Karate

Parece que hoy se hizo tarde para Joaquín y tendrá que darse prisa en el vestuario, sino quiere quedarse el ultimo. Los lunes siempre resultaban ser un poco tediosos y Joaquín acababa siempre cansado, sus padres lo habían inscrito en esta actividad para que no estuviera en malas compañías, no le gustaba en exceso, pero intentaba adaptarse lo mejor posible. Pensaba que solo un año mas y ya seria libre, con 18 años ya nadie le diría lo que tendría que hacer o no.

Parece que hoy se hizo tarde para Joaquín y tendrá que darse prisa en el vestuario, sino quiere quedarse el ultimo. Los lunes siempre resultaban ser un poco tediosos y Joaquín acababa siempre cansado, sus padres lo habían inscrito en esta actividad para que no estuviera en malas compañías, no le gustaba en exceso, pero intentaba adaptarse lo mejor posible. Pensaba que solo un año mas y ya seria libre, con 18 años ya nadie le diría lo que tendría que hacer o no.

El karate le parecía un deporte que no iba nada con el, lo peor de todo era pasar esa vergüenza en el vestuario, todos los chicos se desnudaban y a Joaquín era algo que le superaba. Siempre usando la toalla para intentar no mostrar su polla, que aunque no tenia nada de malo, le parecía algo muy intimo como para que otros chicos se la vieran. Era una mezcla de vergüenza y morbo, aunque a Joaquín lo que le gustaban eran las chicas de los vídeos porno que veía, el tener un montón de chicos desnudos a su alrededor, le daba una sensación extraña.

Aquel lunes quedo rezagado y termino el ultimo en la ducha, el agua estaba bastante buena y que recorriera su espalda, favorecía ese pequeño golpe que había sufrido en la colchoneta. Se encorvaba y estiraba la espalda en busca del mejor enfoque del chorro de agua, en alguna de esas posturas parecía que el pequeño dolor quedaba dormido, además, para una vez que estaba solo en el vestuario y no tenia porque pasar vergüenza, era como para disfrutar un segundo por lo menos.

Parece que todavía te duele ese golpe, no le des importancia, seguro que no es nada, - la voz de Ivan el monitor sonó desde la espalda de Joaquín. Parece que el chico se había despistado y su profesor de Karate estaba en otra de las duchas. Cuando Joaquín lo miro desde la ducha, Ivan estaba completamente desnudo a un par de metros de distancia, no dejaba nada a la imaginación, su cuerpo era escultural para un hombre y su polla, aunque no dura, era enorme. Estaba claro que el profesor de Karate no perdía el tiempo en el gimnasio y aunque doblaba la edad de su alumno, no tenia nada que envidiar a un chico joven. Oye no te preocupes, déjame ver esa espalda - Ivan se acerco a Joaquín y se ubico en su espalda, sobre la que puso sus manos para palpar la zona del golpe, en este lugar su polla era tan grande que la punta rozo el las nalgas del chico, este reacciono con un escalofrío de morbo. La situación era la mas morbosa que Joaquín había sentido nunca, las manos de su profesor acariciaban su espalda y su polla tocaba sus nalgas de una manera armoniosa, todo esto mientras el agua corría por su cara, a una temperatura perfecta. Todo esto era una conminación perfecta para que Joaquín perdiera el control sobre su polla y esta comenzara a pensar por si misma, sobre todo pensó en ponerse dura cuanto antes. La polla dura del chico era poco mas grande que la polla de su profesor, pero este ultimo se dio cuenta de lo que estaba pasando. Parece que te has alegrado con el masaje eh? - una sonrisa acompaño la frase, mientras Joaquín giro la cabeza para escucharlo.

  • No te preocupes, son cosas que pasan, a todos nos pasan estando desnudos bajo el agua.

Joaquín intento pensar en cosas poco sensuales para bajar su morbo y volver a la normalidad, no le había pasado nunca y no quería que su profesor pensara que era un tipo raro. Cuando intento respirar profundamente para bajar esa situación, sintió como la polla de su profesor, que no dejo de rozarlo constantemente, empezó a empujar sobre sus nalgas, estaba creciendo de tamaño y se sentía dura.

  • Ves, fíjate como a mi me pasa lo mismo, es contagioso. - Ivan se reía mientras lo decía y miraba a su polla dura, que había pasado de rozar las nalgas de Joaquín, a apoyarse sobre su espalda descaradamente.

El chico que no podía dejar de pensar en el morbo que lo envolvía su cabeza y su polla, no se movió lo mas mínimo, sintiendo con placer esa polla sobre su espalda, las manos de su profesor solo lo dejaron de tocar, para señalar la polla dura. En un momento, Ivan comenzó a balancear su polla hacia arriba y abajo, la punta marcaba la espalda del chico, mientras la respiración del profesor comenzó a ser mas profunda. Joaquín tuvo el reflejo de con su mano derecha, envolver su polla dura y comenzar a acariciarse, mientras intentaba no separarse de esa polla que lo masajeaba por la espalda. La mano izquierda de Ivan, paso de la espalda a el cuello de Joaquín, mientras que la derecha la ubico sobre su polla para acompañar el masaje de la espalda.

Lo que comenzó como una ducha tranquila, paso a ser la masturbación mas extraña que nunca había tenido, mientras esto pasaba por la cabeza de Joaquín, su polla pronto se lleno de semen y comenzó a gotear. Sentía como su profesor se estaba masturbando rápido sobre sus nalgas y gemía acompañando el masaje. Las nalgas del chico se sintieron calientes al sentir el semen del profesor correr por ellas, bajando por las piernas hasta el suelo. Joaquín casi al mismo momento vacío su polla al aire, todo llego al agua rápidamente. Los dos en pie, bajo el agua, Ivan se abrazo lentamente al Joaquín por la espalda y este acompaño con sus manos el abrazo. Todo había pasado en pocos minutos y sin mirarse a los ojos, había sido perfecto.

Las clases de Karate nunca serian lo mismo después de esto.