Julie

Ella es mi fantasía. Yo, quisiera ser la de ella. Sueño con tenerla, con poseerla, tiemblo al pensar de que podria ser cierto...No seria capaz. P si? Este es mi primer relato. Espero les agrade.

Hoy lo pienso, y puedo estar casi seguro de que en sus noches me le aparezco. De que al igual que a mi, mi propia presencia la asusta y que, cuando le evito su penetrante mirada azul, es porque sabe que yo también la veo cuando se me aparece en mis noches. Envuelta en el alo etéreo de esa canción, que por casualidad una noche en que íbamos solos los dos en su auto, sonaba en la radio. Gwenn Stefani, con su sensual voz, fuerte, con carácter, cantaba de su vida, y al fondo el sintetizador guiado por la maestría del baterista y ese bajo perfecto, melódico…enmarcaba esa energía que fluía entre los dos sin percatarnos de ello. La desee, la deseo…lo sabe, lo sé, ambos lo sabemos por que lo hemos sentido. Porque se que me desea. Somos fantasía mutua, sueño calido de noches frías…destinos trazados sin razón de que se cruzaran y sin embargo allí estaba yo, siempre pensando en ella. Me sorprendía a mi mismo haciéndolo y me recobraba rechazándolo, no estábamos para que nuestras fantasías fueran realidades, pues realidades así solo terminan en pesadillas…y el tormento y el castigo de saber que nunca se podrá hacerse realidad, es demasiado precio a pagar por los impulsos sinceros de la sin-razón.

Aquella noche, ella, manejando, llevando el control de la situación…su cuerpo amoldado al contorno del asiento, resaltaba esa figuraba que me llevaba a mis extremos. Mi mente, sabiéndose presente junto a ella, volaba imaginando los contornos prohibidos de su vientre junto con los pliegues húmedos de su entrepierna, acariciados por la suavidad de la seda de sus pantis. Sus piernas, escondidas bajo la elegante seda del slack de seda blanco, se definían en la oscuridad apenas traspasada por la tenue luz del tablero central, me llevaban al éxtasis mientras, de re-ojo le contemplaba. Su aroma, sensual y femenino…enloquecedor para mi. Enloquecedor, simplemente. Porque razón, porque a mi venia a pasarme esto? Ella casada, yo también y mis pensamientos le hacían el amor de manera loca. Y mi sonrisa se perdía cuando sus ojos me buscaban inocentes de mi perversa fantasía y mi timidez saltaba y perdía entonces allí mismo el control. Y así, idealizándola, me enloquecía más y más, y quería decírselo y no podía. Mi corazón en su enloquecedora taquicardia me sumía en el miedo y en la sin-razón, nuevamente, de no poder razonar y mandar todo a la mierda y jugármela así, sin mas, y dejar que la melódica voz de Gwenn me transportara junto a ella a ese lugar del universo únicamente reservado para los dos, donde en nuestro tiempo y en nuestro espacio, lo imposible flotaba en medio de It´s my life, don´t you forget...Y mis manos, desnudándola, me guiaban explorando con mi boca su piel, descubriendo mi perdición enterrada bajo el enloquecedor aroma de su sexo...Su sabor a pasión contenida…prohibida, mis papilas perdidas en sus entrañas y mi vida desvaneciéndose a cada gemido, casi ahogado por el placer que ella emitía, transmitiéndome a través de su humedad salvaje su entrega…en mi sedienta boca. Y mi mundo se desvanecía en mi silla mientras las luces del carro continuaban rasgando la oscuridad de la noche y de nuevo éramos el universo, ella y yo…y la distancia se acortaba y quien ella amaba sin siquiera intuirlo, le esperaba. Y a mi… que en la oscura soledad de mi alcoba alguien que me amaba me esperaba…inocente también de la explosión de pasión que se sucedía en algún rincón en otra dimensión, lejana y a la vez paralela a la realidad calida de la cómoda silla en que viajaba junto a ella, y Gwen ya se había ido hacia mucho rato y otra canción sonaba en la distancia, pero el eco de la voz sensual, aun palpitaba en mi cabeza porque, sin quererlo, se convirtió el punto de referencia en el mapa de mi perdida situación .