Kat (4), Espiando después de la fiesta

Hola que tal gracias por leerme, perdón por la tardansa pero he estado algo ocupada, aquí el nuevo capitulo de mis historias, como siempre aclarando que aunque no es necesario leer los capítulos anteriores si es recomendable para que entiendan todo, y pues les recuerdo quien es quien

Kat: yo

Sergio Mi hermano

Diana: mi mejor amiga

Pedro: mejor amigo de mi hermano

Paola: Novia de Pedro

Una luz me despierta, estoy en mi cama aunque no recuerdo muy bien como llegue, supongo que mi hermano me trajo, que noche, mi joven mente aun procesaba lo sucedido, todo ese jugueteo todas esas miradas, lo que paso con mi hermano, mi primera vez con una mujer, el olor a comida proveniente de la cocina me saco de mis pensamientos, baje y mi familia ya desayunaba

No he hablado mucho de mi familia, somos 4, mi hermano Sergio, y mi hermana Tania que por aquella época tenían 19 y 9 respectivamente y mi mamá de 36 mi papá había fallecido un par de años atrás, en fin cuando me senté a la mesa mi hermano me miraba fijamente con unos ojos de entre lujuria y burla, mamá nos preguntaba como nos había ido y Sergio respondía pues Kat se la paso muy bien, me ruboricé y termine mi desayuno sin decir ni una palabra

Al terminar fui corriendo a llamar por teléfono a Diana para que me diera los pormenores de lo que había pasado entre ella y mi hermano, pues resulta que tuvieron lo que nosotras llamamos “faje extremo” ósea de todo menos penetración juju

Ella me dijo que tenia que hablar con migo así que quedamos en que ella viniera a pasar la noche en casa, después de unas horas llego, Sergio había salido con unos amigos y mamá se iba por el fin de semana a ver a la abuela así que tendríamos la casa para nosotras solas

Platicamos largo y tendido sobre los juegos de la noche anterior ella me platico con lujo de detalle lo que mi hermano le había hecho y que le había tocado y chupado y todo con lujo de detalle, yo no podía dejar de preguntar por que no lo habían hecho y la respuesta me dejo helada –Lo tenia entre mis piernas y sentía su duro y firme pene recorriendo el exterior de mi conchita, estaba súper mojada y le pedí que la metiera- ¿y luego? ¿Qué paso? ¿Por qué no te la metió?

Un rubor que si bien era común en Diana en ese momento era sorpresivo se apodero de su cara y agacho la mirada, dime, dime ¿Qué paso?

El me pregunto: ¿Estas segura Kat?

¿Queeeeeeeeeeeeé? Dije escandalizada, ¿el te dijo mi nombre? Pues si, y la verdad es que aunque a mi no me importo mucho, al parecer a el si, puesto que ya no siguió

Por un momento ninguna hablo y después reímos nerviosamente, concluyendo que seguro fue por la borrachera y que es la costumbre por que siempre estamos juntas y tal

La conversación giro a mi y lo ocurrido con Paola, confesé que me había gustado y mucho, confesé estar casi segura de ser bisexual y no solo eso si que no que me dio mucho morbo que nos vieran los demás

Ella me confeso que siempre había sentido curiosidad al respecto y que sobre todo por mi, para mi fue algo normal después de todo llevamos años siendo amigas nos cambiábamos juntas, dormíamos juntas, nos bañamos y juntas y a veces hasta nos masturbábamos juntas, bueno en la misma cama, cada quien con lo suyo

En tono de juego metí mano entre sus piernas hasta llegar a tocar su calzón diciendo “falta de confianza”  aunque lo hice con una sonrisa enorme esta cambio cuando sentí  lo húmeda que estaba, y empecé a acariciarla, ella no decía nada, solo se dejaba hacer, su respiración se torno muy agitada, nos acercamos y nos fundimos en un beso increíble húmedo y muy apasionado nuestros pechos se frotaban entre si mis dedos ya habían movido a un lado su calzón, y mis dedos hurgaban la entrada de su coñito, disfrutaba mucho el momento y de repente sentí que se alejo de un golpe de mi , creí que se había asustado y había salido corriendo, pero al abrir los ojos la vi parada a unos pasos de mi pero  su cuerpo estaba rodeado por unos brazos, mi hermano Sergio la abraza por la espalda, una de sus manos  ya se movía violentamente bajo su falda y la otra masajeaba alternadamente sus tetas, “gracias por iniciar hermanita, pero yo termino” fue lo único que atino a decir mientras se la llevaba para su cuarto.

Yo me quede recostada, no sabia si enojarme ponerme a reír o a llorar, unos segundos después entro al cuarto Pedro y Paola que al parecer vieron lo que paso y se venían riendo, -Así que van a desvirgar a la princesita- dije Pao, y no lo vamos a perder agrego riendo Pedro, Si quieren podemos ver,

Los dos se quedaron viendo con una picara sonrisa, yo explique que el armario de Sergio y el de nuestra hermana menor estaban prácticamente unidos solo hace falta quitar una tabla que esta sobre puesta y nos podemos meter en el closet de el, ni dos segundo tardaron en aceptar, entramos al cuarto de mi hermana abrimos su closet quitamos la tabla y pasamos los tres para quedar dentro del closet de mi hermano.

Allí estábamos los tres viendo a mi hermano por una rendija como tomaba a Diana y la recostaba en la cama con hábiles movimientos le quito el vestido, y en un abrir y cerrar de ojos su bra salió volando, el se incorporo en un par de segundos estaba desnudo, yo lo veía de espaldas tenia una espalda ancha y fuerte y un trasero precioso, recorrió con la punta de los dedos las piernas de ella hasta llegar a la única prenda que le quedaba, tomo su calzón y de un solo tirón rápido y muy duro se la arranco, se agacho entre sus piernas y comenzó a comerle el coño, por los movimientos y los quejidos se ve lo que hizo rápido y muy bien en menos de 5 minutos ella ya se retorcía del placer y fuimos testigos de su corrida, el se alejo y la observo mientras ella se seguía convulsionando, cuando termino el la tomo muy amablemte por el rostro la beso y la guio para que se levantara y se arrodillara frente a el, le comenzó de inmediato a hacer una mamada el se veía tan sexy tan tranquilo y en ese momento levanto la vista y la dirigió hacia al armario, una sonrisa se esboso en su rostro como si supiera que estábamos allí y casi podría jurar que me guiño un ojo

Solo unos minutos después la cargo, la arrojo en la cama y sin ningún tipo de duda ni delicadeza se la metió de un solo golpe , el grito de ella se debió escuchar en toda la cuadra, el no bajo el ritmo ni un instante, le comía o mordía los pechos, subía, bajaba, apretaba por todos lados con una violencia tan sexy, parecía que lo hacia con una persona inanimada pues la manipulaba a su total antojo, yo estaba tan concentrada que había olvidado donde y con quien estaba y no me había percatado lo húmeda que estaba, me discutía entre si debía acariciarme o no, cuando sentí el dorso de una mano que subía por mis muslos, se colaba por mi falda, hasta alcanzar mi entrepierna y comenzó a acariciar mi cuquita, no se si por la excitación o por el miedo no dije ni hice nada, seguía viendo a mi hermano envestir a mi mejor amiga, cuando comencé a sentir una mano acariciando mi pecho, pero esta vez la mano era mas pequeña y venia del otro lado. Pao tomo mi mano la llevo entre sus piernas se acerco a mi oído y susurro vamos a otro lado donde estemos mas comodos los tres

En cuanto salimos del armario paola me tomo de frente y comenzó a besarme fogosa y descontroladamente, sus manos se apoderaron de mis glúteos yo no podía ni pensar, cuando iba a mover mis manos para acariciarla Pedro se me acerco por la espalda sentía su duro y gran pene justo entre mis nalgas, se apodero con sus manos rápidamente de mis pechos, sus manos masajeaban duro y fuerte justo entre los senos de ella y los míos mientras besaba mi cuello empezó a desabrochar nuestras blusas y sin darme cuenta bien de como paso ya no traíamos ni blusa ni sostén ninguna de las dos, el pellizcaba alternadamente nuestros pezones, pao me desabrocho la falda y la dejo caer, ya estando solo en tanga pude sentir que Pedro ya no traía pantalones ni bóxer y se movía de adelante atrás restregando su enorme paquete en mi

Desde atrás tomo mi cabeza, la giro ligeramente y me empezó a besar con pasión, pao comenzó a bajar con su boca, por mi barbilla, mi cuello, mi pecho, hasta llegar a mis senos, su lengua daba vueltas por ellos sin tocar el pezón y de repente le daba pequeñas mordidas, alternaba asi entre ambos pechos, las manos de Pedro se alternaban con la boca de pao recorriendo lamiendo pellizcando y mordiendo mis pechos, la manos de pao se empezaron a colar dentro mi tanga, y rápidamente sus dedos entraban en mi húmeda cueva sin ningún problema, yo no podía ni moverme, de tanto placer que sentía, 4 manos dos bocas, un pene y un par de pechos solo para mi

Paola se levanto se despojo en unos segundos de la poca ropa que llevaba y le ordeno a pedro recostarse boca arriba, era obvio que las ordenes allí las iba a dar ella, me tomo de la mano y me guio era evidente lo que quería, así que me quite la tanga y me monte en pedro, estaba tan húmeda que entro en mi sin ninguna dificultad, ella se sentó en su rostro para que le comiera el coño, pero de frente a mi, mientras yo lo cabalgaba a ella le comia el coño nos vimos de frente unos segundos y comenzamos a besarnos loca y desenfrenadamente, ella se alejo un poco de mi solo para inclinarse nuevamente y comerme los pechos, mientras con una de sus manos estimulaba mi clit, no tarde nada en tener un orgasmo

Ella se bajo de pedro y le hizo una seña que el entendió de inmediato, lo que me hizo suponer que no era la primera vez que lo hacían, pedro sin sacármela se incorporo esta vez dejándome a mi boca arriba, pao subió en mi cara, de inmediato comencé a comerle el coño y a meterle un dedo por la colita, me costaba un poco de trabajo concentrarme ya que las envestidas de pedro no se detenían y eran cada vez mas violentas, no perdía el ritmo a pesar de estarse besando con pao y manoseándole las tetas, estaba por llegar a un nuevo orgasmo cuando una ola de liquido cubrió mi cara, había logrado que pao terminara en mi y esa fue la gota que derramo el baso y provoco mis convulsiones

Pao dio indicaciones nuevamente y regresamos a la posición inicial solo que esta ves la penetrada era ella y a mi me comía el coño pedro,  estuvimos haci un rato hasta que pao me miro y me dijo, “termina con migo” nos besamos y yo estimule muy rápido mi clit, unos segundos después, nuestros cuerpos temblaban, nuestros músculos se contraían y caímos abrasadas y exaustas pero sin dejar de besarnos

Levante la vista y pedro estaba frente a nosotras, con su enorme y hermoso pene aun erguido y se lo estaba jalando, nos dijo “me alegro por ustedes pero yo no he acabado” rápidamente pao atrajo mi cabeza hacia el pene y entre las dos no la comimos, alternadamente ella le comía la polla y yo los huevos y cambiábamos, en su pene nuestras lenguas se encontraban, ella puso el pene de pedro entre sus pechos y lo masturbaba, después de eso no duro mucho, nos arrodillamos y termino sobre nuestras caras, mutuamente nos limpiamos el semen,  nos besamos una ultima vez y sonreímos

Un fuerte estruendo nos saco de nuestro mundo, volteamos un poco espantados Sergio y Diana estaban en el piso desnudos, se habían caído desde dentro del armario, nos habían estado espiando, una fuerte risa por parte de todos inundo la habitación.

Gracias por leerme espero comentarios dudas y sugerencias, los quiero guapuritas y pronto vendrá el capitulo 5