Juntos por Siempre (12)

¡Hola!... Si ya sé que tardé bastante en publicar… Pero es que quería estar seguro para hacerlo y bueno, ya lo estoy, creo. –jaja-

¡Además! Tuve que hacer algunos cambios en mi blog… ¡Y! después de algunos capítulos sin hacerlo, he actualizado la lista de personajes… Por si se llegaran a olvidar quien es quien, aquí la tienen http://otroside.blogspot.com/2012/06/lista-personajes-juntos-por-siempre.html .

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Andrés

Me encontré a mí mismo sonriendo alegre frente al espejo, no por nada pero me sentía ¿Cómo decirlo? ¿Alegre? ¿Radiante? ¿Emocionado?... había llegado por fin el día de la entrega del proyecto de grado, después de haber sufrido con miles de borradores, haber pasado noches enteras corrigiéndolo y hasta haber tenido pequeñas peleas y discusiones con Marcos, y sus amigos, por fin, estaba listo, y estaba completamente seguro de mí mismo, dominaba el tema a la perfección, todo un año investigándolo y una vida conociéndoles sin duda habían ayudado además de todas las asesorías que nos habían brindado los profesores a lo largo de los tres lapsos. Después del proyecto sólo faltarían los exámenes de lapso, los cuales con algo de esfuerzo aprobaría, y listo, graduarnos y a la universidad.

Ajusté  el nudo que mi mamá había hecho en la corbata a mi cuello y lo fijé, luego coloqué el cuello de la camisa por encima cubriéndola y por ultimo debía colocarme el pullover; el uniforme para la entrega de proyecto, la graduación y de haberlas habido, las pasantías. Una camisa manga larga de color azul eléctrico, pantalones negros, pullover, corbata y con zapatos casuales negros, que me había matado la noche anterior para sacarles brillo.

Me medio peiné un poco, cómo solía hacer, tenía la suerte de que mi pelo  se peinara casi que solo, una vez estuve listo me decidí por escribirle a Marcos.

Andrés: Hola guapo, todo listo para exponer el proyecto? ;)

Me senté en mi cama mientras esperaba una respuesta, como tardaba tanto en llegar me paré y comencé a revisar si tenía todo lo que iba a llevar, apuntador, mi billetera, fichas con anotaciones, fui hasta la sala, allí estaban la cartelera y unos pasapalos que debía llevar. Si, era todo.

Bebí un poco de agua y me senté en el mueble a leer mis apuntes mientras seguía esperando a que Marcos respondiera, era raro, por lo general siempre contestaba uno o dos minutos después, cuando mucho unos 5 pero ya había pasado más que eso... Podía estar ocupado estudiando, quizás bañándose... Aunque solía llevarse el teléfono a la ducha. Me decidí a llamarlo, marqué su número que ya me sabía de memoria y cuando ya solo me faltaba presionar la tecla de llamada, vibró mi teléfono y en pantalla apareció el aviso de un mensaje nuevo de él.

Marcos: Si, ya voy saliendo al liceo

Andrés: Ok, nos vemos allá entonces :*

Marcos: :)

Avisé a mi mamá y junto con Kevin nos fuimos al liceo, era el momento.

Julián

Con ayuda de la mamá de Marcos y la de Andrés habíamos logrado decorar el salón y la verdad que quedó bastante bien, la mamá de Carlos acomodaba la mesa mientras que el señor Manuel y el señor Esteban conectaban los equipos, el proyector, la laptop, la pantalla para el proyector… Marcos aún no había entrado al salón, según sus padres había llegado directo al baño a lavarse la cara para espabilarse ya que no había dormido casi la noche anterior, por preocuparse tanto los nervios de seguro lo habían traicionado. Rebusqué entre las personas que habían llegado, los familiares de todos… y por mi parte… al menos mi abuela había venido. Sonreí y le saludé a lo que ella me correspondió. Me giré hacia mis amigos para dejar de verla y evitar cualquier tontería… me fijé en el salón y estaba ya todo organizado media hora antes de la pautada para nuestra exposición.

Pasados unos minutos por fin Marcos se dignó a aparecer, lo vi cuando venía por el pasillo así que con el codo tropecé a Andrés y señale hacia marcos haciendo un gesto con los labios. Todo el mundo lo esperaba como quinceañera... Era quien traía el proyecto y también las diapositivas.  Mirábamos como a paso lento se acercaba, Andrés entrecerró los ojos mirándolo, fue entonces cuando me fijé bien, no por nada, pero parecía un muerto ambulante, Esteban también se dio cuenta y les avisó a Carlos y Alejandro todos íbamos a ir pero con un gesto rápido decidimos que iríamos Andrés y yo y los demás simularan como si nada pasara.

-¿Coño Marcos que te pasó?- le pregunté preocupado al acercarme.

-¿Qué? ¿Por qué?

-¡Pareces un zombie Marcos!- dijo Andrés.

-¿Estuviste llorando?- Pregunté al fijarme en sus ojos algo rojos -¿Qué te pasa?

-Nada vale- trato de apartarnos a Andrés y a mí y seguir hacia el salón.

-¡Así no vas a entrar a exponer, que van a pensar los profesores! ¿Qué pasó?- volvió a preguntar Andrés con tono preocupado, pero tampoco podía ocultar lo molesto que se estaba poniendo -¡Marcos!- Le tomó del hombro y lo zarandeó un poco.

-No pude dormir casi, pero estoy bien.

-¿Y eso por qué?-Preguntó Andrés.

-El proyecto, que más.

-Pero si ya estaba listo- agregué.

-Faltaban unas cosas.

-No Marcos, yo lo revisé y todo estaba listo- añadió Andrés, la respiración se le había agitado un poco.

Marcos se puso cabizbajo...

-¿Y dónde está? Se supone que tú lo imprimirías- preguntó Andrés, ahora más molesto que antes.

Unas gotas cayeron al suelo, Marcos se había puesto a llorar.

-Perdí el proyecto y las diapositivas.

-¿¡QUÉ!?- gritamos Andrés y yo despavoridos atrayendo algunas miradas desde el salón- ¿Cómo así?-

-Solo lo perdí.

-Coño de la madre- dijo Andrés mientras se ponía las manos en el pelo. En eso Alejandro se acercó a nosotros y preocupado preguntó que ocurría, le explicamos sin saber bien que era lo que pasaba.

-No jodas Marcos, que mierda te está pasando…- lo miró torciendo los ojos mientras se apretaba el entrecejo… -No tenemos tiempo que perder- terminó por decir.

-Tengo las copias que me enviaste en mi correo- agregó Andrés.

-Vamos a imprimirlas- dije.

-¿Qué pasó?- se acercó ahora Esteban preocupado.

-Marcos no tiene el proyecto- respondió Alejandro.

-¿Tenemos que imprimirlo de nuevo, tienes un pendrive allí?-

-Sí, si- respondió Esteban

-Vamos pues- Dijo Andrés dándose y arrancando a correr con Esteban.

-Y tú ven conmigo, tenemos que quitarte esa cara e´ muerto- dijo Alejandro tirando del pullover de Marcos halándolo en dirección al salón para después llamar a Geraldine, una vez ella salió pasó de nuevo a mi lado.

-Tú ve con Carlos y ve que inventas para hacer tiempo- me dijo.

-¿Y qué van a hacer con Marcos?- pregunté preocupado, Marcos estaba allí, escuchaba todo lo que decíamos y aun así parecía ausente, no participaba en lo absoluto, solo se había quedado cabizbajo.

-Lo vamos a dejar como nuevo- contestó Geraldine por él para después picarme un ojo y seguir caminando perdiéndose entre los pasillos.

Me quedé pensando un momento… Cuando por fin reaccioné recordé que mi tarea era hacer tiempo distrayendo a todos en el salón mientras ellos volvían…

-Definitivamente, me ven cara de payaso.

Andrés

Esteban y yo corríamos por la acera y sin querer tropezábamos a más de uno, y otros se asustarían de ver a dos chamos corriendo, lo primero que pensarían es que acaban de asaltar a alguien, pero vamos, quien iba a pensar eso de dos chicos ambos vestidos formalmente. Llegamos por fin al centro comercial y sin dar tiempo a recuperar el aliento entramos al cyber y pedimos una computadora, busqué las diapositivas y el trabajo escrito y los puse a descargarse ambos.

-Corres bien- me dijo Esteban soltando el aire, como por fin descansando.  Yo solo sonreí asintiendo.  -De los muchachos solo Marcos me lleva el ritmo- agregó.

-Ah, cierto que no hemos ido nunca a trotar contigo- recordé yo.

-He andado ocupado ¿Además que ya tienen tiempo sin hacerlo no?

-Seh

-A ver entonces en vacaciones.

-Aja.

-Qué problema con Marcos…- soltó.

-Si… es raro en él… No sé qué le habrá pasado, que yo recuerde ya todo estaba listo, él solo lo iba a imprimir.

-¿Y si se le quedó en casa?

-¡No! Él dijo que lo había perdido…

Me fijé en el tiempo restante para la descarga, 5 minutos, coño, comencé a mover el pie golpeando el piso.

-Qué raro eso- dijo Esteban… estuvimos un rato en silencio hasta que volvió a hablarme, tratando de calmarme supuse -¿Y cómo has ganado resistencia tú? Yo por lo menos en el gimnasio, u know- hizo un gesto flexionando el brazo marcando sus músculos.

-jaja, bueno, yo hago ejercicios en mi casa y ¿te dije que practico Capoeira?

-¿Ah sí?

-Sí, bueno, antes iba, ahora lo hago por mi cuenta.

-Ah, el tiempo imagino.

-Aja- volví a mirar el ordenador, se tardaba bastante en descargarse solo 20 mb.

-¿Y qué corda eres?

Voltee a mirarlo un poco impresionado, eran pocos quienes sabían que en la Capoeira también se usaban cintas como en otras artes marciales, pero que no se llamaban así, y expresaban más que todo tu grado de preparación

-Amarela- le respondí viendo como la descarga llegaba a su fin, guardaba todo en el pendrive de Esteban e íbamos a que lo imprimieran.

-¿Cuánto se tarda la encuadernación?- preguntó esteban al tipo.

-Como 2 minutos, eso es rapidito.

Miré la hora en mi celular, 9:50. Solo 10 minutos teníamos.

-Lo encuadernas entonces por favor- le pidió… Yo solo le miré incrédulo.

-¡Como si tuviéramos mucho tiempo!

-Si alcanza, créeme.

Marcos

-Ya vas a ver qué vas a quedar hermoso mi amorcito- dijo Zugey pellizcándome el cachete.

-Primero hay que despertarlo- añadió Brenda -¿sabes lo que vas a exponer?

-Si… claro...-respondí. Aún no acababa de creer lo que me había pasado.

-No, no, cómprame un café bien fuerte en la cantina Ale, sino un redbull, un monster energy o algo.

-Voy- respondió antes de salir corriendo a la cantina.

-¿Tú tienes algo para las ojeras no?- Preguntó Geraldine a Zugey.

-¿Qué acaso me ves cara de burra con sueño… Estás insinuando que me tapo las ojeras?

-Ay coño Zugy ¿tienes o no?

-Si toma- terminó por buscar en la cartera mientras rezongaba.

Geraldine agarró un poco de la crema y me la puso en el contorno de los ojos.

-¿Cómo te quieres ver amorcito? Sexy y medio mariposito como Zac Efron o así bien macho como Vin Diesel, pregunto Geraldine bromeando.

-¡Pero no me le toquen el cabello!-Dijo Zugey.

-Ay, tampoco es que el maquillaje hace milagros- añadió Brenda burlándose.

-Hasta podemos maquillarte como si tuvieras una cortada en la cara, eso sería so sexy- dijo Zugey

-Nooo, yo ni siquiera sé que hago aquí- traté de levantarme pero entre las tres me volvieron a sentar.

-¡Porque te ves como un muerto!

-¡Vamos a ponerte un poco de base acá!… ¡y un poco de rubor por acá!…

Julián

-Ehmm...

-Esteeem...

-Buenooo…-Miré la hora en el reloj 10:00am, Carlos me miraba de reojo, los padres de Marcos me miraban preocupados, la mamá de Andrés y su hermanito me miraban, los padres de Esteban me miraban, mi abuela me miraba, la directora me miraba, los profesores me miraban y yo no sabía que mierda hacer.

¡Por qué coño todos tardaban tanto qué carajo les había pasado nojoda! Miré a Carlos cerrando los ojos y moviendo la cabeza de lado a lado sin saber qué hacer, resopló luego volteó a mirar todo a todo el mundo, el salón, el más grande de todo el liceo estaba completamente lleno, personal directivo, profesores, alumnos, representantes… todos estaban allí, después de todo era la primera exposición que se haría, abriríamos la semana de entrega de proyectos, y no teníamos nada de nada. Andrés y Esteban no llegaban, Marcos y Alejandro no sabía dónde estaban y mi misión de entretener no había sido cumplida, pero que iba a hacer ¿Contar un chiste acaso? Eso seguro nos costaría la nota, coño de la madre.

-Julián, sígueme- susurró Carlos.

-¿Qué piensas hacer?

-Sólo sígueme.

-Buenos días profesores, representantes, alumnos y todos los aquí presentes, como pueden ver hemos tenido un pequeño inconveniente por lo que ven que faltan algunos integrantes de mi grupo, no obstante mi compañero Julián Gonzales y mi persona Carlos Alfonzo adelantaremos un poco acerca de nuestro proyecto.- Se detuvo y con la mano me señaló los trípticos, los tomé de la mesa y comencé a repartirlos, varios se ofrecieron ayudarme a repartirlos a los que yo les respondía con mirada asesina, tenía que hacerlo yo solo si quería hacer tiempo. Terminé de entregarlos y volví a mirar a todo el salón, luego a mi reloj, 10:05am…

-Bueno, como pueden ver tienen en sus manos un tríptico, nuestro proyecto trata acerca de los Videojuegos como observarán, pero más allá de eso, qué beneficios y qué desventajas tiene su uso…- Continué hablando, sin saber bien lo que hacía, pero de alguna forma debía distraerles.

Carlos me pidió la palabra y le dejé hablar, suspirando volví a mirar a todo el salón, aún los padres de mis amigos me miraban extrañados, pero yo estaba igual que ellos sin saber cuándo llegarían. Pasados unos minutos Carlos me miró como perro callejero que pide ser rescatado así que seguí hablando yo.

Andrés

-Llegamos- Me paré frente  a la puerta del salón con la mano sobre la manilla.

-¿Listo?- preguntó Esteban con el proyecto ya impreso en sus manos.

Me asomé por la ventanilla y vi que Carlos y Julián habían iniciado la exposición sin nosotros, o al menos debían estar haciendo tiempo.

-Estas todo sudado, toma, sécate- Esteban sacó un pañuelo de su bolsillo y me lo pasó, me sequé un poco –tú estás igual- le devolví el pañuelo… aunque no creí se fuera a limpiar con él también, lo miró unos segundos y luego me vio a mí.

-No importa- se guardó el pañuelo en el bolsillo.

-¿Seguro?

Él solo encogió los hombros, en eso venían Brenda, Geraldine y Zugey junto con Alejandro, todos venían como escoltando a alguien, pero las sobrepasaba a ellas por varios cm me fijé bien y era Marcos, no lo había reconocido a la primera después de todo iba… ¿Maquillado?

-¿Listos?-preguntó Alejandro.

-Si, si, ya estamos todos listos. Respondió Marcos, andaba algo alterado ahora.

-¿Qué te hicieron?- le pregunté entrecerrando los ojos.

-Me taparon las ojeras y me colorearon, creo. Ah y me dieron también un Redbull, es que no pude dormir en toda la noche, por el proyecto, ya sabes.

-Aja, aja, ¿te sientes capaz de exponer Marcos? Volví a preguntarle.

-Claro, vamos allá- Abrió la puerta del salón sonriendo, Carlos y Julián pararon de hablar, la mirada les brilló al vernos, los dos debían haber estado pasando las de Caín.

-Buenos días a todos, disculpen los inconvenientes y muchas gracias por su paciencia- se disculpó Marcos mirando a todo el salón.  Atrás le seguimos nosotros y las chicas tomaron asiento.

-Bueno, ahora que ya han llegado nuestros compañeros pedimos unos minutos más de su tiempo para preparar nuestro material de apoyo- pidió Julián quien se acercó rápidamente a nosotros le entregué el pendrive y colocaron la diapositiva, pedí el señalador a mi mamá y en menos de tres minutos dimos inicio a la exposición, me fijé que estaban los padres de todos, excepto los de Julián, sólo su abuela estaba. Suspiré un poco, miré a todo el público y di inicio.

Primero que nada nos presenté a todos los integrantes del grupo, no pude evitar reírme un poco con Marcos al momento que decía su nombre al público presente, Marcos se sonrojó un poco, continué con la presentación y di inicio con la introducción al tema. Me siguió Esteban quien habló de la justificación de nuestro proyecto, luego le siguió Julián, Cada uno se había tomado una cantidad considerable de tiempo puesto que cada punto tenía subtemas que también tenían que explicarse, pero por lo que veía el tema parecía atraerle a muchos y el “carometro” de los profesores daba buenas señales voltee a mirar a Marcos,  ni se le notaban las ojeras, estaba muy diferente a como cuando llegó al liceo… sin embargo tampoco tenía la misma cara que cuando habíamos entrado al salón… Estaba diferente, había perdido la hiperactividad y pensé que eso era bueno…

Di unos cuantos pasos pasando tras Julián que seguía exponiendo, me acerqué hasta Marcos y le pregunté al oído:

-¿Estás bien?

Marcos respondió solo asintiendo con la cabeza

-¿Seguro?

Volvió a asentir

-Ya vienes tú.

Asintió nuevamente y esta vez cogió un poco de aire yo choqué mi codo con el suyo haciendo que volteara hacia mí, sonreí mirándole tratando de tranquilizarlo, él me devolvió una sonrisa chueca, nerviosa… Además la cara se le había comenzado a enrojecer… Tenía un mal presentimiento.

-Y ahora los dejos con mi compañero Marcos Rivero que les va hablar un poco acerca del Marco teórico de nuestro proyecto- le cedió la palabra Julián que se quitó del frente dejándole el espacio a Marcos, él dio unos cuantos pasos y se colocó frente a todos.

-Bu…- nada más se le había ido el gallo, noté como miró a su mamá y ella solo movió su cabeza agarró aire y lo soltó lentamente indicándole que hiciera lo mismo. Marcos le obedeció y luego que hubo exhalado todo el aire se giró a mirarme a mí, le volví a sonreír mientras en mi mente no dejaba de decirle que si podía.

-Buenos días, como ya les indicó mi amigo Julián yo les hablaré acerca de los fundamentos teóricos en que se basó nuestro proyecto, Primero que nada…

-…

-…

-Primero que nada- repitió, casi que pude escuchar como su saliva trataba de pasar por su garganta… -Mierda, mierda, mierda…-

Volvió a tragar saliva, toda su cara se enrojeció y comenzó a mirar al suelo.

-No Marcos por favor, no la cagues ahora- susurró Alejandro. Sólo los chicos y yo alcanzábamos a escucharle. Carlos se pasó la mano por la frente y la bajó por sus ojos, toda la cara enrojecida…

Sin saber que hacer miraba a todas partes buscaba una forma de poder ayudarle pero la mente no me daba, no podía pensar en nada en más que él allí bloqueado… Nunca le había visto así, en ningún momento, de hecho cuando exponía en clases lo hacía bien y los demás le temían por “Encadenarse” como el mismo Chávez… -Por favor… Marcos… continua-

-Otra cosa que quería mencionarles, me disculpas Marcos- interrumpió Julián, Marcos levantó la mirada del suelo y lo vio por unos segundos, Julián le sonrió pero Marcos en cambio pasó de él y caminando entre las filas de pupitres rompió a llorar mientras salía corriendo del salón, su mamá se iba a levantar para ir tras él pero el señor Manuel la detuvo y con la mano le indicó que él iba. Salió del salón atrás de Marcos, no podía verle así… no podía estar allí y no hacer nada por él… Qué podía pasar si iba, o qué si no lo hacía… Con un pie adelante y el otro atrás indeciso en si ir o no tras él, miraba a la puerta del salón, miraba a los que prestaban atención a Julián, a otros que veían a la puerta como Marcos había salido, unos con caras de burla… no los soportaba…  me puse cerca de Julián y con una mirada rápida le indiqué que iba por Marcos a lo que él me pareció ver que asintió aunque en realidad no me importaba si lo hacía o no, igual iría, corrí para salir del salón y fui al salón más cercano donde imaginé que estaría y lo confirmé al escuchar los sollozos, miré la hora en mi móvil, 10:56am, Julián tampoco iba a hacer tiempo por mucho así que si no quería perder la nota Marcos debía apurarse.

-¿Se puede saber qué es lo que te está pasando a ti Marcos?- le preguntaba su papá, Marcos lloraba en un pupitre sentado pegado a la pared mientras el señor Manuel apoyado con una mano en esta y la otra en el hombro de Marcos le preguntaba sin recibir respuesta alguna.

-¿Cómo es eso de que te pasaste toda la noche haciendo un proyecto que según llevaba días listo y que por eso no pudiste dar un último repaso? Explícame porque por mí solo no puedo entenderlo, además ¿qué pasó con el que traías?

Otra vez no tenía respuestas, yo sólo presenciaba como él le preguntaba, sin subir el tono mucho, pero igual era bastante amenazante.

-Marcos, por el amor de Cristo, respóndeme…  ¿Por qué comenzaron tarde y por qué tú no habías llegado?

No respondía de nuevo, solo aspiró un poco los mocos que salían de su nariz.

El señor Manuel  volteó hacia todas partes y su mirada se cruzó con la mía unos instantes, suspiró…

-Marcos colle, es por tu bien, no importa si no me respondes ahora, tienes que ir a exponer…

Me senté en el pupitre delante de él, Marcos colocó los codos sobre el pupitre, se limpió los mocos con una mano, limpiándose con un pañuelo luego y terminó por taparse la cara.

-Marcos, está bien si no expones, igual ya tienes las materias casi aprobadas, sería solo cuestión de pasar los exámenes de lapso…  pero tienes que tranquilizarte- le dije mientras con mi mano recorría su cabello y lo rascaba un poco, su papá me miró –Claro que a tu papá y a todos nos gustaría que hablaras, dominas muy bien el tema… no sé qué te pasa… pero sea lo que sea no es motivo para que te pongas así, estate tranquilo…-

Los sollozos se acallaron un poco, igual que los pequeños brincos que daba al respirar, el señor Manuel se habían cruzado de brazos y no dejaba de mirar lo que yo hacía.

-Mírame Marcos…- coloqué la mano como pude en su cuello y tiré de su mentón –tu puedes hacerlo, confío en que lo vas a hacer muy bien, como siempre… recuerda las veces que se han burlado por tanto que hablas en las exposiciones… Esta que de verdad lo vale ¿no lo vas a hacer?  Y que te pones rojo y te dicen tomatín o cualquier cosa y tú igual seguías Marcos… que no te importe más nada, tú sólo tienes que demostrar que sabes, y si estás aquí y hemos llegado tan lejos no lo vas a dejar ahora ¿o sí?

Marcos negó con la cabeza.

-Háblame- le pedí.

-no- dijo de una forma apenas audible.

-Más duro.

-no- repitió con un poco más de volumen.

-¡MAS!- hablé duro yo.

-¡NO!- dijo en mí mismo tono de voz.

-¡Vamos! Tu puedes…- me acerqué hasta él y le besé los labios levantándome del pupitre y tirando de su mano para levantarle… -¿Va?...

-Va- apretó un poco mi mano y se acercó a besarme de nuevo. Un carraspeo nos separó esta vez, el papá de Marcos seguía allí, Marcos me soltó la mano y se fue hacia el salón esperaba ya decidido, aunque con la cara enrojecida ya de haber llorado y los mocos un poco sueltos. Miré algo avergonzado al señor Manuel...

-Ay ya, que los he pillado haciendo peores cosas.

Reí un poco.

Él se fue hacia la puerta de ese salón para ir a donde era la exposición.

-Gracias por lo que has hecho por mi hijo, Andrés…- dijo para después irse al salón sin darme tiempo a responderle pero automáticamente una sonrisa se dibujó en mi rostro… Suspiré y me pasé la mano por la frente y los ojos, sacudí la cabeza y me fui al salón, Marcos había comenzado a exponer, algo nervioso y entrecortado pero por lo menos lo estaba haciendo, además a medida que lo hacía perdía los nervios y parecía estarlo haciendo  demostrando que si podía… No podía evitar sentirme orgulloso de él… amaba a ese chico.

…

-¡Mamá! ¡Voy a casa de Marcos!- le grité ya frente a la puerta de mi casa con la mano en la manija.

-¡Está bien! Pero no te vengas tan tarde-

-Ok, Chao bendición, chao Kevin…-

-Chao- respondieron los dos.

Bajé en el ascensor  y fui caminando hasta la parada de buses que pasaban por casa de Marcos, a pesar de tantas  complicaciones nuestra defensa del proyecto había salido bastante bien según los profesores, que a pesar de los contratiempos habíamos sabido manejarlo y que para ser quienes iniciaron las exposiciones estábamos muy bien. En la ronda de preguntas habíamos podido responderles a todos, el señor Manuel había hecho varias, pero no las ponía fáciles, en cambio otros hacían unas preguntas que ni sabía cómo se les habían ocurrido y a pesar de todo habíamos salido ilesos. Sin duda el esfuerzo había valido la pena.

Ahora, algo le pasaba a Marcos, había creído muchas cosas pero hasta hoy no me había dado cuenta, algo me estaba escondiendo y no entendía bien el por qué. No era normal que de pronto se desapareciera, menos si no era conmigo, está bien que de vez en cuando quisiera andar solo, sin siquiera sus amigos, pero ya eran varias las veces que se había perdido sin que nadie supiera nada de él. Lo llegué a encontrar llorando y solo se excusó con que era tanto estrés, en un principio le creí, pero de ahí a perder un proyecto, ponerse a llorar en una exposición, así no era Marcos, así no era MI Marcos, y de alguna forma tenía que saber qué le pasaba.

Llegué a la puerta de su casa, ya, como todos sus amigos, yo también tenía las llaves de la reja así que pude entrar sin problemas. Toqué el timbre y pasados unos minutos se abrió la puerta, no me iría de allí sin saber que pasaba con él.

-Hola Sra. Lisbeth, buenas tardes-

-Hola Andrés.

Me quedé un momento en silencio.

-Marcos está allá adentro en su cuarto- terminó diciéndome ella.

-Ah ya, gracias- dije ya entrando hacia la habitación

-Pero está durmiendo...- me detuve.

-Ah sí, me imagino que por lo de anoche

-Sí, es que te digo que si acaso dormiría media hora mi niñito, primero porque le faltaba no sé qué al trabajo. Y después será por los nervios, cosa rara en él, pero es que estaban muy presionados.

-Si bueno un poco...

-Y ahora vienen los exámenes

-Si... Por suerte por ser los primeros ya nos queda la semana libre.

Así seguimos conversando un rato, la señora Lisbeth me invitó a tomar un café alegando que quizás Marcos ya estaba por despertar porque se había dormido hace rato. Mientras tanto habíamos estado hablando, ella había pedido el día libre, pero su papá solo la mañana por lo que se había ido al trabajo, pero que ella iba a salir con Marcos -cuando despertara- a pasear un rato y después a cenar, si quería podía ir con ellos, cosa que me alegró un poco. Dejamos de hablar y dijo que si quería usar la pc, que ella iba a bañarse.

-¡Cuidado con robarme algo, que si te llego a pillar no me pisas más esta casa mijito!

-¡No señora Lisbeth! ¡Cómo cree!

-¡Si, si es broma! Pero tengo la cuenta de que son 5 matrioskas así que cuidadito!

-¡Está bien!

-mmm- entrecerró los ojos y se colocó los dedos índice y medio en cada uno, yo solo asentí con la cabeza. Luego hizo un gesto riéndose y negando con la cabeza diciéndome de nuevo que era broma, entró a su cuarto y me dejó en la sala, así que como ella había dicho me senté en la pc y encendí el monitor que era lo único que estaba apagado. En seguida apareció la pantalla de login pidiéndome una contraseña para ingresar al usuario de Marcos. Comencé a tirar flechas a ver si con alguna acertaba.

-12345

-54321

-Marcos

-Andres- no por creerme nada, claro.

-firulais

-qwertyuiop

Nada, claro, no esperaba menos de Marcos, era lo bastante precavido, y paranoico... Tenía que pensar bien, tenía que ser algo fácil de recordar... No sabía cómo no se me había ocurrido pero le di click al signo de interrogación y me apareció la sugerencia de contraseña. “Ini amigos”.

Por supuesto, como no lo había pensado, las iniciales de sus amigos, pero ahora resultaba algo obvio... Aunque en qué orden seria... Alfabéticamente:

-AACEJ

Nada, esa tampoco era... Aunque...

-EJCAA

¡Listo! Claro, el orden en que los había conocido a todos. Le agradecí mil veces a Julián por haberme contado, en la pantalla aparecieron varias ventanas abiertas, entre ellas una del navegador. Lo abrí esperando conseguir algo extraño supongo, pero no había más que el acceso rápido, busqué en el historial pero Marcos había borrado las paginas o en tal caso, no había hecho nada, pero en qué se había trasnochado entonces...

-Ahmm, como no haberlo pensado antes.

Tecleé Facebook y luego de unos segundos aparecieron las noticias de los amigos de Marcos... No pasaron ni dos segundos de haber entrado, iba directo a desconectar el chat cuando saltó una ventana de chat.

Julián Gonzales

Marcooos parecias una puta e carretera! Jajajja xd xd

Marcos Rivero

Jaja. Por qué lo dices? -Respondí.

Julián Gonzales

El maquillaje loco, el maquillaje! Jaskajskjask

Marcos Rivero

Ah, jaja cierto, disculpame debo irme.

Desconecté el chat y busqué las conversaciones recientes. Julián, Ricardo, Carlos, Brenda, Zugey... ¿Ricardo?

Si mal no recordaba Marcos me había mencionado algo del tipo, era algo así como su cyberamigo con el que hablaba desde mucho antes de que empezara lo nuestro, que ambos se tenían bastante confianza ya... Igual, era el primero en quien podía sospechar, sin pensarlo dos veces abrí la conversación.

Ricardo Estrada

Chau Marquitos ya verás que todo va a salir bien.

Ese era el último mensaje, deslicé la Rueda del mouse y subí un poco más.

Marcos Rivero

No puedo hacer nada, ya te dije que me tiene amenazado con eso.

Un escalofrió me recorrió de pies a cabeza ¿alguien tenía amenazado a Marcos? ¿Con qué?

Ricardo Estrada

Si marcos, pero tampoco te va a tener como tu esclavo... Seguro no te ha pedido nada más?

Marcos Rivero

Te dije que me dijo "Por ahora quiero nada mas eso... Ya veremos después"

Involuntariamente apreté el puño queriendo golpear la computadora, seguí leyendo, apretando los dientes y con el cuerpo tenso.

Ricardo Estrada

Ay Marcos, yo no veo eso por buen camino, ese chamo se está aprovechando feo y no creo que se vaya a conformar solo con que le hagas un trabajo.

Eso, eso era, a Marcos alguien lo había obligado a hacerle el proyecto, es decir, era alguien de nuestro liceo, de que otra forma… Debía saber más, necesitaba saberlo, además, con qué lo chantajeaba... ¿Por qué Marcos no me lo había dicho?

Subí mas en la conversación, por el final, ese tal Ricardo sabía más, quizás hasta el mismo nombre de quien amenazaba a Marcos.

Sin embargo la conversación parecía entrecortada, como si la continuaran por otro medio, por supuesto, el teléfono de Marcos, de todas formas, continúe, algo más debía encontrar.

Un mensaje de hace unas semanas lo explicaba...

Marcos Rivero

No puedo creer que esto esté pasando.

Ricardo Estrada

Pero como es que no se dieron cuenta

Marcos Rivero

Pero es que no pasaba nada, solo estabamos en el baño ya, yo entré sin fijarme en nada y luego Andrés debió haber hecho lo mismo.

Joder, joder, joder... ¿De qué mierda iba todo esto?

Ricardo Estrada

Pero que es lo que dice

Marcos Rivero

Todo Rick...

TODO! Nos grabó a mí y a Andrés teniendo sexo!

¡A LA MIERDA! ¡No jodas! ¡Coño de la puta madre! ¡Quien coño era el desgraciado!

La puerta del cuarto de Marcos se abrió pude escuchar como Marcos se acercaba a la sala, coño, debía tener más información... Los pasos de Marcos sonaban cada vez más cerca, comencé a temblar.

Piensa rápido coño... Piensa... Piensa... Piensa...

-¿Andrés?- terminé cerrando la ventana, para colmo se quedó colgada sin cerrarse, marcos vería que estaba jorungando su facebook coño, giré sobre mí mismo en la silla tapando el monitor, si Marcos no quería que yo me enterase, debía tener algún motivo, mas sin embargo no lo iba a dejar así como así.

-Hola Marcos- me levanté y dándole vuelta haciéndole dar la espalda a la pantalla le besé, él como siempre, cerró los ojos y yo veía de reojo la pantalla del monitor -ciérrate, ciérrate, ciérrate, que mierda, es que acaso Marcos tiene una lemtium 0...-

Marcos comenzó a murmurar como diciendo hasta cuando, era un beso de saludo, esos eran un simple pico. Introduje mi lengua en su boca y comencé a recorrerla, con la mano bajé por su espalda y le apreté las nalgas.

-¿Ya se despertó mi cochito pechocho?-

Los dos nos separamos de golpe, voltee al monitor y por suerte ya se había cerrado el navegador.

-SI MAMÁ- gritó- ¿y eso que viniste?- preguntó dirigiéndose a mí.

-¿Qué? ¿No me puedo preocupar por ti ahora?

Marcos sonrió sonrojándose un poco.

-Tu mamá me invito con ustedes

-¿Si? ¿A dónde?

-Por ahí...

Sonrió un poco...

-Voy a salir con mi suegra- le guiñe un ojo.

-Así parece- se rascó la cabeza Marcos y bostezó un poco...

-¿Que estabas haciendo en la compu?... Espera... ¿Cómo supiste mi clave?

-mmm... Yo lo sé todo joven pupilo.

-Ay ya dime.

-jaja, jugaba los sims, y pues estaba fácil. Le tengo que dar las gracias a Julián por el orden.

-Ah, ya te habló de eso, se sonrió negando con la cabeza -¿Y qué pasó con el juego? No está abierto.

-Ehmm... Se quedó pegado- puse una sonrisa chueca.

-Ah sí, suele pasar... Debo bajarle los gráficos.

-Sí, lo supuse, se veía arrechamente... Lento, jeje.

-¡No te metas con mi compu eh!- me dijo dirigiéndose a la cocina.

-¿Mamá no hay nada que comer?- Gritó desde allí.

-Ahí te la comida servida.

Mientras Marcos comía estuvimos hablando un rato, le pregunté qué era lo que había sucedido en la mañana, a lo que solo contesto que había perdido el trabajo y el pendrive y cambió el tema… No quise insistir, ya sabía que algo me ocultaba… hablamos hasta que terminó de comer y se fue a bañar iba a entrar de nuevo en su facebook pero ya que su mamá andaba por ahí preferí revisar que tenía por ahí Marcos, encontrando su carpeta con videos porno, cosa peor que entrar al mismo facebook, por suerte cerré la ventana antes de que su mamá se diera cuenta y seguí como si nada... Saqué mi teléfono y anoté el nombre y apellido del tal Ricardo, le escribiría, algo le tenía que sacar.

...

-Mira esta- le decía la señora Lisbeth a Marcos enseñándole unas franelas en una vitrina, él solo veía algunas y asentía diciendo que estaban chéveres de manera un poco seca. Casi no mediábamos palabra, yo porque no sabía que decir pensando en todo lo que debía estar pasando, y él… quizás por el mismo motivo. Su mamá lo notó, e hizo el intento por animarnos a ambos, fuimos a comer una pizza y estuvimos hablando un buen rato los tres, sobre mi familia, que por fin la Mamá de Marcos y la mía se habían conocido, y ambas se habían llevado muy bien al parecer, un poco sobre Marcos, una que otra historia de cuando era pequeño, al igual que yo compartí algunas mías que hicieron reír a ambos, no podía faltar hablar acerca del futuro y lo de que Marcos y yo queríamos estudiar, y ser… La tensión entre Marcos y yo no desaparecía, ni se hacía a un lado, seguía allí, solo que pintada de normalidad, pero ninguno quiso hablar de eso.

Terminé despidiéndome de ellos en la parada de buses que iban hacia mi casa mientras que ellos tomarían los que pasaban por la suya. Mientras subía en el ascensor miraba a la pantalla de mi celular, el nombre escrito en una nota.

-Ricardo Estrada-

Tenía que hacer algo, antes de que fuera demasiado tarde…

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Espero les hay gustado, y bueno, este capítulo y el siguiente iban a ser uno solo, pero debido a cuanto se extendió… Decidí dividirlo. Sin embargo, la espera para el próximo no va a ser tan larga.

En el próximo capítulo… Marcos y sus amigos deciden poner en marcha un plan que tienen desde hace mucho… Pero no saldrá del todo bien. Por otra parte… Andrés continua sus “averiguaciones” y consigue hablar con Ricardo ¿Obtendrá alguna información importante de esa conversación? ¿Descubrirá quien está amenazando a Marcos?

Tarde o temprano, todo cae por su propio peso.

Saludos. Espero les haya gustado, y no se olviden de comentar, sea lo que sea, aquí sus criticas serán bien recibidas.