Javi y sus experiencias sexuales 2

Las aventuras de un chico de barrio, sus relaciones sexuales y morbosas con sus amigos y familia.

Ya entrada la noche sonó mi móvil, era mi amigo Dani.

-Oye capullo, ¿a que no sabes que ha pasao?

Dime chaval ¿que te ocurre?

-Pues agarrate que vienen curvas tío.

-Resulta que mi hermano nos vio anoche mientras nos las chapábamos y dice que ahora el quiere rollo con nosotros que haber cuando nos la montamos.

¿Qué estas diciendo tío? Me pegué un brinco de donde estaba y salí escopetado a encerrarme en mi cuarto para poder hablar con mayor tranquilidad.

-lo que te cuento tronco, mientras estábamos en el asunto, mi hermano entró en casa y nos vio enrollaos y no dijo nada, pero esta tarde cuando nos hemos puesto a ver la tele me ha contado lo que vio y que el te tiene ganas hace mucho y que conmigo también tiene ganas de rollete.

¡Joder tío! Dije acojonado. Bueno ¿y que va a pasar? Me da tela de palo que tu hermano nos haya visto tío, no se yo.

-tu tranquilo, si quieres vente para acá, vamos a pedir unas pizzas y tomamos unas birritas ¿te hace el plan?

No, me quedo en casa, estoy aquí con mi viejo y con Damian viendo la tele y ya no salgo tío, mañana nos vemos y me cuentas.

-Bueno, si cambias de opinión aquí estamos.

Volví a donde mi padre y hermano estaban viendo la tele y dejé el tema pasar, no quería irme ahora de casa y menos meterme en otro lío nuevo ahora que ya había echado dos polvetes cojonudos con mi viejo.

Pasaron unos días, por circunstancias yo no había vuelto a ver a Dani, cada uno estaba en sus asuntos y no habíamos coincidido. Durante estos días mi actividad sexual se había centrado en pajas pensando en las envestidas que me había dado mi padre, que estos días había venido a casa tarde y cansado de trabajar y no habíamos tenido opurtunidad de hablar mucho de nuestro encuentro.

Una tarde que me quedé en casa aburrido coincidió que Damian mi hermano no tenia clases y andaba por casa vagueando el muy perro.

-Oye Javi, ¿vemos alguna peli? Estoy aburrido y no tengo nada que hacer,

Bueno, venga ¿tienes tu alguna peli?

-no, si quieres vamos y sacamos alguna del video club.

De repente me acordé de la peli que íbamos a ver mi padre y yo y con cierta malicia me dije a ver como reacciona este chinorri de hermano ante esa película.

Espera Damian, tengo yo por ahí una peli que no he visto y me han dicho que está buena, podemos verla en mi cuarto tumbados que vamos a estar mejor.

Damian es un chico mas alto que yo también rubito y de ojos claros, delgaducho típico de un adolescente, muy pajillero y salido mental, la verdad que mi hermano era guapete, siempre iba vestido como todos los chavales del barrio, zapatillas, vaqueros y sudaderas y su pelo lacio larguito con un flequillo que le tapaba media cara.

Fui a la habitación de mi padre y saque la película del DVD y llamé al mi hermano que estaba en la cocina tomándose una coca cola con chucherías.

Pusimos la peli en la tele de mi cuarto y nos tiramos los dos juntos en la cama, no sin antes pedirle al larguirucho de Damian que se quitara las zapatillas.

El chico estaba vestido con unos vaqueros bastante ajustaditos que le marcaban su paquete y una camiseta cortucha que al tumbarse le dejaba fuera su ombligo y le asomaban los pelillos que iban desde este hasta el filo del pantalón viéndosele también el elástico de sus slips.

Yo igual que el tenia una camiseta vieja medio rota que me encanta para estar por casa y los pantalones de chándal viejos que tenia cortados por la rodilla, los usaba para jugar partidos de baloncesto y ya como me quedaban estrechos me los ponía para hacer las faenas de casa, porque todos tenemos nuestras tareas que hacer para tener la casa en orden.

Bajo esos pantalones yo no tenia nada puesto, me había dado una ducha y no me había puesto slip para estar mas cómodo, se me marcaba perfectamente la chorra y los huevos, pero no me importaba, allí solo estábamos tres hombres.

Comenzamos a ver la peli, los dos en silencio, solo Damian que había traído palomitas y refresco para los dos.

Las escenas iban sucediéndose y yo como no había prestando atención el otro día no tenia ni idea de que iba, llegó la famosa escena de los dos tíos que se enrollan y yo callado estuve viéndola con absoluta normalidad, de vez en cuando miraba de reojo a mi hermanito que masticaba en silencio mientras se tragaba la peli sin rechistar.

En una de esas miradas de reojo a mi hermanito, lo vi. Como se sobaba la polla mientras que no quitaba ojo de la pantalla de la tele, yo seguí mirándolo disimuladamente y descubrí que de vez en cuando el larguirucho echaba una ojeadita a mi bragueta que sin darme cuenta estaba bastante abultada.

La película era totalmente gay y la había traído mi padre, dato que debía ocultarle a mi hermano, pues estaba claro que tarde o temprano me iba a preguntar la procedencia de dicho material.

Mi cabeza comenzó a maquinar como entrarle a mi hermano para que nos hiciéramos al menos una pajilla juntos, pero cual fue mi asombro cuando comprobé que el retoño había tomado la delantera el solito y se había abierto el pantalón vaquero y su mano estaba dentro de sus calzoncillos de dibujitos dándose un soberano magreo en sus partes.

¿Qué te has animado, eh? Dije a Damian en tono cariñoso y bromeando.

-Pues ya ves, me he puesto yo un poco cachondo con la peliculita esta. Y ya veo que tu también estas animadillo ¿no Javi?

Pues fíjate como se me ha puesto a mí el cacharro tío, y diciendo esto me agarré la polla por encima del chándal mostrándole lo gorda que tenía la pija a mí hermano.

-Pues si que la tienes grande cojones, es que estamos hechos unos figuras, calzamos buen instrumento los dos. Je je je

A ver hermanito sácate el bicho de la jaula que vamos a ver como nos las gastamos.

Yo sin esperarle me bajé el pantalón dejando al aire mi polla toda dura los cojones peluditos a la vista del pardillo de mi hermano que tenia que hacer mas esfuerzo pues tenia los slips y el vaquero puesto.

Tras unos momentos de forcejeo con su ropa pude ver un buen felpudito de vellos encima de la imponente polla que gastaba el cabroncete de mi hermanito y dos huevos bien hermosos pobladitos de vellitos rubitos que estaban de lo más apetecibles.

Joder hermano, que bien dotado estas, nunca me había fijado como te había crecido el carajo, dije a Damian.

-Pues tu también tienes unos buenos atributos compi, vamos no tienes de que quejarte.

Si medir más palabra, Damian echó mano a mi polla y comenzó a sobarla como si lo hiciera habitualmente.

Yo ante tanta evidencia agarré el nabo del chico y se lo meneé suavemente bajándole el pellejito que protege el prepucio una y otra vez. Después le pasé una de mis manos por los huevos y introduje mi mano entre sus piernas alcanzando su ojete lo cual le provocó un respingo y un leve gritito que lo delató.

¿Por qué no te quitas esos pantalones Damian? Dije a mi hermano que continuaba pajeándome, el chico obediente sin decir nada, saltó de la cama y se quedó completamente desnudo, no se dejó ni una sola prenda.

Yo al verle le imité y me deshice de mis pantaloncillos viejos, la camiseta y los calcetines que tenia puesto.

Mi hermanito volvió a la cama pero ahora se tendió de manera distinta, colocó su cabeza cerca de mi paquete dejando el suyo al alcance de mi boca.

Su mensaje era clarísimo y como no quise llevarle la contraria me dispuse a sobetear su precioso rabo que engullí como si fuera un caramelo.

Damian por su parte no hizo ascos del mío y se puso manos a la obra a mamarme la polla como un experto, se delataba que no era la primera vez que engullía semejante tipo de artilugios masculinos.

Damian y yo nos prodigamos no solo con las mamadas, nuestras manos no dejaron de acariciar al otro por cada lado que podíamos tocar, yo aproveché mi picardía y fui masajeando el culito del chico que no ponía obstáculo a estos estímulos que le procuraban mis dedos. Sus piernas se abrían ante el incesante paso de mis dedos por los espacios mas íntimos buscando el portón de su virginidad, el rosadito ano de Damian palpitaba cada vez que le pasaba el dedo y se abría como una flor al introducírselo despacito, dejé de comerle la verga y le metí la lengua en su culito sonrosado que aceptó encantado tan húmeda y grata visita. Estuve un buen rato lengüeteándole su esfínter, le tenia llenito de saliva el culito y en una de esas, mi hermanito se me acercó la oído y me dijo.

hermanito, métemela ya, estoy deseando que me empetes.

Cojí al chico y lo puse boca arriba, le alcé las piernas y de un golpe le encaje mi polla dentro de si, ni se quejó el muy cabrón de la envestida.

Lo follé a lo bestia, sobre todo porque el me lo pedía, le iba lo duro y se ponía burro al verse poseído y dándole mucha metralla, se le notaba en la cara que cuanto mas duro le envestía mas gusto recibía.

Después de un buen rato el chico tenia desencajada la cara de tanto como disfrutaba y de su hermoso nabo salieron churriagazos de lefa que cayeron sobre todo mi cuerpo incluso el primero me llegó al careto, yo al ver aquella lechada me comencé a correr dentro de mi hermano que lo sintió y el tío se retorcía de gusto al sentir como mi leche le resbalaba de su culete para afuera.

Una vez nos hubimos corrido, me salí de sus interiores y caí rendido sobre el cuerpo pringado de leche de mi hermanito, lo besé en los labios suavemente y el me devolvió otro beso diciéndome.

-Javi, eres la caña, te quiero mogollón hermano.

Damian, yo también te quiero hermanillo, eres un pedazo de tío, pero dime algo ¿Quién es el cabrón que te ha desvirgao?

ja ja ja , sabia que me lo ibas a preguntar Javi, pero no te lo voy a decir, no creas que hay mas de uno, solo lo he hecho con una persona antes que contigo.

Diciendo esto, me besó en los morros, se levantó y se fue al baño.

Desde el pasillo gritó.

-será mejor que te duches, papá está al venir, no es plan que nos vea con esta pringue encima.

Le hice caso y me metí en la ducha con el, nos lavamos bien y nos vestimos dispuestos para preparar la cena, en breve llegaría nuestro padre.

Dani no había dejado de llamarme durante toda la semana, yo sabía que es lo que quería y lo estaba eludiendo, pero el viernes ya me fue imposible, desde por la mañana me estuvo mandando mensajes a mi móvil y el viernes por la tarde lo tenía en casa a buscarme.

-No me das mas esquinazos colega, hoy salimos con mi hermano, no te escapas, el plan que tiene preparado para los tres te va a alucinar así que arréglate lo mejor que sepas que nos vamos, te espero viendo la tele con tu hermano.

Me metí en el baño y me dí una buena ducha, me perfumé y me vestí a conciencia para la que me esperaba, una vez estuve listo y salí al salón.

-wow ¿Quién este pedazo de tiazo que ha salido por aquí?

Bromas de mi hermano Damian y de Dani, nos fuimos rápidamente dejando recado a mi hermano que era casi seguro que me quedaba a dormir en casa de mi colega.

Esa noche salimos con Raúl, estuvimos en lo sitios normales donde siempre vamos y a algún otro que frecuentaba el hermano de mi amigo, cenamos una pisas y después hicimos botellón en un parque y mas tarde fuimos a los bares típicos terminando en una discoteca, bien entrada la madrugada estábamos bien cargaditos de copas Raúl decidió que iba siendo horas de ir a casa.

Raúl había estado muy amable conmigo toda la noche, cuando decidió que regresábamos a casa, me hizo montar con él en su coche mientras que su hermano volvería solo en la moto.

Nada mas salir del aparcamiento de la discoteca Raúl me agarró la pierna con una de sus manazas, este tío tenia dos garras imponentes además trabajaba en la construcción y sus manos estaban bien ejercitadas en labores duras. Estuvo un buen rato masajeando mi muslo mientras conducía con la otra zarpa y me miraba con unos ojos brillantes que de vez en cuando miraban al frente.

Raúl será mejor que mires mas a la carretera, no tengo ganas de que nos demos una galleta, prefiero que cuando lleguemos a tu casa me mires todo lo que desees, le dije al chico que rió al oír mi comentario.

-Sabes Javi, siempre me has gustado mucho, lo que pasa que me daba palo entrarle al amigo de mi hermano sin saber que le iba el rollo. Me gustaría que esta noche fuera para nosotros solos, dejar fuera de esto a Dani. ¿Cómo lo ves?

Hombre a mi me da un poco de palo dejar fuera a tu hermano, el tenia mucha ilusión en esta historia, le molaba cantidad montárselo con los dos juntos.

Pero si, tu a mi me molas cantidad y no estaría mal que nosotros dos pasáramos la noche juntos, quizás debamos dejarlo para otro día, no se que decir.

-Por Dani o te preocupes, el se puede ir a dormir a otro sitio, de hecho lo he hablado con el, si tu querías algo conmigo, el se iba a buscar al Bocas y se va a dormir a su casa, ya sabes que el Bocas es primo nuestro y cuando uno de los dos tiene mamoneo el otro se va a su casa.

Pues hecho, dile a tu hermano que se vaya a otro lado, que hoy nos lo montamos los dos solitos ¿Qué tal?

Raúl, sacó su teléfono de la chupa y marcó el teléfono de Dani, después de varios toques mi amigo respondió a la llamada de su hermano.

Hey brother, mejor que te vayas a casa del Bocas, creo que Javi y yo debemos conocernos mejor esta noche y si tu estas por allí me darás muchas pistas.

Besitos hermano, mañana nos vemos para comer, chau chau.

¿Cómo lo ha sentado el cambio de planes?

Tranquilo, el ya estaba avisado, de hecho estaba ya en la puerta de casa de Bocas y solo tenia que ponerle el candado a la moto y subir.

Nosotros llegamos a la casa de Raúl, aparcó el coche y subimos, nada más entrar me dijo que si me apetecía tomar una copita más a lo que respondí negativamente.

Raúl se sacó la chupa quedándose en con la camiseta blanca que llevaba , le quedaba ajustadita y le marcaba un pectoral bien trabajado por sus horas de curro en la construcción, llevaba unos tejanos azules oscuros que le marcaban bastante bien un paquete prominente, se descalzó las zapatillas Nike blancas quedando descalzo en la casa.

-Anda ponte cómodo chiquitín, que tu ya eres asiduo de la casa y no tengo que explicarte donde están las cosas aquí.

Me quité la chupa de pana y me saqué también las zapatillas que llevaba ese día puestas unas puma de piel marrones que había estrenado hacia pocos días.

-¿te apetece que nos demos una duchita juntos? Debemos oler fatal después de haber estado en tantos tugurios como hemos ido.

Creo que no sería mala idea, una ducha de agua calentita me vendría muy bien, además si es contigo me va a sentar mucho mejor.

Guiñé el ojo a Raúl mientras le decía esto y sin mediar mas palabras me dirigí hasta cu cuarto donde me fui despojando de toda mi ropa quedando en pelotas a la vez que veía como mí amigo se desprendía de toda la suya.

Raúl entro primero en el baño y una vez tenía el agua caliente a buena presión me hizo señales con el dedo de que me metiera dentro de la bañera con el.

Nada mas hice entrar el chorro de agua caliente dio contra mi cuerpo, salía con una presión magnifica, Raúl me atrajo hacia el que se encontraba justo abajo del chorro y mientras me caía todo el agua sobre mi cuerpo, el se dedicaba a masajearme cada una de las partes de mi cuerpo como para estimularme, nuestros nabos se encontraros uno frente al otro duros y rectos mirando hacia arriba y Raúl frotaba su miembro contra el mío procurándome un placer increíble.

Me hizo un poco de fuerza en los hombros indicándome que bajara y yo obediente bajé colocándome de rodillas ante su polla durísima comencé a mamarsela con esmero.

Este tío tenía una polla increíble, blanquita muy buen grosor y de una longitud importante el capullo rosado, vamos que el aparato de Raúl daba gusto. Le acompañaba dos testículos gordotes tersos recubiertos de un vello claro que dejaba entrever la piel rosada de los cojones. Todo ello se lo fui lamiendo con glotonería hasta que Raúl me incorporo y sin darme tregua me comió la boca, llenándomela con su lengua glotona que me pasó hasta por el cielo de la boca.

Dentro de la bañara había un quicio de azulejos donde había colocados botes de gel y artículos para el aseo, Raúl me llevó hasta ese rincón haciendo que me sentara y una vez que me tenia allí se agachó y saboreó mi polla con gula dándole unos buenos lengüetazos al igual que a mis cojones, me elevó las piernas dejando a su vista el ojito de mi rosado ano y allí apuntó con su lengua dándome en el culito un tremendo masaje que me estaba dilatado a tope

Después de esto en ese mismo lugar donde me había sentado se colocó el y me sentó sobre su polla metiéndomela de un golpe hasta dentro de las entrañas, comenzó a besarme con mucha energía ninguno de los dos nos movíamos pero estábamos unidísimos por el cacho de carne que me había metido dentro. Sin sacármela se puso de pié conmigo abrazado a él y colocándome pegado a la pared de la ducha comenzó a follarme suave dándome un placer de dos pares de cojones, tanto que comencé a correrme de una manera descontrolada, hasta yo mismo me asusté de la cantidad de leche que estaba echando. Raúl al ver mi corrida sacó su polla de mi culo y puso la verga en mi cara y comenzó a darme trallazos de semen que me dieron en los ojos, los cachetes y en la boca, estos últimos los saboree con deseo pues la leche de mi colega me pareció exquisita.

Nos volvimos a dar un buen lavado en la ducha y una vez salimos y nos hubimos secado nos metimos en la cama fumándonos un cigarrito los dos abrazados uno junto al otro.

Después comenzamos una nueva sesión de besos y caricias, Raúl era un experto besucón y a mi me encantaba morder con este tío que me ponía a cien.

-¿Sabes que me gustas un huevo Javi?

A mi también me gustas tu mucho tío, no eres un cualquiera, me pones cachondo perdido.

-no se trata solo de eso tío, se trata de que me gustas para que seas mi pareja, creo que me voy a enamorar de ti, siempre te he visto como el amigo de Dani, pero cada vez que venias por aquí deseaba estar contigo como estamos ahora.

Raúl, yo tengo que asumir muchas cosas, no puedo prometerte nada, pero si de algo tienes que estar seguro es de que me gustas, me haces feliz y me encanta estar contigo. Solo te pido paciencia y que vayamos despacio, no quiero defraudarte ni tampoco que creas que te estoy rechazando.

-Tranquilo Javi, me parece razonable todo lo que me dices, sabré llevar con calma este tema, pero procuremos estar juntos todo el tiempo que sea posible ¿te parece?

Nos besamos tiernamente y volvimos a la carga ahora dentro de la cama, nuestros cuerpos desnudos se fundieron en calidos abrazos, roces refriegas de nuestros miembros terminando mamandonos la polla el uno al otro.

Raúl me dijo al oído lleno de sensualidad.

-ahora eres tu quien tienes que penetrarme a mi, quiero tenerte dentro, muy dentro de mi.

Se puso a cuatro, y colocándome tras el, le lamí su ojal por un momento y una vez lo había humedecido, hinqué si nabo en su culito y poco a poco comencé a introducirle todo el tronco hasta la base dentro de sus intestinos, al final paré por un instante dejándole que se acomodara y asimilara todo mi trozo de carne dentro de sus entrañas.

-Dale, no pares por mas tiempo, follame ya, enviste como un toro bravo.

Haciéndole caso a mi amante comencé a follarlo con fuerza, dándole palmadas en las cachas y sobándole su espalda, el pecho y agarrándole la polla que la tenia dura como un palo.

Lo cabalgué con rudeza durante un buen rato, la polla me dolía ya de tanto como le había follado y viendo que mi corrida se acercaba le saqué el bicho de su interior para voltearlo y correrme sobre su pecho y abdomen mientras me pajeaba.

Bajé a su nabo y me lo comí entero de un solo empellón provocándole una maravillosa corrida que me llegó hasta la garganta.

Caí rendido en la cama, sudoroso y pringado, pero no nos importaba, nos abrazamos y dormimos placidamente hasta la mañana.

Mi relación con Raúl ha ido cada día a mas, ya mis dudas sobre mi orientación sexual pasaron a la historia, me siento plenamente realizado en mi historia con este chico y a pesar de tener una excelente relación de sexo y en todos los demás apartados de mi vida con el, de vez en cuando sigo cometiendo alguna que otra travesura sexual.

Pero la carne es débil y uno tiene aun edad de tener mucha marcha, más teniendo en casa un semental insaciable con quien de vez en cuando me gusta pegarme un buen revolcón.