La boda de los cornudos (1/2)

Tras diez años de convivencia y dos hijos, una pareja decide casarse y lo hacen en República Dominicana, donde casualmente conocen como son otro tipo de bodas: las bodas de los cornudos.

Las bodas de los cornudos (1/2)

Capitulo 1.- Asisten, sin ser invitados, a una extraña boda.

Loris cogió la mano de Robert mientras estaban de pie en los escalones del hotel mirando al autobús del aeropuerto preparándose para irse.

A bordo del autobus estaban familiares cercanos y amigos que habían volado con ellos a la República Dominicana diez días antes para su boda.

Ambos saludaron a sus dos hijos que tambien iban en el autobús y luego Loris se volvió hacia sus padres… Su madre todavía se estaba riendo de su comentario de despedida.

  • "Recuerda, queremos una nieta esta vez… Tu padre y yo estamos esperando que salga un bebé de tu luna de miel y debes ser una niña.”

Loris sólo negó con la cabeza mientras su madre seguía riendo.

El padre de Loris le mostró el pulgar hacia arriba y ella sonrió.

Ella todavía recordaba la expresión de su rostro cuando, a los diecinueve años, le dijo que se iba de casa para irse a vivir con Robert… Ella vio la tristeza en sus ojos cuando se dio cuenta de que su princesita, como la llamaba, se iba de casa… Todo lo que le dijo en ese momento fue:

  • "Aunque no nos guste, esto es lo que hacen casi todos los jovenes hoy en día… Os deseamos que seaís muy felices en esta nueva etapa."

Loris sabía que él hubiera preferido que se casaran antes de llegar a esa etapa en su relación, pero ella y Robert sabían que todavía no estaban listos para ese tipo de compromiso.

Diez años después de relación de pareja, en la que tuvieron dos niños, uno de ocho y otro de seis años, decidieron casarse.

Una lágrima llenó sus ojos mientras observaba al autobús alejarse lentamente para llevar a familiares y amigos al aeropuerto para su vuelo de regreso a casa.

Apretó la mano de Robert y él se volvió y le sonrió… Tras casarse hace dos días en la playa de Punta Cana, les esperaban dos semanas de luna de miel… Y lo que lo hizo aún más especial fue que era la primera vez en ocho años que pasarían sus vacaciones solos.

Cuando se volvieron para entrar al hotel, de repente recordó que la maleta que contenía su vestido de novia y el traje de Robert se había quedado en su habitación… Se suponía que su madre se lo iba a llevar con ella… Se giró y miró resignada hacia atrás y vio al autobús lejos.

  • "¿Te apetece un cóctel?", escuchó que le preguntaba Robert.

  • "Mmmm, eso estaría bien… Y luego quizás...", le dijo ella sonriendo.

Él le sonrió, se acercó a ella y le dio unas palmaditas en el culo… El sexo parecía mucho mejor ahora que estaban casados ​​y ya habían empezado a planear ampliar su familia.

Se dirigieron a uno de los bares del hotel y se encontraron con una multitud de personas… Acababan de ser servidos cuando de repente una pareja de novios entraron en el salón del bar... Las otras personas comenzaron a amontonarse a su alrededor y rápidamente se dieron cuenta de que estaban en medio de la fiesta de una boda.

  • "Creo que es mejor que nos vayamos", dijo Robert.

Se levantaron para irse cuando de repente entró una mujer en el salón.. La reconocieron rapidamente como la Juez civil que los había casado.

  • "Paren la fiesta de bodas… Ahora, por favor, síganme", gritó antes de volverse y salir del salón.

Loris y Robert sentaron de nuevo, pero una pareja se volvió hacia ellos y les dijo:

  • "Vamos, no se queden ahí sentados… Será muy emocionante ver esto… No se lo pierdan", dijo la mujer.

Loris miró a Robert, que se encogió de hombros y se levantaron.

Momentos después se encontraron siguiendo a la pareja fuera del salón... Robert se encogió de hombros otra vez y le sonrió a Loris mientras seguían a la pareja hasta el siguiente piso y hacia una pequeña sala de conferencias… La sala tenía unas cinco filas de sillas con diez sillas cada una y delante de todo había una mesa larga con documentos.

La Juez civil se puso en la parte de atrás de la mesa y dijo:

  • "Por favor, siéntense todos."

Como Robert y Loris fueron los últimos en la sala, se unieron a la pareja que los había traído y se sentaron en la fila de atrás… Loris miró a su alrededor con decepción… Aunque se habían casado en la playa, no tuvo tantas flores como habian aquí.

  • "Damas y caballeros, nos hemos reunido hoy aquí para presenciar la boda del cornudo Bob y Kelly Osten de Houston, Texas", comenzó diciendo la Juez civil.

Hubo una ronda de aplausos cuando la pareja se puso de pie.

Loris y Robert se miraron asombrados por lo que acababan de escuchar.

  • "¿Una boda de cornudo?", le dijo Robert en silencio.

Loris se encogió de hombros.

  • "Por favor, Kelly y Bob, vengan aquí", llamó la Juez civil.

La pareja se acercó a la mesa mientras se tomaban de la mano.

Loris adivinó que tenían más o menos treinta y pocos años... Aunque ambos tenían la misma altura, la mujer era mucho más delgada.

  • "Kelly y Bob Osten, ¿están listos para comprometerse formalmente con el estilo de vida cornudo al realizar una boda de cornudos?", les dijo

Se volvieron el uno al otro y respondieron al unísono con una sonrisa:

  • "Sí."

La Juez civil se dirigió a Kelly y le dijo:

  • "¿Kelly, aceptas que ya no deseas estar obligada por tu voto matrimonial de abandonar a todos los demás hombres a partir de hoy?"

  • "Acepto."

La Juez civil se volvió hacia Bob.

  • "Bob, ¿estás de acuerdo con la decisión de Kelly de ser liberada de su voto matrimonial de abandonar a todos los demás hombres a partir de este día?"

  • "Estoy de acuerdo y acepto."

Volviéndose a Kelly, dijo ella.

  • "¿Tú, Kelly, Bobas a Bob como tu marido cornudo para cuidarlo y controlarlo?"

  • "Acepto."

  • "¿Te comprometes en todo momento a provocar, frustrar y negar los derechos sexuales preferenciales de Bob, como es habitual en el estilo de vida de los cornudos?"

  • "Me comprometo y acepto."

  • "Kelly, ¿prometes perseguir y usar a otros hombres para la satisfacción sexual tuya cuando así lo desees?"

  • "Lo prometo."

  • "Kelly, ¿prometes dejar que tu cornudo te vea con tus amantes o le cuente todos los detalles de tus encuentros sexuales si lo solicita tu marido?"

  • "Lo prometo y acepto."

"¿Tú, Kelly, prometes ser una buena puta para tus amantes?"

  • "Lo prometo."

Volviéndose hacia Bob le preguntó.

  • "Bob, ¿prometes mantener tu voto matrimonial de dejar a todos los demás hombres con tu esposa y, al hacerlo, ser el fiel marido cornudos en cuerpo, mente y espíritu, de manera libre e incondicional?"

  • "Lo prometo y acepto."

  • “Bob, ¿aceptas el puesto de marido cornudo con el entendimiento de que Kelly tiene total libertad para tener relaciones sexuales con quien quiera, mientras que tú debes permanecer completamente fiel a ella?

  • "Acepto."

  • "Bob, ¿prometes amar y apoyar los asuntos extra matrimoniales de Kelly, ya sea a largo plazo, a corto plazo o de una sola noche?

  • "Lo prometo y acepto."

  • "Bob, ¿reconoces el hecho de que sexualmente no puedes proporcionarle a Kelly todo el placer sexual que se merece?"

  • "Lo reconozco."

  • "Bob, ¿prometes, si ella lo solicita, que le ayudes a encontrar amantes competentes para tu esposa, Kelly, que le proporcionarán el placer sexual que tú no puedes darle?"

  • "Lo prometo."

  • "¿Prometes ser hospitalario, amable y respetuoso con los amantes de tu esposa y también prometes darles acceso preferencial a tu esposa en todo momento?"

  • "Lo prometo."

  • "Finalmente, Bob, ¿reconoces que al entrar en este matrimonio cornudo existe la posibilidad de que tu esposa puede quedar embarazada con el hijo de otro hombre, y si es así, ¿criarás a ese hijo con ella como si fuera el suyo? "

Bob dudó un momento antes de decir.

  • "Acepto y lo criaré."

Kelly podía verse visiblemente emocionada apretando la mano de su marido… La Juez civil miró a Kelly y luego se dirigió al público:

  • "¿Hay un hombre presente para consumar este matrimonio cornudo?"

Como ninguno de los presentes se levanto, la Juez civil se dio la vuelta y miró en dirección a dos hombres negros y altos sentados al fondo:

  • "Duke y Josh, me dijeron que ellos quieren ofrecer sus servicios."

La Juez civil les hizo un gesto para que fuesen… Bob se movió hacia un lado para permitir que los dos machos se pusieran a cada lado de ella.

  • "Duke y Josh, ¿estás preparado para ayudar a Kelly y Bob a consumar su matrimonio cornudo teniendo relaciones sexuales con Kelly?"

  • "Lo estamos", dijeron al unísono.

Luego, la Juez civil se dirigió a Bob:

  • "Bob, como es habitual en estas ceremonias, debes retirar el anillo de matrimonio de Kelly antes de que Duke y Josh se la lleven para consumar el matrimonio… Al hacerlo, usted esta, ante estos testigos, eliminando todos los votos de fidelidad y renunciando a todos los demás que Kelly aceptó el día de su boda… ¿Lo entiendes?"

  • "Lo entiendo y acepto."

  • "Por favor retire el anillo y colóquelo en la mesa", le dijo la Juez civil.

Bob, nervioso, Bobó la mano extendida de Kelly y le quitó el anillo de matrimonio.

La Juez civil se volvió hacia la novia y los dos hombres que estaban de pie a ambos lados de ella.

  • "Ustedes puede ir y consumar el matrimonio cornudo", les dijo.

Los dos hombres tomaron cada una de las manos de Kelly y la llevaron fuera del pequeño salón al eco de vítores y risas.

Loris notó el enrojecimiento de las mejillas de Kelly antes de volverse hacia Robert.

  • "¿Qué es todo eso?", le preguntó Robert en voz baja.

Ella sólo sonrió... Había oído hablar de relaciones de cornudo, pero nunca antes había oído hablar de una boda de cornudo.

  • "Debe ser una cosa estadounidense", comentó Loris.

  • "No crea… También son muy populares en Europa… Francia y Alemania ya las hacen desde hace tiempo... Y ahora se están poniendo de moda en Inglaterra, por lo que he oído", dijo una voz junto a ellos… Era la mujer que les había invitado a seguirles y ver este tipo de boda que no conocían.

  • "Supongo que no conoces esta forma de vida moderna?", le dijo a Loris el hombre que acompañaba a la mujer.

  • "No… Nunca había oído hablar de esto hasta ahora", dijo Loris.

  • “¿Llevas casada mucho tiempo?”, le preguntó la mujer.

  • "Un par de dias, pero hemos vivido juntos unos diez años", dijo Robert.

La mujer acarició la rodilla de Loris.

  • "Deberías intentarlo, amor… Te lo recomiendo muchísimo", le dijo ella.

  • "Sí… Mantiene siempre a un marido en estado de alerta”, dijo el hombre que acompañaba a la mujer.

La aparición de la Juez civil a su lado de repente interrumpió su conversación y la pareja se levantó y se fue.

  • "Son Robert y Loris, ¿no?"

Ambos la reconocieron y luego tuvieron una breve conversación con ella sobre las ceremonias de matrimonio de Cornudos.

  • "Bueno, si alguna vez te interesa, sabes dónde encontrarme y puedo recomendarte a algunos caballeros que sólo estarían dispuestos a ayudarte a consumarlo", les dijo antes de irse.

Robert notó que se había abierto una puerta lateral que conducía a un pequeño bar.

  • "¿Te apetece una bebida?", le dijo a su esposa.

  • "Joder, sí… Necesito una después de todo esto", respondió Loris.

Encontraron una mesa tranquila para ellos solos y se sentaron hablando en voz baja y bebiendo.

  • "¿Crees que deberíamos intentar escabullirnos?", preguntó Robert.

Loris negó con la cabeza y le dijo a su marido:

  • "Supongo que deberíamos irnos de aquí, pero me muero por ver qué sucede a continuación."

Ambos levantaron la vista cuando notaron el regreso de la Juez civil con un hombre negro, alto y ancho de hombros... Estaban mirando en su dirección y de repente el hombre comenzó a caminar hacia ellos.

La Juez civil se dio la vuelta y se fue.

  • "Felicidades a ambos", les dijo mientras se acercaba a la mesa… Ella levantó la cabeza para mirarlo de cerca y él le dio un beso en la mejilla… Luego le ofreció la mano a Robert como saludo y se sentò presentándose como Leroy.

  • "¿Esta es vuestra primera asistencia a ver una boda de cornudo?"

Ambos asintieron.

  • "Es bastante popular aquí…  Aunque son muchos más conocidas las bodas convencionales, claro", les explicó.

Loris sonrió y le dijo que nunca supo que existían hasta ahora y Leroy le explicó:

  • “El cornudismo ha existido desde tiempos inmemoriales y los matrimonios desde finales de los sesenta han vuelto a utilizar este tipo de relación y aquí lo explotamos como un buen negocio.

  • "Supongo que habras participado en este tipo de bodas, no?", le dijo Loris.

  • "Nunca me he casado, así que nunca he sido un cornudo, pero he ayudado a muchas parejas a llevar este estilo de vida y he tenido la suerte de consumar bodas de este tipo", le respondió sonriendo.

Robert se sentía nervioso mientras observaba a Leroy sonreír a su esposa… Era obvio que él se imaginaba con ella y, a juzgar por la expresión de Loris, también era obvio que a ella le gustaba.

  • "Entonces, ¿ustedes no pueden verse en este estilo de vida", preguntó Leroy.

Robert rápidamente sacudió la cabeza mientras Loris le explicaba:

  • "Acabamos de casarnos… Es un poco pronto para empezar a involucrarnos en algo así... De todos modos, somos felices como estamos ahora”, le respondió ella.

  • "Nunca es demasiado tarde, aunque han estado juntos diez años y también tienen un par de hijos", le dijo Leroy sonriéndoles.

Loris asintió… Era obvio que la Juez civil había estado hablando con él sobre ellos.

  • "Ahora es un buen momento para entrar en este estilo de vida", sonrió Leroy.

  • "Y supongo que estarías ofreciendonos tus servicios, por así decirlo, si decidiéramos entrar en ello?", le dijo Loris riendo.

Robert ajustó su postura en su asiento con nerviosismo.

  • "Sería un sacrificio que con mucho gusto haría para ayudarles a los dos recién casados ​​en su camino al cornilismo", respondió Leroy poniendo su mano en su corazón.

Loris se rio de nuevo y le dijo:

  • "Un sacrificio humilde, ¿eh?"

Robert sonrió y Leroy también se rió.

Su vaso estaba casi vacío y también lo estaba el de Loris, así que se levantó para ir al bar y le ofreció a Leroy una bebida.

  • "Una cerveza pequeña, por favor", le pidió.

Robert los dejó hablando… De vez en cuando los miraba mientras esperaba a que le sirvieran… Loris se reía a veces y Leroy se inclinaba hacia delante para llamar su atención… Él estaba obviamente interesado en ella y pensó que quizás los sentimientos eran mutuos.

En un momento dado, miró hacia otro lado y vio marido cornudo de la esposa que estaba arriba en algún lugar con otros dos hombres… El hombre le sonrió… Parecía bastante feliz.

Sus pensamientos se dirigieron de nuevo a la esposa de ese hombre cornudo… Robert pensó en una cama con los dos hombres follando a la esposa desnuda, provocandole orgasmos tras orgasmos.

Conocía la reputación de los hombres negros con hembras blancas… Ellos siempre parecían encontrar esa fuerza extra para follarlas por más tiempo y más duro y siempre parecían tener pollas más grandes y gruesas que los hombres de otras razas.

La esposa del hombre cornudo sin duda se encontraría con que ahora tendría las manos ocupadas con los dos hombres con los que estaba.

Se volvió de nuevo hacia Loris y Leroy... Los vio que se reían de nuevo… De repente se encontró pensando en los dos juntos… Ella siempre había sido crítica con las personas que tenían asuntos sexuales fuera del matrimonio... Pero ahora se estaba preguntando si todavía tenía esas opiniones… Ella estaba disfrutando de la atención de Leroy.

Después de que finalmente le sirvieron las bebidas, se unió a ellos en la mesa y Loris se disculpó para ir al baño de señoras.

  • "¿Qué piensas de la boda que viste, Robert?", le preguntó Leroy.

  • "Pues que hay gustos para todos."

  • "¿No te apetece la idea?"

Robert negó con la cabeza.

  • "¿Y si Loris estuviera interesada en la idea?"

Robert se rió nervioso preguntándose si ella le habría dicho algo a Leroy.

  • "Yo,.. dudo que ella lo haría."

  • "Pues yo tengo la sensación de que ella lo haría si estuviera con la persona adecuada", le respondió Leroy sonriendo.

Otra risa nerviosa escapó por la boca de Robert.

  • "No… No creo que eso suceda", respondió él sacudiendo la cabeza.

Leroy se inclinó hacia delante.

  • "Creo que ella lo haría, Robert… Si estuvieras de acuerdo, ella también celebraría esa boda."

  • "¿Ella?... ¿Ella te dijo eso?"

  • "Esa es una conversación que deberías tener con ella, pero creo que a Loris le encantaría hacerlo… No creo que ella quiera seguir ese estilo de vida siempre, pero estoy seguro de que le gustaría celebrar una boda de cornudo", le dijo Leroy sonriendo.

Robert no tuvo la oportunidad de discutirlo con ella cuando volvió.

Leroy se quedó con ellos y se puso hablar de sí mismo… Loris le preguntó si tenía novia y él se rió y le contestó:

  • "En este momento, sólo EOH."

  • "¿EOH?... ¿Y eso qué es?"

  • "Las e sposas de o tros h ombres… Es mucho menos complicado y muy agradable", respondió.

  • "¿Muy agradable?", preguntó Loris con una sonrisa.

Leroy asintió, devolviéndole la sonrisa y le respondió:

  • "Si… Es un poco como robar dulces… Siempre parecen tener un sabor mucho más dulce cuando los robas."

Robert notó la mirada en los ojos de Loris… Podía ver que ella se sentía sexualmente atraída por Leroy… Allí había química… Sintió una punzada de celos y, al mismo tiempo, sintió que su excitación sexual iba en aumento.

Una repentina algarabía en el salón contiguo atrajo la atención de todos hacia la puerta… La novia y los dos varones habían vuelto y la gente comenzó a correr para Bobar sus asientos.

Loris y Robert se levantaron y también se movieron hacia la puerta, pero Leroy permaneció sentado.

La Juez civil también entró en el salón justo cuando se sentaron todos y ella caminó hacia el frente de la mesa… Al llegar allí dijo:

  • "Bob y Kelly, vengan aquí, por favor… Y también, Duke y Josh."

Momentos después, los cuatro estaban en la mesa frente a la Juez civil.

  • "Duke y Josh… ¿Habéis tenido ambos relaciones sexuales con Kelly Osten?", preguntó.

  • "Sí… Y hemos disfrutado muchísimo con ella", respondieron sonrientes al unísono.

  • "Kelly Osten, ¿confirmas que acabas de tener relaciones sexuales con Duke y Josh?"

  • "Sí… Y también lo disfruté muchísimo", respondió ella aclarando su garganta antes de sonreír.

La Juez civil se volvió hacia Bob y le dijo:

-  "Bob Osten, usted ha oído que Duke y Josh declararon que tuvieron relaciones sexuales con su esposa Kelly, y que una vez que ella lo confirmó, yo lo declaro un marido cornudo."

Bob se volvió hacia Duke y Josh, sonrió y les dio su mano a ambos en señal de agradecimiento antes de girarse hacia su esposa Kelly y besarla firmemente en los labios.

  • "Habiendo cumplido con todos los requisitos necesarios, ahora declaro que esta ceremonia de bodas de cornudo ha terminado", dijo la Juez civil, con gritos y aplausos de la audiencia.

  • "Que ambos tengan una larga y agradable vida de cornudo."

De repente, Kelly se inclinó, levantó el dobladillo de su vestido de novia y comenzó a quitarse la liga de seda blanca con lazos rojos.

Cuando salió de allí, se volvió de espaldas al público y lanzó la liga al aire detrás de ella… Manos femeninas se alzaron en el aire, preparadas para cogerla con chillidos alegres… Robert las miró con desconcierto mientras la liga comenzaba a caer hacia donde estaban las mujeres.

De repente, Loris alargó su mano y la cogió.

Todavía había gritos de alegría cuando ella se volvió para mirar a su marido enseñandole que había cogido la liga.

  • "Es tu turno, amor", dijo una voz familiar desde su lado.

Robert se dio la vuelta para ver el rostro sonriente de la mujer que los había llevado antes al salón de ceremonias.

  • "Ahora es tu turno de convertirte en un marido cornudo.”

Abrió la boca para hablar, pero no pudo encontrar ninguna palabra que decir.

  • "Lo disfrutarás, créeme", dijo el hombre que acompañaba a la mujer.

Continuará...