KAJSA Una historia de amor en el tiempo (VIII)
Amor, pasión, lujuria, placer...¿Habrá manera de separarlos?
Llegó el año de 1970, año en que México sería cede de la IX copa mundial de futbol Kajsa y Pedro continuaban con su ya manifiesto noviazgo, no ocultaban frente a sus familias el amor que se tenían, lo cual al parecer y solo al parecer era plenamente aceptado por todos, Kajsa con el fin de agradar a Lourdes había asistido varios domingos a misa junto con Pedro quien había hecho lo mismo en la iglesia Luterana para complacer a Miranda y en tanto complacían a las familias en cosas que para ellos carecían de importancia en privado habían hecho de sus aventuras sexuales una agradable costumbre, no solo de fines de semana sino que al haberse terminado la restricción de verse solo en fines de semana lo hacían cada vez que tenían oportunidad de salir juntos y terminar amándose en el cuarto de un hotel.
Y no era solo el amor el que los llevaba a la cama sino que conforme se repetían sus relaciones se volvían más placenteras ya que la confianza en su desnudez y su sexualidad aunada a una insaciable búsqueda de placer, los había llevado a hacerlo en todas las posturas que su deseo de experimentar habían visto, oído o imaginado (de perrito, de lado, de pie, él sobre de ella, ella sobre de él)
Un día en camino al cine dentro del auto Kajsa le dijo
-Estoy menstruando amor….
Pedro la interrumpió diciendo
-Ya lo noté, estás usando pantalones
-¿En qué quedamos sobre respetar mis decisiones sobre mi sexualidad?
-¿Y no las respeto?
-Sí, pero ese no es el tema, el asunto es que terminando podría tomar píldoras, Ana y Diana se ofrecieron a llevarme con su ginecóloga ¿Te gustaría?
-¿Ana mi hermana?
-No conozco a otra
-¿Ana toma la píldora?
-No sé, pero me imagino que se cuida de un embarazo.
-De Diana no me asombra ya que es bastante putita, ¿Pero de Ana? ¡Pinche Luis!, que buenos palos se debe estar echando el maldito… ¡Y con mi hermana el muy cabrón!
Kajsa soltó la carcajada y dijo
-¡Palos!... Que expresiones usas Pedro
-Así se dice, “echarse un palo” o “echarse un palito”
-Como le quieras decir, “Hacer el amor”, “Coger” o “echarse un palo”… Pero yo me imagino que lo hacen…. ¿Y a ver amorcito?, explíqueme usted como está eso de que Diana es muy puta ¿Ya te acostaste con ella?
-¿Cómo crees?
-Pero te encantaría ¿Verdad?
-Si no te hubiera conocido, yo creo que sí
-Querrás decir “De no haberte obligado tu mamá a conocerme”__ Aclaró Kajsa y Pedro dijo
-Da lo mismo, lo importante es que contigo me estrené como hombre, pero de no haber sido así, creo que lo hubiera hecho con Diana… Siempre me coqueteaba y se me insinuaba hasta que se enteró que tú y yo éramos novios.
-Y decidió hacerse amiga de la novia… Muy inteligente la mujer… Creo que tanto ella como tú son unos cochinos
-¿Celosa?
-No amor, no soy celosa, yo doy lo que tengo, si te alcanza que bueno, pero si no te alcanza te dejo en libertad para que busques quien te de lo que necesitas, sería tonto y muy injusto de mi parte retenerte a mi lado y obligarte a buscar quien complemente tus deseos
-¿Así de plano?
-¿Y que querías?, una vez te dije que quería un hombre que me fuera fiel por necesidad de mí y no por temor a mí, te repito que yo te doy lo que tengo
-¡Y vaya que tienes para dar!... Si con besar las “piernotas” que tienes ya es demasiado, ahora imagínate lo que es besar esos pechos….
Ella lo interrumpió diciendo
-¿No te digo?... No se puede contigo
-Perdón, di lo que ibas a decir
-¡Nada!, solo que yo estoy dispuesta a complacerte en todo y si no sé cómo hacerlo siempre te he pedido que me lo digas para intentarlo, pero si aun así no consigo que me necesites en todo y para todo, ¿Qué hago a tu lado?
-Y lo has sabido hacer “piernas”… Te has convertido en mi más grande necesidad, verte me es tan necesario como comer
-¿Y por eso le ves las nalgas y las tetas a la Diana?
-¿Y que hago si tengo buen gusto?, tan buen gusto que me enamoré de ti
-Como siempre, dos palabras y la taruga de la Kajsa se rinde… ¡Te odio!
-¿Entonces si me puedo coger a Dianita?
Ella le dio un golpe con el puño cerrado en el hombro y después riendo le dijo
-Se nota que le traes ganas a la chaparra
Kajsa quedó un instante en silencio y ya en tono serio agregó
-La verdad es que Diana tiene un cuerpazo, como todas las chaparritas… Pero no creo que quiera contigo… Sin duda te quiere mucho y no lo puede ocultar, tal vez por eso es tan linda conmigo, casi tan linda como lo es Ana y eso ya es decir porqué Anita es ¡Como mi hermana mayor!, la amo, te juro que adoro a tu hermana como si fuera mi propia sangre
-Me encantaría hacerte el amor sin usar condón, eyacular dentro de ti, que sientas el calor de mi semen recorriendo tus entrañas….
-¡Pedro!... No me calientes cuando sabes que no puedo hacerlo
-¿Y quién te quiere calentar?, estoy hablando de la píldora.
-¡No te digo!, eres insoportable, solo te pedí que no me calientes, no lo voy a hacer menstruando Pedro
-¡Me lleva la….! Solo quería decirte que no me gustaría que tomaras la píldora, mejor seguimos usando preservativos, pero si lo que digo te calienta, me callo y ya
-¿Y a ti no?
Pedro la miró, hizo un gesto afirmando y los dos rieron, Kajsa dijo
-¿Ah verdad?… Si somos un par de calientes amor… ¡Y tú tienes la culpa!
El fin de semana habían ido a una reunión de amigos, Kajsa vestía muy a la moda con minifalda y botas altas abajo de la rodilla, durante la reunión Pedro la admiraba con deseo, miradas a las que ella correspondía coquetamente y al salir de la reunión subiéndose al auto y ante la mirada incrédula de Pedro, ella levantó su cadera y se quitó las bragas, se sentó de lado haciendo que su minifalda se subiera lo suficiente y le dijo
-Estoy ardiendo Pedro… Quiero que me lleves a un hotel, que me obligues, que me maltrates, que me digas obscenidades, vulgaridades, que lo hagas como si me estuvieras violando
-¿Cómo crees?
-Entonces cógeme sin pensar en mí, solo busca satisfacerte, cógeme como si fuera una puta. Te lo estoy pidiendo Pedro y habíamos quedado en algo sobre complacernos ¿O no?
-Sí pero… ¿A qué se debe ese masoquismo?
-No es masoquismo, no te estoy pidiendo que me lastimes, solo que me uses, quiero sentirme usada, abusada… Por favor amor ¿Si?
Le pidió Kajsa agachando la cabeza avergonzada, él solo aceptó afirmando con la cabeza. Al entrar al cuarto del hotel Pedro cerró la puerta, se acercó a Kajsa y le dijo
-¿De verdad quieres que te use?
-Si amor
-Pues vas a hacer lo que no te gusta, pero que yo me muero de las ganas
Ella afirmó con la cabeza y él se bajó el pantalón y los calzones hasta las rodillas, la tomó por la nuca y la obligó a agacharse diciendo
-Mámame la verga putita, come de lo que tanto te gusta
Ella fingiendo obediencia abrió la boca y por vez primera sintió el pene dentro de su boca, Pedro gimió diciendo
-Que rico mamas la verga niñita
Después de unos minutos en que ella trató de complacerlo con su boca, él la llevó hacia la pared y la obligó a ponerse frente a esta, empujó la silla que había en la habitación pegándola a la pared a un lado de Kajsa, le metió las manos bajo la falda para acariciarla en las nalgas y los muslos al tiempo que acercaba su boca a la oreja de ella para irle diciendo lo que le hacía con sus manos
-Que ricas nalgas tienes mamita y que muslotes más sabrosos como para tenerlos enrollados en la cintura cuando te meta la verga
Metió su mano entre las piernas de Kajsa para acariciarle el clítoris y al meter el dedo entre los labios vaginales dijo
-Mira nada más, se te está derritiendo la panochita, se nota que estás urgida de verga mamita… ¿Te urge la verga? ¡Pídela!
Ella quien ya estaba sin control por la excitación, usando el mismo tono vulgar y con voz ardiente le dijo
-Méteme la verga cabrón, demuéstrame que tan hombre eres
-A mí no me retes niñita__ Le tomó la mano y la puso sobre su miembro diciendo__ Siente putita, siente que buen pedazo de dura y ardiente carne tengo para ti, pero solo la tendrás si suplicas por ella, de otra forma solo tendrás esto__ Le dijo al tiempo que le metía el dedo índice en la vagina acariciando y frotando el clítoris
Kajsa jadeaba sumamente excitada y dijo
-Ya métemela Pedro
-¿Así como así?, fíjate que no, suplícame que te meta la verga
-Te lo suplico
Pedro permaneció en silencio mientras se ponía el preservativo y ya puesto le metió nuevamente el dedo en la vagina y reclamó
-No, mujercita, así no, ruega, suplica por la verga o solo te tocará dedo mamita
-Por favor papito, te lo suplico, méteme esa delicia de verga que tienes
El le levantó una pierna y la hizo apoyar la bota sobre el asiento de la silla que había acercado, le empujó la cabeza hacia la pared y teniéndola de espaldas la penetró, el lubricante del preservativo unido a la humedad de ella hizo que su miembro se hundiera de un solo golpe hasta empujar las entrañas de Kajsa quien grito por la mezcla de placer y dolor que le causaba. Pedro sin darle importancia comenzó a moverse con fuerza dentro de ella, haciéndola gemir de placer mientras le decía
-¿Querías verga mamita? ¡Pues siéntela!, siente como te bombea y te hace gozar, gime, grita, llora, demuéstrame lo mucho que te gusta, dímelo mamita, dime lo que sientes, dime que es la mejor verga que has tenido
-Está enorme, deliciosa, me encanta tu verga cabrón, es la mejor que he tenido, tú si sabes cómo cogerte a una mujer, me coges como nadie me ha cogido
Pedro siguió con sus violentos embates que empujaban todo el cuerpo de Kajsa hacia arriba repitiéndole__ Esto querías mamita, pues ahora aguántate hasta que me venga en ti, ya te tocó mi verga niñita y no te la pienso sacar hasta que le exprimas toda la leche
-Eso quiero, quiero sacarte hasta la última gota de leche para eso estoy, para exprimirte la verga papá.
-Como buena putita que eres
-Sí, si lo soy, soy tu puta a la que le encanta la verga
Con la cara levantada hacia el techo, los ojos desorbitados y la boca abierta Kajsa comenzó a temblar de forma incontrolable mientras un sonido gutural salía de su garganta, Pedro la sintió apretar su vagina y lleno de lujuria al notar que ella se venía la penetró con fuerza oprimiéndola contra la pared y con voz ardiente le dijo
-Vente niñita, disfruta lo que hace en tu cuerpo una buena verga
Las piernas de Kajsa comenzaron a temblar, soltó soltó un fuerte rugido y él inflamado por la lujuria empujó con más fuerza al sentir las fuertes contracciones de la vagina apretar su pene, pero la lujuria se tornó en terror cuando vio que Kajsa pretendía desesperada e inútilmente sujetarse de la pared y su cuerpo se desvanecía, él asustado intentó sujetarla por la cintura pero ella cayó al piso sobre sus rodillas hasta terminar sentada con la espalda recargada en la pared.
Rápidamente se agachó y la tocó, las piernas de Kajsa temblaron nuevamente y con sus manos quitó la mano de Pedro diciendo__ ¡No, no!, no me toques__ Al tiempo que las lágrimas escurrían por sus ojos. Pedro realmente asustado no supo que hacer que no fuera decir__ Tú me lo pediste Katy
Ella levantó su mano indicándole que se callara y así pasó más de un minuto, hasta que ella se puso de pie para sentarse en la silla diciendo
-Perdón amor, perdón por asustarte, pero nunca creí que esto pudiera pasar, fue increíble sentir tanto placer, hasta me hiciste llorar.
Pasados unos minutos Kajsa se puso de pie apoyando su espalda en la pared y dijo
-Termina tú amor
-Deja que me cambie el preservativo
Pedro se cambió el preservativo, se acercó a ella, le levantó una pierna sujetándola a la altura de su cintura y la penetró de frente levantando con la otra mano la falda de Kajsa para acariciarle las nalgas y cuando su pene se endureció al máximo detuvo sus movimientos y ella le dijo
-Vente rico, dame toda tu leche, no te quedes con nada
Y él se vació para terminar apoyando su cabeza sobre la blusa de Kajsa, le soltó la pierna que detenía pegada a su cintura y se sentó agotado en la silla a un lado de ella quien recargando la nuca sobre la pared permaneció en silencio pensativa observando a Pedro quitarse el preservativo, cuando el terminó de hacerlo la besó en el muslo y dijo
-¡Que locos estamos Katy!, pero que manera tan increíble de coger
-¿Locos?... Somos unos vulgares amor… ¡Que cosas nos dijimos, que vergüenza!
Dijo ella sonrojándose
-A mí escucharte me puso a mil, te juro que no me molesto en lo absoluto
-Lo que es más, nos encantó
Dijo ella riendo y bajando la mirada hacia el condón que él sostenía con sus dedos le dijo
-Me encantaría que todo eso se quedara dentro de mí
El levantó la vista hacia ella y rehuyendo el tema le dijo
-Me encantan tus botas
-¿De qué hablas Pedro?
-De que con tu estatura y usando botas te cogí como nunca imagine que se pudiera coger de pie, que manera de venirme, eres única, te juro que eres única
Ella caminó hacia la cama, se desnudó y entró al baño diciendo
-Hay que bañarnos amor
Pedro entró bajo la regadera con ella y evitando que se le mojara el cabello le lavó el sexo y después hizo lo mismo con el suyo, al salir se vistieron y ella le pidió
-Ve por mis bragas que dejé en el auto
Pedro lo hizo y después de que ella se las puso subieron al auto y salieron del hotel, en el trayecto ella le comentó
-Si me vuelvo a venir así te juro que me muero… Pero inténtalo ¿sí?
Los dos se rieron y él preguntó
-¿Qué fue lo que te pasó güera?
-No sé, sentí una contracción deliciosa, fuerte muy fuerte, la locura de placer que subió por mi espalda hasta la nuca, se me oscureció todo como cuando estás sentado y te levantas muy rápido pero me duró más tiempo, después sentí que me desmayaba y me caí… Cuando me tocaste sentí que todo dentro de mí se contraía y mis piernas volvieron a temblar sin control, se sentía rico, era como si me viniera otra vez, pero estaba aterrada, pensé que me quedaría así, viniéndome cada vez que me tocaran__ Pedro no rió y ella agregó__ Ya no quería más y fue cuando me puse a llorar sin razón
-Vaya susto que me diste
-Perdón amor, te entiendo, no sé qué hubieras hecho si me desmayo en el hotel, si a ti te pasara te juro que enloquezco, imagínate desnudos en el cuarto del hotel y tú desmayado… Ay no, ¡Que horrible!
Permanecieron en silencio y al llegar a casa ella le dijo
-Pedro… Quiero que termines dentro de mí, necesito llevarte dentro de mi ahora que…
El interrumpió preguntando
-¿Quieres que te embarace?
-¿Cómo crees?... Quiero saber que te quedas en mí, eso es todo
Kajsa bajó del auto molesta y se metió a su casa
CAPITULO XVI
El 10 de Abril Pedro incrédulo leía en la prensa las declaraciones de Paul Mc Cartney sobre la separación de los Beatles a pesar que el 8 de mayo se da a conocer en Inglaterra su disco “Let it be”. El domingo 17 de Mayo de 1970 Kajsa cumplió los 17 años y como feliz coincidencia para ella, ese mismo día el presidente Richard Nixon, le da el rango de general de las fuerzas armadas de los Estados Unidos a dos mujeres
-¿Ya estas entendiendo lo que significa la liberación sexual?
Le preguntó Kajsa cuando entró a su casa invitado a comer el pastel que Miranda había horneado para su hija invitando a varios amigos de ella, cuando abrió sus regalos dejó el que Pedro le había dado para el final y cuando lo abrió sus ojos se humedecieron al encontrase con una pulsera de oro de la que colgaba un dije en forma de corazón con el nombre de él grabado y una fecha “22-12-1969”,
Emocionada le dio un pequeño beso a Pedro en los labios y él le enseñó a Kajsa que junto a la medalla que siempre llevaba colgada en su cuello había colgado un dije exactamente igual al que colgaba de la fina pulsera con el nombre de ella y la misma fecha. Cuando una de las amigas de Kajsa preguntó el significado de esa fecha, Pedro volteó a mirar a Kajsa quien riendo respondió
-Pedro dice que ese día se enamoró de mí
Miranda los miró fijamente y con una sonrisa que a Pedro le pareció “diabólica”, dijo en tono sarcástico, casi burlón
-Qué lindo Pedro, te agradezco mucho que quieras tanto a mi hija, no entiendo la razón ya que son muy diferentes, sin embargo espero que logren cumplir todos los objetivos que se han trazado juntos
Pedro le sonrió pensando en lo que pasaría si supiera lo que significaba esa fecha, miró a Miranda y con toda la mala intención que podía poner a sus palabras dijo
-A pesar de ser tan diferentes, amo a su hija señora, y es muy simple de entender ya que el amor no conoce de razones ni se traza objetivos, no trata de complacer a terceros y mucho menos busca agradecimientos, no se ama mucho o poco, simplemente se ama y se ama porque se ama, porque sí, el amor no sabe de razas, credos, idiomas o colores, el amor solo conoce de entrega incondicional… Personas incapaces de entenderse con palabras lo logran hacer amándose y eso es lo maravilloso del amor, es único y universal
Todos quedaron en silencio Miranda fijó la vista en Pedro quien no le bajaba la mirada pensando “ Si supieras que esa fecha fue cuando tú hija y yo hicimos el amor por vez primera, nos quitamos mutuamente la virginidad y a partir de ahí nos convertimos en amantes” Miranda fue la que le bajó la mirada, se aclaró la garganta y dijo
-Tienes razón muchacho y es bueno que pienses así
Al día siguiente lunes 18 de Mayo Pedro llevó a Kajsa a ver una película que ella quería ver sobre la vida del general Patton y que tenía ese mismo título “Patton”, al salir del cine caminaban abrazados hacia el auto y ella comentó
-Me encanta la historia, por eso me la habían recomendado, actúa muy bien George C. Scott, ha de haber sido duro para un general como Patton disculparse frente a sus hombres ¿Ya la vio tu abuelo?
-No sé
Al sentarse en el auto ella subió su falda larga para permitir que Pedro le acariciara las piernas y preguntó en un tono de voz muy sugestivo
-¿Me harías otro regalo de cumpleaños?
El sonrió, se agachó para besar la blanca y tersa piel de los muslos de Kajsa y sin poder ocultar su gusto por la propuesta respondió
-Vamos
Mientras se dirigían al hotel como siempre Pedro le acariciaba los muslos, ella puso su mano sobre la de él y le dijo
-Pero vas a hacer lo que yo te diga, quiero llevar la iniciativa, que no hagas nada y me dejes hacer lo que yo quiera… Es mi regalo amor
Pedro rió y dijo
-OK, seré tu esclavo sexual
Dentro de la habitación del hotel, Kajsa le pidió que se desnudara y mientras él lo hacía ella hizo lo mismo, se acercó a él diciendo
-Acuéstate boca arriba, pero no hagas nada, déjame ser yo la que lleve el juego
El obedeció y ella se subió a la cama para besarlo en la boca y recorrer su cuerpo a besos hasta llegar a los pies, volvió a subir besando hasta el pecho de Pedro y mordió delicadamente su tetillas, el respiraba aceleradamente y Kajsa bajó hasta el pubis para besarlo donde nacía su erecto pene, besó sus testículos y tomó el pene con una de sus manos para contemplarlo diciendo
-Me gusta, es muy grande y gruesa, con razón me hace gozar como loquita, ¿Te gusta metérmela?
-Me encanta Katy, me encanta metértela hasta el útero y no tienes idea de lo que me gustaría venirme ahí
-Creo que me mojarías hasta los ovarios
Pedro rió al tiempo que ella observaba el viscoso líquido trasparente que fluía del pene, pasó sobre de este la palma de su mano para después acariciar el glande, Pedro gimió y ella se agachó para lamer el cinturón del glande, mientras lo hacía con su otra mano recorría el tronco de pene repitiendo
-Me gusta Pedro, te juro que me encanta
Había nacido entre ellos una gran confianza, habían perdido todo temor y recato en su trato en la cama, habían llegado al lenguaje común e incluso vulgar durante sus relaciones, frases como “Que buena estás” “Que rico coges” “Dame las nalgas” “Que enorme verga tienes” “Métemela toda” se habían hecho comunes. Expresaban libremente su deseo sobre lo que querían hacer y donde y como querían ser tocados, acariciados y complacidos por el otro. Pedro disfrutaba de hacerle el sexo oral, de saborear sus erectos pezones de besarla en todo el cuerpo muy en especial los muslos y las nalgas. Y cuando lograba hacer que a ella le temblaran las piernas sin control para después oírla gritar por el placer de un intenso y largo orgasmo él, como cualquier hombre, se enorgullecía de su hombría la cual ella no dudaba en halagar agradecida por el placer.
Su relación como amantes se había hecho casi perfecta, mientras hubiese mutuo acuerdo todo era válido, pero si no había consentimiento de alguno se evitaba hacerlo sin que hubiese problemas o discusiones, así ella no permitía la penetración anal y en lo referente al sexo oral, no había pasado de algunos besos y pequeños roces de su lengua en el pene. Durante su periodo menstrual Kajsa se negaba a todo contacto y se molestaba por cualquier insinuación sexual que Pedro le llegara a hacer, llegando al extremo de usar pantalones para evitar que él le tocara la piel de los muslos como era su costumbre al ir en el auto, Pedro no estaba de acuerdo en esa actitud por considerarlo una exageración, sin embargo aceptaba y respetaba la decisión de Kajsa sin reproche alguno.
Con los ojos cerrados Pedro disfrutaba del momento, ella nunca se había comportado de esa manera, tierna, dulce, absolutamente complaciente y él no pretendía que la excitación lo llevara a perder la cordura y terminar con ese maravilloso momento, abrió los ojos cuando ella sujetando su miembro con las dos manos dijo
-Nunca lo había observado con detalle, me encanta amor, es bonito, muy bonito, me gusta cómo se le ven las venas y como brilla la piel del glande, ya es hora de agradecerle todo el placer que me ha dado
Kajsa rió por lo que había dicho y lamió el líquido transparente que salía por el orificio del glande. Pedro gimió cerrando nuevamente los ojos y cuando los abrió ella lo miró fijamente, abrió la boca y él incrédulo la observo meter el pene en su boca, acción que le hizo exclamar con gran placer
-Ohh, por Dios amor, esto es delicioso
Ella lo sacó de su boca y preguntó
-¿Quieres terminar en mi boca?
-¿Lo dices en serio?
Ella sonrió y comenzó a masturbarlo al tiempo que besaba, lamía y chupaba, metiéndolo y sacándolo lo más profundo que podía dentro de su boca, lo pegaba a la parte interna de su mejilla donde lo acariciaba con la lengua, lo sacaba para tragar saliva y al limpiar la que había sobre el pene lo recorría masturbándolo, varias veces lo hizo disfrutando de los gemidos y la agitada respiración de Pedro, sonrió cuando él estiró sus piernas con fuerza endureciendo sus músculos sin lograr evitar que le temblaran y momentos después él le sujetó la cabeza por la nuca, Kajsa con sus manos evitó que él empujara más adentro ya que tenía el pene pegado a su paladar, lo apretó con sus labios, escuchó a Pedro soltar un fuerte gemido y sintió las cálidas descargas de semen golpear sobre su paladar, sus dientes y su lengua.
Al terminar, Kajsa se sentó sobre sus pantorrillas, abrió su boca para que Pedro la viera llena de su semen, lo tragó y al terminar dijo
-Qué rico amor
-Eres increíble Katy, realmente increíble, te adoro mujer
Ella se recostó boca arriba sobre el vientre de Pedro y después de un largo tiempo platicando en esa postura sobre cosas sin importancia, ella preguntó
-¿Qué hora es?
-Las ocho, ya llevamos aquí casi dos horas, nos van venir a sacar
-¿Por qué?, se supone que pagas por toda la noche, además había muchos cuartos vacíos, será por ser entre semana, los fines de semana sí que hemos tenido que esperar a que se desocupe algún cuarto
Mirando al plafón de la habitación jugando con los dedos de su mano y observando la pulsera que Pedro le había regalado preguntó
-¿Terminarías dentro de mí?