Jorge es un hombre reservado

He esperado mucho y con paciencia para estar así contigo. Los dos solos, sin personas que nos interrumpan y poder acariciarte a mi gusto. La oscuridad es mi cómplice y esa tenue luz de tu lámpara solo descubre lo que quiero ver...

Has tenido tus reservas.

Y he esperado mucho y con paciencia para estar así contigo. Los dos solos, sin personas que nos interrumpan y poder acariciarte a mi gusto, sin sentir que estas rehuyendo o sintiéndote culpable por nada. La oscuridad es mi cómplice y esa tenue luz de tu lámpara solo descubre lo que quiero ver: tus labios ansiosos, entreabiertos y tu respiración excitada y jadeante…acaricio tu rostro, me acerco hacia él y lo rozo tiernamente con el mío…me acerco a tu oído y susurro: "te quiero todo, todo para mi" y siento tus manos apretar mi cintura al oír mis palabras.

Beso tus labios y los saboreo con mi lengua suavemente, mis caricias se hacen cada vez mas rudas e intensas, estoy bajando mis manos a través de tu torso y al llegar a tu cintura siento tu sobresalto y me miras: en tus ojos veo el deseo reprimido por tanto tiempo, no estás haciendo nada malo, solo estas siendo tu mismo, y con alguien que te comprende, te quiere y te desea tanto, que hará todos tus deseos realidad: yo.

Recorro tus labios con mis dedos, los chupas mientras me miras disfrutar tus caricias por todo mi torso, empiezo a inquietarme y a balancearme sobre ti al notar tu ímpetu, tus ganas, se que quieres hacerme el amor…y yo quiero hacerlo contigo, también. Te beso y deslizo mis manos dentro del pantalón, estas excitado…sonrojado y mientras te acaricio con mi mano, me recuesto sobre tu hombro para acariciarte y susurrarte cositas sucias en el oído….mmm, cómo te gusta….

Me pongo de pie frente a ti, sin quitarte los ojos de encima, sonrío y me desabotono la blusa lentamente, tus labios buscan y saborean mis senos desde lejos y no puedo hacerte esperar: te los ofrezco mientras me siento sobre ti, como si estuvieras dentro de mi, abro mis piernas y me acerco lo mas que puedo a tu torso te beso con pasión y mientras tus manos me acarician la piel cierro mis ojos y lo único que siento es el calor que produces en mi cuerpo…"soy tuya, tómame" alcanzo a gemir mientras tu boca me enciende los senos, tu lengua me hace delirar al recorrer mis pezones, los saboreas con delectación.

Quiero saborearte yo también. Me posiciono de rodillas ante ti, te miro y acaricio tu sexo sobre el pantalón, "déjame complacerte" te digo mientras te miro a los ojos, y al bajar tu ropa interior me ofreces el pene más bello y apetecible, grande y grueso, con un glande delicioso que me apresuro en devorar, quiero darte todo el calor, me excita tanto que gimo mientras lo saboreo, quiero más, te masturbo con ganas, me gusta tu calor en mis manos…y te gusta, lo siento en tus gemidos y la expresión de placer en tu rostro.

"Tómame!" te suplico, mientras levanto mi falda y me siento lentamente sobre ti, dirijo tus manos hacia mis caderas y tomas los lazos de mis bragas y los arrancas…al hacerlo me zarandeas sobre tu regazo y lo único que puedo hacer es gemir, mientras me acaricias y levantas mi pierna derecha para tener un mejor ángulo de mi clítoris, lo tocas…primero con delicadeza y luego con audacia, estoy retorciéndome del placer y te gusta escucharme - ahora quiero sentirte dentro de mi – y me penetras… Toda tu inmensidad dentro de mí… tan húmeda, tan caliente, que rico se siente el roce de nuestros cuerpos, con movimientos lentos y cadenciosos al principio, y nuestros ojos no pueden dejar de mirarse, como si no pudiéramos creer que esta clase de placer exista, tus embestidas me queman las entrañas, una mezcla de dolor y electricidad me recorre la espalda…uh! Qué rico orgasmo me has dado…pero sigues, ahora con rudeza y rapidez, la fricción se hace insoportable, más, más, más…dame más placer…uy si, acabamos otra vez