La amante. Ella su vida VIII

-espera yo te lo quito- dije juguetona acercandome a ella, ese olor su olor era el mismose me herizo la piel ya ya no queria esperar mas queria tocarla sentir su humedad sus labios su clítoris sentir su vagian

al cerrar la puerta de mi habitación comencé a bajar por su cuello  deteniéndome en su senos, fue entonces que le quite el sostén aspire su aroma me estaba volviendo loca comencé a besarlos pasando mi lengua por la aureola apenas rozando su pezón derecho, sentía como su respiración se volvía agitada  baje hasta la prominencia de sus senos y comencé a lamer pasando a los costados regresando al punto de inicio así lo hice por varios minutos, después baje con besos por su abdomen y tire de su pantalón hasta que llego al suelo  percibí por primera vez su aroma. Ella me jalo del cabello hasta que estuve a la altura de su cara, sus ojos por dios me decían tantas cosas, sonreí me aventó a mi propia cama se acostó a mi lado  comenzó a recorrer mi cuerpo entero con sus manos, podía sentir la tibieza de su cuerpo pegado al mío, me paso los dedos por la cara por las mejillas por los labios y comience  a besarlos se acerco a mi y me beso sentí el sabor de su saliva nuevamente su lengua en mi boca. Comencé a succionarla. No se que deseaba mas si a ella recorriendo con su boca mi espalda mis senos mi nuca mis piernas o probar sus flujos, esa parte que jamás pude imaginar al pensar en ella sentir con mis dedos esa humedad  de su interior.

-¿Por qué nunca regresaste? Te espere cada sábado, cuando alguien entraba por la puerta pensaba que eras tu- dijo reprochándome

-Eso ya no importa samanta.- fue todo lo que pude decir. Y a decir verdad no sabia en ese momento si era cierto lo que acababa de decir. Me coloque entre sus piernas y pude ver entre la oscuridad de mi habitación sus ojos vidriosos fue un instante la verdadera samanta, mi cabello caía sobre su cara y cuando lo hice de lado ahí estaba otra vez la mujer frívola y superficial con la sonrisa perversa y la mirada bloqueada. La bese con deseo y baje la mano hasta llegar a su pubis fui internando los dedos por su labios sintiendo ya su humedad su calor empecé a estimular su clítoris y descubrí que le gustaba que lo hiciera directo  también descubrí que le encantaba que la besara en los costados de las costillas y baje hasta el vientre con mi lengua alce la cabeza un instante y pude verla con los ojos cerrados y la boca entreabierta supe que era el momento así que comencé a dar besos por la cadera bajando hasta los muslos pasando por las piernas y regresando a su pubis comencé a besarla por encima de su ropa interior pasando por los costados  comenzaba a gemir muy bajito. Estaba torturándola besando el principio del pubis bajando a la cara interna de los muslos con mi lengua con mis labios.

-ya hazlo Paula!- me lo dijo en un tono de suplica mezclado con pasión y desesperación

Aun entre sus pernas me hinque  para poder sacar con mayor facilidad su ropa interior. Y ahí estaba la mujer que se me hacia tan perfecta, desnuda en mi cama ansiosa porque yo la tocara.

El ritula con mi lengua empezo explorando el inicio de los labios bajando por la entrada de la vagina lentamente su sabor no se si jamas habia provado algo parecido o se me hacia tan diosa que sentia que su sabor era divino. Estuve asi unos minutos y cuando mire hacia arriba ella mordia su labio las manos cerradas a sus costados sin atreverse a aggarrar mi cabeza y guiarme a su antojo fue entonces que meti dos dedos y ella suspiro todo era tan mojado que creí desmayarme por la excitación ella me apretó los hombros. Tenso los músculos  y sentí como su interior se humedecía aun mas, le di un  respiro y comence a mover  los dedos nuevamente. Quería que tuviera otro orgasmo.   Y asi paso al cabo de unos minutos.

-alto por favor…- me dijo en susurros agitados

subi y la bese tiernamente, no sabia la hora exacta pero debian pasar de las 12.

-          he olvidado el celular en la sala- dijo para no besarme y perderse en mis brazos nuevamente. Tenia esa mirada. Salio corriendo ahacia la sala regresando con nuestros celulares en las manos.

-          -alguien te llama- dijo al acercarce a la cama, lo tome y mire que era milena. Comence a recordar a milena a sentirme nerviosa por lo que acababa de hacer con samanta. Debia contestar? Demonios porque me sentia culpable si ella tal vez ya habia estado con el. En su cama matrimonial. santo cielo…

-          ¿es tu pareja?- pregunto en el mismo instante en el que conteste no pude responder su interrogativa

-          - ¿Bueno?

-          Hola paula,

-          ¿Qué tienes mile?- sonaba llorosa.

-          Solo queria escucharte, te etraño muchisimo- solto a llorar con sollozos sonoros, que encendieron por completo mi culpabilidad

-          Lo que pasa… es que… no puedo …

-          Mile que ocurre

-          ¿puedes venir por mi a casa?

-          Pero …- diablos que debia hacer, samanta estaba ahí y milena necesitaba de mi. Cuando mire a samanta se estaba vistiendo velozmente- si milena  yo te marco. Todo estara bien- colgue.  no queria decirle cosas cariñosas por alguna extraña razon.

-          ¿era tu novia?- pregunto con amargura en la voz

-          si, algo asi, sabes me da mucha vergüenza lo que te pedire, lo siento en verdad disculpame pero ire por ella le ha ocurrido algo que no quiso decirme por telefono, disculpa pero no puedo estar contigo ahora

-          ¿debo marcharme cierto?- lo dijo con furia y frustración

-          si, lo siento- dije con un hilo de voz

la indignación estaba a su maxima potencia termino de ponerse los zapatos y salio de la habitación,me puse una playera larga y Sali a su encuentro

-gracias me ha gustado lo que haces- dijo con esa mirada autoritaria fria superficialmente me beso, en ese instante la abrace como consolandola por la situación embarazosa que la hacia pasar, asi  nos quedamos unos segundos sin decir nada, bese su cuello y dije que lo sentia. Me daba pena pero no queria dejar a milena sola. Tomo las llaves de su vehículo y salio sin dedicarme una ultima mirada. No me atrevi  a verla partir solo escuche como encendio es auto y arranco velozmente. me repetia que solo habia venido a pasar un buen rato nada mas. Volvi a mi habitación cambie las sabanas, me di un chapuZon de agua me vesti y Sali al encuentro de melina