La bella y la bestia parte 6

Un vuelco total a mi vida.

LA BELLA Y LA BESTIA

6ª parte

Se fue temprano al trabajo y quede sola en la cama, mirando la habitación. Debía esperar hasta después de medio día para encontrarme con Roberta y no veía la hora que llegara ese momento. Lo que si estaba claro que acá no volvía más, aunque Roberta dijese que aguante unos días más. No, lo de anoche fue suficiente para saber que no tenía ningún escrúpulo conmigo. Además de golpearme y violarme que podía esperar mas de él. Que me entregase a sus amigos y conocidos, quizás hasta cobrándoles o dejarme en el departamento prostituyéndome esperando cliente telefónicos. O la muerte. Por ello arme una valija con la ropa necesaria. Saque de su mesa de luz la plata que había, unos 2 mil pesos y espere el llamado de Roberta. Llamo y salte del sillón, con miedo a que sea mi marido. Era Roberta que me esperaba, con el auto en la esquina. Cuando me vio se sorprendió por la valija.

ROBERTA: que pasa amor, y esa valija?

PAOLA: me voy de casa, estoy resuelta a hacerlo. Si no es con vos lo hare sola a algún hotel de mala muerte.

ROBERTA: quedamos que ibas a esperar, que aguantarías un poco más.

PAOLA: (con lagrimas en los ojos) es que no aguanto mas, estoy destruida.

ROBERTA: cuéntame que paso.

PAOLA: hace un tiempo que viene a casa y por cualquier pretexto, sin yo abrir la boca, empieza a golpearme. Son verdaderas paliza que me dejan destruida. Que por la comida, que porque lo mire mal, o se me cayo algo o había algo sucio. Ya no vivo. Ayer además de pegarme, tengo las nalgas marcadas, por los golpes, que me duelen al sentarme, me violo por el culo. No sabes como lo tengo. Eso colmo el vaso.

ROBERTA: que hijo de puta

PAOLA: si, solo falta me traiga gente y cobre por mis servicios. Y en cualquier momento lo hace.

ROBERTA: pero yo aun no puedo llevarte conmigo

PAOLA: si, lo se

ROBERTA: puedo llevarte a un hotel, pero el ambiente no es bueno. Ven te llevare a uno que conozco.

Salimos rumbo a ese hotel.

ROBERTA: dime, Ud. estaban bien, solo que él no quería tener hijos. Es así?

PAOLA: si, yo esta resignada a eso, así que no se porque.

ROBERTA: a un problema de dinero.?

PAOLA: no, eso no. los dos ganamos bien y vivíamos bien.

ROBERTA: no eso solo. El negocio, el coche, propiedades, joyas.

PAOLA: joyas no tengo, no me gustan. El negocio es de los dos con mayoría él, además lo dejo mi padre. El coche es 0km y esta a nombre de él. El que teníamos los dos lo vendimos para comprar este. Lo único que me queda y es mío sola, es un chalecito chico en Córdoba. Nada más. No tengo cuentas en el exterior ni nada. El no se si tendrá o no.

ROBERTA: entonces debe andar detrás del chalecito, transfiéreselo y terminas todo con él.

PAOLA: no, es un obsequio de mi madre.

ROBERTA: y ahora que harás? Pedirás el divorcio?

PAOLA: si, pero primero debo conseguir un hotel y un trabajo.

ROBERTA: el hotel dalo por hecho, el trabajo no puedo ayudarte, porque si pido en el ambiente, se va enterar.

PAOLA: no te hagas problema, consigamos el hotel.

Me llevo a un hotel de bastante baja de categoría. Los hombres que había, algunos eran de cuidado. En cuanto a las mujeres, sacando una o dos, las demás eran chicas se dedicaban a la prostitución en la zona. Una vez alojada estrene la cama con Roberta. Pero ninguna de las dos estaba mentalizada para ello.

ROBERTA: no te preocupes amor, estamos las dos conmocionadas, otro día será. A propósito el sábado salgo para Roma, por 60 días. Voy a prepararme y boxear con la otra campeona a fin de unificar el titulo y es muy importante esa pelea.

PAOLA: esta bien no te hagas drama, mañana salgo a buscar trabajo

ROBERTA: bien me voy. En cuanto salga cierra bien con llave la pieza.

Cerré y trabe bien la puerta. Era una habitación chica, había una cama, un viejo y destartalado ropero, una mesa de luz y una TV colgada de la pared, que manejaba con control remoto. No tenia baño. Para ello cruzaba un pasillo de aprox. 1,50., y sino otro al fondo, frente a la cocina. Para cocina tenia que tener lo utensilios que yo no tenia. Teníamos prohibido, totalmente las estufas eléctricas y como gas, había solo en cocina y calefones de los baños, había que arroparse bien para no tener frio. Por la TV pagaba un adicional y si tenía heladera, radio eléctrica, o todo artefacto eléctrico debía pagar adicionales, por cada uno de ellos. Yo solo pagaba por la TV, para entretenerme. Solo se permitía tener en verano y sin pagar, un ventilador mediano. Me costo dormirme, no solo por el miedo que tenia, sino que también por el pasillo circulaba gente hacia o desde sus habitaciones.

Por fin me dormí hasta las cinco de la mañana. Desperté con unas ganas enormes de orinar. Abrí despacio la puerta a ver si venia alguien y salte el pasillo para meterme en el baño. Una vez hice mis necesidades volvía a mi habitación haciendo lo mismo.

A la media hora, salí al patio y viendo el baño libre me metí, trabando bien la puerta, a  darme una ducha y lavarme la cabeza. Me vestí con tanga y sostén y me puse el albornoz, para ir a mi habitación. Solo se veían en el pasillo algún que otro tipo. El baño apenas salí lo ocupo uno y se bañaba cantando. De las chicas solo vi a una ir a la cocina. Las demás parecían no estar o dormir. Una vez que me vestí fui a la cocina a ver si conseguía tomar algo. Entre e estaba una calentando agua.

PAOLA: buenos días

ALICIA: (así llamaba) hola, buenos días y bienvenida, eres nueva no?

PAOLA: si, acá en el hotel me registre anoche. Quería ver si conseguía por hoy, una taza y café. Hoy comprare varias cosas.

ALICIA: (tomando una taza y una cucharita.) si acá tienes, es de una que recién fue a trabajar. Café, te o mate? Sírvete lo que quieras. Ah, acá hay leche.

Tome un saquito de café y me serví con leche.

ALICIA: toma come alguna factura.

PAOLA: bueno, gracias, no quiero abusar, pero tengo hambre y un café con leche caliente es genial. Hace mucho vives acá.

ALICIA: dos años. Eres nueva no?

PAOLA: y que tal el hotel

ALICIA: bien, mientras no te metas con otras es tranquilo. Eres la nueva del Chino?

PAOLA: la nueva? Del Chino? Quien es el chino?

ALICIA: disculpa, pensé eras del Chino. El es mi proxeneta y el 10 chicas que hay acá.

PAOLA: trabajas para él. De…?

ALICIA: dilo, no hay problemas, trabajamos de putas. Es nuestro proxeneta.

PAOLA: pensé que el proxeneta era cosa del pasado, que ahora trabajaban independientes.

ALICIA: algunas pueden ser, pero son muy pocas y callejeras. Él te ubica en prostíbulos, paga el hotel y comida y te hace ver cuando estas enferma. Eso si debes cumplirle.

PAOLA: y se queda con toda la plata que ganas, si hace lo que dices.

ALICIA: no, algo recibimos, podemos ir al cine, comprarnos algo. En realidad no es chino. Le decimos así, pero en realidad no se si es coreano o laosiano. El prostíbulo es coreano.

PAOLA: trabajas muchas horas?

ALICIA: 12 horas. De 20 a 8.

PAOLA: cuando llegas caes muerta de cansancio.

ALICIA: si, otra no hay. Con el chino no se jode, es capaz de hacerte una cicatriz en la cara con la cuchilla. La que se fue recién es mi compañera de cuarto.

PAOLA: son más grandes que el mío los cuartos de Uds.

ALICIA: no y hay una sola cama, que se ocupa para dormir las 24 hs. Mitad del día esta mi compañera y mitad yo.

PAOLA: y si alguna no trabaja ese día, por menstruación o enfermedad.

ALICIA: si es por menstruación tienes dos agujeros mas, la boca y el culo y si esta enferma, comprobada por el medico, y bueno dormís con ella en la misma cama. Bueno ya no vamos a ver seguido, me voy a dormir, suerte!

PAOLA: si, gracias, que descanse. Yo voy a buscar algún trabajo.

ALICIA: mañana a la noche el chino organiza acá una raviolada, si quieres ven.

PAOLA: bueno gracias, no se si podre.