Just a dream

Abro los ojos. Me levanto desubicada. Me toco la frente y noto lo húmeda que está. ¡A la mierda el cambio climático! Y eso que estamos aún en pleno marzo. Y no sirve de nada cuando tus padres deciden llevar a casa el desierto del Sáhara. Un día de estos juro que me mudo a vivir al cuchitril más lujoso de la ciudad. En fin. Decido buscar de nuevo mi lado bueno para dormir a ver si esta vez consigo conciliar el sueño. Han pasado 15 minutos y nada. Decido coger el teléfono para distraerme un rato y así con la tonteria consigo cansar la vista. Reviso Twitter e Instagram y me encuentro con una foto de ella. Mierda. Sigue estando igual de buena que siempre. Yo diría que aún más. De repente una sonrisa aparece en mi rostro esporádicamente. Miro sus ojos, esos ojos que muestran con total sinceridad su hermosa alma. Siguen brillando con la misma intensidad que antes. Bajo mi mirada a su nariz respingona. Se ha hecho un nuevo piercing y es jodidamente sexy. Sigo bajando y me encuentro con sus labios. Díos, esos labios carnosos color carmesí, recuerdos vienen a mi mente del sabor de sus besos. Menta con toque a tabaco, cómo no olvidar su maldito vicio. ¿Seguirá estudiando? ¿Se habrá mudado? ¿Habrá cambiado mucho? ¿Tendrá pareja? ¡ Dios! ¿ Por qué sigo pensando en ella? Después de todo lo que pasamos, todo lo que sufrimos. Soy masoquista, no tiene más explicación.

Sé que está mal, que debería pasar página pero aún asi soy incapaz de olvidarla. Aún recuerdo sus caricias recorriendo cada parte de mi cuerpo. Los besos tan apasionados y tan ardientes que nos dabamos. Aún tengo grabado en mi mente sus súplicas obligandome a que siguiese dándole placer, mientras nuestras manos permanecian entrelazadas y nos decíamos te amo al unísono. ¡Dios mio! Tengo la piel de gallina de solo recordarlo. Dejaré el móvil, si será lo mejor. En fin, olvidemos el pasado y vivamos el presente como suelen decir. Con esto cierro mis ojos y dejo que Morfeo venga a por mi.

Despierto de nuevo.¡Joder! Tengo un dolor de cabeza tremendo, no vuelvo a beber más en la vida y encima acabo de perder por quinta vez a mis amigas en lo que llevo de noche. Al final sé de alguien a la que le tocará joderse e ir a patita a casa. En fin, disfrutemos de lo que queda de noche y disimulemos que vamos al menos con tres de los cinco sentidos bien puestos. Contemplo el entorno de mi alrededor. Gente borracha tomando alcohol como un poseso, gente comiéndose la boca, gente mirando el reloj y viendo a su amiga enrollandose con un tío, el tipico pagafantas feo invitando a una copa a una chica, Ester dándose el lote con el camarero, ¿Ester? ¡Joder estaban enfrente mía las desgraciadas de mis amigas y yo sin enterarme! Definitivamente debo pasar unas semanas en abstinencia. Voy de camino a ellas cuando diviso una melena de color azabache a lo lejos ¡Deus! Ese cuerpo podría reconocerlo desde kilómetros ¡Es ella! Mueve sus caderas al ritmo de la música marcando cada paso. De repente se gira y puedo apreciar su bello rostro. Se muerde el labio cada vez que da un paso y permanece con los ojos cerrados dejándose llevar por la música. No puedo evitar quedarme embobada. Es la criatura más hermosa que he visto en la vida. Ahora ha abierto los ojos y me ha mirado fijamente. ¡Mierda! Esos ojos podrían hipnotizar a cualquiera. Ella sabe que la estoy mirando, intento desviar mi mirada para otro lado pero ya es tarde. Ella toma su copa y se aproxima hacia mi. Estoy atacada y mi respiración se entrecorta cada vez más, maldito alcohol y maldita la mujer que la parió. Me mira con esa sonrisa tan pícara que tanto le caracteriza. Sabe que me tiene a sus pies. Ganó la batalla desde el momento en que me miró. Me saluda y toma un sorbo a su copa. Comenzamos a hablar, sé que ella también ha bebido porque puedo notar cómo sus ojos se empequeñecen cada vez más y su aliento con pestuzo a whisky me lo confirma. Seguimos hablando de nuestras cosas por mucho tiempo. Parece que todo el alrededor nuestro no existe y solo estamos nosotras. Estoy tan metida en la conversación que no me doy cuenta de que ella cada vez está más cerca de mí y ahora me mira fijamente con esos ojos ¡ Esos malditos ojos!. Toma un mechón de mi pelo y lo retira de mi cara. Me sonríe y me dice que me echaba de menos. Poco a poco se aproxima cada vez más a mi. Estoy temblando y sudando. ¡Dios! ¡No sé si voy a aguantar esto más! Se dirije a mis labios pero de repente los desvía y va a otro destino donde sabe perfectamente que es una de mis mayores debilidades: la oreja. Me susurra que estoy preciosa hoy y me muerde el lóbulo. Tira de él lentamente. Es un poco doloroso pero puedo soportarlo. Noto como toda la piel se me eriza. Ahora pasa su lengua por mi oreja. Noto lo húmeda y caliente que está. ¡Me está matando! Cierro los ojos por instinto y dejo la boca entrebierta. Tomo aire poco a poco. Ella sonríe porque sabe que me tiene. Toma mi cintura entre sus manos y se aproxima. Toca su nariz con la mía y la pasa por mi mejilla hasta la oreja de nuevo donde sugiere que nos salgamos a fuera a tomar el aire. Cojo su mano y salimos del local. ¡Esto no pinta nada bien!

‌Una vez fuera de la discoteca nos sentamos en la acera. Puedo notar como el aire fresco vuelve a adentrarse por mis pulmones. Al contrario que mi acompañante ha sacado un cigarrillo de su bolso y le ha prendido fuego. No estamos hablando, simplemente me dedico a observarla mientras fuma tranquilamente. Admiro cada parte de su rostro, aún recuerdo cuantas veces me perdía en él en clases de historia. Sin duda no he visto aún alguna belleza sin igual. Ella es perfecta y yo tuve el privilegio de adorarla por unos cuantos años, Dios mio ¿ Cuándo fue la última vez que dormimos juntas? ¿Cuando fue la última vez que nos prometimos un para siempre? ¿En qué momento llegamos a esta situación? De nuevo me sumerjo en mis pensamientos y olvido por un momento a la hermosa mujer que tengo a mi lado. Ni siquiera me he dado cuenta que ahora me está mirando fijamente con esos hermosos ojos esmeralda. Ella escanea cada parte de mi rostro. Finalmente se decanta por mis labios, está ansiosa, puedo sentirlo. Yo también. Simplemente se acerca y toma mi mano para levantarme. Me acompaña hacia su coche y nos dirigimos hacia su piso. No puedo negar que estoy ansiosa y a la vez acojonada. Me sudan las manos constantemente. No es que no haya tenido en estos años mis rollos de una noche, pero esto sé que es diferente. Sé que hay sentimientos de por medio y aunque duela y sepa que hoy después de todo lo que tenga que pasar acabaré en más jodida de lo que ya estaba al comienzo de todo esto. Pero ¿ A quién voy a engañar? Estaba deseando que esto ocurriese.

‌Finalmente llegamos a nuestro destino. No sé qué hora es pero visto lo desiertas que están las calles puedo suponer que serán más de las cuatro. A decir verdad nunca he estado por este barrio. Ella toma mis manos y frena el paso de repente. Lleva mis manos hacia su boca y puedo notar su cálido aliento en mis manos. Sopla con delicadeza y las frota mientras me mira con una ternura que hace tiempo que no sentía. Estoy atonita. Unas lágrimas amenazan con salir pero consigo retenerme. No puedo mostrar debilidad ante ella. Otra vez no.

‌Sé que me arrepentiré posteriormente por haber dejado pasar este momento pero sé porqué estoy aqui y cuál es el fin de esto. No puedo resistirlo más y le susurro al oido lo mucho que la deseo. Ella capta al segundo mis intenciones y no duda en dirigirme hacia la entrada de su piso. Tengo curiosidad por saber cómo es. Ella es una persona muy detallista y muy creativa. Cuando pasamos finalmente no puedo estar más en lo cierto. Puedo apreciar un pequeño salón acogedor con un mandala decorando la pared. Sí, definitivamente no ha cambiado nada en estos años. Sigue conservando sus aires romanticistas y bohemios.

‌no me da tiempo de inspeccionar más el piso porque ella se apodera rápidamente de mis labios. Los besos son ardientes y desesperados al mismo tiempo. Ella muerde mi labio inferior varias veces tirando lenta mente de él. No puedo evitar jadear al sentir su lengua dentro de mi boca. Nuestras lenguas se enlazan y se mueven al ritmo de un compás lento. Ella agarra por un momento mi cintura para aproximar más nuestros cuerpos. Comienzo a sentir calor por todo mi cuerpo. Ella ahora esta acariciando con su lengua mi oreja mientras su mano se dirige a uno de mis pechos y lo masajea. Puedo notar como mis pezones se han puesto de punta por debajo del sostén. No puedo más. Solo quiero que me quite la ropa poco a poco y me folle como nunca antes lo ha hecho. Tantas son las ganas que tengo de tenerla que no puedo evitar agarrar con fuerza su culo logrando asi rozar nuestros sexos por encima de la ropa. Noto como empieza a frotarse en mi y yo solo me dejo llevar por ella. No puedo evitar soltar un gemido cuando ella pasa su lengua una y otra vez por mi cuello. Ahora hace más presión con sus labios succionando con fuerza aquella zona sensible mientras yo agarro más fuerte su culo debido a ese dolor placentero. Estoy demasido caliente y la necesito a ella. Solo a ella, al menos por esta noche.

Finalmente termina su trabajo en mi cuello el cual ahora seguro que se encuenta con un gran hematoma que sé que dejaría secuelas al día siguiente, aunque sinceramente ahora es lo que menos me importa.

Puedo oler su perfume adentrandose por mis fosas nasales. Su olor simplemente enloquece cada una de mis hormonas y activan el lado más primitivo de mi ser. Estoy embrujada por los encantos de esta ninfa, ella es la razón de mi evasión y de mi enloquecimiento. Soy un simple humano engatusado por su inigualable belleza.

No podía aguantar más esta agonía, estaba dispuesta a hacerla mía durante toda la noche. Tomé la iniciativa y comencé a quitarle el top que llevaba esta noche puesto. Se me hizo la boca agua nada más ver lo que mis ojos tenían delante. Hacia tanto tiempo que no apreciaba un cuerpo tan perfecto, como si los si los mismisimos dioses lo hubieran esculpido. Sus pechos habian agrandado un poco y su abdomen estaba tan bien marcado. Solo quería poder lamerlo y besarlo lentamente. Ella en este tiempo de trance ya me ha quitado los shorts que llevaba puestos y ahora esta tomandose toda la libertad para tocar mi trasero. Siento como lo aprieta y ansia con retirarme el tanga que llevaba puesto. Yo no demoro tampoco y deseo que este en las mismas condiciones que yo. Le desabrocho los pantalones y ella termina con la labor. Ahora quita la blusa que llevaba puesta y la arroja a un lugar lejano del apartamento. Ahora juntamos nuestros cuerpos. Puedo notar el calor que me brind su cuerpo desnudo al lado del mio. Ella no para de acariciar mi espalda y de besar mi cuello. No puedo evitar escapar un escalofrio al sentirla en esa parte tan sensible Simplemente quiero sentirla. Quiero que esta noche seamos una sola. Yo permanezco abrazada a su cuello cerrando los ojos disfrutando del momento tan excitante que estoy presenciando. Ella me susurra en odio que me desea y esta noche seré suya y ella mía como en antaño. Toma mi mano y me dirige hacia su habitación. Nada más llegar continuamos besandonos mientras nos acariciamos. Ella es la primera en tomar la iniciativa y desabrocha con total maestría mi sostén. Yo no puedo aguantarlo más y repito la misma acción. Nos estamos mirando fijamente. Puedo sentir su mirada esmeralda pentrando lo más profundo de mi ser. No voy a engañar y decir que no me siento intimidada. Más ahora que su mirada se ha posado en mis pechos y los mira con mucho detenimiento mientras puedo observar como su boca se entreabre. No tarda en masajearlos poco a pocodando algún que otro pellizco a mis pezones que ahora estan muy erectos ante el tacto. Ahora aproxima su boca a uno de mis pechos y comienza a lamerlo mientras que continua masajeando el otro pecho con total suavidad. Puedo notar su cálida lengua rodeando la aureola de mi pezón hasta que noto cómo lo atrapa y succiona poco a poco chupándolo mientras me pellizca el otro. No puedo evitar volver mi cabeza hacia atrás y soltar un ligero gemido,mientras ella trabaja mis pechos. Ahora ha cambiado de pecho y esta lamiendo el otro. A estas alturas mis pezones deben estar muy sensibles, podría correrme con tan sólo sentirla en mis pechos. Pero, ese no era su plan. Poco a poco fue bajando y besando cada parte de mi cuerpo dejando rastros de su saliva por todo mi vientre. Con suma tranquilidad retira la última prenda que me queda y noto cómo baja por mis piernas hasta llegar a mis talones. Ella las retira y por fin observa mi sexo. Agradezco que sea verano y que hace prácticamente unas semanas fui a darme una sesión de rayos UV. Ella observa mi sexo y me pide que abra un poco las piernas a lo que no me niego. Veo como se agacha y se pone de rodillas mientras deposita besos por mi vientre dando alguna que otra mordida a por mis caderas. Sigue bajando y besa mi entrepierna dando un buen lametazo por la zona cerca de mis labios superiores. No puedo aguantar más la necesito. Ella sonrie porque sabe que no puedo aguantarme más. Toma su dedo indice y lo pasa por mis labios inferiores tocando de arriba a abajo de manera repetitiva notando lo húmeda que ya me encuentro. Sigue con su masaje hasta que consigue pasar sus dedos por la abertura y comienza a realizar movimientos relativamente lentos para mi gusto. Luego sigue bajando e introduce con cuidado un dedo en mi húmeda vagina tomando fluidos de esta para luego lubricar toda mi feminidad parandose en el punto de mayor placer que puede tener una mujer. Comienza a realizar movimientos en círculo y noto como éste se engrandece y se tensa ante el tacto de su dedo lubricado. Repite esta acción por un largo período de tiempo al mismo ritmo.Puedo notar unos pinchazos en mi clitoris ante lo sensible que está y la necesidad de tenerlo entre su boca. Ella sabe perfectamente lo que quiero y cómo lo quiero. Me pide que me siente en el bordillo de la cama a lo que obedezo. No tarda en gatear hacia mi. Poco a poco coge una de mis piernas y la bes por toda la parte interna del muslo miemtras que al mismo tiempo la deja abierta cuando la deposita en el suelo. Repite la misma acción con la otra pierna de tal modo que me encuentro totalmente dispuesta para ella. Se posiciona entre mis piernas y me dedica una sonrisa lasciva. Sabe lo que viene ahora. Poco a poco acerca su boca a mi centro. Puedo notar su respieracion cerca de mi coño. Sopla en mi clitoris y puedo notar como se eriza todo mi cuerpo. No tarda en depositar su lengua en mis labios inferiores y con total maestria comienza a mover su lengua de arriba hacia abajo rozando con su nariz mi clitoris. No puedo evitar echar la cabeza para atrás mientras mi respiración se entrecorta. Intento apoyar los codos en la cama mientras miro como esa mujer lame mi coño como si fuera el mayor dulce del mundo. Ella ahora toma mi clitoris entre sus labios y comienza a succionarlo lemtamente. Realiza movimientos de arriba abajo y luego circulares sobre él. Luego lo toma entre sus dientes y tira de él con total sutileza sin llegar a hacerme daño haciendo un sonido. No puedo evitar volverme loca y pido que repita la acción a lo que ella repite sin rechistar. Ella sigue relizandome sexo oral mientras que yo tiro con fuerzas de las sabanas. Me queda poco para llegar, lo sé y lo peor de todo es que ella lo sabe. Pido que vaya más rapido y ella comienza a realizarme el abecedario con su lengua en mi clitoris con unos movimientos tan ágiles que no puedo evitar llegar al primero de mis orgasmos. Noto como la sangre comienza a fluir más rapido y como mi diafragma se contrae y se relaja sucesivamente mientras mi respiración se entrecorta inhalando y exhalando repetitivamente mientras vuelvo a recuperar la cordura de nuevo. Cosa que no puedo ya que ella continúa tocando mi clitoris con su lengua suavemente mientras que intento recobrarme tras el primer orgasmo. No es la primera vez que lo hace. Pide que me masaje los pechos. Es por eso que tomo mis pechos y comienzo a masjearlos lemtamente mientras ella vuelve a chuparme el clitoris. Ahora decide mirarme a los ojos miemtras su lengua trabaja y yo hago los mismo con mis manos en mis pechos. Tira un poco fuerte del pequeño botón que ya esta muy sensible y no evito gemir del placer, tanto es asi que pellizco mis pezones con fuerza. Estoy aproximandome al siguiente orgasmo, sé que no tardaré mucho. Ella continúa lamiendo y chupando hasta que consigue realizar su cometido. Quiere seguir continuando pero lo digo que me deje descansar algo para recobrar de nuevo mis cinco sentidos tras el delicioso orgasmo que me acaba de dar. Ella se rie ante mi poco aguante y se retira de mi sexo. Se relame sus labios que contienen restos de mis fluidos hasta que no queda rastro de ellos mientras yo la obsevo tumbada en la cama. Nos volvemos a mirar fijamente la una a la otra y sonreimos porque sabemos que esto es solo un adelanto de la noche.