Jugando con Vani

Los jueguitos que jugaba con Vani

Jugando con Vani

Hacia dos meses que salía con Vanina, pero no había tenido sexo con ella. Solo algunos besos apasionados y algunos manos perdidas en su cola. Pero ese día nos habíamos quedado solos en la cocina de mi casa, mis padres hacia una hora que estaban durmiendo cuando comenzamos a besarnos. Nuestras lenguas comenzaron a entrelazarse y mis manos comenzaron a recorrer su cuerpo. Ella, cuando intente tocarle los pechos, me pidió que me tranquilizara. Yo hice como que no la escuche y seguí besándola. Nos apoyamos contra una de las paredes y comencé a frotar mi pene sobre su sexo mientras le acariciaba la cola, único lugar donde me dejaba tocar. Colé un dedo por encima del pantalón y comencé a tocarle la cola por debajo de la ropa. Ante mi asombro no le importo, mas aun cuando llegue a su ano. Le dije que quería sentirla mas y me senté en una silla y la hice sentar sobre mí de frente. Nuestros sexos se encontraron frotándose. A mí la ropa me aprisionaba y me acomode el pene para sentirla mejor. Mi mano accedió mejor a su culo. Mi dedo comenzó a juguetear con su ano y estaba por meterle un dedo. Ella me pidió que no lo metiera pero que si dejara el dedo allí. Sus movimientos sobre mi se tornaron mas acelerados, mientras no dejaba de besarme. Mi pija estaba a punto de estallar. Ella empezó a gemir y a hamacarse sobre mi sexo cada vez más rápido, yo apreté el dedo contra su ano y ella deja de besarme y coloco su cara cerca de mi oído y pego un pequeño grito anunciando su acabada, lo que me hizo acabar en ese instante.

Unos días después estábamos besándonos en la calle, mis manos comenzaron a bajar a su cola, y ella me pidió que me detuviera que estaba en la calle. En eso pasamos por un terreno baldío y la convencí de meternos allí. La apoye contra la pared y comencé a besarla y apoyarla. Mi mano bajo a su cola, pero como tenia falda le metí la mano por delante tocándole la concha. Ella intenta sacarme la mano que jugaba con su conchita por arriba de las medias y la bombacha. Ella me pidió que no fuera mas allá y yo le dije que la quería tocar y hacerla terminar con mi mano. Ella se dio vuelta. Yo acomode mi pija entre sus nalgas y le metí la mano en la concha. Luego de acariciarla sobre la bombacha metí dos dedos que acariciaron su concha lentamente hasta que encontré su clítoris. Con mis dedos índice y mayor comencé a acariciarlo mientras refregaba mi pija con sus nalgas cubiertas de sus medias y bombacha. Vani giro su cabeza para besarme mientras movía su cuerpo casi al compás del mío. Su sexo se humedecía mas y más mientras mis caricias iban en aumento. Yo no aguante mucho mas y termine dentro de mis pantalones mientras la apoyaba en las nalgas. Cuando ella comenzó a sentir que acababa, sus gemidos aumentaron y acaba ella también.

A los pocos días nos quedamos solos en mi casa, ya que mis padres fueron invitados a un casamiento. Convencí a Vanina para que estuviéramos solos en mi habitación. Y comenzamos a besarnos. Nuestros besos comenzaron a ser cada vez más fogosos. Yo me acosté en la cama y la hice acostar sobre mí. Ella comenzó a refregar su sexo contra mi pija, mientras yo le corría la pollera para tocarle la cola. En mi desenfreno también corrí la bombacha y le comencé a meter el dedo en el ano. El dedo entraba a salía rápidamente, al ritmo de que ella se movía sobre mí. Saco su pecho al aire y se los comencé a besar y a chupar. Subí su pollera y baje por completo su bombacha. Ella me quita los pantalones, pero me dejo los calzones y comenzó a refregar su conchita desnuda sobre mi pija cubierta con el calzón. Yo sentía toda su humedad y le chupaba con mas ganas los pechos y jugaba con el dedo en su ano metiéndolo y sacándolo. Ella grita fuertemente cuando acabo.

Me pregunto si yo había acabado, pero le dije que no. Le pedí si podía terminar entre sus nalgas desnudas con mi pija afuera. Primero se resistió pero después me dejo. Así que ella se coloca boca a bajo y yo me coloque sobre ella apoyándole mi pija desnuda sobre sus nalgas desnudas. Estaba muy caliente. Mis manos se fueron a las tetas que apreté y acaricie. Una de mis manos bajo a clítoris que acaricie con la punta de mi dedo índice. No aguante mucho y le acabe en la cola. Después de ello nos bañamos juntos. Era la primera vez que nos veíamos desnudos y nos excitamos, otra vez. Yo le lleve su mano a mi pija y le enseñe a pajearme. Ella comenzó a pajearme lentamente para luego ganar velocidad. Nos besábamos. Yo tocaba sus gomas con la punta de mis dedos lo que, según me decía ella, le hacia tener escalofríos. Desnudos volvimos a mi pieza y comenzamos a besarnos. Comencé a apoyar mi pene sobre su sexo, mis intensiones eran claras, quería ponérsela. Ella me pidió que no se la pusiera, se corrió de arriba mío y me empezó a pajear. Me dijo si en vez de meterla en la concha se la metía en el ano. La idea me excitó mucho.

Ella se coloca en cuatro patas y yo le metí un dedo ensalivado en el ano y luego dos, luego de un rato cuando salían y entraban con facilidad me pareció que era el momento. Me acomode para ponérsela en el ano y ella se tapa el orificio vaginal con la mano. Verla con el culo en pompa y con la mano tapándose su sexo me excitó. Le apoye la punta de mi pija en el ano y apreté despacio para adentro. Ella hizo un quejido. Le pregunte si le dolía, pero no contesto y tiro su cola para atrás como pidiendo que siguiera. Mi mano derecha fue a su clítoris y comencé a acariciarlo con la punta del dedo índice. Mi pene iba entrando lentamente en su ano. Lo sentía muy apretado y me gustaba. Ella comenzaba a gemir cada vez mas, y aunque yo no sabia que era que lo provocaba, si mi pija en su culo o mi mano en su sexo, seguí metiéndola cada vez mas adentro. Cuando entro toda comencé el movimiento de mete y saca, sin dejar de acariciar su conchita. Ella gemía cada vez mas fuerte y comenzó a gritar. Pero sus gritos lejos de ser de dolor eran de gran placer. Lo pude comprobar por la gran acabada que tuvo unos minutos después que mojaron mi mano y mi cama acompañada por un estruendoso grito. Las contracciones de su ano sobre mi pija, cuando estaba acabando ella, me hicieron acabar a mí casi inmediatamente.

Adrian