Juegos del destino. CAP. 3 CELOS.
Si el destino decide jugar contigo... ¿Qué harías? Amor, desamor, amigas, diversión, sexo, romances, historias... JUEGOS DEL DESTINO. - CAP. 3 MI ANGEL, SALIDA DEL ARMARIO Y CELOS.
No tardé mas de cinco minutos en llegar. Pagué y me bajé del taxi. Miré a mi alrededor y me di cuenta de que en la acera de enfrente había un pub gay.
-¿Tienes dudas amor? – Me preguntó una chica. La miré corriendo. Era muy guapa, mas alta que yo se acercó a mi y me besó.
Un beso dulce, tierno, que se tornó a ardiente y fogoso.
-Veo que si, ¿Un trago?
Entramos al pub. Pedimos unas copas… No recordé nada más hasta la mañana siguiente cuando amanecí en una cama que no era la mía.
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Abrí los ojos lentamente, esa no era mi habitación, esa no era mi cama… ¿Cómo había llegado hasta ahí? Me moví un poco y noté que estaba desnuda y que alguien me abrazaba por detrás. Intenté hacer memoria, una chica, una chica me invitó a beber, a bailar, luego a llevarme a casa, pero me trajo a la suya… Era la misma chica. Yo no quería que cogiera el coche, había bebido, pero no me hizo caso, yo estaba peor.
Noté como ella me soltó bruscamente. “Seguro que ha tenido la misma sensación que yo al despertar” pensé. No recordaba su nombre. Ni siquiera que había pasado esa noche, pero al parecer me había acostado con ella, sonreí a nadie acababa de acostarme con una chica muy guapa. Fue entonces cuando duras imágenes rompieron mi felicidad Natalia, Víctor, la noche anterior, todo lo que ocurrió y lo que pudo suceder entre ellos después. No aguanté mas y estaba agobiándome, me faltaba el aire, tenía que incorporarme, y eso hice, al parecer demasiado rápido, puesto que asusté a mi acompañante, aunque mas bien yo era la suya.
-Eh… Hola… - Me dijo. - ¿Estas bien? – Preguntó tímidamente.
Asentí y me llevé las manos a la cara. Ella acercó su mano a mi espalda y dudó si acariciar o no. Lo hizo, y me estremecí miles de sensaciones recorrieron mi cuerpo, miles de sensaciones sentidas la noche anterior con ella. Esa suavidad, ternura, había sido maravilloso, cerré los ojos y sonreí nuevamente, mi respiración volvía a ser normal, quitó su mano, fui a mirarla y nuevamente Natalia, no quería pensarlo. Mi respiración volvió a agitarse, ella se incorporó y me miró a la cara, me la agarró con sus dos manos y me besó suavemente los labios. Perdia el control de mi cuerpo y mi mente, me quedé sin fuerzas, me quitó todas mis preocupaciones, mis miedos y me dio paz y tranquilidad con un solo beso.
-No sé que te pasará pero sea lo que sea seguro que tiene solución. ¿No? – Me miró. – A no ser… Que tengas novia… ¿Tienes novia? – Preguntó alarmada.
-¿Qué? ¿Novia? No...
-¿Novio? – Se alejó de mí.
-No, tampoco, no tengo nada. – Respondí, ella suspiró aliviada y se volvió a recostar en la cama.
Era un angel, enredado entre aquellas sábanas blancas, seguramente dispuesta a mi si se lo pedía o simplemente si le hacía un gesto, parecía mucho más tímida que la noche anterior, iba muy bebida, íbamos muy bebidas, era preciosa, no conseguía quitarme esa frase de la cabeza “Es preciosa” resonaba y resonaba… Era muy blanca de piel, su negra y larga cabellera resaltaba entre las sabanas, aunque sus verdes ojos esmeralda resaltaban mas aún. Me perdía en ellos. Sin darme cuenta entre pensamiento y pensamiento mientras la miraba mi boca dibujó una tonta y tierna sonrisa.
-¿Por qué sonríes? – Me preguntó.
-Posiblemente por encontrarme en la cama contigo. No recuerdo bien… ¿Cómo te llamas?
-Oh… No te lo diré. – Dijo sonriendo. – Tienes que acordarte.
Me recosté a su lado y comenzó a acariciarme la mejilla con su mano, algo se removió en mi interior, cerré los ojos, me besó.
-¿De verdad nunca lo habías echo con una chica? – No me esperaba esa pregunta.
-¿Qué? – Pregunté incrédula.
-Anoche me dijiste que nunca lo habías echo, ¿Con una chica no? ¿O en general?
Mi cara se puso roja, deseaba que la tierra me tragase.
-Es… Mi primera vez… - Confesé apartándole la mirada.
-Lo siento… - Me dijo y desvaneció la sonrisa de su rostro para dar paso a una cara triste.
-¿Por qué?
- Tu primera vez y borracha… Estabas muy borracha… No dejabas de hablarme de…
Sabía que iba a decir su nombre, no podía no quería escucharlo, la callé con un beso.
-Me acuerdo… De todo… Solo que no de tu nombre… Del bar recuerdo muy poco, pero de aquí, de la cama… Todo… - Mentí para que no se sintiera mal, en realidad recordaba muy poco.
-No te lo diré, y ahora te voy a llevar a tu casa con los ojos vendados, si el destino de verdad quiere que nos conozcamos, volverá a juntarnos. – Explicó.
-No hagas eso. – Le pedí.
Más lo hizo, me vendó los ojos y me hizo vestirme para luego montarme en su coche y que yo le diera la dirección. No me dejó quitarme la venda hasta que no llegamos a la puerta de mi piso.
-¿Estas segura de que quieres desaparecer? – Le pregunté decepcionada.
-Si, el destino volverá a acercarnos. – Me dijo, besó mis labios con ternura dejando entrar su lengua en contacto con la mía y se separó. – Baja del coche y sube a tu casa, nos vemos preciosa.
Me bajé y se fue, mi ángel acababa de dejarme sola en este infierno. Miré el reloj 12:30PM poco más de media mañana. Entré en el piso y llamé el ascensor. Subí al mío y con cuidado me dispuse a abrir la puerta, supuse que Sonia y Dani estaban dormidos.
-¿Quién es? – Escuché decir a Iker mientras salía de la cocina. – Dios mío Rach. – Añadió al verme y me elevó del suelo en un abrazo. – Creíamos que te había pasado algo, ¿Dónde has estado cariño? - Me preguntó.
-Calma, suéltame – Suplicaba. – He… He conocido a alguien Iker, suéltame.
-¿A quién? - Preguntó Bea.
-¿Qué hacéis aquí? - Pregunté extrañada.
-Hemos dormido muy poco y a turnos… Te estábamos buscando, estábamos preocupados… Te fuiste muy borracha sin móvil. – Explicó Iker.
-¿Quién e… - Preguntó Sonia la cual dejó la pregunta al verme, Natalia salió junto a ella, me miró y suspiró.
Llevaban vasos con café.
-Creo que eso ya no hará falta. – Le dijo Dani a Sonia y Natalia.
Opté por entrar y sentarme en el sofá. Estaba cansada. Todo era muy confuso. No conseguía recordar el nombre de mi ángel. Cuando de pronto Natalia entró en la habitación y recordé todo lo que pasó la noche anterior sobre ese mismo sofá que estaba yo sentada, me llevé una mano a la cara y resoplé.
-Víctor, cariño, que ha aparecido, si, no sé, pero está bien, quizás un poco resacosa, ¿A qué hora sales? Vale, hasta después, te quiero. – Fue la conversación telefónica que mantuvo Natalia con Víctor, al parecer trabajaba… Pero ¿Un domingo? ¿Cual sería su trabajo?
-Ahora cuéntanos, ¿Qué ha pasado? ¿Dónde has estado? Fuimos a party’s club y no estabas. – Me regañó Sonia, la cual se sentó a mi lado.
Bea se sentó al otro extremo del sofá, Dani se fue a la ducha, Iker se sentó a mi otro lado y Natalia en el sillón, al parecer quería guardar distancias.
Me costaba hablar con ella delante.
-Cogí un taxi y me fui a party’s club. – Expliqué.
-No estabas allí cariño. – Insistió Iker.
-Ya, eh… Una chica me besó allí, me invitó a bailar, a unas copas y luego a su casa. – No me acuerdo bien de nada… Hasta llegar a su casa. No recuerdo ni su nombre.
-¿Una chica? - Preguntó Sonia. – Hay dios… ¿Qué has hecho Rach?
-Seguramente nada de lo que se arrepienta. – Rió Bea.
-Pues… - Fui a responder.
-Espera… - Me paró Iker. – ¿Me estas diciendo que te fuiste, conociste a una que no recuerdas ni el nombre y que te acostaste con ella borracha? – Asentí. - Y… ¿Cómo te sientes?
-Bien. – Respondí.
-¿Cómo bien? ¿Te gustó? – Me preguntó Sonia alterándose.
-No… Bueno, sí. – Respondí asustada por su reacción.
-¿Qué pasa no puede gustarle una chica? Lo confieso, a mi me gustan los chicos. – Dijo Iker.
-Lo tuyo era obvio. – Aclaró Sonia. – No es que no pueda, si no… Es raro…
-Sonia… - Le dijo Bea. – Lo de ella también se veía de lejos.
-¿Qué? – Pregunté. – A mi no se me notaba nada.
-Anda que no, y anoche tampoco se nos notaba a ninguna ¿Verdad? - Dijo mirando a Sonia.
-Espera… Mi cabeza esta procesando… - Decía Iker poniéndose de pie. – ¿Vosotras?
-No, lo mío fue solo de una noche no pasó nada más… - Confesó Sonia.
-Venga ya, que si alguna se hubiera dejado te lo hubieras montado, confiésalo venga. – Insistió Bea. – Yo lo admito, sí me lo hubiera montado.
-Pero… - Intenté decir.
-Tu porque calientas a todo lo que se te acerca… - Le dijo Sonia.
-¡Eh! ¡Ya! ¡Parad! – Las paró Iker. – Oh my god… Valla día.
-Me voy a la cama. – Dije.
-No, espera aquí no se termina todo… - me paró Sonia. - ¿Qué ha pasado con ella?
-Nada, no me dijo su nombre, no me dio su teléfono, me puso una venda para traerme a casa…
-¿Una venda? – Preguntaron al unísono.
Pude notar como Natalia se incorporó un poco para escuchar mejor la conversación.
-Si, para que no viese donde vivía. – Expliqué.
-No quiere volver a verte. – Le dijo Bea.
-Alguna explicación tiene que tener, ¿No? – Preguntó Iker.
-Sí, que es un ángel y que ha vuelto al cielo… - Dije sonriendo tontamente.
-Por dios… - Refunfuñó Sonia. Bea le dio un codazo. – ¿No te explicó nada?
-Me dijo que el destino volvería a juntarnos.
-¿Y si no lo hace? – Preguntó Iker.
-Confío en ella. Lo hará. – Dije. – Ahora me voy a la cama que estoy cansada.
-Tienes invitada en tu habitación. – Confesó Sonia. – Aunque quizás prefiera coger un taxi e irse a casa.
-Opino que debería descansar antes. – Añadió Iker.
-Descansaré un poco. – Contestó Natalia.
-Oh… Yo… Estoy… Estaré… - Comencé a decir caminando y me choqué con Dani. – Voy a la ducha.
Y eso hice, me metí en la ducha lo que creí ser el tiempo suficiente para que ella se durmiese.
Salí me puse el pijama y me metí en la cama sin hacer ruido.
-¿Por qué? – Me preguntó en un susurro.
“Mierda” pensé. Aunque, ¿Me estaba pidiendo explicaciones? Quizás sentía algo por mi… No, imposible.
-¿Por qué Rach? – Volvió a preguntarme, esta vez se dio la vuelta para mirarme, yo estaba mirando hacia el otro lado.
-Porqué… ¿Qué?
-¿Por qué te acostaste con ella y conmigo no?
¿De verdad me estaba preguntando eso? No podía ser, ahora no.
-Estábamos borrachas.
-Seguramente vosotras también lo estabais.
-Tienes novio Natalia, acuéstate con él y déjame a mi tranquila. – Terminé de decir.
-Vale… - Dijo enfadada a la vez que se levantaba de la cama. – No volverás a verme.
-¿Dónde vas?
-¿Acaso te importa?
-No, solo que no quiero que hagas tonterías. – Confesé.
-¿Piensas que puedo hacer alguna tontería porque no te quisiste acostar conmigo? Venga ya. – Terminó de decir y se fue a abrir la puerta de la habitación.
Me levanté de un salto y me puse a su lado, la agarré por la cintura y eché mi cabeza en su hombro.
-Suéltame – Me dijo.
-No.
-Vete con tu ángel. – Terminó de decir agarrando mis manos y soltándolas de su cintura bruscamente, para acabar saliendo por la puerta.
Estaba celosa… No comprendía nada. Intenté salir tras ella más ya no estaba.
-Se ha ido, y bastante enfadada. ¿Qué le has hecho? – Preguntó Iker mientras se sentaba en el sofá dejándome hueco para sentarme.
Me senté a su lado y eché mi cabeza en su hombro.
-¿Por qué os fuisteis todos anoche de aquí? – Era una duda que llevaba un buen rato rondando mi cabeza.
-Víctor fue al servicio, lo encerré, creí que necesitabais intimidad. Sonia y Dani se fueron a la habitación.
La semana pasó tranquila, todos los días la rutina habitual, me levantaba, me duchaba, Sonia preparaba el desayuno, desayunábamos juntas, la acercaba a la facultad de derecho e iba a trabajar a una pequeña teteria que había cerca de su facultad. Salíamos a la misma hora y volvíamos, ella hacia sus labores y yo solía sentarme con el ordenador a escuchar música, leer o escribir más no conseguía sacarme de la cabeza a Natalia y a mi ángel, no conseguía olvidar todo lo que ocurrió en esas veinticuatro horas. Al fin llegó el viernes, Iker, Bea y Dani vinieron a casa.
-Entonces, ¿Qué hacemos? – Preguntó Dani. – Iker, ¿No quedamos en que saldríamos?
-Si, salgamos. – Dijo Iker mientras se reboleaba en el sofá.
-La verdad, yo no tengo muchas ganas de ir a ningún lado… - Les dije.
-Quizás encuentres a tu ángel… - Me dijo Iker mientras tiraba de mi para que me sentara a su lado.
Deseaba encontrarla, volver a verla, saber su nombre, volver a besarla, poder contemplar su sonrisa, deseaba volver a pasar otra noche como aquella.
-Esta bien… - Accedí, no debí hacerlo.
Fui corriendo a mi cuarto y me puse guapa, me maquillé, me peiné y salimos a cenar, luego fuimos a party’s club en taxi ya que todos pensábamos beber.
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Pues aqui tenéis la continuación :D espero que os guste como sigue, como he tenido varios comentarios os ire respondiendo :D
La verdad, estas en lo cierto, los pequeños detalles marcan, y efectivamente, se me olvidó vestirla jajajaja muchisimas gracias por tu excelente sabiendo que saqué a una mujer a la calle sin ropa... jajajaja tendré en cuenta darle mas de un repaso al subirlo. Gracias por tu comentario :D Besos!
Me alegra que te este gustando esta historia :D Besos!
**chemary (ID: 1372664)****
Gracias, me alegro que te guste, espero que te gustase este capítulo tambien. Besos!
Te gustó este capitulo? Espero que sí y que te consiga atrapar del todo esta historia, besos!
Jajajajajaja yo tambien quiero jugar! Espera un tiempo y cuando estes borracha con tus amigas lo propones!! jajajajaja así despues todas las culpas van para el alcohol jajajaja me alegra mucho que te guste como la historia y como escribo, aqui tienes la continuación, te ha gustado? besos!
Tan pronto como he podido! :D Te ha gustado la continuación?Espero que si, besos!
*YourNightmareMe (ID: 1417144)*
Aquí la tienes, tu y yo nos conocemos, verdad?
Pues ya estan contestados :D espero nuevos comentarios y valoraciones, me gusta saber vuestra opinion respecto a la historia y que lo comentemos, me motiva mucho leer todos vuestros comentarios me anima muchisimo a seguir escribiendo :D espero que lo acojais bien y que os guste, en el próximo capitulo Rach se acostará con alguien... ¿Con quien será? Espero que hayais disfrutado de este capitulo. Saludos a todos!!