Juliana: Una nueva relación

Despues de lo que inicio en familia, sigo con alguien que me hace sentir una nueva atraccion por las jovencitas...

Hoy relatare algo que me paso poco tiempo atrás, un hecho que cambio mi vida de una forma impresionante. Ya he relatado como inicie a mi hermana en el sexo, miedo no tengo de admitirlo; pero a pesar de su edad no me atraían mucho las adolescentes, esto cambio cuando conocí a Juliana.

Ella es una chica compañera de mi hermana en su preparatoria, de 16 años es una mujer de estatura baja, de complexión delgada y a mi parecer un lindo y bello cuerpo, cintura breve y caderas pequeñas, pero proporcionales a su cuerpo, armonizando el cuadro tan dulce que describo tiene unos senos pequeños y bien formados. Es una niña de cara singular, alargada y bella, tersa piel y cabello negro intenso, que hace juego con su piel morena clara. Es una dulzura mexicana como las que se dan en tierras jarochas.

A ella la tratan realmente mal, mi hermana es una de las pocas amigas que tiene, notoriamente esta desubicada, normal para una adolescente con antecedentes de una ruptura familiar.

Yo, siendo estudiante universitario tengo un horario variado; en una ocasión saliendo de casa a la facultad en la que estudio me tope con mi hermana y su amiga, iban en la acera del frente. Una voz que no conocía, me pregunto: "¡¡¡ ¿Eres el hermano de Belem?!!!" A lo que conteste positivamente, con una sonrisa y una expresión de sorpresa. Esa niña iba seguido a nuestra casa, pasaba largos ratos charlando con mi hermanita.

En una ocasión, mi hermana me comento que ella sentía una tracción por mi, pero en un comentario esporádico y con una advertencia, era una niña mucho mas pequeña que yo, y tenia problemas, es mas despectivamente ella me comento que no era nada bonita, detalle en el que difería mucho, talvez sean celos por la relación tan cercana que teníamos.

Seguido llamaba y al contestar su servidor, claramente notaba la voz entre cortada de la pequeña damita, eso me hacia gracia y mucho orgullo. Decidí invitarla una vez a salir, a lo cual acepto, pero me condiciono a que no se enterara su mejor amiga, mi hermana menor.

Salimos al cine, la lleve en mi camioneta como si fuéramos amigos de tiempo, jovial y distinta se comportaba a las historias que me hacia llegar mi hermana, era ciertamente bonita y por los problemas que tenia muchos chavos de su colegio le faltaban el respeto, al recordarlo intente ayudarla, esperaba claramente tener algo con ella, pero no tan rápido. De inicio le comente: "¿Es cierto que te faltan mucho el respeto en el colegio? No me parece eso en ninguna situación, me pareces una niña muy bonita y que debe hacerse respetar" Abrió los ojos y con faz sorprendida dijo: "¿Como sabes eso? ¿Cómo tu hermana lo menciona? Sonreí y pensando en que seria prudente contestar le dije: "Ella me lo dice, somos amigos, se lo pregunto por que me interesa" Cuestiono inmediatamente: "¿De verdad te importa? ¿Te puedo importar a ti? No lo entiendo, jamás me habían dicho eso, ahora no se por que tu me lo dices".

Detuve la marcha del motor, en un pequeño parque baje las ventanillas y le pedí me esperara, baje por unos helados. "Toma el de fresa, se que te gusta, así demuestro que tengo interés en ti" Comente. Desprovista de palabras tomo el helado y bajo la carita. Notoriamente había conmovido a esa niña tan tierna. Puse un poco de música, un CD que le había comprado como regalo, quería quedar bien con ella: "Es Rasmus, buen grupo, según se los adoras, es tuyo"… Al decir esto, levanto la mirada y me dijo: "¿Por qué haces esto?" Sonriendo busque en mi mente la mejor respuesta: "Realmente no creo merezcas la mala fama que te han dado, me gustas pero no sabia si decirlo, si te ofendí con mis palabras lo siento". "Tu también me gustas, de hecho quiero confesarte que me enamore de ti…" -Inmediatamente de mis palabras me impresiono su charla- "… tanto se de ti por Belem, que me intereso conocerte, cuando te vi me gustaste y note que eras interesante y listo, un joven exitoso y con una carrera que promete".

Con eso me basto, la tomé detrás de su cabeza y le di un beso, ella rápidamente lo contesto, tiro el helado por la ventanilla y me tomo del cabello, despeinándome. Era una tigresa, pequeña pero feroz. Saborearía mucho esta experiencia.

Al separarme de ella, dice: "Besas delicioso, eres un hombre de verdad, cortes y educado" Ya mas que con mi ego alto, miro a mi pantalón, noto que no solo me había levantado los ánimos. "Me gustas Juliana, pero eres menor que yo, esto no pude ser" –Comente- "Puedes salir lastimada". Me beso de nuevo y al oído transporto sus labios: "Hazme el amor, quiero ser tuya antes que de otro".

Impresionante, era mejor de lo que pensaba, si quería llevarla a la cama, pero pensé me costaría más que una sola salida y uno bobos detalles. Prendí la camioneta y a toda maquina me dirigí a casa, no había nadie, era un sábado, mi madre trabajando y mi hermana de compras.

La conduje a mi recamara, en ella al cerrar la puerta con seguro, me impresiono lo que veía, ella se quito su pequeña blusa, tenia un sostén blanco, quitose enseguida la falda y me deslumbro con un bello cuerpo, un perfecto y esculpido trasero que me fulmino. La diferencia de estaturas era bastante, ella con apenas 1.50 me parecía una pequeña muñeca.

La subí sin esfuerzo a la cama, la desnuden lentamente, mis labios recorrieron su cuerpo, tenia un sabor dulce, perfumado con aroma a flores. El tono moreno de su piel era exquisito a la vista, se movía lentamente conteniendo la respiración, me pidió que la dejara desnudarme, lo permití. Poco a poco me quito el saco, la camisa y quede solo en zapatos y pantalón.

Beso mi pecho y mordió mi cuello fuertemente, araño mi espalda sin piedad. Me recostó en la cama y desabrocho mis jeans, salto inmediatamente mi pene del bóxer que traía puesto aun. Inmediatamente con vista picara me hizo una felación impresionante, todo se me torno en colores brillantes y sensaciones jamás sentidas. Era instintivamente una experta, o eso creo hasta hoy

Sen mantenía en esa tarea un tiempo, le pedí hacer un 69, acepto, nos dimos placer el uno al otro. Era delicioso el sabor de ella, dulce, sofocantemente y enviciante. Se corrió una vez al menos, use mi lengua diestramente en el diminuto clítoris de mi joven amiguita. Era increíble sentir lo que ella hacia, su garganta realmente profunda soporto esa extensión de mi, 22 centímetros de mi ser.

Me tome en serio el hecho de el interés por ella, es cierto que senos pequeños provocan mas placer a su portadora, no siendo así para el varón, pero le di importancia a su sensación, lamí, mordí e incluso use un poco de helado sobre esos montículos deliciosos que apenas sobresalían de ella. Sus pezones duros fueron victimas de constantes embates de mis dientes. Lastimeros quejidos escuchaba en mi habitación, era un placer verla, tan menuda, tan bella y tan mía

Era momento de hacerla mujer, me dispuse despojarme del bóxer, salio mi miembro expulsado por la presión que ejercida en el la tela de la poca abrigadora prenda. Ella se puso de pie a mi petición, la levante y dispuse sus brazos entorno a mi cuello, sus piernas en mi cintura y miembro en donde debía, ella me dijo que la amara como jamás nadie lo haría, a eso me dispuse.

En dos estocadas me tope con el virgo, la mire tiernamente y la bese, de un solo embate entre en ella, me respondió con una mordida en mi labio inferior, ahogamos el grito. Mi faena de entrar y salir rítmicamente fue lenta, la cadencia aumentaba de poco, ella gemía.

"Duele cada vez menos, pero se que es así. Ámame mas… ahhh… dame lo que he querido siempre…" Lo haría a continuación. Aproveche mi contextura para aumentar la fuerza, la velocidad por igual. Gemía profundo, ahogaba sus gritos en mis besos.

Fuerte y rápido, más fuerte y más aun, así lo recuerdo, ella solo aguantaba, no entre plenamente en ella, no hasta ese momento. Después de sentir que tenía una explosión mas de placer, la deje caer boca arriba en la cama, me arrodillé frente a ella y de nuevo la penetre, con intensidad ella sonreía y me veía con cierto gusto.

Duro un tiempo corto, tenia ganas de penetrarla mas profundamente y ver su delicioso trasero, la puse boca abajo y con ojos de miedo dijo: "¡¡¡Por detrás no, dolerá mucho y no creo estar lista!!!" – Con poca importancia, por no ser mi intención, respondí – "No hay nada que temer cielo. No será así, solo quiero varia y desfrutar tu cuerpo plenamente".

La penetre ahora con menos delicadeza, quería tener mas el control, con fuerza la sometí y ella no me parecía le pareciera doloroso, tenia una gran capacidad. Seguí mi marcha a mil por hora, fuerte, tanto que la cama se estremecía y la penetraba mas profundo que antes. Tomándola de las caderas me dispuse a terminar, fuerte y con locura animal me corrí en ella, no me importo el hecho se no protegernos.

Gemí como loco, me vacié en ella, que tuvo un orgasmo mas al mismo tiempo, la bese en el cuello y me deje caer sobre la cama, sudados y cansados por mas de hora y media de amor, nos bañamos, la lleve a casa y desde ese tiempo frecuentamos mucho algunos cafés o restaurantes que nos sirven para hablar, para el amor teníamos mi casa

Dejen sus comentarios por favor, eso me ayuda a mejorar y saber que quieren leer… su amigo King