Ivonne, la primera vez. 3

Cómo me inicie en las aventuras más ricas de mi vida... obvio todo queda en familia.

Ivonne, la primera vez. 3

Después de un rato nos despedimos, en mi mente y en mi imaginación, fantaseaba, con todo lo rico que cogeríamos mi padre y yo. Me veía disfrutando de la pija de mi padre dentro de mi, haciéndome gozar muy lindo de una sabrosa fantasía incestuosa, mi primera cogida con mi padre.

Al día siguiente me apresure en todo, tuve limpio mi hogar desde muy temprano, prepare mi recamara y mi closet con las películas de Taboo a la vista, ropa muy provocativa sobre la cama y mi arreglo personal de lo más sexy y cachondo posible, con un mini vestido entallado a mi cuerpo y con un buen escote, quería enseñar mi cuerpo lo más posible para encender el lívido de mi padre, provocando su deseo.

Al poco rato llego mi papi, ya todo estaba listo, la trampa estaba puesta, solo faltaba que mi padre cayera en ella, y disfrutara de mi, como es mi deseo.

Al entrar mi padre me saludo con mucha alegría, yo le dije que iba a la cocina y el me pidió que lo dejara entrar a mi recamara, para ver el closet; yo sonreí́ para mis adentros, mi padre me desea, hizo lo que yo quería, él entro a mi cuarto estuvo un buen rato, estoy seguro que vio las películas y mi lencería sobre la cama.

Al regresar a la sala le pregunto.

  • ¿Viste el closet papá?

  • Si bebe, ya lo vi...

  • Bueno, y dime ¿que te pareció?

  • Es muy amplio, hay muchas cosas que podemos hacer, y que quede como a ti te guste.

Mi padre se dirige a la cocina.

  • Voy a tomar un poco de agua

Me llama...

  • güera, ¿puedes venir un momento?,... al llegar yo, me dice

  • Hija vi lo que tienes en el closet, el tipo de películas y su tema, además de la ropa sobre la cama.

  • ¿Te gusto papa?

  • Ivonne no me hagas decir y cometer una tontería, mejor vamos a la sala para que empiece a diseñar un nuevo closet.

Salimos de la cocina, yo primero, mi padre detrás de mi, aproveche para lucir mi cuerpo ante él, con un caminar muy provocativo y sensual, esperando que disfrutara, ver el movimiento de mi cadera, deseosa de ser penetrada.

Le pedí a mi papa revisara las dimensiones de mi closet y que empezara por diseñar alguna idea.

Mi padre se queda en la sala, yo entro a mi cuarto (sin cerrar la puerta), con la intensión de exhibirme desnuda ante el al cambiarme de ropa.

Yo ya había iniciado con mi parte, me paseaba garbosa alrededor de mi cuarto, completamente desnuda, usando mis zapatillas de tacón alto, con ellas se resaltaban mis formas de mujer, mis senos muy erguidos, mi culito bien levantado, aparecía y desaparecía de su vista constantemente, me decidí a pararme frente a la puerta del cuarto y acariciaba mis tetas, y mi culo, dándoselos a desear.

Entonces con todo el atrevimiento del mundo, salí del cuarto, pase al baño, me detuve en el pasillo mirando de frente hacia el y digo,... hola papito lindo,... con mi dedo índice sobre mis labios le mando un beso de lo más sensual, me volteo y regreso a mi recamara moviendo mi trasero, como la hembra en celo que espera que llegue su macho a poseerla .

Yo hirviendo de excitación, comienzo a vestirme frente a la puerta a la vista mi padre, inicio por ponerme un bra delgado sin forro, muy delicado, pequeño y transparente, colocando con cachondería y suavidad mis tetas en su interior, seguida de la parte baja, mis bragas de encaje blanco, retiro una zapatilla, apoyo mi pie sobre la cama y coloco una media de seda blanca, repito la acción sobre mi otra pierna, al terminar tomo mi mini vestido blanco, sin tirantes, ni zipper, solo el pedazo pequeño de tela, al ponérmelo introduzco mis piernas para subirlo por mi cadera ajustarlo a mi pecho, hago un mohín de enojo y llamo a mi padre.

  • Papa, papito puedes venir un momento a ayudarme. Al entrar mi padre le pregunto.

-Dime, ¿cómo luzco?

  • Linda hija, muy hermosa mi güera

  • No papa, a mi no me gusta como me veo. - Pero si luces fantástico!...

  • ¿Cómo papa, dímelo?

  • Endiabladamente cachonda, mi güera.

Abrazo a mi padre, junto mis senos a su pecho y le vuelvo a preguntar.

  • Dime papi, ¿qué has decidido?, ¿me quieres tener para ti?

  • Si güera, si te quiero coger, te quiero meter la pija.

  • Entonces pídemelo papa, ¿pídemelo?

  • Ivonne te quiero coger, te quiero meter la verga; Ivonne, ¿déjame cogerte?

  • Si papa, yo también quiero que me cojas; lo tomo de la mano para llevarlo cerca de mi cama y le digo,.. ¡¡¡papito ven, hazme tuya!!!

Al decir esta palabras, yo ya había perdido toda cordura y mi padre también, solo nos atraía el deseo incestuoso de coger, a partir de ese instante todo fue una locura.

Parándome frente a mi padre, le digo.

  • Me ayudas; (señalando que me quite mi ropa).

Mi padre me quita el mini vestido y mi brassiere, dejando las medias y el resto de mi lencería, disfruta mamando de mis tetas, comiéndose mis pezones, succiona con fuerza para introducir al máximo una de mis bubis en su boca, mientras con su otra mano masajea o más bien manosea mi otra teta, yo encantada con lo que él hace, acaricio su cabello, tomo su cabeza para que no se separe de mi teta, estimulándolo a que continúe comiéndome mi senos, con su otra mano inicia por tocarme el culo, lo oprime con fuerza, tanto tiempo deseándolo agarrar y ahora esta todo mi culo a su disposición, yo gustosa con su magreo, yo estaba tan excitada que también quería lo mío, empecé por acariciar su fuertes brazos, tocar su pecho, bajar mis manos por su fuerte abdomen, hasta llegar a su miembro viril, fuerte y duro, lo acaricio con devoción y lujuria, estaba listo para penetrarme y yo gustosa por recibirlo dentro de mi vagina, la que ya estaba hecha un mar de fluidos, calientes y jugosos para el hombre que los había provocado.

Aprovechaba para decirle cerca del oído,... así papito, que bien se siente, me gusta, me excita,... mmmmhh, queee ricooo, maaas papi, quiero maaasss,... continué estimulando su pene, hasta que tuve oportunidad de ser yo la que pudiera bajar a quitar su pantalón y descubrir lo que tanto deseaba, su miembro excitado al máximo, lo quería dentro de mi.

Al bajar su pantalón y su bóxer al mismo tiempo, salta cual brioso caballo, de forma rápida y fuerte hacia mi, un estupendo pene, me quedo exactamente frente a mi boca y justo a mi medida, como a mi me gustan las pijas grandes, fuertes y venosas, sobretodo la de mi padre, creo que por el morbo de cogerme (a mi, su hija consentida), su erección estaba más grande e impetuosa, prendida al máximo para descargar su contenido en mi precioso coñito.

Este cumulo de sensaciones me tenían al borde del orgasmo, bese, lamí y engullí tan hermoso falo, le ayude a quitarse por completo la ropa, entonces volví́ a lo mío, a seguir degustando mi rico manjar, el sabroso pene de mi papi, tener lo que tanto había incitado y provocado para llegar hasta este punto en mi vida, el coger con mi padre, estaba dispuesta a lograr que mi padre gozara al máximo con mi cuerpo y de mi pasión.

Por un rato más continúe mamando con agrado y gusto el miembro de mi padre, hasta que él me levanto entre sus brazos y me lleva a mi cama, depositándome en ella, yo me deslizo hacia el centro y con mucha coquetería y cachondez, me quito mis bragas y la lanzo a su rostro, mi padre la toma, se las lleva a su rostro y aspira su aroma, me dice,... me las llevo como trofeo,... le contesto, con mis dedos índice y le digo,... entonces, ven papi, ven por el premio que te has ganado.

Yo recogí mis piernas, apoyando la planta de mis zapatillas sobre la cama, abriendo al máximo mis piernas, diciendo,... ven papa, ven cógeme, cógeme como tu quieras pero cógeme.

Mi padre bufando como toro, esta listo para penetrarme, se acerca a mi, pero sorprendentemente no me mete su verga, se agacha y llevando su rostro a mi panochita, empieza a darme una maravillosa comida de concha, mete su lengua lo más profundo en mi interior, la mueve con maestría, en verdad sabe comerse una concha y la mía sobretodo, disfruto mucho bebiendo de mis jugos vaginales, cada que bebe de mi interior, me arranca suspiros de un placer indescriptible, de tal manera que me lleva a la cúspide de la pasión y compenso a mi padre con un gran flujo de líquidos vaginales del orgasmo que me hizo tener, mi mente nublada por el goce y el deseo de querer más, solo atino a decirle,... si papa, así papi, toma son tuyos, soy toda tuya.

Cuando mi padre acaba de beber de mis jugos, sube su mirada a mis ojos, con cariño y pasión, le digo,... que rico papa, me gusto, pero quiero más,... me contesta,... mi linda bebe que rica sabes, me imagino que has de coger bien rico Ivonne,... pues a las pruebas me remito papi, méteme tu rica pija, dura y caliente, para que sientas lo rico que es que me cojas, y te demuestre todo el placer que te voy a dar.

Mi padre toma mis piernas entre sus brazos, me las abre, acerca mi cadera a su cuerpo, se lo que va hacer yo simplemente me dejo llevar y acomodo mi vagina dejándola que toque la punta de su verga y como lo imaginaba, de repente sentía la gran estocada, el pene de mi padre me penetro abriéndome mi vagina de manera rápida, entrando hasta el fondo, aunque mi vagina se encontraba lubricada por mi orgasmo anterior, aún no estaba del todo abierta o dilatada, así que su penetración violenta, me lleno de un gusto fabuloso.

Fue una sensación que antes no había experimentado, me sentía completamente llena con semejante pija dentro de mi, no que fuera el tamaño de su pene, pues mi marido lo tiene mas grueso y un poco mas largo y lo he hecho con hombres que en verdad lo tienen grande; creo más bien fue la rica sensación del tabú, aquello que es prohibido, que es sagrado, que yo lo estaba profanando al dejarme coger por mi padre, o fueron las dos cosas al mismo tiempo su pene rico, sabroso dentro de mi y el placer del incesto con mi padre, que me hizo sentir deseo de ver como me coge mi padre, ver su pija entrar y salir de mi cuerpo ardiente .

Colocando mis brazos como apoyo sobre la cama para levantarme, veo perfectamente como mi padre mete y saca su pene dentro de mi, volteando a verlo a sus ojos, continuo estimulándolo,... así papi, así más fuerte, que rico siento, me encanta, cógeme papi, cógeme, así... aaaahhhh, mmmmmhhh, aaggghh, que rico, maaaaasssss, siiiiiiii, papa sigue,.... Aaaaahhhh, oooohhhh que bien, maaaaaass,... mi padre me posee con rapidez y una violencia que me excita al máximo, me dice,... bebe que bien se siente, que rico coges,... papa que rico, dame maaass,... Ivonne que sabrosa y buena estas, que rico es cogeeerte,...

Mi papa esta listo para terminar, yo siento como esa rica verga, me parte en dos, mi vagina esta caliente y bien lubricada a estas alturas, le pija de mi padre entra y sale con rapidez de mi vagina, como un guante fino que se adhiere finamente a su alrededor, aceptando su largueza y anchura dentro de mi, no cabía duda, mi vagina estaba hecha para el pene de mi padre, nuestro acoplamiento fue maravilloso,... bebe, que rico siento, voy a terminar,... si papa, hazlo, báñame con tu leche, al decir eso mi padre estallo, me echo su lechada y me arranco un segundo orgasmo del cual casi desfallecí́ pero me sentí en la gloria.

Derrumbándome sobre mi cama, respiraba con rapidez y violencia, bufando el placer que sentí,.... mmsssmmsssmmsssmmsss, aaaahh, asi papaaaa que bien y que rico.

Fue así que me convertí en la amante de mi padrastro, mi padre de siempre, satisfaciendo cada uno de sus caprichos y fantasías, en una ocasión me llevo a un lugar a tener sexo frente a un par de sus amigos.

No cabe duda soy una perfecta zorra, y me encanta.

Besitos

Dra. Tentación