La bienvenida de Paola.
Después de muchos intentos mi amigo Gilberto logró cogerse a la esposa de mi compadre Paco.
Hace tiempo que no les cuento nada, pero las “fiestas” con los amigos siguen con todo, con la novedad que por motivos económicos Antonio y Susana ya viven juntos. Mi compadrito con el pretexto de ver el futbol los miércoles en nuestra casa convence a mi esposa y cuando menos le mete dos goles. Hemos tratado de integrar a su esposa Paola a nuestro grupo con varias cenas de “matrimonios” y parece que las cosas van por buen camino, los hemos invitado a algunas veces con Toño, Susy y Gilberto a cenar en plan “tranquilo” pero con un poco de picardía. Mi amigo Gilberto en la última cena se le había lanzado a Paola, cuando la sacó a bailar le estuvo acariciando las nalgas mientras le embarraba su cañón en la panocha, Paola se sintió indispuesta y una vez que ellos se fueron nos pusimos una cogida tremenda los cinco.
Supimos que Paola le dió esa noche una buena cogida a Paco y le comentó; que Gil se propasó con ella pues cuando bailaban le acarició las nalgas que ella tuvo que aguantar para no hacer una escena en casa de Toño. Paco le respondió; si te molesta no vamos más a las cenas. Ella le recalcó; ¿no te molesta que otro tipo me acaricie las nalgas?... Paco le dijo; mira por mí no hay cuidado, Gilberto es muy “travieso” y si a ti no te molesta pues déjalo que haga lo que quiera... Paola grito; ¡lo que quiera!! ¿He?... puso cara de sorpresa con excitación y se dió media vuelta y se durmió. Nuevamente preparamos una cena de parejas en casa, le contamos los planes a Gilberto para que se presentara informalmente a la cena y sedujera a Paola, mi compadre estaba nervioso y feliz con el intento de que Gil se cogiera a su esposa.
Nos propusimos todos que esa noche calurosa haríamos lo posible por que esto sucediera. Los primeros en llegar fueron Toño y Susana que venía despampanante, con una playera negra entallada con un generoso escote que dejaba ver sus apetitosos melones con una mini falda de cuadro Escocés, mi esposa también estaba vestida muy sexy, con un nuevo vestido corto cruzado como bata con un cinto de tela y un juego de lencería de infarto en color beige. Nos saludamos muy afectuosamente pues Susy me planto un besote de lengüita mientras me oprimía sus tetas en mi pecho, para corresponder el saludo le metí mis dos manos por abajo de su faldita para estrujar sus nalgas. De reojo pude ver a Gaby con su vestido abierto, pues mi amigo Antonio se estaba dando una buena agasajada con mi esposa.
Unos minutos después sonó el timbre y que bueno que sonó, si no nos encuentran cogiendo a los cuatro pues estábamos muy calientes. Nos recompusimos y nos fuimos Toño y yo a la cocina a preparar los tragos en lo que las damas abrían la puerta, unos minutos después entraba a la cocina mi compadrito Paco con dos botellas de licor en sus manos las puso en la mesa y nos dió un efusivo abrazo, Paco nos confió: Mi esposa me amenazó: Si Gil me vuelve a tocar las nalgas le voy a dejar que haga todo lo que quiera, al fin que a ti no te importa que a tu esposa le metan mano. Le respondí por mi si te gusta te lo puedes coger. Toño se quedó girando; le preguntó; ¿si le meto mano no te molesta?... Claro que no tu ya sabes que es lo que deseo, pero me prestas a tu esposa ¿he?... OK. Está bien.
Cuando entre a la sala me quedé sorprendido con Paola, pues ella es delgada vamos a decir que es alta morena clara con el pelo largo lacio en color negro, con unos ojos grandes en color negro se veía guapísima, nunca la había visto con morbo pero se le notaban unas nalguitas respingonas muy ricas en su vestidito entallado, de inmediato me acerqué a ella a saludarla con un par de besos en sus mejillas, Toño hizo lo mismo solo que le dió un abrazo mientras le besaba las mejillas. Nos sentamos a tomar la copa y a platicar de todo, le cargamos más las copas a Paola que por primera vez estaba muy sonriente y simpática. Mi compadrito Paco estaba feliz deleitándose con las tetas de Susana pues su escote cada vez enseñaba más de sus melones. El vestidito traicionero de mi mujer se abría y dejaba ver casi todo su muslo hasta donde sus medias terminan y una parte más de la carnita.
Yo servía copas y más copas hasta que estábamos muy desinhibidos, en eso sonó el timbre y fui a abrir la puerta, era Gil que ya venía medio entonado, saludo a las señoras con unos besotes entre mejilla y boca, se siguió con Paola que la saludo de la misma forma solo que el beso fue más en la boca que en la mejilla. Luego se disculpo por llegar sin invitación pero nos dijo que había tomado un curso de masaje Hindú que imparten cerca de nuestra casa, como vio el auto de Toño pues pasó a saludarnos.
Yo se que esas cosas esotéricas de incienso, masajes, y yoga le gustan a Paola, que de inmediato le preguntaba a Gilberto como eran, él le daba explicaciones pero luego le ponía sus manos en la espalda y la recostaba a un lado mientras le hacía presión con sus dedos, Gil le dijo que obviamente tenía que ser sin ropa para aplicar un aceite especial que traía en su mochila. Todos le pedimos que nos enseñara como se daba ese masaje y que Paola fuera a quien se lo hiciera. Paola se negaba pues argumentaba que luego se tendría que bañar. Gil le aseguraba que el aceite se absorbería todo y que no había necesidad de bañarse y huele muy rico tiene extracto de plantas orientales es delicioso que te va a relajar.
Mi esposa fue por una sábana mientras Susana convencía a Pao diciéndole; Gil da unos masajes deliciosos te arregla toda la espalda, a mi ya me los ha dado y tiene muy buena mano. (Y mejor verga pensé yo) les serví otra copa a Paola para que se relaje y Paco la animaba para que lo hiciera. Pao al fin aceptó ir al baño a quitarse su ropa, salió envuelta en la sábana. Gil le dijo que mejor se acostara en la alfombra pues así tenía más espacio, ella se recostó con cuidado para no mostrar nada de sus encantos mientras Gil encendía unos inciensos y unas velas se frotaba las manos con un aceite, le empezó a frotar la espalda haciendo presión con sus dedos en algunos puntos. Las señoras estaban sentadas a un costado de ellos viendo atentamente como las manos de Gil corrían por la espalda desnuda de Pao.
Nosotros nos servíamos una cuba y bajamos al mínimo la intensidad de la luz, puse una música de relajación en el estéreo. Paco nos confía que está muy caliente por ver a Gilberto como acaricia a su esposa, regresamos al masaje y Gil le oprimía el principio de las nalgas de Pao y regresaba a su espalda, luego le descubre una pierna le vacía un poco de aceite y le empieza a dar masaje a los pies sube a las pantorrillas y lentamente subía hasta los muslos, los sobaba con fuerza y poco a poco sus manos fueron entrando hacia la parte interna de los muslos, jaló la sábana a un lado ¡Paola estaba desnuda!... se le veían unas nalguitas respingonas muy sabrosas. Paola no decía nada y el masaje estaba tomando proporciones de manoseo, pues Gil se daba vuelo acariciando las nalgas de Paola que seguía con la cara entre sus brazos y solo la delataba su respiración un tanto agitada, por momentos ¡los dedos de Gil se perdían en la hendidura de sus nalgas!!
Voltee a un lado y mi compadrito estaba de pié con los ojos perdidos en las manos de Gilberto viendo como le estrujaba las nalgas a su esposa pero le rozaba su bulto en un brazo a Susy, ella cruzó los brazos para acariciarle la verga con su mano sin ser delatada, entonces él le paso su brazo al rededor del su cuello y le acariciaba las tetas por arriba del escote. Gaby no se quedaba atrás pues tenia una mano dentro de la bragueta de Toño mientras él le abría el vestido y se lo sacaba. Gilberto le acariciaba la espalda y volvía a estrujar las nalgas de Pao que sin inmutarse se dejo hacer todo, entonces Gil regresó a las piernas de Pao se las flexionaba hasta que su talón pegaba en su nalga pero eso fue con el pretexto de irse colocando entre las piernas de Paola, se abrió los pantalones se puso más aceite en las manos y siguió acariciando con todo las nalgas y la rajita de Paola, sus caderas la delataban pues se le movían involuntariamente mientras jadeaba en voz baja.
Gilberto liberó su verga que lucía enorme, volteo a ver a Paco que estaba como hipnotizado viendo incrédulo como se van a coger a su mujercita, le hace una seña permitiendo que Gil siga adelante. Gil se hinca entre las piernas le masajea los muslos por la parte interna separando más las piernas de Pao, empieza a correr el glande bañado de aceite por la rajita de Paola, le empieza a hacer presión en la entrada de su cuevita, de inmediato Paola sintió la punta de la verga que se le metía, levantó su cabeza y nos volteo a ver a todos con ojos de plato, pero al ver a mi esposa mamando la verga de Toño, y a su marido metiendo la mano en las tetas de Susana se relajó y volvió a hundir su cara entre sus brazos, Gilberto se la empezó a meter muy lentamente le daba unas estocadas lentas y profundas que le arrancaron un sonoro orgasmo, entonces Gil con más confianza le levantó las nalgas y la puso en posición de perrito pero ella seguía con su cara entre los brazos, se la dejaba ir completita, Paola le gritaba;¡La tienes muy grande no me vallas a lastimar!!...
La ropa de todos volaba por toda la sala, Toño acostó a mi señora a un lado de Paola y se la cogía con todo, Paco dejo a Susana y se hincó a un lado de su esposa para ver con una cara de lujuria como Gilberto se la cogía, le acariciaba el rostro a su esposa la besaba con fuego se regresó a la parte de atrás de su mujer para ver incrédulo como le entraba toda la tranca de mi amigo en el coñito. Gilberto sin ningún recato le ¡agarró la verga a mi compadrito y le pajeaba rozando el glande en una nalga de Paola!! Mi compadre no pudo más de la excitación tan tremenda que tenía, descargaba una cantidad impresionante de leche en las nalgas de su esposa, algunos chorros llegaban a la verga de Gil que le servían como lubricante para seguir cogiéndose a Paola, después de la venidota que se dió mi compadrito seguía tan excitado que no se le bajo el pito y se siguió de nuevo con Susana, me dijo con voz agitada quítate dame chance de coger con Susy y me quitó, Gil giró a Paola y la acostó boca arriba y ella se le enredaba en su cuerpo como araña pues lo abrazaba con las piernas y brazos gritaba con todo; ¡aayy que ricooo me estás cogiendo!! ¡La tienes muy grande ahhggyy!! Escuchar esas palabras de la boca de Paola tan seria me excitaron mucho.
Veía como se le agitaban las tetitas a Pao al compás de la cogida que le metía Gil. Me acerque a acariciárselas le pellizcaba sus pezoncitos obscuros, se volteo y se ¡prendió a mi verga con una mamada de fuego!!... mientras con su mano la pajeaba al mismo tiempo, recordé que mi pija estaba bañada de jugos de Susana y eso me excitó aún más. Enfrente mi esposa estaba cogiendo con todo con Toño y se estaban corriendo los dos al mismo tiempo, sus jadeos y gritos eran muy fuertes. No aguante mucho pues la mamada que me daba Pao era muy excitante, nunca pensé que la esposa de Paco diera ese tipo de mamadas, la quise apartar pero no se quitó y me empecé a correr en su boca trago una buena cantidad de leche abrió su boca para tomar aire mientras jadeaba con fuerza, Gil la silenció besándola con fuego mi leche salía de sus labios y tenían un orgasmo simultaneo jadeaban y gritaban. Uff... Mientras mi compadrito se daba vuelo con Susy, se la cogía a toda velocidad le estrujaba las tetas con fuerza.
Me fui al baño a orinar, y cuando salía mi esposa entraba con su panochita escurriendo leche de Toño, solo me comentó esa Paola se me hace una mosquita muerta, mira que cogida se dió con Gilberto. (¿Serían celos?...) Lo que me sorprendió es que Gil se estaba levantando de estar arriba de Paola, en ese momento mi compadre sale corriendo de estar dentro del coño de Susana de inmediato se la mete a su esposa que lo recibió con la panocha llena de leche de Gil, se besaron con lujuria y se empezaron a correr como adolescentes solo nos quedó aplaudirles... Jajaja. Que bonita reunión todos desnudos platicando y tomando, Paola estaba feliz escurriendo leche hasta las rodillas, se fue al baño con su marido, Gilberto le reclamaba a mi esposa; Me tienes muy abandonado ya no quieres coger conmigo. Mi esposa lo acariciaba dicíendole: Pobrecito quiere que Mami le de su lechita. Yo brindaba con Susy le acariciaba y besaba sus maltrechas chichis pues a mi compadrito se le pasó la mano de estrujarlas.
Abrí una botella de Champaña para que brindemos todos con Paola, todos le dimos un abrazo con una acariciada de nalgas y un beso, pero el mejor abrazo fue el que le dió Susana con sus súper tetas contra las chichitas de ella, le puso una estrujada de nalgas tan caliente que los ojos de Paola nos volteaba a ver la verga a todos los señores pues la escena nos despertó la pinga, seguíamos desnudos con mucha naturalidad. El que andaba feliz como chivo en cristalería era Paco, pues le daba un agarrón de nalgas a mi esposa mientras que con su otra mano le pellizcaba los pezones de Susy. Estuvimos tomando y platicando de lo rico que coge Paola, Toño estaba muy apuntado con Paola pues la abrazaba por atrás le acariciaba las tetitas y le restregaba el pito entre las nalgas, un momento después se sentó en un sillón subió a Pao arriba de él para que lo cabalgara le rozaba su glande en la rajita, mi compadrito se hincó a centímetros para ver en primer plano como otro cabrón estaba a punto de meterle la verga a su esposa.
Gilberto encendía un cigarro de marihuana y se lo daba a fumar a Susana y a mi esposa mientras mi compadre seguía arrodillado entre las piernas de Paco, abriendo con sus manos las nalgas de su esposa para ver muy de cerca como le entraba y salía la verga de Toño, que en ese momento le daba a toda velocidad mientras trenzaban sus lenguas con lujuria. Mi compadrito no podía más con la excitación recostó a Susana en la alfombra pero ella le reclamó que la había dejado a punto del orgasmo cuando se Safo de ella y se fue a coger a su mujer. Paco le pedía disculpas y se la empezó a coger con todo, al poco momento Susy tenía un súper orgasmo que la hacía moverse como serpiente, pero Paco no le soltaba las tetas.
Paola los volteaba a ver como cogían, mientras Gilberto estaba acostado en la alfombra con las piernas separadas y mi esposa en cuatro mamándole con todo la verga que ya la tenía totalmente dura, se preparaba para recibir ese monstruo en su coñito pues se hincó sobre él para rozarse en su rajita el cabezón morado escurriendo líquidos, se tuvo que parar en una pierna para centrarse el glande en su cuevita y lentamente dejarse caer sobre la tranca de mi amigo, pronto desapareció la verga completita, mi mujer tenía espasmos como si se estuviera muriendo de frío Uff... Que sentirá.
A mi se me reventaba la verga de lo caliente que estaba pues para donde volteara había acción, pero lo que yo quería era cogerme a Paola, pues es un coño nuevo para mi y cobrarme un poco de las cogidas que Paco le ha metido a mi señora, así que solo esperé un poco pues Pao tenía un orgasmo muy fuerte sobre la verga de Toño que de inmediato vi como se la dejó clavada hasta los huevos y se le tensaron las piernas los dos jadeaban y se besaban con fuego. Me acerqué a ellos y le dije a Toño dame chance de coger con Paola. Ella me dijo pero estoy muy sucia déjame lavarme. Le respondí; así me gusta más entonces Paola se desmontó de Toño y se subió en mi, se dejó caer en mi palo que se le fue hasta el fondo pues estaba repleta de leche de Toño que tanto me gusta remover.
Uff... ¡Que rico se mueve la flaquita!... sus nalguitas no dejaban de moverse mientras me veía fijamente a mis ojos, me susurraba al oído: ¿Te gusta?... Mucho le respondí. La leche de Toño me hacía unas cosquillas tremendas, le mamaba sus chichitas chicas pero duras, a pesar de lo lubricado de su coño apretaba muy rico su panochita se nota que mi compadre no le ha dado mucho uso, es muy ligera pues la levantaba de sus nalguitas como si me hiciera una paja con ella, me estaba gustando mucho coger con ella, lo único que no me gustó es que cuando la besas te muerde los labios y la lengua en el momento te lastima y te excita. Mi mujer tenía un violento orgasmo que le sacudía las nalgas, se le salían chorritos de líquidos de su panocha que corrían por toda la verga de Gilberto. Paco se estaba corriendo en la panochita de Susy y nos volteaba a ver con ojos de plato. Paola empezó a gritar con un orgasmo muy fuerte, sus músculos vaginales se le tensaban muy rico claramente sentía en la verga como se estaba viniendo lo que me arrastro a correrme en lo más profundo de su coñito mientras le estrujaba las nalgas con fuerza.
Uff... Estaba aturdido de la cogida tan fuerte que nos dimos, Paola estaba como dormida sobre mi hombro, Paco se levantaba de estar sobre Susana y corría al baño, mientras Toño tomaba una cuba sin quitar los ojos a mi esposa, pues estaban en los últimos jadeos de la súper cogida que se dieron, pues a Gaby le brotaba chorros de leche de su coñito mezclados con el orgasmo tan salvaje que siempre le saca Gilberto, pues le roza el punto “G” parecía que se hubiesen hecho pipi.
Me estaba orinando así que me quite a Pao de encima la recosté en el sillón y me fui corriendo al baño. Paco se estaba acabando de bañar. De inmediato me pregunto: ¿Que tal coge mi esposa?... Pues estimado compadrito que desperdiciada la tienes, coge riquísimo... Está muy nuevecita y sabe coger muy rico, no entiendo por que dices que no le gusta si le hecha muchas ganas a las folladas, mira que coger con Gilberto no es cosa fácil, está flaquita pero picosa. Jajaja. Que cogida le metió Gilberto yo pensé que no le iba a entrar esa vergota que tiene el cabrón, me la ha de haber dejado muy abierta. Yo la sentí muy bien compadrito, una pregunta: ¿Coge por el Culo?... Nunca me ha dejado hacerlo por ahí, pero hoy lo creo todo. Vamos a tomarnos una copa. Jajaja. Bienvenido al club de los “cuernos largos”
Gilberto encendió otro cigarro de Marihuana y se los dio a fumar a las damas, pero el efecto fue inverso pues se quedaron profundamente dormidas, todos estábamos satisfechos menos mi compadre Paco, se acercaba a ellas y les tocaba todas sus cositas mientras me exclamaba; nunca pensé acariciarle una nalga a mi comadrita mientras le pellizco los Pezones a Paola, y luego un buen agarrón de estas deliciosas tetas enfrente de mi esposa, estoy soñando... Jajaja. Seguimos comentando la velada con más tragos. Toño despertó a Susana se vistieron y Gil se fue con ellos. Subimos adormiladas a mi esposa y a Paola las acostamos en mi cama, le dije a Paco que las dejara dormir y que por la mañana se fueran a su casa, nosotros nos podemos dormir en la recámara de mis hijos. Mi compadre me pidió casi de rodillas y ¿si me voy a dormir con ellas?... Has lo que quieras... de inmediato solo me dijo con una sonrisa de oreja a oreja; gracias buenas noches. Corrió a mi recámara y cerró la puerta, un momento después estaba de regreso. ¿Que pasó? Me corrieron me dijeron que querían estar solas. ¿Tu crees que estén haciendo cochinaditas entre ellas?... No lo sé ya duérmete.