Juego de adolescentes
Jairo era un joven agricultor que deseaba a una joven amiga de su familia. Tras algunas vicisitudes con ocasión de enseñarle unos nidos de pájaros, se alejan a una finca cercana y allí consuman por primera vez su encuentro sexual.
Jairo era un joven que había nacido en una familia humilde de agricultores, y que por entusiasmo y tesón del muchacho, a través de becas y ayudas oficiales comenzó a estudiar siendo bastante joven, encontrándose en la época que ocurrieron los hechos que voy a relatar, en su mayoría de edad, cursando estudios de derecho. Para la familia era algo maravilloso, toda vez que en el pueblo donde residían y tenían las fincas, era poco común que una familia tuviera hijos estudiando en la universidad. Eran siete hermanos, siendo el segundo de la familia, lo que suponía que tenía que compatibilizar sus estudios con ayudas a sus padres en las tareas del campo.
La familia tenía en arrendamiento unas fincas muy cerca de su casa, donde sembraban varios cultivos, entre ellos, maíz, papas, viña, etc. Jairo, conocía perfectamente todas las formas del cultivo y era bastante amañado, lo que llevaba que sus padres estuvieran muy contentos con el mismo. Sin embargo, pese a su edad todos lo conocían como un joven algo tímido, especialmente en el trato con sus amigas, y, no se le conocía novia. La realidad es que por aquella época, dado los escasos recursos económicos que la familia disponía, el joven tenía poco dinero para poder invitar a cualquier joven a salir con él. Sin embargo, estaba bien considerado dada su educación y su trato amable con la gente. Por otro lado, era un joven bastante apuesto, 1.75, pelo medio rubio y ojos algo azulados, y que debido al ejercicio físico que realiza en el campo se mantenía en muy buena forma física.
Cuando le preguntaban por alguna novia, el siempre les comentaba que ahora no había tiempo para ello, que su principal preocupación era sacar adelante sus estudios. No obstante ello, Jairo desde que adquirió la pubertad, era un chico bastante activo sexualmente, aunque descargaba su adrenalina con la práctica masturbatoria, siendo un ávido consumidor de revistas porno, que por aquel tiempo eran difíciles de conseguir, ya que tampoco existía internet. Todo esto lo realizaba con tal cautela, que ni su propia madre se había percatado de la actividad efervescente del hijo.
Cuando se llevaba a cabo la cosecha de la uva, papas etc, la costumbre del lugar era que varios amigos le ayudaran en dichas tareas. De esta forma, los padres tomaron amistad con una familia algo lejana del pueblo, pero que pronto se hizo tan estrecha la relación, que venían con frecuencia por la casa de sus padres y estos ayudaban en las tareas agrícolas. Esa familia, tenía tres hijas, una de ellas llamada Katy, la mayor, y las otras de menor edad que ésta. Evidentemente durante los primeros años en que ambas familias tomaron amistad, las hijas de esta familia visitaban también la casa y finca de los padres de Jairo.
Desde los primeros momentos, aún siendo adolescente Jairo, se sintió atraído por Katy, aunque nunca le manifestó nada. Al contrario intentaba evitar cualquier tipo de acercamiento con la misma, pese a que la joven también se sentía atraído por el muchacho e intentaba acercarse a este, hasta el punto que lo instigaba con preguntas capciosas, etc.
Katy era una joven bastante elegante, 1.70 de altura, rubia, cara bastante bonita. A Jairo le gustaba bastante, y se sentía atraído especialmente por los pechos que la misma poseía. No es que fueran exagerados, pero destacaban claramente en su figura. Ella se había dado cuenta de que pese a todo, Jairo la miraba lascivamente, y que se fijaba en sus pechos, lo que motivo que aún siendo adolescente, se soltara algún que otro botón de su blusa para que el joven pudiera contemplar parte de su buena delantera. Obviamente, esto lo hacía sin que nadie se percatara de su acción.
Ambos eran de una misma edad, y pronto alcanzaron la mayoría de edad. Katy ya se mostraba interesada por los jóvenes, y en su pueblo había tenido algunos encuentros. De hecho había perdido la virginidad con un joven espabilado de su pueblo que la engatusó y terminaron haciéndolo, aunque ella exigió hacerlo con condón, pero para ella fue algo desagradable por la forma en que actuó el chico.
Ambos acostumbraban a jugar, cuando lo hacían los hermanos/as de ambos. Uno de esos juegos, consistía en tirar la pelota para alcanzar al otro, y si lo alcanzaba quedaba fuera del juego. Uno de esos días, Katy había estado rondado a Jairo, pero este se hacia un poco el loco evitándola, pero la chica insistía. En uno de los momentos que ella tenía la pelota en sus manos, lanzó la misma con la intención de dar a Jairo. La lanzó con fuerza e intención, y la misma fue a dar en los genitales de Jairo, el cual se tuvo que echar las manos a los mismos ante el dolor que aquello le produjo, debiendo abandonar el juego.
Cuando Jairo la miró, observó que había sido intencionado, y notaba la cara de satisfacción de la joven en su rostro. El joven, se retiró del juego, y se marcho a un lugar apartado, ya que le estaba doliendo sus genitales por el balonazo. Al rato, se vio sorprendido cuando hizo su aparición, Katy, la cual se acercó hasta donde se encontraba. Ese día la joven llevaba una falda plisada, más bien corta y una blusa blanca con botones. El chico quedo algo cortado al verla acercarse, y ella le pregunto con cierta morbosidad: -¿te he hecho mucho daño?
- Bueno… me has dado en un lugar … - le respondió el entrecortadamente.
Ella se sonrió, y le dijo: - pobrecito. ¡Casi te quedas sin ella ja ja! .
El joven le contesto:- ya sé que lo hiciste con intención.
Ella no le contesto, limitándose acercarse al mismo, y para cambiar de tema y evitar que el joven se pusiera más nervioso, le pregunto:- Oye me ha dicho Elena ( una hermana de Jairo), que sabes donde hay unos nidos de pájaros en la finca. ¿Es cierto?
El joven se quedo algo extrañado, pero no obstante le contesto: - pues sí. Conozco unos cuantos.
-¿Por qué no me los enseñas? Le preguntó la joven directamente.
Jairo, pese a su timidez deseaba también estar con la joven, la cual le atraía cantidad, la cual había sido fuente de inspiración de sus prácticas masturbatorias. Por ello, ante la petición de la joven, sabiendo que la parte de la finca donde se encontraban los nidos estaba algo alejada de la casa, y en esa fecha no había nadie, le contesto: Solo yo lo conozco. T ienes que prometerme que tampoco se lo revelarás a nadie.
-claro. Contesto ella.
- Bueno está un poco alejado de aquí. En la huerta del fondo. ¿Te atreves a venir?- Le preguntó el pensando que quizás no quería acompañarlo hacia esa parte de la finca que ella también sabía que era bastante frondosa, sembrada de maíz y viñedos, y bastante arboleda.
La joven, en el fondo se excito. Deseaba estar a solas con el joven, y acudir aquella parte de la finca, solos ellos dos, era algo alucinante. Sabía que Jairo siempre se había portado con bastante timidez, y eso a ella le enardecía. Por ello, le contesto: - ¿ Bueno…tampoco me vas a comer verdad? al tiempo que se dibujo una sonrisa en su boca.
El joven entonces le pidió que le siguiera y comenzaron a caminar hacia la citada huerta. Durante el trayecto procuraron, a instancias de Jairo, que nadie los viera, ya que no quería que luego lo siguiera cualquiera de los demás jóvenes y localizaran el nido de pájaros. Aunque Jairo tampoco quería que nadie pudiera sospechar que estaban solos en esa parte de la finca.
Durante el trayecto, hubo que descender por unos pequeños senderos, con lo que el joven se prestó ayudarla, tomándola por primera vez de la mano. Sentir el calor de mano de la joven, revolucionó el muchacho. Pero ella también colaboró, y pronto se hizo la que resbaló para ir a caer sobre el joven, el cual la sujeto para que no cayera al suelo. Al intentar sujetarla, una de sus manos palpó por primera vez el pecho de la joven.
-¡ oh ten cuidado por donde me agarras!. ¡Qué atrevido! - le contesto la chica.
- Lo siento Katy. Te ibas a caer. ¿Acaso querías que te dejara caer?
-claro que no. Pero me has cogido un pecho. No sabía que fueras tan descarado - le contestó ella, que tenía intención de calentar al joven.
-Bueno… tú hace un rato me golpeaste en mis partes.
Ella para cambiar de tema, observó unos parrales de uva, donde aparecían unos racimos grandes y algunos ya maduros, que apetecía llevarlos a la boca. Ante ello, le dijo: -¿ Oye Jairo. Crees que tu padre se enfadara si le robo algunas uvas?
-Te apetece. Vale… pero con una condición. Yo las cogeré del parral y te las pondré en la boca. El joven estaba igualmente excitado, y hasta se había asombrado el mismo por lo manifestado. Pero al final se había atrevido, aunque no sabía cómo iba a reaccionar la joven.
Katy, se agitó y se sonrojó ante la petición del joven. ¡ No se lo esperaba!. Le hacía más tímido . La petición del joven de ponerle las uvas en la boca se le mostró como bastante sensual. Pero ella, quiso poner mayor morbosidad al asunto y le dijo:- Ya, pero yo también pondré otra condición: no podrás utilizar las manos para ponerlas en mi boca.
-y ¿cómo quieres que te las ponga? Le preguntó el joven.
- ah. Tendrás que ingeniártelas. ¡Pero no puede utilizar las manos!.
Jairo, se quedó de piedra. No obstante tomo de un racimo, unas uvas que considero óptimas y maduras, y le quitó el hollejo y luego se la puso en los labios, y la acercó hasta la boca de la joven. Evidentemente era la única forma. En cuanto ella sintió los labios del joven en su propia boca, engullo los del mismo. Sin decirse nada, fue ella la que tomo unas uvas de la que poseía Jairo, y la puso en su boca para luego acercarla hasta los labios del joven. Pero esta vez, se entretuvo y ambos se besaban al tiempo que hacían que estaban sorbiendo el jugo de la uva. Katy se dio cuenta que había mojado las tanguita que llevaba.
¡Joder como esta de lanzado este chico hoy! .- se dijo para sí.
Mientras tomaba otra y hacia la misma operación, Jairo había contemplado como su pene emergía bajo su pantalón. Lo que no paso desapercibido para la propia joven.
Luego, Jairo tomo otra uva en los labios, se le cayó introduciéndose por la blusa de la joven.
-oh.. Exclamo ella al sentir, la uva bajar por la ranura de sus pechos.
Jairo se quedó excitado. No sabía qué hacer. Entonces la joven la dice :- Jairo, tienes que recoger esa uva. Pero, recuerda no puedes utilizar las manos.
Jairo no se lo podía tampoco creer. Ante ello, optó por acercar su cara hasta el pecho de la joven, y con los labios y dientes logró soltar tres botones de la blusa de la chica. Ello motivo que al momento apareciera claramente el sostén de la misma, poniendo de relieve una parte de los voluminosos pechos de la joven. Localizó que la uva se había metido por unos de los tapapechos de la citada prenda intima, por lo que sin pensarlo, jugó con su boca hasta lograr apartar el tapapechos, lo que conllevó que quedara a la vista del mismo, el pecho desnudo del lado derecho de la joven, observando que no solo era bastante grande y firme, sino que terminaba en aureolas con unos pezones bastante pronunciados.
- oh joder Jairo. ¡Nene que atrevido eres!… oh … que vas hacer …. Exclamo la joven al sentir como el hijo de los amigos de su padre, tan modosito, ahora le había logrado sacar uno de sus pechos fuera, con la propia boca del mismo. Mas sorprendida se quedó cuando comprobó que el joven comenzó a lamer la zona donde estaba la uva, exprimiéndola, y esparciendo el jugo con su boca por el pecho de la joven. – oh Jairo…que haces oooh.. Pero éste, lejos de retirarse, con avidez continuo mientras lamia parte de pecho, logrando alcanzar el pezón, sorprendiéndose de lo empitonado que estaba, para luego sorberlo suavemente entre sus labios. Aquello levantó los suspiros de la joven: - oh …Jairo. Te estás pasando.. oh… que haces…oh nene….
La joven se había visto sorprendida con la acción del joven. Aunque ella en el fondo lo deseaba. Había soñado también con tirarse aquel joven. Incluso había decidido que sería suyo como fuera. Y ahora, aquella fantasía parecía que tenía todos los visos de poder hacerse realidad. Sin poder contenerse, mientras el joven no dejaba de sobar y mamar el pecho de la joven, ésta con una de sus manos alcanzó el bulto del pantalón del joven, pasando la mano por arriba sorprendiéndose de la dureza y enormidad del mismo.
Ante ello, Jairo la miro, y le dijo:- No te contengas Katy. Anda tómala. Sé que estas deseando verla.
La joven completamente excitada, sin contestarle, le retira el cinturón del pantalón, luego le baja el cierre, con lo que los pantalones del joven cayeron al suelo. Observó el calzoncillo del chico, que mostraba una petulancia tremenda. Con tremenda morbosidad, le baja también este, mostrándose ante la joven un pene de unas dimensiones bastante largas y no menos grueso. La joven miró incrédula el tremendo falo que tenía el joven, y exclama: - “ joder que grande” .
-¿Te gusta Katy ?. Le pregunta él.
Ella lo mira bien, observa las venas que recorrían aquel pene, y se da cuenta que nada tenía que ver con el pene que le había metido el joven de su pueblo. Aunque temerosa por el poderío que aparentaba aquel falo, notó que su coño se mojo completamente.
Ella no le contesto, sino que acerca su boca a la del mismo y lo besa ardientemente. Se comenzaron a besar, sin que ella soltara el pene que seguía manteniendo en su mano, y que además sopesaba pasando la mano a lo largo y ancho de los genitales del joven. Este, ahora más desinhibido, había tomado el pecho de la joven y también lo sobaba con una de sus manos.
De pronto, escucharon un ruido, se pusieron nerviosos pensando que era alguien que se acercaba. Jairo reaccionó a tiempo, la tomó de la mano, y subiéndose un poco los pantalones, la hizo seguirle hasta meterse bajo unas parras de viña bastante frondosas, que permitían ocultarse bajo ellas sin ser vistos. Viendo que existía bastante hierba seca en el suelo, se recostaron sobre esta.
- creo que alguien vine – le comentó ella.
- tranquila. Aquí nadie nos vera. La viña es bastante frondosa. Seguro que habrá sido un mirlo o cualquier pájaro. Relájate.
Por primera vez, se encontraban frente a frente, y el dijo:- que bonita eres Katy. Una verdad preciosidad.
-¿de verdad lo crees? Pensé que nunca te fijarías en mí. Siempre me has dado el esquinazo. Le contesto ella.
-Soy algo tímido. Pero desde que te vi en mi casa por primera vez te he deseado. ¡Lo juro!.
Ella entonces lo besa en la boca, y comienzan una serie de besos, hasta que el se baja de nuevo el pantalón y toma en su mano el cipote a pleno rendimiento, y le dice: ¿Has visto como me tienes?
Ella observa el pene del joven, y le dice:- joder Jairo. La tienes bien grande. ¿No me digas que pretendes meterme todo eso?.
-Siempre he soñado que te la enterraría hasta los huevos. Has visto mis testículos.- le contesta el joven, instándola a que tocara sus testículos.
Ella accede, y al tenerlos en su mano, exclama:- ¡ que grandes son!. Joder nene tienes que tener mucha leche ahí. ¿De verdad te has pajeado pensando en mí?
-muchísimas veces.
Ella se entretiene mirando el tremendo falo del joven, manoseándolo con su mano, y sonriéndole le dice:- No sé si mi chochito soportará tremenda polla. Creo que la tienes muy grande para mi vagina.
-¿ por qué no lo intentamos ? Le responde el joven excitado.
- No sé. ¿Tienes condones?... a pelo tengo cierto reparo. No quiero aparecer preñada ante mis padres. Me matarían, y a ti también .
Jairo se quedo nervioso: ¿ condones?... ¡claro que no!... Bueno Katy…yo nunca los he usado.
-¿nunca has usado condones? ¿Y cuando lo has hecho, lo haces a pelo? Le interroga ella.
Jairo entonces la contesta: te confieso que yo aún no lo he hecho con nadie.
La joven se excito al oír aquellas palabras ¿No me digas que aún eres virgen? ¿Lo dices en serio?
-Por lo que veo tu no.Pero, tengo unas ganas enormes de estrenarme contigo.
- Ya veo Jairo. ¡Pero hacerlo sin condón!. Además, solo lo he hecho una vez, pero… aquel chico tenía una pene que nada tiene que ver con el tuyo. Es que…¡chico lo tienes bien grande!
- Anda al menos colócate sobre mí. Quiero sentir tu coñito por encima de mi polla. De esta forma no te pasara nada.
A la joven aquella idea le excito. No era peligrosa, y encima era algo que ella nunca había llevado a cabo. Se dio cuenta, que pese a ser virgen Jairo conocía algunas posturas sexuales.
Entonces deseosa, se procedió a bajar la tanguita que llevaba, apartándola a un lado, para luego colocarse a horcajadas sobre el joven. Fue la primera vez que Jairo vio un coño en realidad. Al abrirse de piernas Katy, le mostró al muchacho toda la raja de su coño, y el abundante vello que poseía. Se quedó maravillado. La chica se dio cuenta y le dijo: - ¿ qué te parece mi coño? ¿Te gusta?
- Claro que si Katy. Es precioso.. Me encanta - le contesto embobado.
- ya lo veo. Joder mira como se te ha puesto la polla solo la verme el coño. Anda déjame bajarla, así empitonada ja ja .
La joven, entonces, tomo el pene en sus manos, y lo puso en posición horizontal sobre la barrida del joven, procediendo luego a sentarse sobre él. Al momento los labios de su coño abrazaron la polla del joven, sintiendo ambos el calor de sus sexos.
- Um Katy. Que delicia sentir tu coñito sobre mi pene .
El joven la hizo recostarse más sobre él, y la comenzó a besar en la boca. Sus labios se entrelazaron. La joven se dio cuenta que los labios de su coño abrazaban el pene del joven y lo estaban embadurnando con sus propios jugos. Poco a poco, sin pensarlo comenzó a moverse hacia delante y hacia detrás sobre el pene, como si estuvieran follando, pero sin meterse el pene.
- ¿ te gusta Katy?- le pregunto él sin dejar se besarla, al tiempo que sus manos se colocaban en las posaderas de la joven atrayéndola hacia su cuerpo una y otra vez.
-¿ Ya lo habías probado con otra chica antes?- le pregunto ella.
-Jamás. Pero en las revistas porno se aprenden muchas cosas. Le sonrió él.
-Ya veo. Oh joder me gusta. Vas hacer que me corra. Le contesto ella, alcanzando pronto un orgasmo en aquella posición.
Al terminar su orgasmo, aún seguía su coño abrazando el nabo del joven. ¡Se veía tan grande!. Ella deseaba metérselo dentro. Pero a pelo se retraía. Como si el joven leyera su pensamiento, le dijo: - No te apetece metértela. Sé que deseas tenerla dentro de tu coñito. Al menos métetela un poco y luego te sales. “Así me desvirgas”.
-sabes que lo que me pides es peligroso- le contesta ella, aunque lo estaba desenado . Pero eres un cabrón, me tienes bien arrecha. Pero ¡solo un momento, y me salgo! .
La joven bien excitada, se hecho hacia atrás, y tomando la polla del chico la dejó en vertical y la acercó a sus rajita. Aquel falo le parecía enorme para su coñito. Primero enjugo el glande con sus jugos y luego se fue sentando. Al momento sintió como aquel pedazo de carne, nada tenía que ver con la polla que la había desvirgado. Oh Jairo… me vas a reventar.. oo sii oooo decía a medida que se iba sentando y cada vez le entraba un poco más la tranca del joven.
- oh Katy que delicia. Uf creo que me voy a enamorar de ti. Qué coño tienes preciosa… anda clávatela toda… oh si mi amor …. Quiero que te la metas toda - le instaba el.
- Oh… me vas abrir. Ooo siii…. Oh cabrón que verga. Me vas a reventar….oooo
Poco a poco fue descendiendo, viendo como su coñito se abría al tiempo que se iba tragando el nabo del joven. Cuando se dio cuenta, observó que había tocado fondo. Sus nalgas hicieron tope con las bolas del joven. ¡Se la había encajado totalmente!. Se sentía totalmente ensartada, abierta como nunca. Las paredes de su vagina estiradas la máximo.
- oh si Katy. Te la has clavado toda. ¡Me has desvirgado!... oh si que placer. Oh cuanto tiempo deseándote.
-¿ era como pensabas ?- le pregunta ella morbosamente.
- mucho mejor. Oh nena tienes un coño maravilloso. Anda cabálgame un poco. Vamos…
- pero solo un momento. Oh Jairo. Al final te has salido con la tuya. ¡Como me preñes nos la ganamos!.— decía comenzando a cabalgar sobre la polla del joven.
Pronto sus cabalgadas fueron cada vez más veloces. Se dio cuenta que tenía que salirse, pero su cuerpo le decía que necesitaba correrse con aquella polla dentro de su cuquita . Por ello, continuó pese a todo, hasta alcanzar un sonoro orgasmo, que si hubiera habido alguien cerca los hubiera pillado.: oh siii me vengo ooo siiiiiiii
Al acabar, se hecho agotada sobre el pecho del joven. Este entonces, el joven con un movimiento la gira y la coloca boca arriba, colocándose el encima. Todo ello sin sacarle la polla del coño de la chica. Esta se quedó sorprendida. Sin esperar a razones Jairo comenzó a bombearla, metiendo y sacando su enorme falo de la vagina de la joven. Esta le dijo: - oh Jairo que haces …. Tienes que salirte… oh… es peligroso ooo Dios,…. Como me abres... oh esto no es lo que dijimos ohhh coño….
Jairo estaba fuera de sí. Era el primer polvo de su vida. Quería disfrutarlo. Quería que no se le olvidara. Sabía que la chica tenía razón y debería salirse, pero estaba tan excitado. Quería clavarle toda su polla aquella chica antes las bolas una y otra vez, y lo estaba consiguiendo.
- oh Jairo oooo –la joven intuyó que el ritmo que llevaba el joven amigo de su familia, tenía toda la tinte que querer vaciarse dentro de ella. Esto la puso al borde del éxtasis. ¡J oder se iba a correr dentro… y ella no estaba protegida! . La primera vez lo había hecho con condón. Aunque en el fondo deseaba sentir la leche del joven, pero era peligroso: - tienes que salirte… no puedes hacerlo dentro… oh joder lo veo en tus ojos oooo cabron ….
- Vamos Katy. ¡Sé que deseas mi leche!. Es mi primera vez. Siempre he soñado que te llenaba con mi semen. Necesito hacerlo …- le decía sin parar de bombearla, cogiéndola por la piernas y arremetiendo contra ella, sin parar, pistoneando la vagina de la joven sin parar.
- oh Jairo. No lo hagas… oh cabron te siento oooo - decía ella mientras veía como pronto se hinchaba la polla del joven y comenzaba a brotar su semen dentro de su cuquita. No se lo podía creer. Se estaba corriendo dentro de ella. Era algo que ella nunca había experimentado, en cuanto sintió el calor del semen dentro de su vagina, ella tambien se excito y comenzó a convulsionarse, alcanzando un nuevo orgasmo, al unísono con el joven.
Terminaron rendidos sobre la hierba seca. Cuando el joven sacó su pene de la vagina de la joven, constato que aún su pene manaba gotas de semen. Observó la vagina de Katy, la cual se había abierto al máximo contemplando un tremendo boquete, del que salían restos de su semen. Ella se miro igualmente, y le dijo:- Joder Jairo. Me has llenado. Has visto como me has dejado. Me has abierto un boquete….oh Dios ¿ Y …si se me has embarazado?... mis padres me matarán.
Jairo, sabía más o menos el ciclo de las mujeres. Lo había aprendido en las revistas, y tras preguntarle por la fecha de su última regla, verificó que las posibilidades eran relativamente escasas. – tranquila. No creo que este ovulando. Me ha encantado. Sabes. ¡Te juro que nunca te olvidare! ¡Has sido mi primera mujer!. Ha sido maravilloso.
Ella le agradó la forma en que el chico se expresaba, y le contesto:- para mí también es como la primera vez. La otra la hice con condón. Hoy he sentido tu leche dentro de mí y … cabronazo me he corrido a gusto.
-Vamos quieres ir a ver el nido de pájaros- Le preguntó el sonriendo.
Ella aceptó y llegaron hasta una zona llena de matorrales, donde localizó tres nidos de pájaros con algunos pajaritos ya dentro y otros con huevos. Katy quedo ilusionada.
Mientras contemplaba uno de los nidos, ella capó la mirada de Jairo hacías su trasero. Entonces se gira, y sonriendo y le pregunta:- ¿ qué miras? ¿Me estabas viendo el culo?
-Joder Katy. Tienes también un trasero perfecto.
-No me digas que también te gustaría clavármela por ahí.
-Ganas no me faltan. Otro día…. Pero, tener una hembra como tu delante. Aquí en este lugar, me está apeteciendo echarte otro polvo .- le contesto morbosamente.
Ella se sorprendió. Pensó que lo decía por decir. Pero al contemplar el bulto en el pantalón del joven se dio cuenta de que lo decía en serio. El joven entonces se bajó de nuevo el pantalón y le mostró su cipote de nuevo totalmente empalmado.
- pero joder… ¿estás de nuevo así?... que cabron…. Así que quieres follarme otra vez.
Esta vez ella se bajó la tanga, y se colocó en cuatro sobre la hierba existente y lo incitó a que la montara. – vamos cabron… que esperas …. Clávame como una perra .
El se coloco tras ella, y al momento hundió su poderoso cipote en la coñito aún mojado de Katy. Se la estuvo follando en esa posición durante varios minutos, hasta que vio q ue estaba a punto de venirse de nuevo. Oh Katy me voy a venir de nuevo. ¿La quieres dentro?
-Oh cabronazo….ya me llenaste antes. Que más da. La quiero dentro otro vez. ooo vamos lléname otra vez.
El joven no se hizo de rogar y volvió a regar el coño de la joven nuevamente. Tras ello se volvieron a colocar sus ropas y regresaron a la casa.
Sin embargo, al mes siguiente, los padres enviaron a Katy con sus abuelos, a bastante distancia de donde ellos vivían, por lo que no volvieron a verse durante muchos años. Mientras tanto, Jairo terminó la carrera de derecho, monto su despacho, se caso y tuvo dos hijos. El supo por la familia de Katy, que esta se había casado y tenía también un hijo. Y así fueron pasando los años.
CONTINUARA