La casa del placer ii
Así que cogí esa polla y empecé a medirla con mi boca, primero le lamí los huevos y subí despacio por ese tallo degustando cada milímetro,
Una vez en el coche, Elena le cuenta a Paul sus escarceos.
Cuando la verde te miro, algo se encendió en mí, no sé si fueron celos o el sentido de posesión, pero quise arrancarla los ojos. Cuando se te sentó encima y la vi disfrutar me dieron ganas de morderla el coño, pero no podía, tenía que comérselo y lo hice lo mejor que se, prueba de ello es que se corrió en un minuto.
Bueno igual mi polla también tuvo algo que ver.
Seguro hummmm eso no lo dudes.
Después me hubiese gustado follar con el verde. Pero no era mi tipo y posiblemente cuando estuviese más caliente igual tenía una oportunidad.
Así que apareció el de negro, con esa preciosa polla que en cuanto la vi quise comérmela, esa era mía y nadie me la iba a quitar. Me gusto tanto que me lancé a por la tuya mientras él se follaba a la verde. Hummm te la devora relamiéndome en lo que vendría después. Cuando todos terminaron y se abrió la veda, rápidamente fui a por él y le pregunté si quería follar conmigo. Me dijo que claro, que me había echado el ojo nada más entrar.
Así que cogí esa polla y empecé a medirla con mi boca, primero le lamí los huevos y subí despacio por ese tallo degustando cada milímetro, me regodee lamiendo su capullo con mis labios e intente meterla lo más posible. Solo pude meterla hasta la mitad en la primera intentona, pero poco a poco fue entrando más. Notaba como atravesaba mi garganta y como cada vez que lo hacía el lanzaba un gemido. El líquido preseminal y la hinchazón de la polla denotaban que se correría pronto. Así que me senté encima de él y me metí su polla poco a poco hasta tenerla toda dentro. Luego lo empecé a cabalgar despacio, relamiéndome en cada metida. Subiendo y bajando muy lentamente disfrutado de cada centímetro. Noté como alguien me empujaba hacia adelante y me metían la polla en el culo. Al volverme vi que eras tú y te pedí que me dieses muy fuerte. Así lo hiciste y al tener las dos pollas dentro y sentir como se rozaban en mi interior me hizo ponerme muy cachonda y me corrí, me corrí como una perra sintiendo como el negro me llenaba el coño.
Luego tú desapareciste.
Así que esto será nuevo para ti.
Apareció la amarilla y empezó a comerme el coño, se estaba comiendo toda la corrida del negro y me estaba dando un gusto de muerte. Chupaba mi clítoris con maestría y lo lamía y relamía con una paciencia esquinita a la vez que introducía un dedo por mi culito. Me di la vuelta y empecé a comerla el coñito en un perfecto 69. Ella se aplicó más si cabe y me saco unos buenos orgasmos que terminaron con su cara bañada en mis jugos. Fui a su boca la bese y me fui.
Al pasar por una sala que ponía placer y dolor, vi como el anfitrión estaba azotando con su mano a la negra, mientras que la anfitriona la retorcía los pezones.
¿Quieres venir? Me dijeron.
No, no me va el dolor les dije y seguí hacia adelante.
Entonces me encontré una habitación que ponía sorpresa. Entre y no se podía ver absolutamente nada. Anduve a tientas por ella hasta tocar un cuerpo, era un cuerpo fibroso que tenía una polla de unos 18 cm me entretuve acariciando su torso y empecé a masturbarlo lentamente, a la vez que el acariciaba mi clítoris. Noté como se había chupado el dedo y así la caricia fue mucho más placentera. Me agaché y me metí su polla en la boca hummmm era gordita y la llenaba entera, pero también me cabía entera en la boca. La saboree con parsimonia metiéndola y sacándola, primero muy despacio, para ir subiendo el ritmo poco a poco. El, sujeto mi cabeza para marcarme un ritmo más lento y metía su polla hasta mi garganta, la dejaba unos segundos y la volvía a sacar. Esa polla empezó a palpitar y sabía que se iba a correr. Me la metió hasta el fondo de mi garganta dando unos terribles empujones y ahí se vacío apretando mi cabeza con fuerza. Después lentamente se retiró. Yo le cogí la polla y se la dejé bien limpia. Subí y le besé en la boca.
Salí otra vez a fuera y vi al azul en la piscina. No era precisamente mi tipo, pero tenía una buena polla gordita y de unos 20cm. Me acerqué y me senté en el borde, nos miramos y se acercó hacia mi.
No vas a bañarte? El agua está estupenda.
Me lo voy a pensar, no sé si me apetece.
Vaya si me apetecía, aunque solo fuese por quitarme de encima el sudor y los pegotes que llevaba. Había sido una noche larga hasta el momento.
Venga mujer , yo te ayudo.
Se acercó a mí y cogiéndome de la cintura me depósito en la piscina, que la verdad sí que estaba calentita. Al caer pude notar su erección golpeando mi pubis y eso me excito. Me levanto en el agua y yo lo rodee con mis piernas mientras encajaba su polla dentro de mi coño. Un leve quejido salió de mi boca cuando noté como esa polla me llenaba entera. Agarrada a su cuello lo fui follando lentamente, notando como el agua me hacía cosquillas en el culito. El pego su boca a la mía y me besó con pasión metiendo su lengua hasta lo más hondo de mi boca. Ese beso hizo que un río fluyese por mi coñito bañando su polla con él. Acerqué mi boca a su oreja y le dije.
Me corro hummmmm que rico siiiii hummmmm siiiii me corrooooo.
El me agarró fuerte de la cintura y apretándome contra la piscina me clavo su polla hasta el útero corriéndose dentro de mí con una gran cantidad de semen.
Hummm me has vuelto loco hummmm siiiiiii.
Salí de la piscina y me dirigí a mi cuarto, quería ducharme y tumbarme a dormir un poco, el sol casi estaba en lo alto.
Al llegar a la puerta me llamaron
Ehhhh roja, sii tu
Me di la vuelta y era la morada que también volvía a su cuarto.
Que tal lo has pasado?
Joder genial, esto es la hostia, tendré que repetirlo con más asiduidad.
Me gustaría comerte el coño, ¿ Te apetece?
Pues claro que me apetece , esas tetas bien valen un revolcón.
Me guío dentro de su cuarto y me tumbo en la cama, se puso de rodillas frente a mi coño y se lanzó a por el como una loca. Lo abría con sus manos y cogía mi clítoris entre sus labios, lo sorbía me daba lametones de izquierda a derecha con mucha fuerza y mucha rapidez , cuando estaba a punto de correrme cambiaba de arriba abajo y después lo hacía en círculos. El placer me estaba matando y la sujete la cabeza para que me dejaste correrme.
Siiiii hummm siiii no pares, no pareeeees siiii siiiii
La apreté muy fuerte contra mi coño mientras me corría en su boca.
Joder que bien sabes cabrona hummmm ha sido un buen fin de fiesta. Me voy a duchar.
Yo me levanté y me fui a mi habitación, estaba tan cansada que me tiré en la cama y me quedé dormida.
Si, así te encontré yo, dormida y exhausta. El caso es que me has puesto muy cachondo.
Pues hasta que no lleguemos a casa nada jajaja que me tengo que duchar
Vale pero en cuanto lleguemos te voy a follar por todos tus agujeros.
Hummmmmmmm que ricoooo.