La Abadía (3)

Llega la competencia...

Coretta quedó sorprendida de su capacidad que había provocado un orgasmo terrible al cura Lacroix. Pero decidió mantener eso en secreto. Pierre supo que solamente la habían mandado a limpiar las habitaciones inferiores durante casi media madrugada.

Coretta sabía que algo parecido había sucedido a Pierre. Solo deseó que no hubiera pasado con él lo que pasó con Nardo...

A la mañana siguiente, Coretta vio a Lacroix montado sobre un corcel ,y marchó lejos de la enorme abadía.

El monasterio entero se entristeció con la salida del sacerdote, sobre todo las jóvenes monjas...así como la abadesa Irina de Vázquez.

Claudine habló a Coretta.

-He sabido que te enviarán a la corte inglesa...para que te acuestes con todos los príncipes y duques y marqueses que puedas. Sabes algo, niña? Creo que no permitiré que tomes el lugar que Vandermeer se negó a concederme...antes muerta...ya lo sabes.

Coretta se encogió de hombros...ya no sabía que hacer. Acababa de tener su primer orgasmo y estaba confundida, y ahora los problemas con una monja envidiosa...

Vio que Vandermeer miraba con lujuria el trasero de la muchacha. Estaba muy nalgona ,eso si. Cuando Claudine pasó junto a Vandermeer, él apretó una nalga a la jovencita. Ella siguó caminando hasta las puertas del monasterio.

Coretta corrió a la ventanilla del sótano, no sin antes cerciorarse de que los sacerdotes estaban ya dentro.

Entonces echó un vistazo...

-Ayy! Aayy padre...!

La cama no se veía completa, y al parecer no se podía ver a nadie, ya que la cama estaba justo bajo la ventanilla.

Después se vieron las piernas blancas de Claudine, atadas con dos sogas a la altura de los tobillos.

Estaba atada a las manos del cura.

Los pies estaban morados, la soga debía apretar demasiado...

Luego se vieron las nalgas blancas e inmensas de la monja. La jovencita estaba sodomizada de manera grotesca, aunque a que monja de ese monasterio no le gustaría?

Después vio la cara de Claudine, pues su espalda estaba arqueada a más no poder.

Tenía los ojos cerrados, las mejillas rojitas y una leve sonrisa.

-Ayy!! No sea tosco!-Decía la joven ruborizada mientras el hombre le mordía el cuello...

Coretta alejó rápidamente la cara de la ventana. Si Claudine la veía, entonces de seguro iría para matarla.

Pero escuchó un grito de placer y no pudo dejar de mirar. Acercó su carita, y vio las manos del hombre en las nalgas de la jovenzuela. Las masajeaba y pellizcaba deliciosamente.

Ambos sudaban, y empezaron a bramar.

La monja casi mugía, y casi explotaba a gritos en un intenso orgasmo. Ya casi...

-Ya casi acabo! Yaa!! Ayy, me va a desmayar!!!!-gritaba la monja...

Entonces se puso roja completamente, y se echó toda hacia atrás. La larga cabellera rubia y hermosa de Claudine cayó sobre sus enormes nalgas.

Los pezones eran increíbles. Eran como fresas casi. Iban a reventar si seguían a ese paso. Y más con las toscas manos del hombre coqueteándolos...

-Ay, me arden!!!!Me arden!!! Apriételos!!!! Apriételos que me desmayo!!!!

El vientre de la joven quedó casi frente a la cara del sacerdote. Y le hizo cosquillas mientras gritaba.

El venoso pene inyectó en el ano de la joven toda una jarra de leche....Y la joven quedó con la boca abierta y los ojos también. Y gritó fuerte. El sacerdote le dijo:

-Ahora entiende, muchachita... esa niña es preciosa, e irá a la corte inglesa, les guste a las monjas o no!!! La jovencita sintió todo el morbo de ser partícipe de un mega pecado...

Y le acarició toda la vagina...la monja abrió más los ojos, y se sumió en un súper orgasmo...

-Aayyyyyyy!!!!!!!!!!

Después del tremendo éxtasis, a la preciosa jovencita se le fueron los ojos para arriba ,se desmayó y cayó hacia delante ,sobre las sábanas...

-Ahhhh.......

Vandermeer dejó a la muchacha y salió del cuarto hacia su alcoba.

Por ese tiempo, una joven del este de Francia llegó a la Abadía como parte de un cargamento proveniente de más allá de Italia.

La capturaron en una aldea.

-¿Qué significa esto, caballeros?-replicó el Cardenal a los hombres del cargamento.

-La hemos encontrado en un pueblecillo de germanos en Francia. La decidimos traer porque han saqueado aquellos lugares.

-Y quién es??

-Su nombre es Federica...es una joven lecherita...de una familia de agricultores.

-Está bien, podrá quedarse. Pero su condición no será privilegiada dentro del monasterio.

-Pero es profundamente católica, y es una niña aún. Tiene catorce. No conoce nada del pecado carnal aún.

-Que se quede. Monjas...consíganle un lugar.

DESDE que la lecherita llegó, la monja Úrsula, una pelirroja de dieciséis añitos la admiró. Su juvenil belleza y sus encantos aún no desarrollados, le fueron gustando. A los pocos días le encantó la joven.

Cuando cenaban juntas ,Úrsula se atrevió a tocar la suave mano blanca...

Al principio, Federica, que nunca había hablado en la abadía, retiraba rápidamente su mano, pero después dedicó a Úrsula una sonrisa y dejó que jugueteara con sus blancos dedos mientras la miraba sonriente y lasciva...

Coretta pasó cerca de el cuartucho donde dormían Úrsula y Federica...cuando se asomó por la ventanilla vio algo que le impactaría.

Úrsula lamía las juveniles ,delgadas y enloquecedoramente blancas piernas de la jovencita, que estaba sentada sobre el camastro.

Retiraba las sandalias a la jovencita. Y lamía los pies...Después se retiraba el hábito...y retiraba también el hábito de la adolescente...

La doncellita se tomaba el lindísimo cabello y lo ponía sobre sus pezones, como un símbolo de vergüenza...pero la monja le tomaba los cabellos, los enredaba en los pezones mientras le tocaba el clítoris... la doncella veía a la monja con las mejillas rojas y los ojos abiertos.

Pasó una media hora después de que el sacerdote Vandermeer dijera misa en el santuario.

Después veía entrar por una puerta al lado derecho a Vandermeer...

-Supongo que la niña está lista-. No es así?

-Si, señor cura...-contestó la monja mientras le sonreía a la lecherita algo tímida...

Entonces Úrsula untó grasa en el ano de la pequeña y después Vandermeer procedió a "montarla" sobre él...

La lecherita puso una cara de espanto cuando vio qué estaba entrando en su culo, pero no dejó de clavarse...

Miró al cura y aflojó el ano.

Después de un rato de bombeo anal, la irritación hace acto de presencia. La voluptuosa enculada, merecedora de un envidiable e inmenso orgasmo anal para la lecherita, se prolongó casi durante una hora.

Una hora de lúbrico desenfreno de sexo anal para la inocente lecherita peinada de hermosas trencitas y de cara rosada y pecosa...

El hombre le jalaba los pezones a un ritmo endiablado mientras le hurgaba en el ano una y otra vez.

Cuando menos se esperaba:

-AAAAAYYYY!!!! Me arden los pezones, ya no los jaleeeee!!!- exclamó la niña...

-Ah ,si?? Te arden ,lecherita??!!! Prefiero que te ardan más hasta que te vuelvas loca, me escuchas?? Locaa!!!!- bufaba el sacerdote enloquecido...

-Ay nooooo!!!! Esto es pecadooooo!!!!!- decía la lechera y casi lloriqueaba, pero de placer y de morbosa lujuria...

-Claro que es pecado, lecheritaaa!!!!

El sacerdote tenía de espaldas a la lecherita, y ella ,mientras la monja le jalaba las tetillas, se echaba hacia delante y le daba sus juveniles nalgas blancas ,lechosas, al sacerdote...después se echaba enloquecida hacia atrás, y el sacerdote mordía sus trencitas...

-Ayy!! Voy a morirme!! Ayy!!

La niña estaba a punto de explotar gritando en un terrible éxtasis anal...

Entonces el sacerdote sintió los latiditos del ano de la lecherita...y eso bastó para que perdiera la cabeza por completo...la morbosa sensación de los palpitaditos del ojete trastornaría a cualquiera...El cura mordía el cuello a la lecherita, y en ese momento quería morderle hasta las nalgas y los pezones...pero sólo podía coqueteárselos. Y se los coqueteaba a pescozones, le daba con el dedo a los pezoncitos de la lecherita...

Y el pene inyectó por el ano toda la leche...le llenó el cántaro a la lecherita.

Y la lecherita sintió como si el ano se le quemara ,pues los chorros de leche salpicaban hirvientes.

-Ayyyyyy!!!!!!!AAAAYYYY!!!!! AAAAAYYYYy!!!!

-Lecheritaaaaaa!!!!!!ggrrrrr!! condenada! El ojete te late a brincos!!!! GGGRRRRR....-Gritaba el padre mientras llenaba el cántaro...

La lecherita terminaba mareadísima por el orgasmo anal...y rápidamente dio un manazo a la monja que le chupaba los pezoncitos...

-Ay, niñaa! No seas tan hosca...al fin y al cabo, te quedarás con nosotros una buena temporada- dijo Úrsula a la niña.

Federica se fue a bañar, y Vandermeer también. Al poco rato, el sacerdote dijo a Úrsula...

-Escucha monja, creo que deberás ponerte de acuerdo con aquellos arrieros que pasarán a Coretta, creo que serán dos...también irá Federica.

Son de lo mejor, deben ir las dos, merecen estar entre los nobles de Inglaterra. Dentro de unos cuantos años, reventarán los vestidos, al paso que van...y como les estamos dando...dentro de poco lucirán mejores que Venus.

-Está bien ,señor. Avisaré a Fréderic y a Gustave. Ellos son los líderes de las caballerías que se dirigen a Flandes cada un tiempo. Creo que debió llevarlas Lacroix de una vez...

-No, es muy temprano. Tu sabes, las quiero poseer unas cuantas veces...

-De acuerdo. Hoy es mi día...tiene que acordarse. Y ya verá. Si hoy me premia, yo lo premiaré con el viaje de las dos jovencitas. Me las apañaré para convencer a Fred...

-Eso espero, preciosa doncella... y hoy mismo te daré mis caricias para que logres un merecido orgasmo...con las condiciones que tu pongas...

-Solo una. Me tiene que llenar completamente de leche....