KAJSA Una historia de amor en el tiempo (XIV)
Continuación
CAPITULO XXIII
El tres de Junio de 1971 faltando dos días para la boda de Ana Pedro estaba sentado en su recámara leyendo un libro, Ana se asomó por la puerta preguntando
-¿No hay nadie en la casa?
Pedro volteó hacia la puerta y le indicó que pasara sostuvo el libro abierto sobre su pecho y mientras Ana caminaba para sentarse frente a su hermano en la orilla de la cama él le respondió
-Las muchachas del servicio deben estar en su cuarto viendo las comedias en la tele y Pablo llevó a los abuelos a casa de no sé quién, regresan como a las ocho
-¿Y qué haces?
-Leyendo para no aburrirme, que lento corre el tiempo cuando uno está solo
-Hablando de esa absurda soledad en la que te has recluido cual si fueses monje cartujo… Fíjate que una amiga mía muere por ser tu pareja en mi boda y si vieras lo linda que es, la vas a pasar muy bien con ella hermanito
-¿Muere?, Pobre, ya que tendrás que sepultar Ana__ Y soltando un suspiro agregó__ No soy compañía para nadie hermanita, así que prefiero estar solo. Mis planes para el día de tu boda son fungir como capitán de meseros y ver que todo salga como te mereces
-Qué lindo… Pero prefiero que seas pareja de mi amiga, viene de otra ciudad y no quiero que se la pase mal, ¿Sí?.. “Por fa”(Por favor)
-Si es tan linda como dices de seguro no va a estar sola, te aseguro que habrá muchos galanes sin pareja, tan solo Alberto, Enrique y creo que Toño vienen sin pareja
-Pero yo le aseguré que estaría contigo… ¿Me vas a hacer quedar mal? Está piernudita como te gustan
-¡Hay Ana!, créeme que te agradezco lo que haces por mí, pero de verdad que no hermana…Además estoy seguro que la va a pasar mejor estando sola que conmigo
-No lo hago por ti, lo hago por ella.
Pedro la miró sonriendo y dijo
-Sí claro… Ya no te preocupes Ana, tú dedícate a lo de tu boda que lo mío ya se me pasará
-¡Eres más terco que una mula terca!...Te voy a decir la verdad, pero no me eches de cabeza porqué si lo haces me voy a enojar mucho contigo… Mira, la cosa es que mi amiga está enamorada de ti
Pedro soltó la carcajada y riendo agregó
-¡Que ocurrencias tienes!... De modo que tienes una amiga que yo no conozco pero que está enamorada de mí, de veras que eres única Ana, pero te repito que no te preocupes voy a pasarla muy bien en tu boda, te prometo que no me verás triste.
-Pedro… Te juro que es verdad, está perdidamente enamorada de ti
Pedro se dio cuenta de que su hermana hablaba en serio y sintió temor de que Diana hubiese hablado con ella, así que cerró el libro que leía, lo puso sobre sus piernas y en tono serio le respondió
-Así menos lo acepto Ana.
-No seas egoísta Hermano…Dale una oportunidad a la chica
Pedro la miró y sin poder ocultar su tristeza le dijo
-No…No puedo Ana… Entiéndeme por favor, me siento vacío, completamente vacío, si platico con alguna chica de inmediato comienzo a hacer comparaciones, y eso no es justo porque no la veo como es, sino como quien yo quisiera que fuera… ¡Ya no!, te juro que ya no puedo, no quiero lastimar a más gente hermana… ¡Ya fue demasiado carajo!
Ana lo miró llena de ternura e insistió
-Inténtalo una vez más, hazlo por mí como regalo de boda para tu hermana… Date otra oportunidad ¿Quién te dice que ella no podría llenar ese vacío que sientes?
Pedro bajó la mirada hacia el libro que tenía sobre sus piernas, quedó un instante en silencio y moviendo la cabeza con gran tristeza respondió
-No existe ninguna que pueda llenar el vacío que ella….
-¿Ni yo?
Lo interrumpió una voz que Pedro reconoció en el acto, se puso de pie de un salto dejando caer el libro que tenía sobre sus piernas y al voltear hacia la puerta vio a Kajsa de pie bajo el marco de la puerta, desconcertado giró las palmas de sus manos hacia el frente y volteó a ver a Ana quien le dijo
-Es la amiga de quien te hablaba
Pedro incrédulo la recorrió con la mirada, tenía el cabello más corto, sus ojos maquillados se veían enormes, había embarnecido, su cara ya no le parecía tan larga y su cuerpo seguía siendo una auténtica escultura, vestía la misma ropa que usaba el día que lo fue a invitar al estadio hacía casi tres años, con voz temblorosa preguntó
-¿Y el listón del tobillo?
Ella sonrió sin entender y miró a Ana quien subió las cejas y los hombros en señal de que tampoco había entendido lo dicho por su hermano y él al notarlo aclaró
-Me refiero a que con ese vestido y esos zapatos tenis usabas un listón en el tobillo
-¿Cómo te puedes acordar Pedro?
-¿Cómo podría olvidarlo Katy?
Kajsa estiró su brazo hacia donde él estaba para que viera la pulsera con el dije que él le había regalado y dijo
-Lo cambié por ésta pulsera mira, me la dio el amor de mi vida
A Pedro se le llenaron los ojos de lágrimas y se acercó para abrazarla diciendo
-Dios mío Katy, te amo, te amo… No sabes cómo te he extrañado
La besó en el cabello, la cara y la boca, Ana notoriamente emocionada dijo
-Los dejo solos
Y al salir de la recámara se detuvo, se regresó y al verlos besándose decidió no decir lo que pensaba decirles y solo cerró la puerta, bajó al jardín pensando entre risas “Iba a salir con mi pendejada de “pórtense bien”… De seguro eso van a hacer portarse de maravilla, como debe de ser después de un año separados” y llegando al jardín dijo en voz alta “Ámense todo lo que quieran hermano”… Sabía que aun gritando no la escucharían pero se sintió feliz al grado de girar bailando sobre el entarimado donde el día 5 bailaría por primera como mujer casada
Mientras tanto en la recámara de Pedro él observaba y acariciaba el desnudo cuerpo de Kajsa tendido sobre su cama, nuevamente sus manos tocaban esa blanca y suave piel, la recorría besando y lamiendo los pies, las pantorrillas, los muslos, el pubis, el vientre, los pechos, los hombros, el cuello y la cara observando con satisfacción como ella cerraba sus ojos y se mordía los labios llena de placer, ternura y pasión
-Te amo
Le repetía después de cada beso que le daba, y mientras él se ocupaba de no dejar sin besar un solo poro de esa suave piel, Kajsa sonrojada por la pasión le decía
-Te extrañaba amor, extrañaba tu ternura quemando mi piel, te adoro Pedro
Ella dobló sus piernas apoyando sus pies sobre la cama y las separó para que él se metiera entre ellas y al hacerlo la penetró despacio, la escuchó gemir de placer y después él se recostó sobre de ella quien emocionada sintió en su cara la plaquita de oro con su nombre que Pedro llevaba al cuello. Todo fue lento como si se quisiera eternizar el momento y cuando las piernas de Kajsa comenzaron a temblar él aceleró sus movimientos, ella soltó un fuerte gemido, apretó con sus manos el edredón que cubría la cama, cerró sus ojos y mordió sus labios.
En ese momento Pedro arqueó su tronco apoyando sus manos sobre la cama, apretó con sus nalgas para profundizar la penetración y observando el rostro de Kajsa comenzó a derramarse dentro de ella, cerró sus ojos y cuando los abrió, su mirada se encontró con una dulce sonrisa y esos enormes ojos azules colmados de placer.
Por más de un minuto permanecieron así, unidos en cuerpo y alma. Nuevamente sus cuerpos se habían unido en una total entrega, nuevamente amor, ternura, sexo, pasión y placer se había fundido en un solo sentimiento, en una sola y maravillosa sensación de entrega y unión, nuevamente esos enormes ojos azules lo miraban llenos de amor y satisfechos de placer y nuevamente esa dulce voz le dijo.
-Te amo Pedro
Una extraña sensación, algo jamás sentido por él recorrió su cuerpo, la miró a los ojos y supo que ella sentía lo mismo, los ojos de ambos se llenaron de lágrimas, de esas que brotan sin razón y que tal vez solo sirven para recordarnos que estamos vivos y que aún somos capaces de sentir. Kajsa le hizo una seña a Pedro para que le pasara unos pañuelos desechables de los que tenía sobre su buró y cuando él sacó su miembro ella cubrió la entrada de su vagina para después levantarse y entrar al baño, al regresar se sentó en la cama y él le dijo
-Me siento nuevamente lleno de vida, tu ausencia y mi necesidad de ti me tenían vacío, al borde de la locura… Me haces tanta falta amor
-Y tú a mi Pedro… Pero nuestra realidad es cruel
-¿Por qué?__ Preguntó Pedro con temor
-Por qué no usamos protección__ Respondió ella riendo para ocultar su nerviosismo
-No me importa, si te embarazas mucho mejor
-No Pedro, la desesperación nunca será la mejor manera de actuar, tendremos que esperar muchos días para estar tranquilos, falta tiempo para que me baje
Respondió ella resignada a lo que pudiera pasar, volteó a ver a Pedro y señalando hacia su cuello le dijo
-Ya vi que usas mi regalo ¿Te gustó?
-Me encantó, pero te viste muy violenta obligándome a preguntarle a tu papá lo que decía tu mensaje
-Quería que mi papá supiera se enterara de todo, pero no le dijiste nada
-¿Sabías que me iba a preguntar si tú y yo…? ¡Qué loca estás piernas!
-Yo lo imaginé y a pesar de tú respuesta él lo intuyó…. Se lo tuve que confesar
-¡No juegues Katy!, me va a matar cuando me vea
-No amor, no te va a decir nada… Me dijo que eras un caballero
Pedro sonrió y temeroso preguntó
-¿Te vas a ir otra vez?
-Eso quieren, pero yo vine a cumplir mi promesa
Pedro la jaló hacia él obligándola a recostarse en la cama y la llenó de besos en la cara y la boca, ella riendo le dijo
-Mejor nos vestimos amor, no vayan a llegar tus abuelos y nos encuentren desnudos en tú recámara.
Se vistieron y bajaron tomados de la mano para dirigirse a la alberca, ya eran las 8 de la noche, el jardín estaba iluminado ya que probaban la iluminación para la recepción, Ana quien observaba que todo estuviese bien al verlos se acercó y le preguntó a Pedro
-¿Entonces qué?... ¿Ya me crees que mi amiga está enamorada de ti?
El rió y preguntó
-¿Nos podrían casar también a nosotros?
Ana pensaba responder con una broma, pero al observar la cara de Kajsa en tono serio dijo
-Todo depende de ustedes, creo que ya es hora de que hablen claro y se impongan
En ese momento llegó Luis para ayudar a Ana con los preparativos y después de charlar un rato Pedro y Kajsa se alejaron caminando por el jardín, él preguntó
-¿Y allá…?
Se acordó de lo dicho por su abuela el día de su aniversario sobre cuál era el secreto para un matrimonio feliz “No preguntes sobre lo que no te quieres enterar” y quedó en silencio
-¿Allá que amor?
-¿Te divertiste?
Ella sonrió a intuyendo a lo que se refería él y respondió
-¿Quieres saber si allá me acosté con alguien?
-No, ¿Cómo crees?, Yo solo, es que… No sé, saber si alguien te gustó y… tú sabes que….Dios, ya me metí en problemas
Kajsa rió y apoyó la cabeza sobre el hombro de Pedro diciendo
-Allá hay muchachos muy guapos, y si me gustó uno, con el que hice muy buena amistad, se llama Alex, pero allá Pedro, allá en el mundo liberal, hablando de ti con mi abuela me dijo algo que en español sería más o menos “Para una mujer enamorada, sexo y amor son una misma cosa ya que son una sola unidad en su mente y en su alma”, en pocas palabras la mujer enamorada siempre es fiel… Y sí, si me divertí, fui a fiestas, bailé con chicos, la pasé bien
-¿Y…?... Nada, mejor cambiemos el tema
Dijo Pedro bajando la mirada hacia el andador empedrado sobre el cual caminaban y le daba vuelta al jardín, ella rió y preguntó
-¿Me amas?
-Como a nada en el mundo
-¿Crees que te amo?
-Estoy seguro
-Entonces ¿A que le temes?
-A…. A que tú…. A que te enamores de otro y te pierda para siempre Katy
-Ese es un riesgo que espero tengamos que correr los dos por muchos, muchos años Pedro, mi pretexto para regresar fue la boda de Ana, pero mi intención es quedarme a tu lado de una buena vez y para siempre
-¿Debo entender que quieres casarte conmigo?
-Eso pídemelo en algún lugar romántico
Cuando Pedro iba a decir algo escuchó la voz de la abuela quien gritó
-¡Mi muñeca preciosa!
-¡Mormor!
Gritó Kajsa y salió corriendo a abrazarse de la abuela y del almirante, Pedro sorprendido solo miró a Ana y a Luis quienes se rieron cuando Kajsa abrazando a los abuelos uno a cada lado de ella caminaron hacia la casa, al acercarse a Ana Pedro les preguntó
-¿Ahora lo entienden?, ¿Entienden la enorme diferencia entre que odien o quieran a quien tu amas?
Ana lo tomo del brazo y en medio de su hermano y su futuro esposo caminó detrás de los abuelos y Kajsa hasta entrar en la casa
El 5 de Junio de 1971 Fue la boda de Ana a la que fue invitada la familia Larsson, ya en la recepción Pedro se puso a bailar con Kajsa, la pegó a su cuerpo y la besó en los labios, ella le dijo__ Ya nos vio tu mamá Pedro__ La besó nuevamente y respondió
-No me importa, soy libre de hacerlo y tú también, que nos vean y se den cuenta de que perdieron la guerra
Lourdes se acercó a la mesa donde estaba Miranda y haciendo una señal ella se levantó y Lourdes le señaló a los muchachos diciendo
-¿Qué vamos a hacer con ellos?
-Yo nada, pensé que al separarlos todo cambiaría pero se aman de verdad, así que por mi parte apoyaré a mi hija en todo
-Pero yo no, yo los voy a separar cueste lo que cueste.
-Yo defenderé a mi hija
-Entonces pelearemos Miranda
-¿Piensas pelear con todos?
-Con quien sea
-Ya perdiste a tu hijo, no pierdas más Lourdes
-Yo no he perdido a mi hijo, ya verás que cuando no esté encaprichado con tu hija regresará a la casa
-¿Encaprichado?... Creo que conoces muy poco a tu hijo…En fin que Dios te ayude
Cuando Lourdes regresaba a la mesa de los novios observó incrédula como el almirante se ponía a bailar con Kajsa, se les quedó observando hasta que terminó la música y cuando regresaban a sentarse le habló al almirante quien se acercó y ella le preguntó
-¿Qué le dijiste a esa niña?__ Nada__ Respondió y Lourdes molesta protestó diciendo__ ¿Cómo nada papá?, mientras bailaba contigo algo le dijiste que la hizo poner cara de espanto y no te digo que se puso pálida porque más blanca no puede estar el gusano hervido ese
-Ese gusano hervido va a ser la madre de tus nietos, así que comienza a aprender a respetarla como tal
-¡Ya papá!, ¿Estás de su lado verdad?
-No, estoy frente a ella, mira es esa muñeca que está allá frente a nosotros sentada junto a tu hijo
-¿O sea que los defiendes y te pitorreas de mí? Ya me quitaste a mi hijo y ahora lo piensas solapar con su caprichito con cara de caballo
-Un momento hija, yo no te quite a tu hijo, tú fuiste la que lo dejó al garete, yo solo lo rescate para que no zozobrara
-Si quieres guerra, la tendrás papá
El abuelo soltó una sonora carcajada que hizo voltear a todos y le dijo
-Hijita, no olvides que soy militar y los militares solemos medir a nuestro enemigo, tus armas son muy pobres mujer, al primer disparo terminarás rindiéndote, ya lo verás… Y para que veas el miedo que te tengo te diré lo que le dije a la muñeca, le dije “Deja todo en mis manos que ese enemigo es solo un pájaro nalgón”
-¿Y ese enemigo soy yo verdad?
-Así lo quieres tú, pero más te conviene buscar la paz, la guerra es una locura hijita, si solo en la paz son felices los pueblos cuantimás las familias y solo existe una forma para vivir en paz… ¿Si te acuerdas de quien fue Juárez, lo del respeto al derecho ajeno y eso…?__ Lourdes apretó los labios con rabia y respondió__ Si papá, si me acuerdo__ Que bueno hijita, que bueno que lo que gasté en tu educación no fue en balde__ Respondió Emilio y se fue a sentar a la mesa junto a Kajsa
En la madrugada ya que los novios habían abandonado la fiesta la gente no se retiraba y dado que la orquesta ya se había ido, Kajsa subió al lugar donde había estado la orquesta, tomó el micrófono y les dijo
-Buenas noches, o más bien buenos días… Yo soy Kaesá , ya sé que no lo podrán pronunciar así que me pueden decir Katy, soy la novia del hermano de Ana. Ya en un momento les van a servir la cena, consistente en deliciosos platillos de la cocina mexicana, Pozole, chilaquiles, sopes, tacos y otros platillos, mientras tanto y como aquí hay un piano veré si soy capaz de convertir esta última etapa de la fiesta en un piano bar, mi novio Pedro ya fue por unas partituras que tiene mi “Mormor” dentro de la casa, por cierto “Mormor” significa abuela en sueco
Ante la incredulidad de muchos Kajsa comenzó a tocar todo tipo de música cuando leyó las partituras de la abuela eran unos boleros y el almirante tomó a su esposa del brazo y comenzó a bailar seguidos de una gran parte de los asistentes. El fin de la fiesta llegó junto con el amanecer y cuando los Larsson se despedían Lourdes abrazó a Kajsa diciéndole
-Que bien tocas hija, eres una virtuosa, ya me lo había dicho Pedro que sentada al piano eras una maravilla
Kajsa al igual que Pedro y el almirante quedaron sorprendidos y en silencio, ya que todos se habían marchado el abuelo le dijo a Pedro
-Algo trama tu madre, habrá que andarse con cuidado
CAPITULOXXIV
Días después cuando Pedro regresaba de la universidad a la casa de los abuelos, al entrar escuchó al abuelo decir al teléfono
-No Luis, te recuerdo a Guillermo Prieto “Los valientes no asesinan” y eso fue un asesinato, así que son unos cobardes y no existe otra forma de nombrarlos, solo espero que ninguno de los hombres que sirvieron conmigo haya participado
Era el Jueves de Corpus, Junio 10 de 1971 cinco días después de la boda de Ana cuando nuevamente en México se vivía la violencia, estudiantes de la ciudad de México marchaban en apoyo a los estudiantes del estado de Nuevo León con la idea de llegar a las puertas de Palacio Nacional, en el cruce de las céntricas avenidas de “Melchor Ocampo” y “San Cosme”, la policía acompañada de tanquetas y vehículos militares cerró el paso a los manifestantes y minutos después grupos de choque con el sobrenombre de “Halcones” armados con palos y varas de Kendo comenzaron a golpear a los estudiantes quienes al superarlos en número lograron repeler la agresión y se envalentonaron, pero el contragolpe fue sangriento ya que los “Halcones” regresaron y dispararon con armas de grueso calibre ante la mirada complaciente de la policía.
Por segunda vez la locura, el caos, estudiantes corriendo en busca de refugio sobre un pavimento bañado con la sangre de sus compañeros. Por segunda vez las calles de la ciudad se ensangrentaban, Por segunda vez la política fracasaba dando paso a la sangrienta represión que enlutaba al país y Por segunda vez la justicia permaneció no solo ciega, sino inmutable llenando de impunidad a los culpables de las 120 muertes y los cientos de jóvenes heridos.
El país volvió a llorar la inútil muerte de sus jóvenes estudiantes, nuevamente la juventud era reprimida por la necedad, la incompetencia y la corrupción de gobernantes incapaces de tolerar las expresiones de inconformidad, gobernantes a los que su afán de poder los llevó a asesinar impunemente el futuro de su nación.
El abuelo quien después de terminar su llamada telefónica se había ido a sentar frente al televisor, se puso de pie inspiró profundamente y con los ojos mojados antes de retirarse a su recámara expresó
-Hoy es uno de esos días en que me avergüenzo de ser parte de la humanidad.
Un mes después el sábado 10 de Julio de 1971 Pedro y Kajsa habían ido a una reunión de amigos y él había llegado tarde a su casa y al día siguiente, domingo 11 de Julio mientras Pedro aún dormía su abuelo entró a su recamara lo despertó sacudiéndolo por el hombro y diciendo
-¡Hijo, hijo, despierta!
Pedro abrió los ojos preguntando
-¿Qué pasa abuelo?
-¡Se mató Rodríguez en Alemania!
Pedro se puso pálido y sin decir palabra se metió al baño
De regreso de la casa de los Rodríguez en la lujosa colonia Polanco en el Distrito Federal, dentro del auto Pedro dijo
-Pobre Alejandro, lloraba inconsolable
Después de un largo rato en silencio, Pablo quien conducía el auto habló diciendo
-¿Sabe que me comentó la chica del servicio Almirante?
-No
-Que en la mañana después de que en todo el país ya se sabía lo de su muerte, recibieron un telegrama de él que decía “Corro en Norisring, al terminar la carrera les hablo”…. Han de haber sentido horrible, que bromas tan crueles tiene el destino ¿No cree?
-Se llama lentitud de los telégrafos Pablo
Por la noche los noticieros hicieron una remembranza de la vida no solo de Pedro, sino también de su ya fallecido hermano Ricardo, y dentro de las demás noticias se habló sobre la decisión del presidente chileno Salvador Allende de nacionalizar la minería de cobre, el almirante hizo un gesto y comentó
-Este doctor se está metiendo en problemas
-¿Tú crees?__ Preguntó la abuela
-No me gustaría, pero con lo polarizado que está el mundo con la guerra fría, no va a ser fácil que permitan un bastión ruso en el continente, ya con Fidel tienen suficiente para preocuparse