Juego Mortal 17

Fabuloso, una semana sin tener que ver a Mónica

Fabuloso, una semana sin tener que ver a Mónica. Con que no se le ocurra venir, todo está bien, por eso eh decidido ir más temprano al gym, no tardo nada en ponerme el pants y desayunar algo. En menos de 10 minutos estaba  afuera de mi casa, cuando iba en la esquina, vi a una chica, que se me hizo muy conocida,  le di un zoom a mi vista, llevándome una agradable sorpresa, que otra chica podía ser, si no,  Melissa, me quede tontamente viéndola, sacudiendo inmediatamente la cabeza en negativo, no salgo  de una cuando ya quiero otra, mejor tomo otra ruta, doy media vuelta, comienzo a caminar lentamente, sería una tontería correr.

-Ale… Ale…-como pudo verme, volví a girar 180 grados, ella se va acercando,  dándome tiempo de observarla de sur a norte, sería una mentira decir, que me es indiferente, la verdad, es divina, su cabello castaño que le llega más abajo del hombro,  su piel tersa, esos labios color  cereza, es una ninfa, su cuerpo es perfecto, todo está en proporción en ella, su mirada están cautivadora, podría mirarla hasta el ocaso de mi vida, y esa sonrisa tan hermosa, no sé qué me pasa cuando la veo, me provoca tantas confusiones,  hasta el punto de olvidarme de Irinia, no lo mejor es enterrar esto que lucha por salir, bajo la mirada, el solo verla  me altera.

-Hola-dice alegremente

-Hola- mi tono es totalmente neutro, desvió un poco la mirada, si no estaré más hechizada por ella

-¿No me vas  a saludar?- esa pregunta me desconcierta, no se supone que es lo que estamos haciendo, de seguro tengo una mueca que demuestra mi incógnita, ella estira su mano, ah ya entendí, que rara es, le sigo la corriente,  hasta el contacto de nuestras manos es  tormentoso, a la vez que es tan agradable, sorpresivamente acerca su rostro, desconcertándome, estoy tan cerca de sus labios, paso saliva,  para mi suerte solo me dio un beso en la mejilla, ya me estaba preocupando, por un momento creí que me iba besar, supongo que son ideas mías

-ahh… ¿vas al gym?- es lo único que atino a decir, su mirada me pone demasiado nerviosa, esa sonrisa angelical,  me deja sin aire

-sí, y ¿tú también?- solo asiento, ella ensancha más su sonrisa-así que nos podemos ir juntas

-supongo- así o más animada

Empezamos a caminar, por mi parte no tengo ningún interés en hacer platica,  entre menos sepa de ella mejor, no me molesta ir con ella, al contrario es agradable estar con ella, me cae bien en el tiempo que la eh tratado, que ha sido poco, además como eh dicho no soy muy parlanchina al principio, primero me gusta conocer a las personas observando sus comportamientos y viendo sus gustos, midiendo su temperamento, entre otras cosas. Hasta su respiración está completamente sincronizada con la mía, el aura que desprende, es  pura felicidad y paz, que a mí me faltan, no la veo mucho de reojo, no quiero que piense otra cosa, la tratare como a una amiga, lo raro es que no me ah hecho ningún comentario, de mi frustrado intento de espiarla jaja, que pena si me dice algo, también veo que es de mente abierta, me vio besándome con Mónica y aun así me está hablando.

-¿Cuántos años tienes?

-ehh…- su pregunta me despierta de mi propio mundo-19… ¿y tú?-me tomo por sorpresa, hasta me olvide de mi edad

-18- bueno por lo menos sé que es mayor de edad, así ya no me meten a la cárcel jaja, veo en su cara que quiere conocerme más, pero no se anima a preguntar

-¿quieres preguntarme algo más?-siempre eh sido directa

-jaja… tan obvia soy-contesta ladeando su rostro con un toque sumamente tierno

-yo diría que más que eso-bromeo un poco

-bueno ya que tengo tu permiso…

-no recuerdo haber dicho eso, te pregunte si querías hacer otra pregunta, no que te daba permiso-si nunca se me va quitar lo mala onda, ella me mira haciendo un puchero

-ahh, perdón, no creí que te molestaras- dice tristemente

-jajaja, es broma, pregunta lo que quieras- es medio sentida, ella levanta la cabeza para ver si no la estoy cotorreando. No sé en qué momento mi mano se posa en su hombro, dándole palmaditas, es una costumbre en mi, en señal de amistad, cuando me doy cuenta la quito rápidamente, si cuando  quiero soy bien confianzas, ella se alegra por el gesto.

-Ok, ¿tienes hermanos?

-uno-

-¿Qué tipo de música escuchas?- esto parece chismografo, mejor preguntas leves a que me vaya a preguntar de mis relaciones amorosas

-electrónica, algo de grupos japoneses, instrumental, metal melody y música clásica- si un poco raros mis gustos

-¿Qué tipo de música japonesa?

-emmm… me gusta la que es como relajante y algunos grupos que tocas los openings o endings de algunos animes

-enserio te gusta el anime-con cara de sorpresa

-Por supuesto, si soy casi otaku- bueno no tanto pero siempre me doy mis aires, si no quien

-yo también, es raro encontrar personas que les guste el anime, ya que muchos creen que es para niños-tiene razón, algunas personas me tiran de aloca, cuando digo que me gusta el anime, o me ven raro

-si lo sé, es una pena que no sepan de lo que se pierden, no solamente son dibujos,  es algo más complejo, en algunos casos son tan  buenos que te llegan a hacer llorar o a ver la vida de otro modo, te demuestran la realidad y te hacen imaginar- cuando hablamos de mis temas favoritos, explayo demás

-que padre que pienses así, a mi también me encanta, es fascinante

-¿Cuál es tu anime favorito?

-evangelion

  • wouu, también es uno de mis preferidos junto con death note, code geass, gantz y kannazu…-me paró en seco como le voy a decir kannazuki no miko, una cosa es que me viera besando a una chica y otra que confirme mis gustos, mejor dejo ese tema en otro lado- ahh… y bleach

-super, yo también ya casi vi todos esos- a simple vista, nunca me imaginaria  que a una chica como ella le guste el anime, que grata sorpresa

-¿Qué genero te gusta más?-chequemos que gustos tiene

-Me gusta, el seinen, el gore y algo de mechas- jaja vaya quien lo iba a pensar

Lastima ya que me había gustado hablar con ella, llegamos al gym, todo lo bueno tiene que acabar.

-Bueno, nos vemos después- comento mientras me dirijo a la zona de cardio

-Espera… ¿a qué hora terminas?

-ahh, como en hora y media, ¿por?

-para que nos fuéramos juntas-alto ahí, escuche bien, una voz en mi cabeza me dice dile que no, no entiendo porque se quiere ir conmigo, si ya sé que soy irresistible, jaja que narcisista me oí, tengo un debate entre ir y no…

-como quieras

-bueno nos vemos en las regaderas- ¡what!, tan rápido, ah de ver visto mi cara roja que no tardo en completar la frase

-en los asientos que están afuera

-ok-es lo único que mi ardilla cerebral pudo decir, ella se despide con una sonrisa, que ya se me está haciendo muy común, no me quiero acostumbrarme a ella

Alejo a Mónica y termino con algo más  peligroso,  esa cara angelical,  puede  lograr muchas cosas en mí, es como un veneno lento que te va intoxicando lentamente, y sé que al final me podría lastimar, si no tomo precauciones, no quiero vivir lo mismo otra vez, el hecho de que Melissa no sea homofóbica,  no me da oportunidad con ella, que tal si tiene novio, debo poner una barrera. Antes de pasar a los aparatos, caliento un poco, estiro los músculos, durante 15 minutos.

Al pasar a la corredora, mi debate continua, además es mi vecina, de por sí ya me arriesgué mucho con Mónica, seria jugar con fuego, sobretodo necesito un tiempo para pensar y aclarar mis sentimientos y sanar algunas heridas del amor, es lo mejor solo amistad, el hecho de que Melissa sea cariñosa y risueña, no quiere decir que quiera  conmigo, tengo claro que esa es su personalidad, no debo confundir sus acciones, solo una amiga, no debe importarme que parezca una obra de arte, jaja solo ver no tocar.

Después de una hora y media de matarme de sudor, jaja que también ver a las demás chicas cuesta trabajo, cuidarte de que no te vean, estirar el cuello para obtener el mejor ángulo de vista,  también necesito distraerme, además el ver no hace daño ni cuesta, sirve y no pienso ni en Irinia ni en Melissa, mejor solo amores platónicos. Me dirijo al piso de arriba para tomar una ducha, al pasar por el salón de aerobics, logro ver a Melissa, que se ve sumamente tentadora, como si fuera la manzana prohibida, eso debe ser,  sacudo mi cabeza y retomo el camino a las duchas, que me hará bien, el agua fría me bajara mis lindos pensamientos. Me saco rápido la ropa, y entro al primer cubículo libre, donde pongo solo el agua fría, que no se siente mucho porque hace bastante calor, bueno en mi caso, creo jaja, solo me tomo 20 minutos, siempre un baño me despeja, ahora a esperar a Melissa, al abrir la puerta de las duchas, me topo con ella.

-¿Tan rápido ya acabaste?

-Si, a menos que sea un holograma-es que deberás por que las personas hacen preguntas tan inteligentes, entre menos consideraciones le tenga, más la veré como otra amiga

  • Alex, que sentido del humor

-te tendrás que acostumbrar

-posiblemente-ah con que también sabe jugar, yo solo le hago una mueca  de picardía

-ahh… mira que eres mala onda

-mira quien lo dice- tan rápido ya me agarro la onda

-está bien-lo digo como si no tuviera importancia-yo que te aprecio-ella solo entrecierra los ojos

-así que aparte de sarcástica, también eres medio dramática

-¿yo?, como crees

-jaja… solo espera un rato, no tardo- me dio el avión

-claro, mi lady- siempre se me sale el coqueteo

-eso espero-vaya, no es tan malo, haberla conocido

Dicho y hecho, la señorita no se tardo nada, mira que no es un sacrificio esperarla, mientras veo el salón de aerobics.

-Lista, vámonos- bajamos las escaleras, y salimos del edificio, obvio me fije que no estuviera Mónica

-¿a quién buscas?-ah se me paso, que tengo compañía

-ahhhhhhhhhhh…-parece que estoy meditando, o haciendo mantra- nadie-por su cara sé que no me creyó

-¿tienes algo que hacer ahorita?

-no

-¿te gustaría ver una película en mi casa?

-claro no hay problema- si la voy a tratar como una amiga, no tiene nada de malo ver una película, eso hacen los amigos, después de mi aceptación, no hablamos nada hasta llegar a su casa, no fue un silencio incomodo, es como si no necesitáramos las palabras, solo el estar cerca, es como si ya nos conociéramos.