidos empiezan a despertar, el camarero mas bajito el de la perilla, se arrodilla ya va degustando cada una de nuestras pollas, el bigotes tiene un culo maravilloso, y una polla lago mas corta que la de Rober, pero mucho mas gorda.

Rober también se arrodilla y nosotros mientras nos besamos, los masajes en nuestras pollas son placenteros, el bigotes juega con mis pezones, y yo voy directamente a sus nalgas, prietas, redondas, deliciosas.

El camarero de la perilla y Rober al vernos entretenidos se desentienden de nosotros, y haciendo ponerse a Rober de rodillas en el borde del colchón, el camarero le lame el culo, mientras le va dando manotazos en las nalgas, el culo de Rober esta rabioso, necesita polla, y hasta ahora no ha sido utilizado, se lo lubrica, esa lengua viciosa, entra y sale del agujero, coge un poco de lubricante y directamente le introduce un dildo de considerable dimensión, pero sin llegar a ser del tamaño de su propia polla.

Allí situado de rodillas, con una polla de goma en el culo, el camarero del bigotes se sube encima de la cama y poniéndose de rodillas a la altura de su cara, le pone la polla cerca de la boca, el chaval, ya esta loco una polla aunque sea de mentira en el culo y una autentica, son su olor y su sabor entrando y saliendo de su boca.

El camarero de la perilla, nuestro camarero, el del primer juego de la noche, se sube también a la cama, y poniéndose de rodillas detrás de su compañero, empieza a comerle el culo, y al mismo tiempo poniendo algo de lubricante en el suyo, me lo ofrece a mi para que me lo folle.

Yo , de pie, el borde de la cama, hundiéndome despacio en el culo del camarero con perilla, este lamiendo el culo al otro camarero, mientras Rober le lame la polla y los huevos con un dildo dentro del culo, cada movimiento que yo hacia, este repercutía en toda la cadena, fueron , solo unos minutos, pero la instantánea del momento, hacia preveer una larga noche de sexo, morbo y vicio.

De nuevo el perillas, decide hacer cambios en el juego, se quita de el medio, y me deja allí de rodillas en la misma posición que estaba el antes, pero detrás de ese culo que antes tanto desee, ese culo, ya preparado, lubricado y listo para ser taladrado por mi rabo.

El se va detrás de Rober, y sin apenas darnos cuenta le a puesto las manos a la espalda y le ha colocado las esposas, juega con el dildo en su culo, metiendolo y sacándolo, mientras con el látigo de una forma tímida al principio y mas fuerte después le cruza las nalgas una y otra vez.

El del bigote, coge el poppers, lo inhala y le da a Rober, aprovecha que la boca del chaval queda libre para empezar a morrearse con el mientras yo le doy fuertes envestidas en el culo y la polla de goma, entra y sale del culo de mi chaval, cada vez con mas ímpetu.

Al oír los latigazos en las nalgas de Rober, mi instinto se exacerba, y como enloquecido, yo también castigo con mis manos abiertas las nalgas del camarero con gran bigote, estoy descontrolado y sin poder hacer nada mi ritmo en la follada se ha desatado, no controlo, no paro, solo puedo seguir, solo puedo continuar follando y azotando ese culo que tan generosamente me han ofrecido, sigo, y sigo, el final irremediablemente llega y con un fuerte gruñido desparramos mi liquido vital en la espalda del camarero, he sido del primero en corredme y ellos aun esta lejos del orgasmos, pero lo que mas me preocupa son esas miradas viciadas que se cruzan, se lanzan los tres contra mi, el de bigotes me manteniente tumbado bocabajo en el colchón, Rober me pone un juego de esposas en cada ,mano, las que el tenia puestas y otro que quedaba sobre el colchón, y el camarero de la perilla las une a unas cadenas que colgaban del techo.

Al termina, me sitúan de pie al borde de la cama, con las piernas abiertas, una barra de madera y unas correas me hacen mantenerlas separadas por mas de medio metro en mis pies, mis manos colgando por las cadenas, y entonces, el camarero del bigote, dirigiéndose a ellos, les dice, chicos como habíamos quedado ahora empieza el juego, este macho es para goce nuestro.

Se sube a la cama y empieza a darme de mamar polla, Rober se entretiene en prepararme le culo con lubricante, y hasta allí puedo ver lo que hacen, porque inmediatamente unas manos me vendan los ojos.

A partir de este momento mis sentidos se acentúan, mis percepciones se magnifican, mi placer se multiplica.

Nota manos recorriendo todo mi cuerpo, dedos que se introducen en mi culo, otros que retuercen mis pezones, unas terceras tocan y masajean mis huevos, ponen algo de cuero que los recubre, y noto, como un peso tira de ellos hacia abajo.

Estoy envuelto en una nube, estoy siendo utilizada, como jamás me hubiera podido imaginar, castigan mis pezones y cada vez azotan mas fuerte mi culo, mi cara también recibe alguna que otra ostia, cada vez que una polla entraba y hacia posesión de ella, se que fueron varias, estoy casi seguro que los tres me follaron la boca, sus olores, sus sabores, sus texturas y diferentes tamaños, así me lo hacían pensar.

En mi cara sentía fuego, mis nalgas estaban doloridas y escocidas, mis huevos irritados y rabiosos, mi polla….., mi polla a punto de reventar de lo tremenda que estaba, cuando los dedos que jugaban con mi esfínter se retiran e inmediatamente una polla empieza a ocupar su hueco, es una buena polla, pero desde luego ni es lo grande ni lo gruesa que la de Rober, es la del camarero de la perilla, se mueve de una forma pausada, se nota que no es el roll que practica, pero mientras he estado arriba, creo que se han conjurado, para usarme como les viniera en gana.

A partir de este momento, se alterna, después fue Rober, quien me estuvo follando, al final, el camarero, su grosor de rabo, me costo trabajo, tuvieron que lubricar de nuevo para entrar sin dificultad.

Era una ronda la establecida, me enculaba, me azotaba las nalgas, salía de mi, jugaba con mis pezones y mis huevos y luego me follaba la boca, así uno de tras de otros,

Aunque hubiera querido resistirme me hubiera resultado imposible, pero la verdad, era muy diferente estaba disfrutando de la situación, la sentía através de todos los poros de mi piel, y por primera vez me había relajado plenamente y siendo consciente de cómo estos tres cabrones estaban haciendo uso de mi cuerpo.

La ronda la completaron, dos, tres, hasta cuatro veces, y entonces el del bigote como referente, como coordinador de la función, se salio de mi culo, lo tres se subieron encima de la cama, soltaron mis manos y allí caído sobre el camastro, recibí

uno tras de otro los chorros de leche caliente abrasándome la

piel de mi espalda y de mi culo dolorido.

La sensación de esas descargas de macho sobre mi me hicieron llegar a un orgasmo lento suave, prolongado, mi cuerpo se convulsionaba, se retorcía, descargas eléctrica, recorrían una y otra vez mi columna vertebral, mientras mis huevos como un pequeño chorro de leche caliente, continua, sin paros se iba vaciando lentamente sobre la colchoneta.

Al ver como respondía mi cuerpo a sus descargas de leche, los cabrones empezaron a soltar sus olorosos chorros de hemos, era como una gratificante ducha caliente, purificadora, cicatrizadores, que caía sobre todo mi cuerpo, al terminar, los tres se arrodillaron allí, sobre mi, y empezaron a lamerme y masajearme todo mi cuerpo, para terminar todos abrazados besándonos, retorciéndonos sobre nuestros cuerpos y embadurnándonos con nuestros propios jugos amatorios.

Al llegar al hotel, nada mas cerrar la puerta, le digo a Rober, vaya tarde llevamos, y todavía mira, le llevo la mano a la polla mostrándole la dureza que aun tenia

Jode Curro, como estas de caliente, creo que al final el numerito de la violación te ha gustado.

Bueno, un poco todo, el sentirme usado, el no poder ver, acentúa lo sensitivo, y aun solo con el recuerdo, un estremecimiento me recorre la columna.

Lentamente me desnuda, y cuando hago intención de ir al baño a ducharme, me pide que follemos esta noche por ultima vez, tal y como vamos y así nos quedemos dormidos envueltos en estos efluvios sexuales que traemos del bar de osos.

De nuevo se arrodilla, mi polla tiesa orgullosa se hunde en el fondo de su garganta, mientras el de rodillas, se pajea el culo con una mano y con la otra pone su rabo a punto.

Me besa apasionadamente, su lengua se desborda lamiendo toda mi cara, mis ojos, mi nariz, mis orejas, lo mete en mis oídos, y con un suave movimiento de la pelvis se clava mi polla enardecida en el culo.

Sus manos juegan nuevamente con mis pezones, masajea mis huevos con saliva, incluso introduce alguno de sus dedos previamente lubricados con su boca en mi culo.

Con la pelvis, hace suaves movimientos rotatorios, como buscando dilatar aun mas su abierto culo, yo siento mi polla en el fondo de aquella gruta, pero lo mas placentero son mis huevos aplastados por sus nalgas.

Se tumba encima de mi, me abraza, me aplasta, besándome apasionadamente, su lengua busca dentro de mi boca, se retuerce en una vibrante lucha con mi propia lengua, para después lentamente retirarse , incorporarse de nuevo, para con sus lentos movimientos sobre mi polla volver a ejercer ese sumo placer, en mis huevos, aplastados, doloridos, a punto de explotar de ese contacto tan directo y opresor de sus nalgas.

Estamos cansados, mis huevos han sido vaciados varias veces a lo largo de la noche, si no me confundo me he corridos tres veces, de hecho la ultima contra la colchoneta aun quedar resto entre mi bello puvico, pero aun pido mas, tengo necesidad de seguir follando, de seguir practicando sexo desaforado convulsivo.

Rober, cabalga ahora sobre mi polla, el ritmo es mas fuerte, quiere sentir mi polla entrando y saliendo, rozándole internamente, abrasándole el culo.

Cuando ve que no me queda mucho por aguantar, me hace que salga de el, se arrodilla delante de mi entre mis piernas y con su boca y lengua empieza a hacerme el masaje mas jugoso, la caricia mas tiernas, el placer mas sutil, para llevarme en unos minutos al orgasmos final,

Esta noche lo quiero todo de ti, y en el envite final se vuelve a hundir mi polla en la boca, para sentir la descarga en el fondo de la garganta, y así tragárselo despacio, degustándolo, saboreándolo y disfrutándolo hasta la última gota.

Me da la vuelta, me pone a cuatro patas y con los restos de mi semen en la boca, empieza a abridme el culo con su lengua, empuja mi propio semen a sus interior, lubricando por dentro, y con mi semen y su saliva, comienza un mete saca de sus lengua, que cada vez siento mas dentro, de una manera mas profunda.

Sus intenciones son muy claras, y al decirme que esta noche lo quería todo esta claro, que nuevamente me quiere follar.

Vuelve fuera de la cama, busca en sus pantalones y trae un frasquito de poppers, lo inhala, me lo pone a mi en la nariz, y tras lamer un par de dedos de su manos derecha, me lo introduce suavemente, hasta el fondo, los saca y ahora girándolos dentro de mi culo, vuelve a meterlos, mi culo esta abierto, lubricado, no ha dejado de estarlo desde la ronda de folladas en el bar, pero ahora además ,aquí en privado, quiero sentir a Rober, quiero sentir como se hunde dentro de mi, como pasamos a ser uno solo.

Inhalamos de nuevo y ahora si ,ahora es su rabo, el que esta entrando, el grosor así me lo hace saber, y su profundidad también, la respuesta en mi polla es inmediata, otra vez , de nuevo esta dura como piedra, y el chaval, empieza un follada, suave, profunda, para después empezar a cabalgarme de una forma brutal, bestial, allí de rodillas delante de mi entre mis piernas los envites me obligaban a amortiguar la cabalgada con la cabeza contra la pared, esto lo enardece, y creo que ha perdido la lucidez, sigue y cada vez me da mas y mas fuerte,

Quiero sentirle allí, dentro de mi, quiero notar esa descarga en mi interior, quiero todo, y lo quiero ya, sigue le digo, dámelo todo.

El cabrón de Rober, se sale de mi, me pone de lado en la cama, me abraza , apaga la luz y así abrazados inicia lentamente la introducción, se clava dentro de mi despacio, con movimientos pausados, con ternura, demostrando una especie de devoción hacia mi, buscando que el sueño nos llegara juntos, así de esa manera.

Un fuego nace de mi interior, me abraza, quema mi culo, son las descargas de Rober, se esta corriendo despacio, lentamente, llenándome el culo, ese calor ahora se transmite a mis huevos, sale por mi polla es una nueva descarga de leche fruto de la descarga de Rober, es mi cuarta corrida de hoy.

Envueltos en sudor, semen y orines, los brazos de Morfeo lenta pero implacablemente nos abrazan y nos lleva con el.