Jugando con Lucia y Sonia (III)

Esta vez desde el punto de vista de Lucia

Esta es la continuación de la historia de la playa desde el punto de vista de Lucia. Espero que os guste


Ese día habíamos ido a la playa muy temprano. Estábamos en una cala poco conocida, así que pese a que me da algo de morbo que me vean las tetas, casi nadie me las veía ya que Sonia y yo estábamos prácticamente solas. Lo bueno de esto es que Sonia se había animado y también estaba en topless.

Al rato de estar tranquilamente tomando el sol junto a Sonia levanto la vista y veo a una pareja bajando por el camino de acceso. Pronto los reconozco de nuestra ciudad, pese a que estamos lejos, que pequeño es el mundo. Son Paula y Pedro, una pareja que conozco del gimnasio. Con Paula coincido bastante.

  • Está bajando una amiga mía del gimnasio con su pareja – le comento a Sonia – te importa si les digo de sentarse con nosotros

  • ¡¡Uyy!! Vale, pero espera – dice Sonia mientras se vuelve a poner el bikini

En cuanto Sonia se pone el bikini me levanto para saludar a Paula, yo soy menos vergonzosa así que no me hizo falta ponerme el bikini. Saludo con 2 besos a los dos. Pedro se arrimó a mi más de lo aconsejable, clavándose su pecho desnudo contra el mío (se habían quitado ambos dos la camiseta). Ante la poca vergüenza de este hago lo mismo con Paula. No es lo mismo al llevar esta el bikini pero tiene unas tetazas que me encanta sentir.

Les presento a ambos a Sonia y decidimos colocarnos los 4 juntos. Tengo a Paula al lado mío así que puedo ir mirándola de vez en cuando. De hecho cuando se quita los shorts que lleva me percato de que lleva un tanga, aunque por desgracia no puedo verle bien el culo.

Estamos un buen rato hablando. Veo que a Pedro se le van los ojos de continuo a mis tetas, aunque por supuesto no digo nada. Al rato Paula y Pedro se van al agua, y tanto Sonia como yo podemos ver el culo de Paula con un tanga bastante pequeño mientras se van al agua.

  • No está nada mal tu amiga – me dice Sonia – una pena que no haga topless

  • No. Pero el tanga no deja nada a la imaginación. No tiene tu culo, eso si

Al rato de estar los dos en el agua vemos que Paula sale del agua. En cuando el agua deja de llegarle al cuello nos llevamos la sorpresa. No lleva el bikini, pudiendo disfrutar todo el camino hasta la toalla de sus tetas dando botes. Sonia y yo nos miramos con complicidad, y sobre todo no perdemos detalle de las tetas de Paula. Son un verdadero espectáculo

Paula se tumbó en su toalla. Para mi sorpresa a los dos minutos Sonia sin decir ni mu también se quedó en topless. Cuando Pedro volvió del agua Paula le pidió a este que le pusiera crema por la espalda. Por supuesto yo no me perdía detalle. Ver el culo de Paula lleno de crema y con el tanga que llevaba era una delicia. Me fije y Sonia también intentaba mirar, pero al estar más lejos le era más difícil.

Pronto Pedro volvió a la espalda. Parecía que le iba a dar un masaje pero pronto sus manos intentaban colarse por los laterales para tocar las tetas a Paula. Paula pronto le retiro las manos un par de veces. No pude más que reírme de la situación. Hasta que Paula le hecho la bronca.

Lucia: Déjalo que toque. Con tus tetas no me extraña que aproveche – le dije con toda la razón, estaba deseando tocarlas yo

Paula: Esta hecho un sobón. Y poco le importa que estemos en público

Lucia: Bueno, no pasa nada, que hay confianza

Paula: De todas formas con mis tetas, hablo la que no va bien servida

Lucia: No me puedo quejar – dije encantada de que Paula se hubiera fijado en mis tetas

Sonia: No os podéis quejar ninguna de las dos. Y yo con estas miniaturas

La conversación derivo en las tetas de cada una. Era la ocasión perfecta para fijarse en las tetas de Paula muy cerca mía y de Sonia. Está hablando de las tetas se las levanto un par de veces agarrándose con ambas manos, sin por supuesto yo perderla de vista. Mire en un par de ocasiones a Sonia. Esta se estaba poniendo algo roja, claramente la conversación le estaba encantando como a mi

Cuando me acuerdo de Pedro lo miro y se le nota que esta empalmado, aparte que veo que me está mirando claramente las tetas.

Lucia: ¡¡Uy, uy, uy!! Vamos a tener que dejar la conversación. Que uno que se me yo creo que esta empalmado

La conversación sigue sobre mis tetas, y casi sin darme cuenta acabo con Pedro tocándome las tetas. Hace mucho tiempo que un hombre no me toca las tetas, y la situación me pone algo cachonda. Miro a Paula a ver qué cara pone y no pierde ojo de mis tetas. Pronto Pedro sin que casi lo haya notado aparta las manos y se pone a tocar las de Paula para comparar.

Veo como las de Paula sí que las tocas con descaro. Verlas moverse bajo las manos de Pedro es una delicia. Echo un vistazo a Sonia y veo que tampoco pierde detalle. Pedro incluso pellizca un poco el pezón de Paula y se lo chupa un poco, dejándoselo duro.

Lucia: Bueno, ahora que has podido comparar. ¿Cuáles te parecen mejores?

Pedro: ¡¡Buff!! Cuesta decidirse. Es como elegir entre papa y mama. Las dos tenéis unas tetas perfectas

Paula: ¡¡Pero bueno!! ¿Para tanto son o qué?

Pedro: Pues imagínate. Algo más grande que las tuyas

Casi sin darme cuenta y esperármelo tengo a Paula acercando su mano a mi teta y pidiendo permiso. Miro a Sonia un momento y esta me hace un gesto que adelante. Le doy permiso a Paula y esta posa su mano en mi pecho mientras se toca su otro pecho como comparándolos. Al contrario que Pedro sí que aprieta un poco, pero de manera muy delicada.

No quiero ser menos, aparte que lo estoy deseando, y toco la teta de Paula. Acostumbrado a las tetas de Sonia que son más pequeña tocar la de Paula es una delicia. Aprieto un poco sobre su teta como ella hace con la mía. Después la agarro por debajo como sopesándola. Finalmente le paso el dedo por el contorno de la aureola alrededor del pezón, que todavía sigue duro.

Veo que Pedro no pierde el tiempo y le da besos por el cuello a Paula. Esta cierra los ojos y veo que se muerde el labio. Parece que la situación le está gustando.

Estuvimos un rato más hablando, y dándonos un chapuzón. Paula y Pedro nos invitaron a su chalet donde tenían una piscina, así que allí fuimos. Nos montamos en el coche para seguirlos.

  • Anda que te has puesto las botas – me dijo Sonia nada más montarme en el coche

  • No sabes como de cachonda estoy. Estoy deseando llegar al hotel

  • Y yo, pero primero vamos a comer. Que se está muy a gusto con estos dos

  • Me ha sorprendido que te pusieras en topless

  • Me ha dado mucho morbo ver a Paula y he dicho que narices. Me estaba poniendo cachondisima que me las viera mientras hablábamos con ella

  • Que sepas que Pedro no perdía detalle de tus tetas y las mías

  • Ya pero ya sabes que eso me importa menos. Que mire y que disfrute

  • Creo que hemos disfrutado las 3. A mí me ha dado mucho morbo verte con las tetas al aire delante de ellos

Llegamos al chalet. Paula nos abrió la puerta para que pasáramos. Cuando llegamos Pedro se había metido en la piscina. Paula se tumbó y se quedó en topless así que yo ni me lo pensé ni pedí permiso, me quede como ella. A Sonia le costó un poco más, pero finalmente en la hamaca también se quedó en topless. Nos pusimos todas a tomar el sol mientras Pedro seguía en la piscina.

Lucia: La verdad es que se está de cine. El chalet es pequeñito, pero para vosotros dos me imagino que de cine

Pedro: Si, la verdad es que si

Paula: Es una gozada tener una piscina totalmente privada para nosotros. De hecho, este se suele bañar en bolas. No sé porque hoy no

Pedro: Hombre. Que tenemos invitadas. Tampoco me parece de recibo

Lucia: Oye, que es vuestra casa. Vuestras costumbres, así que lo que quieras. ¿A que si Sonia?

Sonia: Si, claro, si es vuestra casa

Pedro: Bueno, pues os tomo la palabra – dijo quitándose el bañador y tirándolo fuera del agua - De todas formas, Paula, tú normalmente tampoco llevas nada para tomar el sol

Ni Sonia ni yo nos lo esperábamos pero de repente Paula se quitó la parte de abajo del bikini. Para mi desgracia Sonia estaba la más cercana a Paula esta vez, así que tumbada como estaba Paula no pude ver nada. Nos ofrecieron si queríamos quitarnos nosotras también los bañadores. A mí no me importaba pero sabía que a Sonia estas situaciones no le gustan así que decline la oferta.

Al rato Pedro salió de la piscina para ir a preparar un picoteo. Cuando salió iba empalmadisimo. Sin estar nada mal no era un pollon. Aparte hacía años que no veía una polla en vivo empalmada. Al ir andando deprisa hacia la piscina la polla se iba moviendo de lado a lado

Las 3 no pudimos más que reírnos mientras Pedro entraba al chalet

Sonia: No veas como va de motivado el niño – dijo cuándo Pedro ya estaba dentro

Paula: Lleva toda las vacaciones así, ya si le añades teneros todo el día en tetas a las dos…

Pedro de repente le llamo a Paula para que le ayudara y Paula se levantó entrando al chalet. Por fin pude verle bastante bien el pubis. Lo llevaba totalmente depilado y algo hinchado, al final también iba a estar cachonda como estaba yo

En cuando Paula entro al chalet veo que Sonia se levanta y me da un par de besos. Aprovecha y me toca las tetas como sabe que me encanta.

  • ¿Qué tal estas? – le pregunto. Sé que no es tan exhibicionista como yo y puede que este incomoda

  • Uff. Le he pillado a Pedro bastantes veces mirándome las tetas. Como estabais las dos igual no era tan consciente de ello. Pero estoy muy a gusto. Hacia muchísimo además que no veía una polla empalmada

Nos sentamos a comer. La comida transcurrió entre vino de manera muy agradable. Pronto nos acabamos la primera botella y Pedro tuvo que entrar a casa a por otra botella. Me sorprendió que la polla de Pedro seguía igual de duro que cuando había salido de la piscina.

La comida transcurre entre conversaciones picantes. Bastante rato veo la mano de Pedro por debajo de la mesa en dirección a Paula. No sé hasta dónde estará llegando pero sin duda la tiene encima de ella.

En un momento dado Paula tira sin querer una copa de vino al regazo de Sonia. Para mi sorpresa Sonia sin levantarse de la mesa se quita la braga del bikini y lo tira a la piscina. Pedro me vacila un poco a ver si yo también me lo quito. Me siento ridícula siendo yo la única con algo de ropa. Al contrario que Sonia yo si me levanto para quitármelo, de manera que me pueden ver el pubis. Dejo el bikini encima de la mesa, el cual lo noto calado al quitármelo, y me siento. En el proceso Pedro no ha perdido detalle

Con el juego Pedro se levanta de la mesa mostrándonos una polla durísima, diría que más que antes. Se tira al agua con la excusa del calor y las 3 le seguimos al agua. Paula enseguida va donde Pedro y se besan. Pedro no pierde tiempo. No podemos ver sus manos pero por la cara de Paula le está tocando abajo.

Estoy deseando como ellos ponerme a jugar con Sonia, pero no sé si ella quiere delante de ellos ni saben ellos que somos pareja. Eso sí, por lo desinhibida que veo a Sonia sé que un poco va a querer jugar con ellos. Le hago un gesto y ambas nos subimos al bordillo mostrando las tetas y reclamando la atención de Pedro.

Pedro se separa del agua y se sube al bordillo contrario al que estamos. Ya no se corta y se hace lentamente una paja mirándonos a Sonia y a mí. Se agarra la polla con toda la mano y la mueve arriba y abajo, dejando solo el capullo por fuera de la mano. Por supuesto no pierdo detalle. Hace mucho que no veo algo asi

Miro a Sonia y esta rojísima, parece que la situación le está gustando. Paula viene con nosotras y se pone en la misma posición al lado de Sonia.

Yo estoy deseando volver a tocar las tetas a Paula, así que aprovecho y me pongo entre Sonia y Paula, y alargo las manos tocándole una teta a cada una

Lucia: Cuéntanos, qué harías ahora mismo con estas dos – le pregunto a Pedro provocándole

Pedro: ¡¡Buff!! A Sonia le mordería ese pezón hasta ponérselo más durito de lo que ya está. Con Paula, algo que me encanta hacer. Pondría mi polla entre esas dos tetas. ¿Y con las tuyas? Que quieres que haga

Veo que Paula está tocando la pierna de Sonia. Decido darle la oportunidad con ella para que se divierta, así que me decido a provocar a Pedro

Lucia: Creo que deberíamos continuar lo de la playa y que las toques. En la playa has sido muy rápido y casi no me las has tocado

Sonia: La que no he tenido oportunidad de tocar ninguna teta he sido yo – dice mientras empieza a tocárselas a Paula – a ver si son para tanto

Pedro viene donde estoy yo. Se sitúa detrás de mí y esta vez me toca las dos tetas a conciencia. Me pellizca un pezón con bastante delicadeza. Aunque me gusta más como me las toca Sonia de verdad sabe lo que se hace y me está poniendo cardiaca. Además siento su polla caliente rozando su culo.

Miro de frente a Paula y Sonia. Mientras Sonia le toca las tetas a esta la mano de Paula esta sobre Sonia. No sé qué le estará haciendo pero la cara de placer de Sonia le delata que se lo está pasando bien.

Lucia: ¿Que te parecen las tetas de Paula? – le pregunto a Sonia

Sonia: Teníais razón que son estupendas. Son un poco más pequeñas que las tuyas, pero más firmes

Pedro: Es que se las vas tocando de normal como para poder saber quién las tiene más firmes o que

Ahí miro fijamente a Sonia y es cuando nos damos cuenta de la situación. Nos hemos dejado llevar y ni Pedro ni Paula saben que somos pareja. Nos miramos con complicidad y es Sonia la que responde.

Sonia: Si claro, todos los días